[TV] Cosas de series; los dramas/comedias coreanos… ¿en horas bajas?

Televisión

O me estoy cansando del género, o ha habido un bajón en el potencial interés que este placer culpable televisivo me suscitaba. Hay que considerar que la mayor parte de los k-dramas que veo están en Netflix, sean producción propia, sean de distribución exclusiva internacional por la plataforma fuera de su país de origen, o sea series anteriores de los que adquiere sus derechos de emisión durante un tiempo. Pero también, va aumentando la oferta de estos en Amazon Prime Video. Entre el año 2021 y 2023 observé que no pocos de ellos dejaban de estar en la categoría de placer culpable, que tenían virtudes propias que los hacían recomendables. Pero en lo que va de año apenas he encontrado series surcoreanas que me hayan dejado esta impresión positiva. Si me lo paso bien es a pesar de sus defectos. Y dado que las situaciones y los argumentos de estas series son muy repetitivos, algún día tengo que comentar sobre eso, puede ser que me esté cansando de ellos. No obstante, sigue siendo lo que veo en los fines de semana. Hoy traigo dos. Las dos vistas en Amazon Prime Video.

Nal Nogyeoju-o [날 녹여주오, derríteme], en inglés Melting me softly y en castellano Derritiéndome suavemente, es la típica comedia romántica con un giro de ciencia ficción. Como de costumbre, se establece un romance improbable entre dos personas de entornos muy distintos. Él (Ji Chang-wook), un productor y presentador televisivo de éxito, ella (Won Jin-ah), una especialista que participa en sus programas. Todo ello en 1999. Y deciden hacer un programa sobre la hibernación de personas a temperaturas extremadamente bajas. Un experimento de 24 horas de duración. Pero un atentado contra el científico que lo realiza les lleva a estar hibernados 20 años. Cuando despierten todo habrá cambiado, y además su fisiología a cambiado y corren el riesgo de morir si su temperatura corporal supera los 33 ºC. Y están los malos. Y los que los traicionaron no rescatándolos 20 años atrás. Y el romance. Y las familias. Es entretenida. Pero no especial. Como muchas de estas series, se sostiene por la buena química y el buen trabajo de sus intérpretes. Como muchas de ellas, también, 16 episodios son demasiados.

Ildangbaekjipsa [일당백집사, no tengo clara la traducción, asistente temporal o asistente por horas], que en inglés es May I help you? y castellano ¿Podemos ayudar?. En un tono más de drama romántico sobrenatural, aunque tenga sus alivios cómicos, nos cuenta el encuentro y el romance entre dos personas que cargan con sus traumas. El (Han Dong-hee), un asistente de alquiler que trabaja en la empresa que monta su tío, es un médico que tras la muerte de su hermano pequeño en un accidente de tráfico, un niño todavía, abandona la profesión y carga con un duelo mal llevado. Ella (Lee Hyeri) es una joven huérfana de madre, que murió en un incendio, criada por su padre que la adora, que entra a trabajar en una funeraria, porque está desorientada en la vida, y que descubre con horror que cada vez que toca a un cadáver para prepararlo, este cobra vida antes de pasar al otro mundo, y le piden favores, últimas voluntades. Pronto sus caminos se encontrarán, al principio con antagonismo, pero finalmente irán acercándose y… ya os supondréis. De fondo, resolver lo que le sucedió al niño y el porqué de los poderes de ella. La serie carga con algunos lastres, aunque está bien valorada en su país de origen. Tiene elementos incomprensibles para un europeo, porque en nuestra cultura no hay prejuicios hacia las personas que trabajan en una funeraria. En el Asia oriental, sí que hay prejuicios culturales hacia determinadas profesiones. Sin tener esto en cuenta, hay situaciones que resultan totalmente absurdas. Otra cuestión es que la chica protagonista, una cantante que se apunta a actriz, a pesar de que es indudablemente muy guapa, sin ser un clon de otras como sucede muchas veces, no es muy buena actriz. Aunque no es catastrófica ni mucho menos, su interpretación, un tanto plana, y dado que es la protagonista principal, lastra no poco la serie.

[TV] Cosas de series; placeres inconfesables surcoreanos pendientes de comentario

Televisión

En las últimas semanas se me habían acumulado muchos finales de temporada, y he ido comentando semana a semana primero las que me parecían más interesantes. Y por ello tenía varias series surcoreanas, muchas de ellas se remontan a los días de Navidad, pendientes de comentario. Aunque en el título de la entrada las he calificado de placeres inconfesables, el guilty pleasure de los anglófonos, no necesariamente merezcan todas ellas este calificativo.

Para ilustrar la entrada, unas fotos realizadas paseando una tarde de principios de octubre por la histórica ciudad de Gyeongju, República de Corea (o Corea del Sur, como prefiráis llamar al país).

Gan Tteoreojineun Donggeo 간 떨어지는 동거 [probablemente algo así como un desastre de compañeros de piso], conocida internacionalmente como My roommate is a gumiho [Mi compañero de piso es un ‘gumiho’] probablemente sí que merezca el calificativo. Es una de las dos series que he podido ver sin necesidad de suscripción de la plataforma china iQIYI, que en general no me interesa más. Sinceramente, tal y como se las gasta el gobierno chino con los datos personales, paso de cualquier servicio que propongan. Y es un drama romántico de carácter preternatural, que mezcla a un tipo guapo (Jang Ki-Yong) que interpreta a un gumiho de casi mil años de edad, zorro de varias colas mítico del folclore coreano, con una estudiante de historia actual (Lee Hyeri, cantante de un grupo de k-pop reconvertida en actriz), que por un accidente acaban compartiendo casa. Y por supuesto, acabaran siendo algo más que compañeros de vivienda. La serie es entretenida, no especialmente original; aunque sus protagonistas funcionan bien, especialmente ella, los mejores momentos los proporcionan algunos secundarios, especialmente otra gumiho recientemente convertida en humana (Kang Han-na), que interpreta cualquier cosa que se dice al pie de la letra, especialmente las frases hechas. Aunque es la más sensata de todos, a pesar de su bisoñez como humana. Bien valorada por la peña votante en internet, agradable de ver, con todos los vicios y virtudes de las comedias románticas del país asiático, puede funcionar como una introducción agradable para quien quiera iniciarse en este peligroso vicio. La principal pega… que se ve a través de una plataforma china… o pirateándola.

Siendo Kang Han-na la intérprete más interesante de la serie anterior, y que ya he visto en alguna otra serie, recalé en otra serie que se puede ver libremente en Youtube, Bite Sisters. Una web serie de diez episodios entre 9 y 13 minutos de duración, que se puede ver de una sentada, y que nos presenta a tres hermanas vampiras, que regentan una tienda de ropa de moda en el Seúl actual, pero que llevan viviendo durante siglos. Y que no son mala gente, puesto que para matar el aburrimiento de una existencia eterna, se dedican más a ayudar a otros que a comérselos. Producto sencillo, elegante, de gente guapa, pero también absolutamente intrascendente, donde Kang es la figura central. Realmente, no se puede negar que, además de sus aptitudes interpretativas, la chica es muy guapa.

Y finalmente, Gu Gyeong-i [la maravillosa Gu (o Ku)], conocida internacionalmente como Inspector Koo [Detective Ku (o Gu); lo de la transcripción fonética del coreano a lenguas indoeuropeas varía, con g (sonido en ga, gue, gui, go, gu) y k como un único fonema, y con determinadas vocales que se transcriben distinto según el idioma, como u en castellano y oo en inglés)]. La historia va de un equipo investigador en horas bajas dentro de una compañía aseguradora, que contrata a una alcohólica, otaku, y ludópata exdetective de policía (Lee Yeong-ae) para investigar unas muertes accidentales que podrían ser criminales. Y se tendrán que enfrentar a una joven asesina en serie (Kim Hye-jun), con quien la exdetective ya se cruzó en el pasado cuando la chica era una adolescente y murió alguien, así como el esposo de la protagonista. No es un placer inconfesable, está bien hecha y es muy entretenida. Mezcla acción, suspense, investigación criminal, corrupción política, en tono mezclado de comedia y drama, todo en dosis adecuadas para hacer de la serie, de 12 episodios de 70 minutos, muy divertida de ver. No es la octava maravilla del mundo, pero es un producto más que digno, y estupendo para evadirse Los intérpretes, tanto los protagonistas como los secundarios, lo hace bastante bien. Y el rollo entre la veterana expolicía y la psicópata veinteañera funciona de maravilla. Algunos la describen como una versión asiática de Killing Eve… pero no lo veo así… este tipo de interacciones entre policía y asesino simpático son un subgénero en sí mismo. Es divertido que los nombres de pila de los dos personajes protagonistas, Gu Kyung-yi y Song Yi-kyung, son muy similares, invitando a pensar que son dos variantes de una misma personalidad.