[TV] Cosas de series; una de las mejores series de la actualidad, y una entretenida curiosidad

Televisión

Hace unas semanas, mientras tomábamos unos chismes antes de entrar a una sesión de cine, dialogábamos un grupo de amigos sobre los gustos literarios de los niños y adolescentes actuales. Libros que considerábamos clásicos cuando teníamos entre 12 y 14 años, ahora no son considerados, ni conocidos, por los jóvenes de esa edad. No había datos objetivos en la conversación; eran las opiniones de quienes tienen vástagos que están pasando o han pasado recientemente por esas edades. Yo escuchaba más que hablaba… porque no estaba en esa situación. Pero parece que Julio Verne, Emilio Salgari, Robert Louis Stevenson, Mark Twain, Jonathan Swift, Walter Scott, Daniel Defoe, por mencionar algunos autores que a mí me apasionaban. En aquellas edades en las que viajaba durante 20.000 leguas bajo el mar, me adentraba en las entrañas de la Tierra por el Snaefellsjökull en Islandia, buscaba tesoros de piratas en islas tropicales, participaba en la Guerra de la Dos Rosas, recorría la estepa rusa como mensajero del zar, enamorándome de paso de una guapa y rubia chica livonia, me enriquecía y empobrecía gracias a un diablo embotellado, luchaba en la guerra de la independencia americana junto a los corsarios bretones, recorría el Misisipí en un barco de vapor, tenía un amigo indígena llamado «Viernes»… o daba la vuelta al mundo en 80 días enamorándome de simpática y joven viuda en la India. Entre otras vidas, como cantaba Sabina. Y por lo que me cuentan, encuentran risible cosas «más modernas» como las aventuretas de adolescentes británicos que bebían «cerveza de jengibre» tal y como las contaba Enid Blyton.

Y todo esto viene a cuento de que recientemente se ha podido ver, o se puede ver, una coproducción de televisiones europeas, que adapta una de las más famosas novelas de aventuras de Jules Verne, Around the world in 80 days. Aunque la serie incluye suficientes cambios en los personajes protagonistas como para decir que se basa en la novela de Verne, más que ser una adaptación de la misma. El carácter de Phileas Fogg (David Tennant) es marcadamente distinto, así como el de Passepartout (Ibrahim Koma). Y no digamos el personaje de Fix (Leonie Benesch), que pasa de ser un torpe detective de Scotland Yard, personaje secundario de la historia, a convertirse en una osada reportera en un mundo de hombres, con un rol protagonista. Con un tono que alterna la aventura con más o menos humor, con dramas más oscuros en las vidas de los protagonistas, esta reinterpretación modernizada de la aventura que imaginó Verne, no acaba siendo todo lo redonda que podría haber sido, pero es bastante entretenida y visible. Aunque sinceramente, el Fogg de Tennant hay algunos momentos en que me resulta un tanto cargante. El final de la serie deja abierta una posible continuación que se basaría en otra novela del imaginativo escritor francés. Aunque no me consta que se haya confirmado la misma.

Y ya que estamos con adolescentes, nos vamos al mundo de los californianos protagonistas de Euphoria, una de las mejores series de televisión que se puede ver en la actualidad. Con una inspiradísima Zendaya en estado de gracia interpretativo a la cabeza del reparto, la primera temporada de esta serie, emitida en 2019, ya nos dejó grandes momentos. Pero estos se vieron muy superados por los superlativos especiales emitidos entre diciembre de 2020 y enero de 2021. Con su segunda temporada, el interés de la serie no sólo se ha mantenido, sino que ha aumentado, con episodios absolutamente antológicos como el 5º de la temporada, Stand Still Like the Hummingbird, uno de los más inspirados descensos a los infiernos de un drogadicto que se haya filmado para la pequeña pantalla, en el que el significado de la expresión «huida hacia delante» toma nuevos significados, hasta que delante sólo hay un enorme y terrorífico abismo. Aunque sería absolutamente injusto no mencionar el 7º de la temporada, The Theater and Its Double, que convierte el drama de los protagonistas en un musical, con protagonismo para la discreta Lexi (Maude Apatow). Como digo, una de las imprescindibles del panorama televisivo actual, que justifica suscribirse a HBO por un mes para verla. Y no he mencionado más un par de los muchos memorables momentos que ofrece la serie.