Los negativos comentarios que realicé el sábado pasado sobre el último libro que he terminado de leer, me dejaron un dolorcillo en el alma. Quedé con la sensación de que esa negatividad se podía transmitir a la región británica en la que acontecen buena parte de los hechos; Cornualles. Sin embargo, esta parte de la Gran Bretaña es un lugar muy recomendable para ser visitado. Tuve la oportunidad de hacerlo hace cinco años en un viaje que me llevó también a Gales y a otras comarcas inglesas. Para compensar cualquier posible mala sensación, os dejo con algunas imágenes del lugar.

Aunque mucho más modesto que su equivalente francés, también en contramos un Mount St. Michael, al que principalmente se llega en barco, salvo cuando la marea está realmente muy baja (Fujifilm Finepix F10).

Barcas motoras que unen Marazion con el Mount St. Michael (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Lejos de un aspecto tétrico, las casitas tiene un aspecto pulcro y aseado, como estas del puerto de Mount St. Michael (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Cerca de Porthcurno, paseamos sobre las calas y los acantilados de la costa sur de la península de Penwith (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Uno de los lugares más visitados son los acantilados de Land's End, o sea, el "finisterre" inglés (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).