Wicked: Part I (2024; 58/20241127)
He retrasado unos días el comentario de esta película, ya que he intentado volver a ver la película original de la que es precuela, de alguna forma. O sea The Wizard of Oz, una de las películas de referencia en la historia del cine, que lució el Technicolor de los principios del cine en color, y que supuso un bombazo para el cine musical, en su época más dorada. Pero finalmente no he encontrado momento u ocasión, y no me apetece esperar más. Así que vamos con esta adaptación cinematográfica del musical de Broadway, que a su vez es una secuela de una novela que, en realidad, más que ser una precuela de la conocida historia de las aventuras de Dorothy en Oz, es más bien una reimaginación de ese mundo y una relectura de los personajes secundarios y antagonistas de la misma. Dejo esta entrada programada para la tarde del sábado, aunque la redacto con veinticuatro horas de antelación, porque no sí si el sábado tendré tiempo para ello.

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La película la estamos conociendo con el título de Wicked (malvada), pero el títular original nos hace observar que es una primera parte, y que habrá al menos una segunda. Y así puedo confirmar que esta película adapta el primer acto del musical de Broadway. Dentro de un añito podremos ver el segundo acto, o sea, la película que nos cuenta la segunda parte. Dirigida por Jon M. Chu, seguimos los primeros años de la vida de la que será conocida como la Bruja malvada del Oeste (Cynthia Erivo), principal antogonista de Dorothy en The Wizard of Oz. Un joven que nació distinta, con la piel verde, lo que generó el rechazo de los demás. Pero también con una fuerte afinidad por la magia. Y especialmente conoceremos de su estancia en la universidad y de su relación con la que será conocida más adelante como la Bruja buena del Norte (Ariana Grande). Y cómo al final se revelará contra el statu quo de Oz, representado por el famoso mago (Jeff Goldblum), y su secuaz (Michelle Yeoh).
La película es una de las muchas que usan (y abusan) de la filmación sobre fondo verde, para luego generar por ordenador los escenarios, paisajes y fondos de la película. Desde ese punto de vista, casi diríase que es una película de animación con personas. Está bien hecha, Hollywood tiene en estos momentos tecnología de sobra para ellos. La trama es la del musical, con sus números musicales, quizá alguno menos y quizá alguno más, no conozco mucho el musical y no puedo decir. Las referencias a la crítica social son obvias. La discriminación por el color de la piel. O por la especie a la que pertenezcas. Todo referencias muy obvias sobre el racismo y la xenofobia. Se avecina en la segunda parte una discriminación por discapacidad; todo el que conozca un poco la obra original sabrá que la Bruja malvada del Este es la hermana de la Bruja malvada del Oeste, y el personaje de la hermana (Marissa Bode) ya ha aparecido de sobras en la película, indicando por donde va a ir el conflicto. Y claramente, lo que trata es subvertir el concepto de bien y de mal, y en qué medida estos están determinados por la ideología y el régimen político y social dominantes. No hay muchas sutilezas. El mensaje es muy obvio.

Con unas interpretaciones correctas, no les veo tampoco nada de especial, y unos números musicales que podrán gustar más o menos, no es de los musicales que más me hayan llamado la atención, me parece una película correcta sin más, por debajo de la expectación días antes había despertado su estreno en Estados Unidos. Pero claro, la popularidad del universo de Oz es mucho menor en nuestro país que en el mundo anglosajón. Y de hecho es improbable que haya tenido en nuestro país un impacto equiparable al que ha tenido en Estados Unidos, a lo que hay que añadir que la afición al cine musical no es excesiva en nuestro país. A mí ni me ha despertado grandes emociones, pero se deja ver y entretiene. Incluso tiene uno tramo final que estaría muy bien si no fuera porque la interpretación de la canción principal, Defying Gravity, me resulta un poquito histriónica y cargante. Lo cierto es que no es una canción de mi agrado. Si a eso añades que… Ariana Grande tampoco es una artista de mi agrado… y bueno. Dejémoslo estar. No está mal. Se deja ver. Y poco más puedo decir. Allá cada cual.
Valoración
Dirección: ***
Interpretación: ***
Valoración subjetiva: ***

