Frente al tópico de las fotografías otoñales llenas de hojas amarillas, ocres y rojizas, en mi ciudad, Zaragoza, las cosas no funcionan así. De hecho, salvo en algunas zonas de montaña, principalmente con hayedos y similares, no funcionan así en casi ningún lugar de la Europa templada. Los árboles verdes de hoja caduca, varían un poquito al amarillo y las hojas van cayendo en cuanto sopla el viento o cae la lluvia, sin esos famosos colores de otoño, más propios de otras latitudes u otros continentes.
Pero es cierto que la luz tiene otra calidad en cuanto llega el mes de octubre. Buena parte del verano, no vemos ni una nube en el cielo. La luz es dura, los atardeceres cortos. Malos tiempos para la fotografía en color. El mes de octubre en Zaragoza tiene la mejor calidad de luz. Últimamente, también noviembre, desde que las nieblas se han hecho muchísimo menos frecuentes que antaño.
Aquí os dejo algunas fotos realizadas en este último mes de octubre, mientras camino por la ciudad. Los detalles técnicos en Leica M2 + Zeiss Planar 50/2 ZM con Kodak Portra 160 para pasear en octubre.