Y mantener las audiencias con una serie de ciencia ficción también. Porque justo cuando me veía el octavo y último episodio de la primera temporada de esta serie británica, Outcasts, me enteraba que es muy posible que sea el último y definitivo. Que la cancelan. Veamos un poco de qué ha ido.
Línea argumental
De una forma tremendamente optimista y pesimista al mismo tiempo, la acción sucede a mediados del siglo XXI en un planeta llamado Carpathia a una distancia de cinco años de viaje de la Tierra, donde una serie de colonos han establecido una ciudad, Forthaven, en un intento de preservar la especie humana, en peligro por las catástrofes ambientales y de todo tipo que ponen en peligro la supervivencia en el planeta madre. Optimista por la idea de que en un plazo de pocas décadas puede estar resuelto el viaje interestelar, por peligroso que lo pinten. Pesimista por la idea de que queda tan poco tiempo para que la especie humana mande su planeta madre a la porra.
A partir de ahí, en los ocho episodios de esta temporada van apareciendo una serie de líneas argumentales. La existencia de unos humanos de diseño que deberían haber muerto pero que están por ahí, y están enfadados. Conflictos políticos e interpersonales dentro de la ciudad. Descubrimientos de la existencia de seres similares a los humanos en el pasado del planeta. Aparición de una inteligencia misteriosa que pone en jaque a los humanos. Llegada de una nave no esperada de la Tierra con aviesas intenciones respecto a la población actual. Etcétera.
Cada capítulo tiene una historia propia al mismo tiempo que va presentando y va haciendo avanzar, con parsimonia, las distintas líneas argumentales.
Producción y realización
En lo que se refiere a la producción, es bastante aceptable para lo que es una serie de televisión de ciencia ficción. Rodada en Sudáfrica, con unos paisaje a ratos áspero y duros, a ratos hermosos, la ambientación es bastante razonable. El hecho de situar la mayor parte de la acción sobre la superficie planetaria, obliga a construir algunos decorados al aire libre para ambientar la ciudad de Forthaven, y permite limitar a un mínimo aceptable las naves espaciales y este tipo de parafernalia.
Los episodios están rodados con razonable destreza técnica. Nada que objetar.
Caracteres e interpretación
Aquí es donde las cosas empiezan a flaquear. Aunque interpretados por actores y actrices razonablemente competentes los caracteres principales no son demasiado atractivos. Los malos son demasiado obvios, los ni fu ni fa no llaman la atención, y los buenos son muy tópicos y con falta de rasmia. No he conseguido interesarme demasiado por lo que les pasaba a esta gente, y en algún episodio incluso me he desconectado un poco, perdiendo hasta cierto punto el hilo.
Impresión general
Creo que la idea era razonablemente buena, pero ha carecido de elementos significativamente distintivos, propios, que no parecieran tomados de otras series o películas. Y que ayuden a engancharse a la acción y los personajes que ya hemos dicho que eran obvios. Esta falta de alma propia, las múltiples sensaciones de déjà vu que presenta la serie le han restado mucha emoción. La serie quizá podría haber evolucionado hacia algo interesante. El cliffhanger final te deja algo intrigado… no mucho, pero algo… Da la sensación de que quizá lo emocionante está por llegar. Pero la serie no ha llegado funcionar lo suficientemente bien, y salvo que decidan hace algún episodio especial para cerrarla, nunca sabremos como acaba el tema.
Una pena. Sigo diciendo que desde que acabó Battlestar Galactica hemos andado un poco huérfanos de space operas. Que lo que ha ido surgiendo no ha dejado suficientemente satisfecho. Habrá que esperar otras ocasiones. O a que el Doctor vuelva por sus fueros dentro de algo más de un mes.
Recomendación musical
La palabra outcast viene a significar algo así como marginado, vagabundo, proscrito,… en inglés. El que ha sido excluido de una sociedad. Individuos de alguna forma aislados. Así me iré a las Empirean Isles de Herbie Hancock, que no sé si tienen mucho que ver, pero que están muy bien. La más conocida, Cantaloupe Island.