Sentencia que se dictará el próximo domingo a las 10 de la mañana hora española. En Nueva Zelanda será ya de noche. Las nueve. Previamente, el día anterior, sabremos quienes ocupan la tercera y la cuarta posición. Lo curioso del asunto es que los protagonistas de ambos partidos serán los mismos que los que en 1987 disputaron las finales de la primera copa del mundo. La única que hasta el momento se había disputado en el país de los maoríes. La única que hasta el momento han ganado los eternos favoritos, los All Blacks. Quizá sea premonitorio. Probablemente lo sea. Pero veamos primero, qué ha pasado en las semifinales.

Dedicaremos las fotos de hoy a Gales por haber sido los animadores europeos del torneo. En la imagen los páramos en la península de Lleyn, al norte de Gales (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

En la semifinal europea, jugada ayer sábado, lo que pasó fue que una decisión arbitral, que no me atrevo a calificar de injusta, pero tal vez sí de rigurosa, dejó al equipo de Gales con sólo 14 jugadores durante tres cuartas partes del partido. Y eso lo condicionó todo. El equipo europeo que más ganas y salero le había puesto durante todo el campeonato quedó roto sin su capitán y director de juego. Lo que pasó a continuación tiene dos explicaciones. Una, que decidieran reservarse con la esperanza de que los franceses no se escaparan en el marcador, y echar el resto en los últimos minutos. Otra, que se vinieran abajo, perdieran el norte, y sólo en los últimos minutos sacaran arrestos para dar la vuelta a un marcador que se les había puesto sólo muy ligeramente en contra. Yo más bien pienso que sucedió esto último. Si a eso añadimos que fallaron muchos de sus tiros a palos, incluida la conversión del ensayo que les acercó a sólo un punto de los galos, la cosa fue como fue. Y Francia, el equipo europeo que en esta competición me ha resultado más antipático, con un juego muy conservador, rácano, basado en una buena defensa y en su mejor acierto en los tiros a palos, se llevó el partido por un mísero 9 – 8. Después de haber jugado con uno más durante 60 minutos. Un poco triste, ¿no? Pero así fueron las cosas. Siempre nos quedará la duda de qué hubiese pasado sin esa expulsión.

Seguiremos hasta el final por el norte de Gales, por ejemplo, visitando el castillo normando de Caernarfon (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

En la semifinal que se ha jugado hoy domingo, lo que ha pasado es que los wallabies han pagado caro su derrota contra Irlanda en la fase de grupos. Porque de posibles subcampeones, ahora tendrán que luchar por el bronce. Porque en ningún momento han podido con los all blacks, que desde el primer momento han salido a ganar el partido, sin dar la más mínima opción a Australia, que se ha estrellado contra el negro muro defensivo que ha montado Nueva Zelanda una vez que tenía el marcador francamente a su favor.

Al otro lado del estrecho de Menai, vistas desde Beaumaris, las estribaciones de los montes de Snowdonia (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Creo que sin lugar a dudas el favorito para el próximo domingo son los anfitriones neozelandeses. Francia no ha dado muestra de gran equipo salvo en los cuartos contra Inglaterra y ya cayeron claramente derrotados en la fase de grupos contra sus rivales del próximo domingo. No creo que vayan a dar la sorpresa y dar una alegría al rugby europeo. Por lo visto, durante el campeonato… lo dudo mucho.

En la final de consolación, lo único que espero es que el quince del dragón se recupere de la decepción de ayer y dé la sorpresa contra los wallabies que también han funcionado todo el campeonato a menor nivel del esperado tras su victoria en el Tres naciones.

Y a lo alto del monte Snowdon se puede subir con el ferrocarril de cremallera, que utiliza tanto locomotoras de vapor como la de la foto como otras diesel más modernas (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Este fin de semana se han jugado los cuartos de final de la Copa del Mundo de Rugby 2011. Lo primero, decir que seguir una retransmisión deportiva cuando el comentarista es extremadamente parcial es un verdadero rollo. Miren, señores de Canal + Deportes. Entiendo que les caigan simpáticos los chicos de la selección argentina, y que hubiera sido divertido que hubiesen derrotado a Nueva Zelanda. Pero no ha sucedido. Decir cuando en el minuto 60 de la segunda parte, cuando los old blacks van ganando 23 a 10, que al entrenador neozelandés las cosas no le están saliendo bien, es una soberana gilipollez. Quizá los old blacks no hayan jugado su mejor partido, ni hayan practicado su juego más brillante. Pero han tenido controlado el partido, no han pasado reales apuros en ningún momento, ni cuando momentáneamente Argentina se ha puesto por delante en el primer tiempo, y han ganado porque son muy superiores. No se puede decir que las han pasado canutas hasta que en los últimos minutos se han impuesto. No es eso lo que ha pasado. Y lo repito, los albicelestes también me caen más simpáticos que los chicos de nuestras antípodas. Pero si no puede ser no puede ser.

En la otra semifinal del hemisferio sur, sí que ha habido mucho más que rascar. Sudáfrica ha hecho todo lo posible por ganar. Menos una cosa. Conseguir ensayos. Y si los contrarios no te conceden las faltas que compensen tu falta de capacidad atacante, de nada te sirve el dominio. Y así, Australia en un partido poco vistoso, pero en el que sí que han sido capaces de atravesar con la mano en una ocasión la línea de ensayo springbok, han ganado por la mínima. Y así, en semifinales se verá el partido entre eternos rivales del hemisferio sur que todo el mundo esperaba ver en la final. Pero los wallabies sí que fallaron contra Irlanda en la fase de grupos y ahora se la tendrán que ver con los anfitriones una semana antes de lo previsto. Por ellos, por la organización, por las televisiones,… por todo dios.

Pero hablemos de los chicos europeos. Empecemos por Gales. Después de las fotos.

En la estación de Caernarfon, norte de Gales, se ve que para mover las duras agujas de la vieja línea de vía estrecha no hace falta llamar a la primera línea del quince del dragón (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Mientras viajamos por el norte de Gales, nos dirigimos a Beaumaris, y vemos anunciado el desvío a la población con el topónimo más largo del Reino Unido; y eso que en el carte están notablemente abreviado (Fujifilm Finepix F10).

Puesto que la melé de un equipo de rugby son ocho, y son unos morlacos de mucho cuidado, los siete que están enterrados y caben en esta pequeña tumba de la ciudad galesa de Bangor,... ¿tendrán que ver con una tal Blancanieves? (Fujifilm Finepix F10).

Y es que el quince del dragón dio ayer la primera sorpresa al derrotar en un partido que se tomaron muy en serio defensivamente desde el primer momento a la favorita Irlanda. Por la trayectoria de los últimos años, por lo visto en la fase de grupos, los del trébol eran favoritos para pasar a semifinales. Pero no. Y aquí no hay casualidades. Los galeses han merecido la victoria, por estar más centrados y por creérselo. Y está bien por ellos. Porque son los más jóvenes y los más ilusionados. Y un 10 – 22 creo que es lo suficientemente expresivo.

Y la segunda sorpresa la protagonizó la siempre irregular Francia al imponerse a su eterna enemiga Inglaterra con mucha mayor claridad de la esperada también a la vista de sus mutuas trayectorias en los últimos tiempos, y no me refiero sólo a los partidos del mundial, aunque también. El caso es que el quince del gallo ha dado lo mejor de sí mismos, al mismo tiempo que al negar por completo el uso del oval a los de la rosa han impedido cualquier recurso para igualar el encuentro. Ni siquiera han podido acudir a las patadas de Wilkinson para ser salvados una vez más. Así que la semifinal europea está servida. Galeses contra galos. No merece la pena especular un posible favorito, visto lo visto.

Por cierto, ya hay un motivo más para haber llamado al grupo B el grupo de la muerte. Ya no queda ningún equipo en competición. La semana que viene, más.

Para homenajear a los del quince que tendrán que enfrentarse el próximo fin de semana a una selección celta, nos iremos a la región más céltica de la Galia; Bretaña. Por ejemplo, a Cap Fréhel (Canon EOS 100, EF 28-80/3,5-5,6 USM).

¿Podéis pensar en algo más francés que este bello citroën con su "roulotte" en la población bretona de Guimiliau? (Canon EOS 100, EF 28-80/3,5-5,6 USM).

Un frío y un viento de mil demonios hacía en la cumbre de Ménez-Hom, a la vertiginosa altitud de 330 metros sobre el nivel del mar, en el Finisterre francés, mientras se disponían a volar los planeadores a escala (Canon EOS 100, EF 28-80/3,5-5,6 USM).

Seguro que ayer se pusieron muy contentas estas bellas jóvenes que paseaban con sus trajes típicos por Locronan. Bueno, teniendo en cuante que la foto es de 1994, igual ya no son tan jóvenes (Canon EOS 100, EF 28-80/3,5-5,6).

Pues sí. Los dados están echados. El camino hasta la final está marcado. Más difícil para algunos, menos para otros, fácil para nadie. Llegados a cierto punto, nadie se puede fiar.

No hay más quer fijarse en el grupo A, donde Japón ha conseguido un empate contra Canadá que aspiraba a tercera de grupo, puesto que ha conseguido Tonga sin embargo, que pese a perder con Canadá ha dado la sorpresa al vencer a Francia. Preocupados tienen que estar los del gallo. No han echo precisamente lo que se llama una primera fase muy prometedora. Vencedor sin paliativos del grupo, el equipo anfitrión Nueva Zelanda, que se ha llevado los cuatro partidos y los cuatro puntos bonus atacantes.

Si lucen las banderas y escarapelas en los ayuntamientos franceses, como este de Mirepoix, en estos días, no creo que sea para celebrar los éxitos del quince del gallo (Canon Digital Ixus 400).

Inglaterra ha dominado sin muchos problemas pero sin brillantez en su grupo B. El gran derrotado en el grupo ha sido Escocia, que le ha puesto ganas, pero no ha sido capaz de resolver esos partidos importantes que ha perdido. Mucho entusiasmo y control del partido, pero le falta pegada. El gran beneficiado, Argentina, que se lleva el segundo premio, brillando menos que hace cuatro años.

Inglaterra deberá acelerar para asegurarse sus próximos partidos; como este Circle Line en la estación de High Street Kensington (Canon Digital Ixus 400).

En el grupo C, se han saltado el guion previsto por la victoria de Irlanda contra Australia. Los irlandeses han jugado con mucha seriedad, y si son el mismo equipo que hace dos años arrasó en el Seis Naciones pueden llegar lejos. Con el cuadro que les queda, con cruces contra equipos europeos, deberían ser considerados como una opción para la final. Los australianos son capaces de dar mucho o de ser muy rácanos. Su primera final, la semana que viene. Su fallo contra los del trébol lo purgarán en cuatros contra Sudáfrica a quienes dominaron en el Tres Naciones. Pero esto es otra historia y habrá que ver como se cuenta. Italia ha puesto voluntad pero todavía no tiene un equipo lo suficiente completo como para hacer frente a selecciones más potentes cuando juegan en serio.

Además del arrojo y la organización de las legiones romanas,... Italia necesita jugar mejor al rugby si quiere pasear trofeos por el antiguo foro romano (Canon Powershot G6).

En el grupo D, la sorpresa estuvo a punto de saltar en la primera jornada, cuando Gales le dido un soberbio susto a Sudáfrica. Yo creo que los del dragón merecieron algo mejor. En cualquier caso, dicen que los sudrafricanos irán a más. Su tanteo contra Samoa fue escaso. Lo cierto es que Samoa, condenado a la tercera plaza, ha hecho un papel muy digno contra los dos grandes de grupo.

Si no mejoran los galeses, corren el reisgo de quedarse varados a punto de lanzarse a alta mar, como estos barcos en el galés estrecho de Menai, en Beaumaris (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Así que como se preveía, una parte del cuadro de cuartos y semifinales medirá a los equipos del norte, y la otra a los del sur. Necesariamente habrá una final norte-sur. Algunos por el sur lo lamentan. Quizás aspiraban a una final entre las dos potencias oceánicas. Pero eso no podrá ser. El cuadro de los del hemisferio sur nos deparará una final tras otra, mientras que el del hemisferio norte definirá la posibilidad de un equipo sorpresa. Salvo que gane Inglaterra, que son los que siempre llegan flojos, regular, y al final amargan la fiesta del resto. Cosas del rugby. Dicen que los franceses también tienen capacidad para dar sorpresas, pero en estos momentos no apostaría.

Nutridos grupos de visitantes en una de las más espectaculares irlandesas, junto con su equipo de rugby, los Cliffs de Moher (Canon Powershot G6).

En el tercer fin de semana de la Copa del Mundo de Rugby 2011, dos partidos han concentrado la atención por su significación. El sábado, la anfitriona Nueva Zelanda se jugaba el primer puesto de su grupo contra Francia, uno de los principales gallitos del hemisferio norte. Además, se vislumbraba un partido con sabor a revencha, ya que Francia apartó a los all blacks en los cuartos de final de los campeonatos de hace cuatro años. Sin embargo, los del gallo sólo ofrecieron sensación de peligro durante los cinco primeros minutos del partido. Después de esto, los neozelandeses empezaron con su juego dinámico y poderoso, y dieron un recital de ensayos que los galos sólo pudieron maquillar con algunos ensayos en la segunda parte. Difícil de ver a los franceses como uno de los candidatos al título después de los visto hasta el momento.

Volvemos a dedicar las fotos a Francia, porque desgraciadamente no he visitado Nueva Zelanda; por ejemplo, las tranquilas calles de Foix en el Midi (Canon Digital Ixus 400).

El domingo, un duelo importante el que ha enfrentado a Escocia y Argentina. Con Inglaterra ya clasificada, el que perdiese este partido virtualmente quedaba fuera del campeonato. Los escoceses han dominado la mayor parte del encuentro, con gran orden en las líneas, y con puntos a base de golpes de castigo y drops. Pero se han visto incapaces de llegar hasta la línea de ensayo con el balón en las manos. Cosa que sí que han hecho los argentinos en un momento clave en el segundo tiempo, lo que les ha dado una ventaja de un punto. Y aquí, los del cardo han repetido una vez más lo que se les ha visto en estos últimos años en el Seis Naciones. Con buenos partidos, su falta de resolutividad les condena a perder partidos que parecían tener controlados. En los últimos minutos, han sido incapaces de mantener la cabeza fría, aclarar sus ideas y salvar ese único punto que les separaba de la victoria y de la clasificación para cuartos. No están perdidos, pero casi. Tienen que ganar a Inglaterra y esperar a ver lo que hace Argentina contra Georgia. Chungo.

Aquí vi el tran amarillo de la Cerdaña de pasada y parado; en un viaje anterior pude montar y disfrutarlo (Canon Digital Ixus 400).

Visto lo cual, salvo sorpresas de última hora poco previsibles (¿Italia podría inquietar a Irlanda? ¿Gales puede tener problemas en sus dos enfrentamientos polinesios? ¿Samoa podría dar una enorme sorpresa a Sudáfrica? ¿Lo comentado de Escocia e Inglaterra?), parece que los siguientes cruces van a tener un marcado caracter hemisférico. Los cuatro supervivientes europeos se enfrentarán entre sí en cuartos y semifinales, y los del hemisferio sur tres cuartos de lo mismo. Con lo que la final será un norte contra sur. ¿Nueva Zelanda contra Inglaterra? ¿Volverán a ser capaces los ingleses de dar una sorpresa como en el 2003 cuando se impusieron contra pronóstico en Australia?

Reflejos de las cristaleras de la catedral de Saint-Étienne de Toulouse (Canon Digital Ixus 400).

En un día nublado y lluvioso, aparece sombrío el claustro de San Bertrand de Cominges (Canon Digital Ixus 400).

Con la jornada del domingo llega al final el segundo fin de semana de la Copa del Mundo de Rugby 2011. Salvo Italia y Rusia, todos los equipos han jugado ya dos partidos, la mitad de su contribución a la fase de grupos. Hoy he visto en directo buena parte del Inglaterra – Georgia, que han ganado los británicos con suficiencia pero con un juego poco vistoso, y todo el partido del Francia – Canadá. Una repetición del partido de los galos contra Japón. Desgana e irregularidad hasta la mitad de la segunda parte, en la que los cambios hacen que cojan carrerilla, y de ir con un resultado ajustado, acaban por arrollar en los últimos minutos a su débil contrario, dejando un resultado mucho más abultado de lo que parecieran merecer. No sé. Me dejan cariacontecido.

Hoy nos daremos un paseo por Francia, por lo tanto; por ejemplo por el valle del Dordoña, por Le Bugue a orillas del Vézère (Canon Ixus 400).

Pero las cosas importantes por dilucidar se verán el fin de semana que viene, para el cual, casi todo el pescado estará cortado salvo sorpresas de última hora. Ayer ya hacía un comentario sobre los partidos más importantes de los enfrentamientos norte-sur. Pero queda por ahí alguna cosa que hay que mencionar. Por supuesto, veremos el Nueva Zelanda – Francia, en el que ambos equipos estarán obligados a demostrar que sus carencias no son tales, sino que hasta ahora han ido al ralentí. Los favoritos los del sur; pero los del otro lado de los Pirineos están obligados a presentar batalla. Y luego, un enfrentamiento norte – sur que hace unos años habríamos considerado que se tenía que llevar Argentina con seguridad. Pero las lesiones de los albicelestes, sumado a la voluntariosidad que puede mostrar Escocia hace que el encuentro entre los dos tenga más transcendencia de lo que pensábamos. Sin contar que quedará un Inglaterra – Escocia para más adelante en el que por favoritos que sean los de ingleses, nada hay que dar por supuesto. Indudablemente, el grupo más emocionante. En el resto de grupos, no deberían darse sorpresas para los equipos favoritos de aquí al primer fin de semana de octubre.

También podemos visitar Souillac al atardecer, en el límite entre las regiones históricas del Perigord y el Quercy (Canon Ixus 400).

O bien visitar los yacimientos arqueológicos de La Madeleine, que han dado nombre a la cultura paleolítica del magdaleniense (Leica CL, Summicron-C 40/2)

Llega el segundo fin de semana de la Copa del Mundo de Rugby 2011. Se jugaron algunos partidos a mitad de semana, pero sin gran trascendencia. Ayer por la tarde, en la que cierta cefalea me estuvo dando la lata, vi en diferido el marcador más escandaloso hasta el momento del torneo, en el que una lluvia de ensayos cayeron sobre el equipo nacional de Japón de manos de los muy superiores neozelandeses. También vi buena parte de la segunda parte del Escocia – Georgia, partido que solventaron los del cardo con menos contundencia de las que se esperaba de ellos.

La verde Irlanda, en la imagen en la región de Connemara en el Condado de Galway, ha sido la protagonista de hoy (Canon Powershot G6).

La verdad es que hasta ese momento, pocas sorpresas se habían dado. Pero llegando el fin de semana, las cosas se animan. Y esta mañana he visto la segunda parte del Sudáfrica – Fiji, en la que esperábamos mayor resistencia de los habitualmente voluntariosos y correosos polinesios, pero no ha sido así. Y el plato fuerte del día, y probablemente del fin de semana, que ha sido el partido entre Irlanda y Australia, estos últimos uno de los equipos favoritos, con permiso de los anfitriones neozelandeses. Y aquí, sí que ha habido sorpresa. Habrá que decir que relativa. En los últimos años, los irlandeses han demostrado que, aunque irregulares, tienen oficio y habilidad para el rugby. Y con un juego serio, pensando en el largo plazo del partido, con una delantera muy sólida, que les ha permitido recuperar muchos balones, han ido controlando el partido, y abriéndose paso en el marcador aprovechando los golpes de castigo y algún drop. Los wallabies, sin embargo, se han estancado pronto en los seis puntos que les han otorgado un par de golpes de castigo, y al final, aun echándole ganas no han conseguido acortar distancias con algún ensayo, por culpa de la buena defensa irlandesa, incluso sobre la misma línea de la zona de ensayo. Incluso en los últimos minutos, algún contraataque de los del trébol pudo haberles dado algún ensayo. Ni el bonus defensivo han conseguido los australianos. Yo me alegro.

Una fortaleza defensiva ha resultado ser la selección del trébol; antigua fortaleza en el condado de Galway (Canon Powershot G6).

Casi lo consiguió Gales contra Sudáfrica, y lo ha conseguido Irlanda contra Australia. En el grupo donde coinciden Inglaterra y Argentina, es el único en el que el poderoso es el equipo europeo, y ya dio cuenta de la albiceleste. Sólo queda un choque de nivel en la rivalidad norte-sur. El Nueva Zelanda – Francia y poco más. Lo importante vendrá a partir de la siguiente ronda. Un poco de humildad a las potencias del hemisferio sur no les vendrá mal, y se pondrán las pilas en próximos partidos. Por otra parte, también es un destello de esperanza para la vieja Europa, ¿no?

Esta mañana habrá habido alegría en los pubs irlandeses, como los de la ciudad de Galway en la foto, en los que habrá corrido la Guiness y otras delicias cerveceras (Canon Powershot G6).

Sigue la Copa del Mundo de Rugby 2011. Dos partidos he visto este domingo por la mañana. Os cuento.

El primero,… bueno, estaba incluido en la selección de partidos que incluyen a los equipos del tres y seis naciones y Argentina. Pero no tenía mucha confianza sobre las posibilidades de que fuera emocionante. Se trataba del Australia – Italia. La selección de los wallabies me parecían a priori mucho más potentes que los azzurri. Y así ha sido. Los italianos han puesto ilusión y a base de esfuerzo, han mantenido el partido igualado hasta entrado el segundo tiempo. Pero cuando han empezado a flojear, han ido cayendo los ensayos australianos sin piedad. Es una dinámica muy propia de este tipo de encuentros en este tipo de competiciones. Pues nada. Lo previsto.

El segundo, sin embargo, despertaba mi interés. Aunque la selección de Sudáfrica aparecía a priori como favorita frente a Gales, este último es un equipo al que no le falta calidad, y los primeros no parecen haber llegado en su mejor momento. Y ciertamente el choque ha estado emocionante, con un resultado final ajustadísimo de 17-16 a favor de los africanos. Los galeses han tenido que remontar un ensayo en contra desde las fases iniciales del encuentro. Globalmente han jugado mejor que los springboks. Pero estos últimos tienen calidad potencial, y en un momento de necesidad han conseguido el ensayo que les ha dado la victoria. Los dragones rojos aún podrían haber ganado, pero han desperdiciado un drop relativamente fácil y un golpe de castigo a palos en los últimos minutos del partido. Y eso es algo que no se puede hacer en esta tipo de competiciones. Un pena. Merecían algo mejor.

Os dejo con una par de instantáneas galesas.

Embalse en Elan Valley, País de Gales (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

El puerto de Tenby con la marea baja (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Hoy ha sido la primera jornada de la Copa del Mundo de Rugby 2011. Ya he repasado el calendario de la fase de grupos que dura hasta el primer fin de semana de octubre. Ya he añadido a mi agenda los partidos que voy a ver si es posible. Son aquellos que involucran los enfrentamientos entre sí de las selecciones del Seis y del Tres naciones más Argentina. Todos se jugarán en fin de semana, y la mayor parte de ellos en torno a las 9 – 10:30 de la mañana hora española. Está bien.

Hoy cuando me he levantado estaba jugando Francia contra Japón, y aunque no he prestado mucha atención, me ha sorprendido ver cómo Japón se ha acercado mucho al quince del gallo en la mitad de la segunda parte. Luego, los galos se han puesto las pilas y han abierto distancias. Pero me ha quedado la sensación de que los franceses no llegan muy allá. Luego ya, una vez terminadas las tareas domésticas del sábado por la mañana, he visto un emocionante Inglaterra – Argentina, en los que los del cono sur han dominado el marcador hasta mediada la segunda parte cuando un ensayo de los de la rosa ha roto la dinámica del partido y se han adelantado y llevado los cuatro puntos. Los argentinos han sido un poco ingenuos frente a los resabiados ingleses, que se han mostrado duros y contundentes en defensa. Sin la eventual aportación de los tres cuartos, sólo con la delantera y golpes de castigo, no es suficiente para ganar a los grandes. Y encima, han fallado muchos tiros a palos. Pero también ha fallado mucho sir Jonny Wilkinson en el peor partido que le he visto en aspecto del juego.

Mañana más.

Megalitos en Stonehenge, Inglaterra. ¿Jugarían a algo parecido al rugby aquellos británicos de hace más de 4000 años? (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Pues eso. Que de vez en cuando aparecerá algún comentario relacionado con la Copa del Mundo de Rugby. Hoy, ceremonia inaugural y primer partido. Los anfitriones, Nueva Zelanda, con la modesta selección de Tonga. Lo mejor, las hakas guerreras iniciales, las dos selecciones las bailan, y la larga y voluntariosa jugada de los tonganos hasta conseguir su ensayo. Por lo demás, victoria de trámite para los All Blacks, que no han estado muy finos.