El pasado domingo, durante la fiesta de carnaval para niños en la que estuve, mi veterano
Aunque con posterioridad, con calma y reflexión, encontré la forma de repararlo por mi mismo, para lo cual sólo necesité un poco de lógica y dos gotitas de loctite, lo cierto es que uno pierde parte de la confianza que tiene en un chisme de estos tras semejante batacazo. Así que me pedí en Amazon.es un EF 50/1,4 USM para reemplazarlo. Cuesta, con parasol, tres veces más. Pero en calidad constructiva, en el motor de enfoque y en varios detalles más, lo vale. En los resultados, mi habilidad dirá si soy capaz de sacarle alguna ventaja. En cualquier caso, como lo recibí ayer, hoy me lo he llevado conmigo cuando he ido a trabajar, y camino de Huesca he tirado las primeras fotos con él. Que no demuestran nada en términos de teoría o práctica fotográfica. Sólo que tenía ganas de estrenarlo.