[Fotocomentario] ¿Comprar barato es comprar dos veces?

Fotografía

De vez en cuando me gusta trastear con cámaras para película instantánea. Por las limitaciones de este medio fotográfico, estás obligado a ser más creativo y más imaginativo para obtener resultados interesantes. A veces me salen, otras no. Pero sin duda es estimulante. Pero como este tipo de película es cara, la compro entre los productos reacondicionados de un conocido vendedor en internet. Y una de mis últimas experiencias… no fue nada bien. Las fotos las podéis ver en Desastre y alivio “intantáneos” – Polaroid Supercolor 635 con Polaroid 600 B&W y Color Round Frame.

Como las cosas no fueron bien, son las fotos en blanco y negro las incorrectas, me quedó la duda sobre porqué las fotos habían quedado «quemadas» como dice popularmente la gente. Sobreexpuestas. ¿O quizá incorrectamente reveladas? Empecé a pensar que la película no estaba en buenas condiciones. Tal vez por haber comprado barato, la cosa había ido mal. Y ahora, estaba en la necesidad de gastar otro cartucho de película para verificar donde podía estar el problema. «Comprar barato es comprar dos veces», dice el dicho popular.

Al final… no sé muy bien que pasó. La cámara funciona bien. El segundo cartucho de fotos, en color pero de la misma marca, también estaba comprado en los reacondicionados del comercio en línea, y quedó bien. Y ahora, después de haber investigado un poco, creo que puede deberse a las bajas temperaturas en las que se realizó el revelado instantáneo de las fotografías. Pero no estoy seguro. De momento, como ha sido un caso aislado, seguiré arriesgándome a «comprar barato», porque en el conjunto, aunque haya gastado un cartucho de más, me sigue saliendo a cuenta. Pero todos tenemos que saber qué arriesgamos cuando practicamos este tipo de compra. Por eso se dice que, cuando el trabajo fotográfico va en serio… usa los mejor que puedas y con productos frescos.