Lost Girls (2020; 17/20200322)
Bloqueados en casa, con los espectáculos públicos suspendidos, la única posibilidad que tengo para actualizar mi listado de películas de estrenos es lo que aparezca en las plataformas de vídeo bajo demanda. Y eso implica mucha precaución, porque hay mucho producto de mero entretenimiento, sin interés. En cualquier caso, me fije hace unos días en esta película dirigida por Liz Garbus, una cineasta que se ha movido más por el cine documental, y que presentaba una propuesta con un reparto interesante.

La película trata de un caso real de asesinatos múltiples en el entorno de una urbanización privada pudiente en las playas de Long Island, en el que aparecieron muertas un número entre 10 y 16 mujeres, muchas de ellas relacionadas con la prostitución, que pudieron ser asesinadas por uno o quizá dos asesinos. Para acercarse al caso, la película sigue a la madre de una de las víctimas, Mari Gilbert (Amy Ryan) que junto con sus hijas Sherre (Thomasin McKenzie) y Sarra (Oona Laurence) se dedica a buscar a la hija mayor desaparecida. Y que con frecuencia se enfrenta con el policía al cargo del caso (Gabriel Byrne).
El problema es que la película resulta fría, y los conflictos internos de las personas que protagonizan en la película quedan trazados de forma muy grosera. Supongo que la directora, fiel a sus orígenes en el documental, busca también una aproximación fiel a los hechos, aunque se pronuncie tácitamente sobre sus principales sospechosos. Pero no te despierta emoción alguna. La presencia Byrne, Ryan y la joven McKenzie es lo que provocó el interés por la película. Y cumplen con oficio, pero sin destacar, quizá porque el material de partida no lo permite.

Sinceramente, no puedo recomendar esta película que, al fin y al cabo, queda a la altura, no importan sus pretensiones, del típico telefilme de sobremesa «basado en hechos reales».
Valoración
- Dirección: ***
- Interpretación: ***
- Valoración subjetiva: **
