[Libros de fotografía] Anna Atkins y Saul Leiter, comprados en Barcelona

Fotografía

Ya comenté que estuve el lunes pasado en Barcelona. Y una de las cosas que hice fue darme una vuelta por librerías. Es algo que hace años hacía mucho, pero que había descuidado en los últimos años. Y no muy lejos de Casanova Foto, donde recalé nada más llegar a la Ciudad Condal, esta la librería Laie, y un poquito más apartada, pero no mucho, la librería Central. Y como tenía bastante tiempo, me acerqué a ellas.

Las fotografías acompañantes son de ayer por la tarde, hacia la puesta del sol. Paisajes urbanos con la Fujifilm GFX 50R. Como ópticas, el Fujinon GF 50 mm f3.5 y el Canon EF 200 mm f2.8 II USM con adaptador Fringer.

La librería Laie esta en la calle Pau Claris, que es continuación directa de Vía Layetana. No sé si de ahí le vendrá el nombre. Pero tiene muchas sucursales en museos y centros culturales. En Zaragoza regenta la librería y tienda de regalos de Caixaforum. Allí compre un pequeño librito dedicado a Anna Atkins, titulado Anna Atkins, la fotógrafa invisible de Lydia Oliva. Anna Atkins fue una fotógrafa pionera del siglo XIX, británica, que según nos cuenta la autora del libro fue anterior a otras figuras del momento, más conocidas por ser hombres. Atkins es conocida especialmente por el uso de la cianotipia la conservación de imágenes de plantas, ojas y flores, con fines documentales. Pero con una alto nivel estético. La cianotipia, ahora muy usada con fines artísticos, se usó inicialmente con fines técnicos. Era una forma sencilla de reproducir planos. En azul con líneas blancas, a partir del original blanco con líneas negras. El libro es pequeñito. Está basado en una ponencia de la autora en un congreso de fotografía hace ya trece o catorce años. Se lee enseguida. Y sus principales ilustraciones son las cianotipias de Atkins.

La librería Central están en la calle Mallorca. A un cuarto de hora caminando de la anterior. Me familiaricé con ella cuando visitaba hace años la ya desaparecida librería Kowasa, especializada en fotografía, y de la que eran vecinos. Es más amplia y con más catálogo que Laie. Y tiene un cierto saborcillo a otros tiempos. A cambiado poco desde que la conozco. Allí compré uno de los últimos libros que se han publicado, hace un año ya no obstante, de Saul Leiter. Leiter, uno de mis favoritos, precursor de la fotografía en color, pasó desapercibido durante la mayor parte de su vida, pero ha sido reivindicado con fuerza en los últimos tiempos. Con un archivo fotográfico de más de 40 mil fotogramas, hay material para muchos libros. Los que se presentan en este libro, con un papel mate que no es el que yo hubiera elegido en un principio, pero que no le sienta nada mal, no tienen la brillantez compositiva de sus fotografías más conocidas y publicadas. Pero ayudan a familiarizarse con el proceso de toma fotográfica del autor. Aportan comprensión a como sería el trabajo en la calle de Leiter, y por ello tienen un valor añadido. Y es que además, también están muy bien. La fotografía en la calle bien entendida, y no como muchos street photographers actualmente la entienden, tan descuidada e intrusiva. Muy recomendable.

[Libro de fotografía] Bosque primordial en Polonia para ¿mi último libro de Another Place Press?

Fotografía

Desde hace varios años he comprado bastante libros y otras publicaciones en formatos más sencillos de la editorial británica Another Place Press. Esta editorial está localizada en las highlands escocesas, no sé exactamente donde, no lo dice Ian Sarjeant, su propietario. Que también es fotógrafo. Y su objetivo es hace ediciones limitadas, económicas, pero de buena calidad, para fotógrafos de todo el mundo. Con un tema principal; el paisaje y su interrelación con el ser humano. Un tema que siempre me ha interesado ha diversos niveles. Y estaba bastante satisfecho con los libros que añadía a mi biblioteca procedentes de esta pequeña pero dinámica editorial.

Visitamos Polonia a principio del verano de 2008, pero no estuvimos ni cerca del bosque del libro de hoy. Así que pondré algunas fotos de los agradables alrededores del castillo de Malbork, no lejos de Gdansk.

Pero en los dos libros que he recibido desde el uno de enero, creo que los dos estaban encargados desde el año pasado, puesto que los reservé antes de su salida de la imprenta, me he encontrado con una desagradable sorpresa. La salida del Reino Unido de la Unión Europea ya está consumada, y los productos que proceden de la Gran Bretaña, o Irlanda del Norte, puede ser gravados en aduanas con aranceles o IVA. Sin que en origen te descuenten el IVA local. Así que pagas dos veces el impuesto, allí y aquí. En libros de modesto valor económico… si sumas los gastos de envío… el aumento del precio es excesivo. Por lo tanto, salvo que saquen un título que me llame mucho mucho mucho la atención, ya no me merece la pena comprar libros. Prefiero dedicar ese dinero a otros libros que por el mismo costo me produzcan más valor personal. ¡Hasta luego y gracias por el pescado!

El último libro comprado y recibido es Puszcza del francés Nicolas Blandin. Un fotógrafo que reparte su tiempo entre los trabajos de encargo, los trabajos editoriales y los proyectos personales. En estos últimos se centra en proyectos documentales en los que combina el retrato del entorno y el paisaje con los de las personas que en un lugar habitan y trabajan. En general… me gusta su enfoque y me gustan sus fotos.

Puszcza es una palabra polaca que significa «gran bosque», especialmente referido a los bosques primigenios, inalterados o escasamente alterados por el ser humano. Si ponéis la palabra en Google Translate dice que significa «desierto», pero el Wiktionary inglés, que incluye palabras de muchos idiomas, en su primera acepción indica lo de los bosques, y es su segunda acepción, marcada como arcaísmo la que se refiere a las malas tierras o tierras salvajes en general. Y en concreto, el libro se refiere a Białowieża, uno de los escasos reductos de los bosques templados que en tiempos cubrieron Europa hasta que la acción del hombre los eliminó para dar paso a bosques alterados, cultivados, o a su desaparición para urbanización y cultivo. Este bosque es patrimonio de la humanidad, pero sólo una pequeña parte tiene especial protección en Polonia como parque nacional. Y el libro de Blandin intenta reflejar la relación de los humanos que habitan en sus límites con el paisaje del bosque. Me gusta este libro. Viene con una foto de tirada limitada en tamaño Din-A4. Creo que echaré de menos estos libritos.

[Libros de fotografía] Robert Adams y el paisaje americano y la felicidad postiza en China

Fotografía

Una entrada breve para el día de Navidad, que servirá también como mis recomendaciones fotográficas de esta semana. Dos libros de fotografía que encargué hace unas semanas y que me han llegado recientemente. Algunos paquetes de correos o de empresas de transporte llegan sin problemas… pero sólo algunos. Y estos dos son algunos de ellos.

Fiel al espíritu de Robert Adams, algunos paisajes suburbanos, en uno de los polígonos industriales de Zaragoza, en un largo paseo dentro de la niebla en la mañana de hoy mismo, día de Navidad.

Bueno… el primero de ellos, más que hace unas semanas, lo encargué hace unos meses. Es una amplísima retrospectiva de uno de los fotógrafos contemporáneos que más cosas me dice. Recogiendo fotografías que abarcan desde 1965 a 2015, cincuenta años de carrera como fótografo, American Silence es el último libro publicado sobre la obra de Robert Adams. Lo encargué ya… a finales de septiembre o principios de octubre. Cuando todavía no había salido a la venta. El caso es que en Amazon han tardado más de lo que pensaban en tenerlo disponible. Pero al final ha llegado a punto, como «regalo» un tanto «inesperado» de Navidad. Miembro de la famosa exposición colectiva New Photographics, de los años 70, es uno de los fotógrafos norteamericanos que se fija en el paisaje alterado por el ser humano. Su mirada se centra en los espacios abiertos y en los suburbios de las ciudades de estados del oeste americano como Colorado, California y Oregón. Su fotografía, en blanco y negro, es directa, sin florituras, descriptiva, pero de calidad. Y fundamentalmente pone el foco en la crisis de los valores más importantes de esta región del mundo, una vez que es alterada por la presencia del ser humano. Y no me refiero precisamente a los nativos americanos que vivían por allí. Como decía, uno de mis fotógrafos favoritos… por lo tanto, para mí, un libro imprescindible, que tardaré días en digerir.

Un tono menos trascendente tiene el libro Happy Tonite, libro que recoge una selección de autores chinos contemporáneos de las colecciones del Archive of Modern Conflict. Esta organización cultural privada, originalmente estaba dedicada a la recuperación y recopilación de fotografías y otros objetos procedentes de la Segunda Guerra Mundial y otros conflictos armados que le siguieron en el siglo XX. Fotografías de lo que los anglófonos llaman vernacular photography, es decir, no realizadas por fotógrafos profesionales con fines documentales, reporteros gráficos o fotógrafos con un interés artístico. Vamos… la fotografía de la gente común o la que realizan profesionales de otros campos para sus propios fines. Con el tiempo, se extendió el archivo fotográfico a otros temas y procedencias, y en este libro se reúne una selección de fotografías contemporáneas, que reflejan la realidad constantemente cambiante del gigante asiático, con un enfoque específico en la ilusión de prosperidad y felicidad, sean estas más o menos reales, o más bien ficticias. Interesante la selección de fotografías, y viene bien para conocer a algunos de estos autores.

[Libro de fotografía (y un premio] Paisajes con casita y premio nacional de fotografía

Fotografía

Antes de entrar en materia, las fotografías que ilustran la entrada proceden de uno de los rollos en color que hice en el mes de septiembre. Y que esta misma mañana he comentado en sus aspectos técnicos de forma mucho más amplia en En color de medio formato (que no formato medio) – Olympus Pen EE3 con Kodak Portra 400. Son fotografías urbanas realizadas con la pequeña Olympus Pen EE3, que nos ofrece más de 72 fotogramas en un rollo de los habituales de 35 mm biperforado de 36 exposiciones. Llevo un retraso notable a la hora de ir comentando los rollos de fotografía que voy haciendo, y se me hecha encima un viaje corto a Andalucía y la llegada del revelado de los rollos que hice en el viaje a Italia. Pero ya no doy más de mí.

Recientemente me llegó un librito que me ha gustado mucho. De la editorial Another Place Press. Ya he comentado en varias ocasiones que se trata de un pequeña editorial británica que se dedica a publicar el trabajo de fotógrafos que trabajan el paisaje con un componente humano y de una forma que se aleje por los senderos trillados de las redes sociales y lo «saturadamente» vistoso. El libro de esta ocasión se titula Black Dots y su autor es el fotógrafo inglés Nicholas J. R. White (instagram), de quien ya he comentado alguna cosa previamente. Me gustan sus paisajes.

En esta ocasión, durante tres años se pasea por remotos paisajes de Inglaterra en los que de vez en cuando se encuentran pequeños refugios de pastores, que en inglés se denominada bothies, generalmente en zonas de montaña, abiertos permanentemente para que cualquiera que por allí pase pueda refugiarse si lo necesita. Estos pequeños refugios son los puntos negros (black dots) a los que se refiere el título del libro, ya que muchas veces apenas se perciben en la inmensidad de los paisajes, especialmente en el norte de Inglaterra. Los paisajes son realmente bellos. Eventualmente presenta también fotografías de los interiores de estos refugios, así como retratos ambientales de personas asociados a los mismos. La verdad es que es un trabajo que me parece interesante e inspirador.

Además del libro mencionado, mencionaré también que se ha conocido la ganadora del Premio Nacional de Fotografía 2021. Me he percatado del asunto en una entrada en Instagram de Leire Etxazarra, la autora del estupendo blog Cartier-Bresson no es un reloj, donde supongo que en algún momento publicará algo sobre el tema, pero no de momento. En cualquier caso, luego he visto que otros medios dedicados a la fotografía en español también han comentado algo sobre el asunto.

La ganadora del premio de este año es Pilar Aymerich, fotoperiodista catalana, que ya cuenta con 78 años y se encuentra ya retirada, aunque tengo la sensación de que no inactiva. Su página web da la sensación de que hace mucho que no está actualizada. Tiene un diseño muy antiguo y no hay referencias a acontecimientos posteriores a 2013. En cualquier caso, es fácil que sus fotografías sean familiares para quienes tenemos unos años y tenemos la fotografía, en todos sus aspectos, como afición. No obstante, sin dudar en absoluto de sus merecimientos, ahora que he repasado su obra tiene fotos muy notables como fotoperiodista que trabajó desde el final de la dictadura, me parece que en esta ocasión es un premio muy tardío, y con un fuerte componente ideológico. Ya digo que eso no quiere decir que no sea merecido. Pero los premios, para que tengan el valor debido, hay que entregarlos a tiempo. Y no por la moda de rescatar del olvido a gente que en su momento se lo curró, pero adquirió poca relevancia entre el público general, quedando simplemente como profesionales de prestigio entre los medios y los pocos aficionados que nos intentamos enterar de lo que pasa en el mundo de la fotografía. Pero este país es así.

[Libros de fotografía] Michals y lo conceptual, y Fukushima

Fotografía, Literatura

Esta entrada tendría que haber ido ayer, como mis recomendaciones fotográficas habituales de los domingos. Pero después de una mañana de caminata, tuve una tarde bajón anímico, que sólo me permitió apañar cuestiones prácticas pendientes para un viaje inminente y hacer un maratón del drama coreano de Netflix, del cual, igual os hablo mañana. Muy interesante. Pero hoy vamos con un par de libros de fotografía que me han llegado a casa en los últimos días… por orden de llegada.

Las regiones afectadas por el terremoto de Tōhoku (literalmente «nordeste») se encuentran al norte de Tokio. Y en mis dos viajes al País del Sol Naciente sólo he ido al norte de Tokio para visitar Nikko. Pero está en nuestros planes que, cuando se normalicen los viajes al amainar la pandemia, haremos un viaje por el norte de la isla de Honsu.

Duane Michals es uno de mis fotógrafos favoritos. Y además, es el fotógrafo con el que aprendí realmente qué es la fotografía conceptual y lo muy interesante que puede ser. «Fotografía conceptual» es un término muy maltratado y es usado por mucha gente como le interesa. Las más de las veces para atribuir a su fotografía un interés que no tiene. Pero en Michals los conceptos están claros, a través de sus sencillas, que no simples, imágenes, pero llenas de significados. Hace unas semanas vi anunciado el último libro publicado del autor, muy recientemente, bajo el título bilingüe The Idiots Delight / Plaisirs ridicules, en el que el fotógrafo juega con el absurdo en una serie de retratos escenificados, que son acompañados por breves frases o expresiones. Fotografías en blanco y negro en un tamaño más que respetable, a doble página en un libro cuyas dimensiones externas son unas notables 34 x 26 cm. Es un libro divertido, del que todavía he oído hablar poco, pero que a mí me ha encantado. Eso sí… se asume la inteligencia del «lector», ya que sólo están las fotos con sus breves frases. Ni introducciones, ni sesudos comentarios complementarios por algún sabio de la fotografía… la «lectura» de la fotografía conceptual necesita de palabras las justitas. Lo importante son las imágenes.

El otro libro nos habla de las consecuencias del seísmo de Tōhoku de 2011 en Japón, más conocido por la catástrofe nuclear de la central de Fukushima que tuvo como consecuencia. Hablo de Out of Sight, Fukushima à l’abrí du regard, en japonés 曖昧な喪失 Aimaina sōshitsu [pérdida ambigua] ,un libro tetralingüe, japonés, inglés, francés y alemán, realizado mano a mano entre una fotógrafa francesa que vive y trabaja en Japón, Delphine Parodi, y una escritora y poetisa japonesa, Yōko Tawada, que vive y trabaja en Alemania. El libro conjuga un serie de dípticos fotográficos de Parodi, retratos ambientales y paisaje de naturaleza, con los textos que Tawada, para hablarnos de las gentes que se han pegado a la tierra a pesar de la catástrofe y de los riesgos, tratando de humanizar a aquellos que se han quedado tras la tragedia. Incluye testimonios vitales de estas gentes. Son muchos los autores, tanto visuales como literarios, que han dirigido su mirada y pensamiento hacia esta tragedia. Pero en su aparente sencillez, este trabajo es uno de los que más me han llegado y convencido. Y tiene poco de espectacular, pero no carece en absoluto de profundidad. Necesitaré mi tiempo para ir leyendo y reflexionando sobre todos los textos que en el aparecen.

[Recomendaciones fotográficas] Algunas, varias… hoy esto espeso

Fotografía

Me acostaba bastante más tarde de lo que últimamente es normal en mí, y a pesar de todos muchos consideraría «pronto» para un sábado por la noche. Y dándole muchas vueltas a la cabeza a un tema. Después de una muy agradable velada con unos amigos, de los de siempre, en el taxi que me traía a casa un tema, que no tenía excesivamente con las conversaciones mantenidas, se fijó en mi cabeza, hizo que me costara conciliar el sueño, y ha resurgido de forma recurrente en mi cabeza interrumpiéndolo varias veces. Así que estoy todavía cansado y somnoliento. Y no me apetece nada pensar lo que voy a escribir. No obstante, haré un esfuerzo par exponer algunas recomendaciones fotográficas este domingo.

Leyre se va de vacaciones y no volverá a escribir en su blog, Cartier Bresson no es un reloj, hasta septiembre. Pero nos deja un listado de 20 libros y alguna cosa más por si queremos rellenar el verano de fotografía, arte o cultura en general. Y me parece muy bien.

Activa en algunos de los grupos de fotografía en los que yo participo, contactos desde hace un tiempo en Facebook, aunque no nos conocemos personalmente, el excelente trabajo de Leonor Benito de la Lastra ha aparecido esta mañana en el tumblr de Gacougnol. También la podemos encontrar en Instagram, o en sitios como LensCulture. Así que no hay motivos para no conocer el trabajo de esta fotógrafa dedicada a procesos fotoquímicos y tradicionales desde Salamanca.

Siempre me han intrigado los bonsáis. Estos arbolitos, que pueden ser de gran belleza, «torturados» para mantenerse en tamaños diminutos para lo que podrían ser. En Pen Magazine ペン hemos conocido cómo el fotógrafo Masao Yamamoto los integra en el paisaje otorgándoles visualmente el lugar que no puede ocupar por las restricciones en su cultivo.

Y también desde Pen Magazine ペン, una serie que atraerá a los más fetichistas, ya que el barcelonés César Ordóñez se va hasta Tokio para fotografiar pies. De lo más diverso. A la moda. O no. Simplemente que muestran algún tipo de interés. Curioso. La serie se llama ashimoto 足元, algo así como «por los pies», o «paso», o «entre los pies»…

En la fotografía moderna, los adolescentes, especialmente las adolescentes, son un motivo favorito de muchos fotógrafos. En esta ocasión, como nos cuentan desde AnOther Magazine, en Derry, Irlanda del Norte, y de la mano de la cámara de Megan Doherty. Llevo ya un tiempo siguiendo a esta fotógrafa en Instagram. Me ha recordado una de las series más divertidas de Netflix.

[Libro de fotografía y algo más] Tomoko Yoneda y la historia

Fotografía

Cuando se anunció el final de la vigencia del estado de alarma para el 9 de mayo de este 2021, segundo año de pandemia, se dio una circunstancia peculiar. Determinados municipios o comarcas de una comunidad autónoma podía estar confinadas por motivos epidémicos, pero no podía haber límites al tráfico entre comunidades autónomas. Algunas lo intentaron… porque cuando sucedió este final del estado de excepción, la última onda epidémica, ya no llevo la cuenta… porque todo depende de cómo se cuente, todavía hacía estragos. Pero los tribunales, que muchas veces han demostrado en el último año y medio que el derecho a la salud y la vida lo consideran por debajo en jerarquía a la economía y las finanzas, han ido anunlando estos intentos en buena parte de las comunidades autónomas. El caso es que… de perdidos al río. Con una dosis de vacuna ya puesta, y con unas razonables precauciones a la hora de tratar con los indígenas de la comunidad de Madrid, me planteé hacer un viaje en el día a la capital del reino.

Había varias cuestiones que me inclinaban a ello, de las cuales sólo comentaré una, puesto que las otras me parece faltas de interés en general o entran en el ámbito de los estrictamente privado, de lo que no suelo hablar aquí. Pero una de las que se puede comentar es que desde hacía tiempo sabía de una exposición en una de las salas de la Fundación Mapfre de la fotógrafa japonesa radicada en Francia, Tomoko Yoneda.

No son fotografías coloreadas como las de Kazusama Ogawa, de quien hablo más abajo, pero me ha parecido adecuado al tema traer estas fotografías de la rosaleda del Parque Grande de Zaragoza.

Yoneda me ha llamado la atención desde hace tiempo. Es una fotógrafa versátil, que utiliza cualquier medio fotográfico que le venga bien para sus intenciones. Lo mismo puede utiliza cámaras de gran formato o medio formato, que coger la pequeña Olympus Pen de su padre, con sus negativos subminiatura, la mitad de lo que se considera el negativo estándar que se consigue con película de 35 mm. Pero sobretodo me interesa por sus temas. Entre la antropología y la reflexión sobre el pasado, es una fotógrafa que basa muchas de sus series en la memoria histórica. En el regreso a los lugares que forman parte de hechos transcendentales, bien en la historia de la humanidad o de los países en general, o de la historia personal, un punto de vista más particular. Y estes es un enfoque que me atrae mucho.

Finalmente, no viajé a Madrid. Aparte de lo antipática que se está poniendo últimamente esa comunidad por diversos motivos, me encontré conque la exposición terminó sus días al mismo tiempo que el estado de alarma. Y algunas de las personas, amistosas y queridas, con las que pretendía encontrarme, no iban a estar disponibles con un margen de tiempo suficiente como para que nos pusiéramos al día en tranquila charla. Lo que sí hice, a cambio, fue comprar a través de internet el catálogo de la exposición. Fundación Mapfre siempre hace unos catálogos sencillos pero muy bien presentados. Y os lo recomiendo.

Y ya que estamos con una fotógrafa japonesa, añadiré algunas recomendaciones más sobre fotógrafos de esa nacionalidad:

En el Tumblr de Gacougnol, muy interesante para ver fotografías y conocer fotógrafos, pude ver la obra de Ayako Takaishi, realizada sobre medios fotoquímicos tradicionales. Lo que más me gustó e impresionó fue las naturalezas muertas. Pero no hay que desdeñar otros temas en la obra de la fotógrafa que se mueve a caballo entre Tokio y París. Su página web, que he enlazado antes, está todavía en desarrollo. Pero tiene dos cuentas en Instagram recomendables. Una para su trabajo más artístico, especialmente las naturalezas muertas, y otra para sus viajes y desplazamientos. Aunque el estilo visual de ambas es similar.

En Pen ペン Magazine me llamó la atención el artículo con las fotografías coloreadas a mano por Kazumasa Ogawa. Fundamentalmente, fotografías de flores. Ogawa fue un fotógrafo de la era Meiji. En aquella época las fotografías coloreadas a mano eran muy populares en Japón, aunque la mayor parte funcionaban como recuerdos de viaje, y escenificaban atuendos, personas o lugares más típicos del periodo Edo que de la época en que se hicieron. Pero las de Ogawa tenían un sentido en sí mismas, como reproducción de la realidad, complementando la fotografía con la pintura para una reproducción adecuada de las flores que interesaron al fotógrafo. Fue un fotógrafo prolífico, por lo que su obra abarca más ámbitos y géneros. Pero este es el que me ha interesado.

[Libros/revistas de fotografía] Últimas entradas entre el paisaje y la moda

Fotografía

Esta semana me han entrado varios pedidos que tenía desde algún tiempo para mi biblioteca fotográfica. Las fotografías acompañantes son de ayer, en un paseo al atardecer, cuyo objetivo principal era tomar fotografías de paisaje con la Hasselblad 500CM y un rollo de Kodak Portra 400, pero durante el cual también tomé algunos apuntes fotográficos con la Canon EOS RP y el veterano EF 50/1.4 USM, todo ello por los alrededores del soto de Cantalobos.

Por un lado han llegado los tres siguientes números de los field notes, cuadernos de campo, de Another Place. Tengo reservados tres más, hasta el número 30. Luego ya veremos si sigo. Al principio, prácticamente todos me gustaban. Desde hace un tiempo empieza a haber algún numero que me deja un poco más frío. Y al ritmo de entre 9 y 12 al año, creo que es algo así, son muchos números para que todos sea realmente trascendentes. Pero vamos con lo que ha llegado.

El número 25, Notes from the LIRR Walks de Bryan Formhals, es un ejemplo de lo que he mencionado. Fotografía en blanco y negro de 22 paseos por los caminos de un par de condados de Long Island en el estado de Nueva York. Habiendo alguna fotografía interesante, creo que es un buen cuaderno personal para uso propio, pero con un interés más limitado para el común del público, no aportando nada novedoso desde el punto de vista temático o estético.

El número 26, Pachacuti de Faustine Ferhmin, me ha resultado bastante más interesante. Un estudio en color sobre un determinado paisaje, la de rocas que emergen de la tierra, como esculturas naturales, mezcladas con los restos de estructura ruinosas, abandonadas por los seres humanos, todo ello tomado en Perú a final de la primera década del siglo XXI. Revisada la página web de la autora, una fotógrafa francesa que vive y trabaja en París, el conjunto de su obra me parece más interesante.

El número 27, The Seventh Zone de Ben Roberts (instagram), se encontraría a caballo entre los dos anteriores desde el punto de vista del interés general, aunque para mí ha resultado bastante interesante por su enfoque. Fotografías tomadas en los alrededores de Birmingham, una gran ciudad de las Midlands inglesas y con un cinturón de pequeñas localidades, yo he pernoctado en alguna de ellas, que incluyen algún interesante paisaje a caballo entre lo urbano y lo natural o agrícola. Lo curioso de este fotógrafo británico es que está afincado en Madrid… he incluye el paisaje urbano y natural madrileño/castellano entre su obra.

En otro orden de cosas, he recibido dos números que solicité recientemente, llegaron con prontitud, de la revista Whitelies Magazine. Llevaba ya un tiempo siguiendo la cuenta de instagram de esta revista de gran formato basada sobre todo en reportajes con gran número de fotografías de alta calidad, sobre arte, creatividad, moda y estilos de vida. La salida a la venta del número 009 PERMANENCE 永続性 con cuatro portadas a elegir, entre ellas una con una fotografía de Lena C. Emery, fotógrafa que me gusta bastante, me hizo plantearme comprar algún ejemplar. Y por mantener el estilo, compré también un número atrasado, el número 007 TRANSFORMATION, también con una portada de Emery, de un libro que ya tengo de ella. El interés de los artículos de la revista, aunque todos muy bien presentado y con material de calidad, varía para mí. Algunos me interesan,… otros me parecen que transcurren por temas más banales y superficiales. Así que no creo que insista en comprar más ejemplares, salvo alguno que lleve algún tema o reportaje de especial interés. Ya veremos. Aun tengo que repasar despacio algunos de los reportajes de estos dos números. Que pueden tener bastante más miga de lo que parece.

[Libro de fotografía/Recomendaciones fotográficas] Ogawa Yasuhiro y algo más

Arte, Fotografía

Al igual que las semana pasadas, la entrada de hoy era para comentar mi última llegada a mi biblioteca de libros de fotografía. Pero incluiré también algunas recomendaciones que me parecen apropiadas.

También he de decir que las fotografías acompañantes son de mi participación en la #fp4party de este año, a la que he dedicado una segunda entrada, «fiesta» de la fotografía con película negativa en blanco y negro, cuya naturaleza ya os expliqué hace unos días. Los aspectos técnicos de las fotos de hoy los podéis encontrar en # FP4Party Edición 2021 – Leica M6.

Ya hice un breve comentario el domingo pasado del fotógrafo japonés Yasuhiro Ogawa, fotógrafo viajero que ha recorrido amplias regiones de Asia y otras partes del mundo. Tanto me gustaron las fotografías que vi de él en Photography of China, que decidí encargar el libro The Dreaming. Como el mismo explica, la idea le vino cuando cumplió los 50 años, y decidió revisar su colección de negativos en blanco y negro de sus viajes. Fundamentalmente, Asia oriental, Sudeste asiático y alguna otra parte del mundo como Centroamérica o Sudamérica. El resultado es un libro no muy extenso, ligero, muy manejable, agradable de hojear, que como su título indica nos traslada al viaje como un concepto de ensoñación. Etéreo. Apenas material. Paisajes y personas de los lugares que visita o con quienes se encuentra, despojados de los elementos que los perturban. Sobrios. Muchas veces jugando con las sombras, como le hubiera gustado a Tanizaki. O con las inclemencias del tiempo. Lo cierto es que desde que lo recibí a principio de semana, todos los días lo hojeo una ratito, y cada vez me gusta más. Y despierta, todavía más, en mí, el deseo de viajar. ¿Cuándo lo podremos satisfacer?

Como también lo ha hecho el artículo de Pen Magazine, en el que vemos algunas de las fotografías que la fotógrafa Nora Rupp realizó en su peregrinaje por los 88 templos budistas de las isla de Shikoku, la más pequeña y menos conocida de las cuatro principales del archipiélago japonés. Aunque para quienes hemos leído el Kafka en la orilla de Murakami no será familiar. Son fotografías directas. Tomadas sobre la marcha, sin buscar necesariamente el momento adecuado, la luz adecuada,… donde encuentra lo interesante, especialmente a los peregrinos, fácilmente distinguibles por su atuendo, ahí hace la foto. Lo que resulta en una fotografía sin tapujos, directa. Y por ello, nos aparece más sincera. Y a pesar de todo, bella. Hizo un librito de la peregrinación, Henro, pero no lo encuentro. Previamente hizo algo similar, aunque no me resuena lo mismo, con el Camino de Santiago.

Finalmente, Elizabeth Avedon dedica una de sus entradas a las fotografías de Tokio de Sean Perry. Tokio es una ciudad que me atrae constantemente, aunque luego, en los dos viajes en los que he parado allí unos días, no me resulte especialmente acogedora. Me abruma un tanto. Sólo algunos rincones de la ciudad me resultan realmente acogedores. Las fotografías de Perry, aunque bellas, no dejan de representar esa ciudad enorme, poco acogedora, de edificios enormes y casi amenazantes. Y sin embargo, lo que daría en estos momentos por volver a Tokio una tercera vez. Con el tiempo.

[Libro de fotografía/Recomendaciones fotográficas] Richard Misrach y algo más

Arte, Fotografía

Básicamente, la entrada de hoy era para comentar mi última llegada a mi biblioteca de libros de fotografía. Pero incluiré también algunas recomendaciones que me parecen apropiadas.

El libro On Landscape and Meaning del fotógrafo californiano Richard Misrach es el sexto de la serie The Photography Workshop de la editorial Aperture. Tengo los seis libros, y son de mis favoritos. En el mundo de la fotografía o cualquier otro mundo del saber y de las artes. Porque aúnan dos grandes propiedades; son una oportunidad para contemplar grandísimas fotografías y por que son una oportunidad para aprender de los grandes fotógrafos que las han realizado. Y que las más de las veces lo hacen con sinceridad, humildad y calma. Y el libro de Misrach se ha convertido casi de inmediato en mi favorito, quizá disputándose el título con el de Todd Hido. Probablemente porque hablan del paisaje. Pero no el paisaje de moda, llamativo, saturado, espectacular y al mismo tiempo repetitivo, que se puede ver en las redes sociales más diversas. Sino el del paisaje auténtico. Con significado como dice el título del libro. A veces bello. A veces no. A veces bello en su ausencia de belleza. Alterado por el ser humano las más de las veces. Y que no huye del entorno urbano, que también es paisaje. Un libro de fotografía que es un gozo, no sólo para ver, sino también para leer.

Mi particular visión del paisaje… en parte inspirada por fotógrafos como Misrach. De este rollo de película negativa en color, ya os hablaré dentro de unos días. Que no me da la vida para ir tan deprisa.

Quienes lean de vez en cuando estas entradas sobre libros o recomendaciones fotográficas, observaran que poco a poco sitios en internet dedicados a la fotografía y culturas asiáticas se abren paso con frecuencia en ellas. Entre ellas Photography of China, sobre la fotografía en China, aunque todo indica que el sitio se edita y publica desde Francia. Con autores chinos y de otros lugares del mundo que se interesan por la actualidad y cultura chinas. Sospecho que un sitio así no siempre tendría el beneplácito de las autoridades chinas… por aquello de la censura y tal que tienen como costumbre las dictaduras.

Y así, en los últimos días me he fijado en un artículo sobre el fotógrafo Luo Dan que usa la antigua técnica del colodión húmedo para retratar a los miembros de minorías en la inmensidad china, otorgando a sus imágenes un aire atemporal. Y también en otro artículo, esta vez sobre el fotógrafo japonés Yasuhiro Ogawa, fotógrafo viajero que ha recorrido amplias regiones de Asia y otras partes del mundo, cuya obra se exhibe actualmente en Hong Kong. Tanto me interesó el contenido de sus fotografías que he encargado el libro. Cuando llegue os cuento.

Mucho más reciente es mi adicción a Pen Magazine, una revista con su versión en línea que nos llega desde Tokio, y que abarca muchos más ámbitos culturales y artísticos además de la fotografía. Estos días atrás me han interesado dos artículos sobre fotógrafos. El primero, dedicado a Momo Okabe, que refleja las identidades sexuales alternativas a la visión binaria tradicional, con una colorida y potente puesta en escena, para una artista que se define a sí misma como asexual, al mismo tiempo que madre. El segundo, dedicada a Masaki Yamamoto, que ha documentado la vida de una familia de siete miembros que durante 18 años ha vivido en un minúsculo apartamento de una sola habitación.

Este sitio también me inspiró la compra de un libro, aunque no de fotografía. Hubiera preferido que estuviera en papel, pero sólo se puede comprar como libro electrónico, y es Harunobu Suzuki’s 100 Beauties, escena de la vida cotidiana, especialmente femenina, en el Japón del siglo XVIII, grabadas según la técnica, que tanto me gusta, del ukiyo-e. Como el título del libro indica, del pintor Harunobu Suzuki, claro. Para contemplar y hojear en el iPad o en el ordenador de sobremesa.

Como veis… al final todo acaba en los libros.

[Libros de fotografía] … y «sakura», tulipanes y narcisos

Fotografía

El domingo pasado llegó la primavera. Y este domingo se nota. Ya desde mediados de semana empezaron a subir las temperaturas. Así que las flores de los cerezos ornamentales del Parque Grande de Zaragoza, que el lunes apenas habían asomado media docena entre todos los arbolitos (les falta mucho por crecer), este domingo ya habían reventado en mayor número. Aunque aun quedan muchas por hacerlo. Las sakura de los japoneses… incluso había una pareja haciendo su hanami particular, desayunando en la hierba junto a los cerecitos. Quizá ella tuviera rasgos orientales,… pero con la cosa de las máscaras y estas cosas… El caso es que ya he dedicado un par de ratos a hacer fotografías. Este año, además, han plantado unos narcisos y unos tulipanes muy vistosos en las riberas de una pequeña acequia que atraviesa el parque en el paseo de los Bearneses. Cuando he llegado era pronto y estábamos cuatro gatos. Pero cuando me iba, aquello era una invasión humana de proporciones considerables.

Así pues, ilustraré esta entrada sobre los últimos libros de fotografía que me han llegado con algunas fotografías de «sakura», tulipanes y narcisos,… y así me quedará muy primaveral. Pero vamos con los libros que es a lo que iba en principio.

Hace unas semanas leí sobre la publicación de un libro de la fotógrafa norteamericana Deanna Templeton, titulado What She Said. Un libro de fotografías no actuales. Más bien un álbum de fotografías personales de sus tiempos de adolescente en los años ochenta, en el que además de fotografías propias y de sus amigas (y también algún chico) adolescentes, encontramos todo tipo de recortes, panfletos, cartas, entradas de conciertos… y todo tipo de recuerdos que una persona puede recopilar por las memorias que le aportan. Me pareció curioso, interesante. Pero en ese momento no me atrajo su compra. Pero…

Unos días después me enteré que el fotógrafo Alec Soth (instagram), un autor que me gusta mucho, había abierto un canal en Youtube y que lo estaban recomendando mucho. Así que me fui a el y vi el vídeo más reciente que había publicado. Y,… ¿a que no sabéis de qué libro estaba hablando? Efectivamente. Del álbum de fotografías de adolescencia de Templeton. Os pongo el vídeo.

Después de escuchar el comentario de Soth, ya no me cupo la menor duda, tenía que tener ese libro. Y lo pedí. Y me llegó enseguida. Y llevo varios días con él. Porque no se trata de ver y mirar las fotos solamente. Todos los textos, todos los recortes, todas las entradas, todos los folletos reproducidos tienen su historia y su interés. Un mirada íntima, profunda y sincera al mundo de la adolescencia. Dura en ocasión. Muy dura. Y tierna y esperanzadora en otras.

Por otro lado, me ha llegado un nuevo trío de cuadernos de la colección Field Notes de la editorial británica Another Place Press, que ha remodelado su página web. Normalmente estas remodelaciones me hacen temblar… pero en esta ocasión parece que ha sido para bien. Todavía es más claro y sencillo el proceso de localización y compra de la publicación que te interesa. Si os interesan estos cuadernos, están todos en la sección Zines.

El número 022 es de Casey Bennett, fotógrafo canadiense de la Columbia Británica, con su cuaderno Singing Their Weird Song, una exploración de una pequeña isla pantanosa, en el centro de la ciudad de algo menos de 10 hectáreas, protegida por ser santuario de fauna local. El proyecto surgió entre los paseos cotidianos durante el periodo de confinamiento por la pandemia actualmente en curso.

El número 023 también llega desde Canadá, de Saskatchewan, de la mano de la fotógrafa Vera Saltzman (instagram), que se ha fijado en los vistosos silos de grano que flanquean las líneas ferroviarias del lugar, cada vez más en desuso, y que quedan como arqueología agrícola moderna, reflejo de una época. El nombre del cuaderno… The Elevators. Me encantan este tipo de fotos.

El número 024 es el más misterioso, porque no se acompaña de mucha información, por lo que queda al criterio del lector de las fotografías otorgarles parte de su significado. Realizado por el fotógrafo polaco Adam Wilkoszarski (instagram). Es en esta red social donde encontramos las claves a estos paisajes desérticos, salpicados de desechos, y en los que de vez en cuando vislumbramos edificios en estado de mayor o menor abandono. Todo indica que las fotos de When The Dust Settles proceden de las zonas limítrofes del estado de Israel, fronteras siempre complejas y conflictivas.

[Libros de fotografía] Viajes, paisajes y moda cinemática

Fotografía

Wing Shya fue fotógrafo de plató o «foto fija» de algunas de las películas de Wong Kar-wai de las que os he estado hablando recientemente. O colaboró de alguna forma con ellas… Hizo fotos relacionadas con ellas. Ha colaborado también con otras gentes del famoseo cinematográfico, musical y del mundo de la moda. Recientemente vi anunciado un libro «triple» que me interesó… pero que tiene un precio bastante elevado, al que hay que añadir costes de envío desde lugares lejanos, que todavía lo incrementan más. Y como no estaba seguro si todo el libro me iba a gustar o estaba simplemente bajo el influjo de las imágenes del ciclo de cine de Wong Kar-Wai, decidí atemperar mis deseos. Pero encontré otro libro del mismo autor con precio más razonable, así como los costes de envío, Shanghai, y que podía darme a conocer el estilo del fotógrafo. Que en realidad es mucho más diverso, por lo que se puede ver al hacer una búsqueda por la red de redes. El libro es fotografía de moda, en colaboración con una conocida fama de las que hace pagar caro el capricho de lucir su marca, y está realizado como su título indica en la cosmopolita ciudad china. No está mal. Pero yo soy algo rarito para los libros de fotografía de moda, y es difícil que me lleguen a satisfacer del todo. Adopta un estilo visual muy basado en sus colaboraciones con el director de cine mencionado.

Como Wing Shya, nos iremos a fotografiar las gentes y los paisajes de Shanghai.

También comenté recientemente la obra del fotógrafo taiwanés Lin Yu Chih, un fotógrafo viajero que ha recorrido amplias zonas del Asía oriental y suroriental. Recoge sus viajes de una forma muy personal, fijándose sobre todo en las gentes. Y se aleja, oponiéndose casi diametralmente, a las modas actuales de fotografía de viajes colorida y espectacular, para refugiarse en un blanco y negro intimista. En Tiny Christs, el viajero se acerca a las gentes que encuentra en sus periplos por China y Tailandia. Y el libro se construye como un álbum de recortes o un diario en el que se adhieren las fotos, aunque hay poco texto. Para disfrutar de otra forma de considerar los viajes.

Finalmente, la siguiente entrega de tres cuadernos de campo, Field notes, que nos llegan desde Another Place Press.

El número 019, de Sushavan Nandy (instagram), Ebbing Away of Identity with the Tides, nos habla de las islas del delta del Ganges que están desapareciendo, llevadas por las mareas cada vez que estas suben, y cada vez suben más debido al cambio climático. Y con ellas, se empobrecen y desaparecen las poblaciones que las habitan. Me ha parecido de los field notes más interesantes que han publicado hasta ahora.

El número 020, de Alice Oliver (instagram), Somewhere & Nowhere, documenta con una variedad de motivos y estilos el viaje que la fotógrafa realizó con su padre por el sur de Gales, lugar donde el hombre nació.

El número 021, de Joanne Coates, North Sea Swells, refleja la vinculación de la fotógrafa con el mundo de los pescadores del mar del Norte y con la industria pesquera. Muchos retratos y algunos paisajes y fotografías de entorno. Está bastante bien.

Y esto es todo por ahora.