[TV] Cosas de series; inducidas por los viajes

Televisión

Recuerdos de la Alhambra

Las dos series de hoy, que no me llevarán mucho rato, son un poquito anecdóticas. Tienen en común que aparecieron en la cartelera de Netflix en el ámbito de viajes que he hecho en los últimos meses y con los que tenían algún tipo de relación. Lo cual hizo que empezara a verlas. Aunque la verdad es que no son gran cosa.

No sabía si poner fotos de Taiwán o de Corea… pero al final he considerado que había que hacer un desagravio a la antigua capital nazarí y poner fotos de las auténticas calles y paisajes granadinos.

La primer viene desde finales de agosto o principios de septiembre. Estábamos entonces preparando las vacaciones de octubre en Taiwán, cuando de repente aparece anunciada una serie titulada, en inglés,
A Taiwanese Tale of Two Cities. La curiosidad me pudo y me puse a ver los episodios disponibles en ese momento. Porque aunque aparece como «original» de Netflix, lo cierto es que no se ha lanzado como las propias de la plataforma. Ha ido apareciendo un episodio cada semana. En alguna ocasión dos, creo. Las dos ciudades son Taipéi y San Francisco, donde residen respectivamente Nian-nian (Tammy Chen) y Jo (Peggy Tseng), dos «jóvenes» taiwanesas o de origen taiwanés la californiana, que se reúnen en Taipéi por una estafa. Lo de «jóvenes» entrecomillado es porque ambos personajes son ya treintañeros y las actrices que las encarnan se acercan, si no tienen ya, a los cuarenta. Hoy en día ya no se sabe qué significa eso de «joven». Y a partir de ahí, durante 20 excesivos capítulos, por el número y la duración, tenemos una mezcla de dramedia romántica y familiar y publirreportaje turístico taiwanés. La verdad es que es una producción manifiestamente mejorable. Aunque los personajes generan una razonable empatía, lo cual probablemente sea el motivo por el que he aguantado hasta el final. La visión que ofrecen de Taiwán… no exactamente igual que la que sentimos en nuestro viaje. Pero ya digo que funciona casi como un publirreportaje del país. A pesar del título, nada que ver con la famosa novela de Dickens.

Incalificable me pareció al principio la otra serie, que también aparecía como original de Netflix, pero también se ha emitido a un ritmo de dos episodios semanales durante ocho. En víspera de mi viaje por trabajo a Granada, había aparecido en la plataforma de vídeo bajo demanda una serie con el título Alhambeura Gungjeonui Chueok [알함브라 궁전의 추억], que se traduce como Recuerdos del palacio de la Alhambra. O simplemente, Recuerdos de la Alhambra, título en castellano de la serie, exactamente igual que la obra para guitarra clásica de Tárrega. Que tiene su que ver en la trama de la serie. Al fin y al cabo, la protagonista femenina, Hee-joo (Park Shin-Hye), es una joven coreana, guitarrista clásica y lutier, que aunque ha dejado la música, vive en Granada con su familia regentando un hostal. No entraré mucho en la trama, que es un tanto estrambótica, absurda en ocasiones, en la que se mezcla el drama romántico con los vídeojuegos basados en realidades alternativas, con consecuencias trágicas en ocasiones. El caso es que la serie se convirtió en un guilty pleasure por determinados dislates en la producción. Por ejemplo, que una estación en una población cercana, supuestamente, a Granada tenga un letrero que ponga Rodalies, mientras que las presuntas estaciones de Barcelona y Granada aparezcan con trenes claramente húngaros. Igual que las calles del Albaicín y otros barrios de Granada tengan un sabor ineludiblemente centroeuropeo. Aunque los taxis de Granada sean, en la serie, negros con las puertas amarillas, propiamente como en Barcelona. Esto provoca una situación de comicidad que, unida a la simpatía que transmite algunos de los personajes protagonistas, me haya comido toda la serie a pesar de las tontadas del guion, y de lo mal llevada que está toda la trama relacionada con el videojuego.

En fin, dos series cuya visión fue inducida por dos viajes… pero que por lo demás no merecen mucho la pena.