Me quedaban dos series por comentar del primer trimestre de anime de 2024. No tan brillantes ni mucho menos como las que comenté hace unas semanas. Pero al menos entretenidas. Y nos sirve para comentar la visión de los animadores nipones de algunos de los diversos géneros a los que se dedican. A veces con numerosos elementos predecibles. Otras… más originales.
Majo to yajū [魔女と野獣, la bruja y la bestia], en inglés, literalmente, The witch and the beast, es la típica adaptación de un serie de manga que se mueve en el terreno del fantástico. Presuntamente en el del terror, pero más bien funciona como una de aventuras entre buenos y malos. En un mundo ficticio donde existe la magia y los seres sobrenaturales, ambientado como la Inglaterra a caballo entre el siglo XIX y el XX, una curiosa pareja formada por un ser bestial atrapado en un cuerpo femenino y un mago que acarrea consigo a cuestas un ataud van por el mundo cazando brujas, buscando la que embrujó al ser bestial, de aspecto muy poco bestial. No voy a decir que me haya entusiasmado siempre el periplo de esta pareja, pero tiene algunos momentos conseguidos. Yo creo que le falta algo para terminar de atrapar. Quizá demasiado convencional en determinados aspectos. Si hay futuras temporadas, no tengo nada claro que me vaya a enganchar a ellas. He probado, he visto… y ya está.

Metallic rouge (en inglés en el original) es una serie de ciencia ficción que va claramente de más a menos. Desgraciadamente, demasiado a menos. En un futuro más o menos cercano o lejano, el ser humano a colonizado ya algunos planetas del Sistema Solar, y ha entrado en conflicto con alguna raza extraterrestre. Estamos en una tregua. Uno de los elementos para luchar contra los extraterrestres es una raza de humanoides sintéticos, que llevan incorporadas, mira tú por donde, las leyes de la robótica de Isaac Asimov. En ese ambiente, tenemos a una androide en una misión en el planeta Marte, acompañada de una joven, donde debe acabar con una humanoide que por algún motivo es hostil al gobierno. La cosa empieza bien. En un Marte que quiere recordar, a veces, al de Cowboy Bebop, tenemos una aventura entretenida entre estas dos chicas y una fauna diversa de gentes de moral siempre dudosa. La cosa empieza a enredarse cuando resulte que alguno androides se convierten en unas especies de grandes robots que disparan muchos tiros, y lo que parecían unas aventuras simpáticas por Marte, se complica en una trama sobre conflictos entre humanos y humanoides, pero mal llevada, engorrosa, y que resuelven de forma poco sutil. Esta es prácticamente seguro que no la seguiré viendo. Esta es la típica que parte de ideas interesantes, aunque no originales, y que pretende darle originalidad a través de tramas enrevesadas y espectacularidad pirotécnica llevada al extremo.
En fin… que en esta ocasión, no hay mucho que recomendar. El problema de ver estrenos,… que no tienes referencias para elegir. Tienes que arriesgar.

