Como viene sucediendo desde hace varios años, a finales del mes de julio llega en Zaragoza la llamada Noche en Blanco. Una iniciativa que se va difundiendo por diversas ciudades en la que, aprovechando el buen tiempo, se saca la cultura a la calle con todo tipo de espectáculos, y las instituciones culturales programa actividades fuera de sus horarios habituales. Este año, en compañia de algunas buenas gentes de Fotógraf@s en Zaragoza (FeZ) (ver en flickr) estuvimos desde las ocho de la tarde hasta más allá de la medianoche recorriendo las calles y plazas del centro histórico de la ciudad. Yo me armé de la Leica ME con varios objetivos, cámara que pese a su teórico «mal rendimiento» a sensibilidades altas, tiene otras virtudes que la hacen adecuada para la fotografía nocturna. Bueno. Os lo cuento con fotos.

Es el principio del recorrido, y Ángel se concentra en el manejo de su pequeña y jugetona GoPro. Será uno de los puntos de animación más divertidos de la noche.

En la plaza Ariño encontramos un cuentacuentos. No llegamos a decidir si la cámara colaga detras de las «cuentistas» era una Canikon o una Panalympus.

En la plaza José Sinués, una pareja de recién casados sirve de objetivo a los disparos de los fotógrafos aficionados.

Parada «obligatoria» en la plaza de Santa Marta para el control de avituallamiento; pescaditos, puntillitas, jamoncito y queso para coger fuerzas.

La «cena en blanco» no forma parte de la programación de la «noche en blanco». De hecho, creo que hay contradicciones en su filosofía. La primera es una invitación privada casi clandestina, la segunda un apertura al todo el mundo de la cultura. Pero no hay que negar que puede ser fotogénica.

Parada en el Pablo Serrano, donde uno de los grupos de la Asociación de Fotógrafos de Zaragoza (AFZ) lleva a cabo una acción solidaria, a base de fotos, con Aldeas Infantiles. Momento muy divertido. Casi nos hechan del museo…

Y lo que da de sí el Elmar-C 90/4 a pesar de la escasa luz. Con pocas cámaras se puede disparar a 1/45 o 1/60, sin estabilizador de imagen y a pulso, sin que trepide la imagen.







