Parece ser que han decidido que este 2014 sea año de aniversarios. Ya irán llegando. Pero esta semana ha habido diversas noticias anunciando el 100º aniversario de las Leitz Camera (Leica). Sería en 1914 cuando Oskar Barnack creo su primer prototipo de cámara ligera, la Ur-Leica, para obtener negativos sobre película cinematográfica de 35 mm con una superficie aproximadamente el doble que el fotograma usado para las imágenes en movimiento proyectadas. Si queréis que os diga la verdad, creo que va a haber un montón de 100º aniversarios al respecto, puesto que tardaron casi una década más en sacar realmente el producto al mercado, y algunos años más en estandarizar una serie de aspectos, como la montura de los objetivos, que les permitió obtener el prestigios y el éxito comercial que ya conocemos. Pero bueno… hace 100 años alguien decidió, sin saberlo, que hoy muchos fotógrafos digitales suspirarían por las cámaras «full format» de sensor de 24 x 36 mm, el que Barnack estableció en aquel momento por una cuestión de conveniencia, y que entonces era conocido como «little format» si se le comparaba con el resto de material negativo que se usaba en fotografía, o «double format» si se comparaba con el tamaño del fotograma cinematográfico. Todo es relativo… ¿no? Puntos de vista.
Sin embargo, por otro lado nos llega un anuncio más sobre el declive de la película de 35 mm, la que sirvió de base para aquellas legendarias Leicas. Paramount Pictures ha anunciado que va a dejar de distribuir sus largometrajes, según nos informan en Quesabesde, en forma de película de celuloide. A partir de este momento, y para mejorar la versatilidad y disminuir los costes de proyección, la distribución se realizará exclusivamente por medios digitales. Se supone que otras distribuidoras, una vez abierta la caja de los truenos, se sumarán al carro con rapidez. Esto no significa que la película de 35 mm no siga siendo una opción para filmar cine,… pero no son buenos tiempos. Y el desarrollo de las películas para fotografía fija siempre ha estado a remolque de las de cine… No son buenas noticias para los amantes de tecnologías tradicionales, entre los que me incluyo de vez en cuando.
Y si seguimos mezclando fotografía y cinematógrafo, me entero en Petapixel, no lo sabía, que en tres ocasiones, en 1941, 1942, 1947, hubo premios óscar a la foto fija de las películas de cine. En cine se distinguen dos tipos de fotografía. La importante para ellos, el director de fotografía y sus colaboradores del área de luces y eléctricos, que se encargan de la fotografía principal en movimiento de las producciones cinematográficas. Pero también está el «foto fija», el fotógrafo convencional que documenta y realiza las imágenes de promoción de las producciones cinematográficas. En los tiempos del «star system» y el sistema de estudios, las fotografías de promoción, especialmente los retratos de las estrellas, alcanzaron niveles técnicos y artísticos de nivel considerable. ¡Cuantas personas coleccionaban postales con las fotografías de promoción de sus artistas y películas favoritas!
Y mientras la película fotográfica tradicional lucha por sobrevivir, algunos se empeñan en afirmar que «la película no ha muerto» y nos muestran cómo se puede desarrollar la creatividad con este medio. Por ejemplo, con la fotografía titulada 1 kilopixel de Jefferson Chang. Imagen formada por una matriz de negativos de 24 x 36 mm, 29 rollos de 36 exposiciones, lo cual hace 1044 fotogramas, para formar una única imagen. Un trabajo original, que exigen una cuidadosa planificación.
El último número fuera de serie de Réponses Photo está dedicada a las series fotográficas. Además de poder ver espléndidos ejemplos de este concepto, hay una reflexión sobre el significado de lo que es una serie fotográfica. Y hoy traigo algunos ejemplos recientes que han aparecido por la red de redes.
En Lens Culture han estado premiando trabajos que han aparecido entre sus páginas. Y creo que son destacables los tres trabajos que aparecen en la categoría porfolio o serie fotográfica. Que ya han ido apareciendo por aquí, pero que no pasa nada por mencionarlos de nuevo.
Creo que este último es el único que no había sido mencionado, pero dada mi afición a la pintura de Edward Hopper, me ha hecho «perder» un buen rato comparando «original» y «copia».
En Lenscratch nos proponen hacer un recorrido por la obra de Frank Armstrong, un fotógrafo norteamericano que con los años ha sabido adaptarse a los tiempos y modificar el tono y la forma de sus imágenes. Y así, podemos ver cómo comenzó con bellos y técnicamente perfectos paisajes en blanco y negro tomados con una cámara de gran formato, tanto naturales como en medio urbano, allá por los años 70 del siglo XX. Pero dos décadas más tardes lo teníamos fotografiando, con su serie Main Street, las calles principales de diversas localidades norteamericanas, a todo color y en formato panorámico. Y en épocas más recientes, en la primera década de este siglo, lo tenemos haciendo una serie en blanco y negro sobre los visitantes de Liberty Island… aquí ya en modo reportaje con una cámara de formato más modesto.
Conocí a Max Pam cuando compré un libro, catálogo de una exposición, que hizo mano a mano con Bernard Plossu. En L’Oeil de la Photographie nos hablan del último trabajo de este viajero empedernido. Con un título muy sugerente, Supertourist, basado en su visión de la India. No me importaría echarle un vistazo detallado.
En L’Oeil de la Photographie dedicaron su edición de este jueves pasado a las últimas tendencias. Cada cual tendrá sus preferencias al respecto, pero yo me quedo con los trabajos This is not a Map #2 de Ronan Guillou, y Road Movie de Nicolas Dhervillers.
Y ya sólo me quedan un par de recomendaciones relacionadas con el paisaje. Una con el paisaje social, el de Groenlandia tal y como lo ve Ciril Jazbec y nos lo traen desde las páginas de Lens de The New York Times, una tierra bella pero dura, especialmente para sus habitantes, que llevan varias décadas desorientados sobre su razón de ser y su futuro, tanto individual como colectivo. Y finalmente, desde las páginas de Feature Shoot, las técnicas mistas de fotografía y diseño digital de Mark Dorf, que me parece que aportan algo distinto a los espléndidos paisajes que toma para su serie //_PATH.
Creo que hoy ha quedado clara la idea de la importancia de tener, una idea, un proyecto y reflejarlo en un serie fotográfica.