[TV] Cosas de series; médicos, bomberos, policías… y vampiros

Televisión

Vamos con mi última ronda de k-dramas… o sea, dramas coreanos, cuando drama es un genérico que incluye también la comedia. He de decir que estaban un poco de bajón estas series. Y de hecho algunas de las que he empezado últimamente las he abandonado. Son cosas que pasan si a unas producciones que tienen no poco de guilty pleasures se une una falta de empatía absoluta con los personajes protagonistas. Como por ejemplo en esta producción de guapos protagonistas que tan buen resultado dieron en otras ocasiones, que está siendo muy bien recibida por la mayor parte del grupo, pero que a mí se me ha vuelto estomagante. Pero vamos con las que no.

Ghost doctor (en inglés en el original) es una serie de 2022 que se puede ver en Netflix, pero creo que sólo con subtítulos en inglés. Un antipático pero tremendamente hábil y eficaz cirujano cardiovascular y un simpático pero torpón residente de primer año, pero heredero de la empresa que gestiona el hospital, se tienen que aliar para desentrañar los misterios que rodean algunas muertes y accidentes en el entorno del hospital. Pero con la peculiaridad de que el hábil cirujano es víctima de «un accidente», acaba en coma y es su fantasma temporal el que colabora con el torpón residente que, casualmente, es capaz de ver fantasmas desde niño. Entre la comedia de las situaciones que se producen por las «posesiones» del fantasma, y otros fantasmas, y el drama de la conspiración para hacerse con el control del hospital y despojar a una rica heredera, y neurocirujana, e interés romántico el hábil cardiovascular, de su herencia. En general, muy animada y entretenida. Con dos peros. La neurocirujana, una actriz muy guapa, hace una interpretación en su 85 % aburridísima. Hay otro personaje femenino, la joven residente, interés romántico del torpón residente, que es bien maja y está absolutamente desaprovechada en la trama. Pero ya está.

He podido ver la segunda temporada de Sobangseo Yeop Gyeongchalseo (소방서 옆 경찰서, la comisaría próxima al parque de bomberos), conocida en inglés como The first responders y en español como Unidad de primera intervención. Este drama de acción (y romance) con bomberos y policías como protagonistas (y los forenses) me pareció muy entretenido en su primera temporada de 12 episodios, que quedaba con las tramas abiertas y cerraba con un cliffhanger. Por eso me apetecía ver la segunda temporada. Que va en la misma línea… pero baja de interés notablemente. Se centra mucho más en el personaje del policía, y la chica, la enfermera de los bomberos, pasa a ser un florero en el conjunto de la serie. Sigue siendo entretenida, pero por esos y otros motivos que no menciono para no destripar la trama, pierde bastante. Pero cerrada está.

Finalmente, en Amazon Prime Video he podido ver Gaseum-i ttwinda (가슴이 뛴다, mi corazón late) conocida en inglés como Heartbeat, y en castellano El latido de mi corazón. Dramedia romántica, con el romance entre una tristona enfermera escolar que vive solitaria y con apuros y un vampiro que estaba sumido en un sueño de 100 años con el fin de convertirse en humano y al que despierta un día antes de lo que corresponde. A partir de ahí, chascarrillos, romance, y los elementos que pondrán palos en las ruedas de la relación. En el reparto de secundarios, los «payasos», los «rivales amorosos», y el vampiro perverso como contrapartida a los vampiros buenos. Y como en casi toda serie sobrenatural coreana, una historia de reencarnaciones y de romances y rivalidades que se extiende desde cientos de años atrás. Empieza bien… pero va decayendo. Tiene el problema que la chica protagonista no acaba de estar cómoda en el papel, en lo que a mí me parece. Le falta expresividad en algunos momentos. Normalita. Entretenida, pero poco memorable.

[TV] Cosas de series; a propósito de una simpática actriz surcoreana

Televisión

Sinceramente, hoy pensaba hablar de la adaptación de una de las novelas más interesantes de la ciencia ficción contemporánea que, aunque manifiestamente mejorable, la novela, tiene suficiente abundancia de ideas interesantes como para que en su momento me enganchase a ella y, especialmente, a sus dos secuelas, superiores en calidad literaria y expositiva. Sin embargo, como hace apenas tres días que la terminé, y con 30 episodios tiene mucho que digerir, lo dejaré para la semana que viene. Por lo tanto, iré esta semana con algo ligero, tres series surcoreanas que tienen en común la actriz protagonista, Gong Seung-Yeon, que me ha resultado simpática, especialmente como actriz de comedia.

Kkotpadang: Joseonhondamgongjakso [꽃파당: 조선혼담공작소], cuyo título en inglés, Flower Crew: Joseon Marriage Agency, viene a ser la traducción más o menos literal del original, es una comedia romántica de época, con intrigas políticas incluidas, y una premisa de partida un tanto rebuscada. La protagonista, Gong Seung-Yeon, es una huérfana que perdió a su familia, y que va a casarse con el hijo de un herrero. Pero resulta que este mozo es en realidad hijo del rey que acaba de morir, y de repente es elevado al trono, cuando se iban a casar por los buenos oficios de una agencia de casamenteros cuyo líder es el hijo de un ministro del gobierno, intrigante político y principal villano de la serie. Ahí es nada. Por supuesto, hay una antagonista de buena familia y aparentemente malvada, hija de otro ministro del gobierno, intrigante político, antagonista del anterior y villano secundario. A partir de ahí… las intrigas y tópicos habituales de estas series de época surcoreanas. Pero es divertida. Los intérpretes lo hacen bastante bien, tienen buena química entre ellos, y sacan adelante una serie que, por lo demás, no pasaría de la clasificación de guilty pleasure. Pero yo le pasé bien con ella durante unos fines de semana. Está en Netflix, pero es posible que sólo la encontréis si configuráis la aplicación de la plataforma en idioma inglés. Duración típica de 16 episodios de 70 minutos.

My only love song, título original en inglés, es una serie que está en Netflix desde 2017, y que ya empecé a ver por aquel entonces. Pero es una serie que le cuesta coger ritmo y la abandoné. Al ver que la protagonista de la serie es también Gong Seung-Yeon la he retomado. Duración atípica de 20 episodios de 30 minutos, por lo que es más corta de lo habitual. Y es una parodia. Gong hace de una famosa actriz que está rodando una serie de época sobre un personajes histórico de quince siglos atrás, cuando todo empieza a derrumbarse a su alrededor, por lo que harta, coge una simpática furgoneta, una Subaru Sambar de los años 90 que parece una Volks Waggen type 2, la furgoneta de los jipis de los años 60.Este tipo de furgonetas (y también coches pequeños), los kei car, son pequeñitas, de escasa potencia, muy económicas y fiables y populares en Japón y Corea del Sur, probablemente también en otros países asiáticos. Aunque un Smart sería un kei car, pero no económico. Bueno… pues la Sambar la llevará, junto con un polizón que se ha quedado dormido a bordo, al pasado histórico, a la época correspondiente a lo que estaba rodando. Y se verá involucrada en un enredo romántico con un hombre de la época, un personaje histórico real, por ficticia que sea la historia, y en los enredos políticos de la época. Todo ello en clave de humor, parodia y, como digo, enredo romántico. A esta serie le cuesta coger momento, pero también tiene momentos divertidos. No al misma nivel que la anterior, pero tiene su gracia. Siendo producción propia de Netflix, se puede encontrar fácilmente por todos los abonados hispanos.

Y cuando todavía estaba viendo la anterior, comprobé que Gong Seung-Yeon protagoniza otra serie que podemos ver en Star, o sea, en Disney+. Sobangseo Yeop Gyeongchalseo [소방서 옆 경찰서, la comisaría de policía al lado del parque de bomberos], es conocida en inglés como The First Responders o en castellano como Unidad de intervención rápida. Y es la historia de las colaboraciones entre una comisaría de policía y un parque de bomberos, uno al lado del otro, en un distrito o ciudad del área metropolitana de Seúl. Gong Seung-Yeon es la enfermera de los bomberos. Teóricamente la hipotenusa en un triángulo latente formado por ella, uno de sus compañeros bomberos y un heterodoxo policía empeñado en destapar escándalos de corrupción por doquier y que arrastra un pasado tormentoso. Son doce episodios de una hora que terminan en un enooooorme cliffhanger, que parece se resolverá en breve porque a partir de finales de agosto, creo, llegará una segunda temporada en la que además de los polícías y los bomberos estarán los forenses, que ya apuntaban maneras, una forense, en la primera temporada. Es otra de esas series que se salva más por el trabajo de sus intérpretes, que caen muy bien, que por la racionalidad o el interés de sus previsibles tramas, llenas de tópicos y estereotipos. Pero la chica protagonista funciona peor en este drama que en las comedias. Aunque puede deberse a que en muchos episodios parece más un florero, ya que el policía se come mucho del protagonismo. Y es que por otra parte, el drama alrededor de una enfermera de los bomberos sólo lo puedes estirar televisivamente hasta cierto punto, por mucho respeto que me merezcan estos profesionales.

Y esto es todo por hoy. Series poco trascendentes, pero entretenidas para relajarse los fines de semana.