Las series de fotografías que ilustran esta entradas de este Cuaderno de ruta pueden verse, desprovistas de texto, en Carlos en plata. Primeras pruebas de mi nuevo objetivo Brightin Star Xslim Pro-M 28 mm f2.8 MC, usado con adaptador sobre cámara digital Canon EOS RP.
Llevaba mucho tiempo sin escribir una entrada con recomendaciones fotográficas. Alguna en los últimos meses con algún libro de fotografía, o con exposiciones, si no recuerdo mal. Pero de las recomendaciones de artículo encontrados por la red de redes, poco o casi nada. Porque no tengo mucho tiempo para buscar o revisar, porque ya hace tiempo que este modelo de entrada lo tengo un poco en crisis. Pero bueno, he ido incluyendo en marcadores algunas cosas en las últimas semanas, desde las vacaciones de octubre, y las voy a comentar. Algunas de ellas no todas.

Una de las más recientes ha sido los numerosos obituarios por el fallecimiento del fotógrafo británico Martin Parr (1952 – 2025) (instagram). Estoy familiarizado con la obra de Parr desde hace bastante tiempo. Tanto, que me sorprende comprobar que ha fallecido con sólo 73 años de edad, lo cual es ser joven en estos tiempos, al menos como fecha de fallecimiento en los países más desarrollados. Siempre he tenido la impresión de que era un tipo majo, con buen humor… aunque vete a saber. Pero era la imagen que transmitía. Eso sí, me costó entrar en el tipo de fotografía que practicó. Fotógrafo documentalista, especialmente documentando al género humano y sus comportamientos, son muy célebres sus trabajos sobre el mundo del turismo y del ocio vacacional, su acercamiento formal al tema me resultó al principio un poco crudo. Esa fotografía directa, con el flash resaltando al sujeto principal de la imagen, con colores vivos, saturados, llamativos… no era inicialmente de mi gusto. Pero conforme uno se va adentrando en el mundo de la fotografía y en la cultura fotográfica, empieza a comprender que no se trata de que la cosa sea bonita. El arte hace tiempo que dejó ser el oficio de hacer obras bellas, para pasar a ser el oficio de hacer obras significativas. El arte ya no es algo para decorar hogares pudientes, edificios públicos, religiosos o políticos y este tipo de cosas, como fue durante la mayor parte de la historia. Hoy en día trata de reflejar ideas, conceptos, realidades, que no siempre son maravillosas o bellas. No creo que Parr quisiera cebarse especialmente en sus sujetos, aunque a veces pudieran parecer grotescos. Simplemente, transmitir realidades objetivas, y mostrarnos a nosotros mismos tal y como somos, no como nos imaginamos a nosotros mismos. Y con su puntito de humor, que siempre viene bien.
En otro orden de cosas, nos informaron en su momento, allá por la mitad del mes de octubre, de la concesión del Premio Nacional de Fotografía 2025 a la fotógrafa canaria Carmela García, de la que yo creo que había visto obras en algún momento, pero sin estar especialmente familiarizado con su obra. Alejada de lo puramente documental, prefiere crear escenarios y situaciones, teniendo, como ella misma dice, los temas relacionados con la cuestiones de género o con el mundo queer como prinicipales en sus reflexiones y en sus desarrollos conceptuales. No sólo hace obra propia, también interviene sobra obras preexistentes, o incluso anónimas. Poco más acierto a decir, pues ya digo que no estoy familiarizado con su obra. Por lo que tampoco quiero meter la para con alguna impresión superficial sobre lo poco que he visto, seleccionado por los medios que dieron la noticia, y que pueden no ser representantivo del conjunto de la obra.

Un par de recomendaciones relacionadas con la fotografía japonesa. La primera apareció en su momento en Another Magazine, sobre el fotógrafo Takashi Homma. Homma se dedica en gran medida al trabajo publicitario, donde se inició y se hizo un nombre, que le ha permitido realizar una obra más personal, en la que ha vuelto su mirada fotográfica a temas tan aparentemente distintos como los suburbios de la gran ciudad, miradas alternativas de las grandes metrópolis, o al retrato de las gentes de su país en las dos primeras décadas del siglo XXI. Estos retrato, directos y naturalistas, pero nada agresivos, es lo que más me ha llamado la atención. Y nos dicen que ahora trabaja en uno de los principales problemas de su país, el extremo envejecimiento de su población y la baja natalidad.
Mucho más recientemente, Tomasz Trzebiatowski, creador de FRAMES Magazine, ha comenzado a crear una serie de vídeos, NOTES ON SEEING, el primero de los cuales está dedicado al colorido fotógrafo japones Yasuhiro Ogawa (instagram). La visión de Ogawa es muy expresionista, con fuertes contrastes, colores dominante intensos, saturados, escenas que implican cierto misterio, una información incompleta del lugar en el que nos encontramos o lo que puede estar sucediento. Os dejo puesto el vídeo por si lo queréis ver. Prefiero su obra en color a su obra en blanco y negro. Siempre he ido a la contra de la opinión mayoritaria en estas cuestiones.
Y de momento, nada más. A ver como sigue esta sección antaño semanal de mi Cuaderno de ruta, actualmente esporádica.











