[Libro] El loco De Dios en el fin del mundo – Javier Cercas

Literatura

Las series de fotografías que ilustran esta entradas de este Cuaderno de ruta pueden verse, desprovistas de texto, en fotos en serie. Un día de extraordinario buen tiempo siendo diciembre en Ciudad del Vaticano en 2004.

Supongo que fueron las noticias repetidas sobre los ingresos hospitalarios de Jorge Bergoglio, conocido popularmente como el papa Francisco, su nombre elegido como monarca absoluto del estado teocrático de Ciudad del Vaticano, lo que me hizo interesarme por este libro de Javier Cercas. En su momento ya me habían interesado otras obras de Cercas de no ficción, un autor que tenía un poquito olvidado, y decidí agenciármelo. Era el día 7 de abril. Y claro, que Bergoglio falleciese dos semanas más tarde, de repente puso al libro muy de actualidad. «De repente» se refiere al interés por el libro, no al fallecimiento de Bergoglio que, para cualquier conocedor de lo que es los males y enfermedades de los ancianos, se veía venir a pasos agigantados dijeran lo que dijesen los telediarios. No obstante, hasta casi un mes después de que Bergoglio se reuniese con su creador,… suponiendo que esté exista, y es mucho suponer,… o con el diablo, cuya existencia me resulta más probable,… no empecé su lectura, mientras todavía estaba recorriendo tierras sicilianas.

Pero al fin y al cabo, según lo que nos relata Cercas en su libro, una de las motivaciones para escribir el libro fue tener la oportunidad de preguntarle al argentino, en nombre de su madre, si realmente la buena mujer se iba a reunir con su difunto marido tras exhalar su último aliento. Dejando de lado que ya existe por ahí alguna demostración «científica» que nos enseña que todos vamos a ir al infierno, siendo además un sistema exotérmico, y por la tanto, como se nos ha contado, bastante calentito, esta excusa me parece más un entretenido macguffin más que otra cosa. Aunque tampoco tengo motivos para dudar que por motivos emotivos, para el autor, sea importante. En cualquier caso, al autor se le presentó la oportunidad de sumarse a la comitiva papal durante un viaje pastoral a Mongolia. Hablan de él como uno de los últimos… claro que siendo en agosto-septiembre de 2023, habiendo fallecido en abril de 2025, tendría que ser de los últimos. Pero a lo tonto modorro, aun hizo un par más por tierras francesas, uno por el Benelux y otro por países de Oceanía y el Sudeste Asiático.

No voy a entrar en el «argumento» del viaje… que lo podéis encontrar en muchos lugares de consulta. El escritor, dedicó buena parte de su tiempo hábil en las semanas anteriores al viaje, durante el viaje y en los días posteriores a entrevistarse con distintas personas; de los medios de comunicación y relaciones públicas vaticanas, de la curia vaticana, misioneros diversos en el país centroasiático… etcétera. Lo cual le permite realizar una semblanza sobre la naturaleza de Bergoglio como líder supremo de la Iglesia Católica, y de su visión y cómo le gustaría que esta fuese. No voy a entrar mucho a cuál es la visión que los entrevistados dan de su líder supremo, ni de cómo lo entiende el autor. Al igual que Cercas, yo soy muy escéptico sobre la autentica naturaleza de la ideología de Bergoglio. Nunca he acabado de verlo como ese papa progresista, incluso de izquierdas para disgusto de la derecha más ultramontana, que muchos proclaman.

Siempre he creído que Bergoglio es un «apolítico»… es decir un señor de derechas. Confesarse «apolítico» es una forma de ser de derechas, incluso cuando quienes se proclaman como tales ignoran este hecho. En cualquier caso, existen varios ejemplos, y Cercas nos ofrece algunos, que muestra que Bergoglio estuvo dispuesto a contemporizar o colaborar con regímenes autoritarios a cambio de que a «su» Iglesia le fuese bien. Lo cual es una tendencia común a muchos de sus antecesores. Y su visión a favor de los desfavorecidos, no deja de ser esa visión caritativa, pero no comprometida con la justicia social y la equidad. Cercas, no obstante, no hace sangre. Los medios próximos al Papa le ofrecen la posibilidad de tener una experiencia única, y de plasmarla en un libro con garantías de publicación. Y sin renunciar a su propia visión, opta por mantener una postura amable; sin «hacer sangre».

Por lo demás, aquí no descubro nada nuevo, Cercas escribe bien. En mi opinión uno de los mejores escritores españoles contemporáneos. Y además de escribir bien, escribe para que se le entienda, lo cual tiene más mérito en su conjunto, sin decaer en el nivel literario de su escritura. Y eso me gusta. Me gusta que al terminar un libro tenga la sensación de que he aprendido a hablar o escribir mejor que al empezarlo, y que ademas me haya sentido interesado y entretenido, que ambas cuestiones son válidas simultáneamente. Realmente no debería haber tenido tan olvidado durante tan tiempo a este escritor.