Instagram, como casi todas redes sociales, está sumida en la esquizofrenia colectiva. Un montón de gente lo odia; los «influencers», las «it girls», la borrachera de selfis, las tontas fotos de comida, la banalidad de la gran mayoría de las fotos que se exhiben, un huevo como foto con más «likes», la censura debida a la mojigatería yanqui o vaya usted a saber qué razones, la publicidad,… y vaya usted a saber cuales otros motivos. Pero por supuesto tiene sopotocientos millones de usuarios…
Es la red social a la que emigraron los adolescentes y jóvenes cuando sus padres invadieron Facebook,… aunque probablemente a estas horas ya se están buscando otros sitio donde los dejen tranquilos. Pero bueno, todo es de la misma empresa. A mí me costó instalarme ahí, pero finalmente encontré una forma y modo.
Empecé subiendo mis fotos instantáneas, las hechas con las Polaroid o similares, en carlos.carreter.instant. Pero entré en crisis con este tipo de fotografías y no publico casi nada desde la primavera pasada. Donde empecé el proyecto que más me apetece, carlos_en_plata, dedicado en exclusiva a la fotografía analógica o fotoquímica, como prefiráis llamarlo. Recientemente, ante la decadencia de la plataforma de microblogging Tumblr, he pasado también a Instagram mi recorrido por mi fotografía de viajes, deviajeconcarlos. Cuyos contenidos también se rebotan al blog de Tumblr. Como también lo hacen las fotografías de las otras cuentas que tengan que ver con viajes. Y estoy cómodo.
Pero también he descubierto que es una buena plataforma para encontrar contenido interesantes en materia de fotografía. Donde se puede aprender de los mejores. Algo que antes lo hacía en Tumblr, pero que por la decadencia de dicha plataforma, cada vez es menos interesante. Voy a mostrar algunas de mis últimas incorporaciones a mi lista de seguido para poner algunos ejemplos. Partimos del hecho de que podemos seguir determinadas etiquetas… y a partir nos van saliendo propuestas de vez en cuando.
Me llamó la atención por ejemplo una fotógrafa de Okayama, Japón, Masako Nakagawa, que expone la vida cotidiana que le rodea de forma poco estridente, y estéticamente agradable. Tanto su familia…
Como su ciudad y su región…
Creo que es un ejemplo para documentar tu entorno, con estilo y elegancia, y sin las estridencias y autobombo habitual. Y luego, tiene su página personal, con su trabajo comercial y artístico/personal.
Nguan es un singapureño que hace fotografía de calle, pero que nada tiene que ver con la agresividad habitual que se ha puesto de moda en los últimos tiempos, y que tampoco necesita tirar de blanco y negro hipercontrastado. Colores suaves, casi pastel, para reflejar las realidades urbanas de las macrourbes asiáticas.
Con la cuenta de Katrin Koenning ya entramos en propuestas menos cotidianas y más artísticas. El lugar para profundizar será su página web, pero su cuenta en Instagram nos va mostrando como es su forma de mirar, como es su proceso de fotografiar, y de concebir las imágenes.
La cuenta de Somewhere Magazine es una de esas cuentas que te permite ir descubriendo nuevos fotógrafos, o recordando otros que ya conocías pero que has dejado de tener presentes. Como por ejemplo, los paisajes nocturnos de Mark Weber, realizados sobre película tradicional,…
O la notable serie de Annie Wang, desde Taipéi, encadenando fotografías que reflejan el crecimiento y el envejecimiento de su hijo y de sí misma, desde la gestación en adelante.
Aunque esta fotógrafa la he descubierto en Instagram, pero no tiene cuenta en esa red social… que yo haya encontrado… Hay un montón de Annie Wang en la red, si te pones a buscar, pero ninguna parece ser ella.
Terminaré con la cuenta de David Campany, que no es fotógrafo, aunque algo debe de hacer porque se define artista, pero sobre todo es escritor y profesor de la Universidad de Westminster en Londres, que se dedica a seleccionar obras de su biblioteca que considera de importancia en el arte contemporáneo.
Y así, una de sus publicaciones nos permite descubrir a un interesante fotógrafo del pasado, WOLS, alemán, también pintor abstracto, un miembro de las vanguardias, del tachismo, cuyas fotografías me parecen claramente influencias por los surrealistas, aunque no se adscribiese a dicho movimiento.
No he pretendido hacer una selección de los mejores. Simplemente de los últimos que he incorporado a mi lista de seguimientos, o que me han llamado la atención. Y para reivindicar un uso sensato e informativo de las redes sociales, lejos del ruido sin interés que las domina.