[Fotocomentario] Mi «alergia» a las fiestas populares,…

Cultura, Fotografía

… al menos las de Zaragoza, es bien conocida entre mis amistades. Cuando tenía 26 años, y ya ha pasado tiempo de eso, tuve la oportunidad de irme a Lisboa durante el «puente del Pilar», en aquellos momentos estudiaba en la Escuela Nacional de Sanidad en Madrid, y me lo pasé estupendamente. Y descubrí que no había echado de menos en absoluto las fiestas del Pilar. Pero nada. Desde entonces, sinceramente, siempre que puedo, intento estar fuera de la ciudad el mayor número posible de días durante las fiestas. Como suelo cogerme mi segunda parte de vacaciones desde finales de septiembre, no suelo tener mucho problema para ello. Este año, en San Sebastián.

Pero como los recursos no son infinitos, y hay que acomodar fechas y disponibilidades de las personas, es inevitable que algunos días de las fiestas los pase en Zaragoza. Entonces me hago el propósito de no pasar al norte de la plaza de Paraíso y voy sobreviviendo. ¿Por qué esta «alergia» a las fiestas? Os aseguro que no estoy en contra, en absoluto, de que la gente disfrute de unos días de celebración. Creo que es algo, que bien orientado, es positivo. Pero desde hace ya mucho tiempo, las fiestas en Zaragoza, y en muchos otros sitios por lo que he podido ir entendiendo, se basan en que haya mucha mucha mucha gente y mucho mucho mucho ruido en determinados lugares. En el barullo, en el bullicio. Sin muchas sutilezas. En lugar de atomizar y distribuir a la gente en actividades diversas, por toda la ciduad, para grupos interés distintos y diversificados,… ale… todos al mogollón, a lo mismo. Y soy incapaz de disfrutar de ese concepto de fiestas.

No obstante, el domingo último de las fiestas, salí a pasear con unos amigos que viven «en el exilio» desde hace 30 años. Antes venían casi siempre para estas fechas. Ahora no tanto… los padres se hacen mayores, fallecen, y cada vez quedan menos lazos con la ciudad de origen. Ley de vida, como muchos sentencian. Nos dimos una vuelta, pero a una hora temprana, y nos retiramos a tomar un aperitivo antes de que hubiese mucho follón de gente. Esas fueron todas «mis fiestas populares». Me llevé la Polaroid conmigo, como cuento en Comprender el fotómetro de la Now+ – Polaroid Now+ con Polaroid Color i-Type. Llamó la atención la «torii» en Torrero, cerca del puente de América. Yo lo conozco de toda la vida. Había, o hay, no lo sé, un gimnasio de artes marciales japonesas; judo, karate y esas cosas. Y también percibimos el anticipo del otoño, a pesar de las temperaturas, altas para la época del año.

[Fotocomentario] (Resultados / Expectativas) = Satisfacción

Fotografía

Para quienes hemos trabajado en alguna ocasión en el ámbito de la calidad de los servicios prestados por una organización, esta es una fórmula clásica para analizar la satisfacción percibida por un cliente o usuario de un producto o un servicio.

Por lo tanto, entran en juego muchas subjetividades. Primero, las expectativas que depositan las personas en una compra o en un servicio son distintas. Unos esperan más, otros se conforman con menos. Los resultados derivados del objeto o del servicio también son valorados de forma distinta. Con un mismo nivel de servicio, de prestaciones o de calidad, es decir de resultados «objetivos» los «resultados percibidos» pueden ser distintos. Pero todo esto también tiene que ver mucho con las expectativas, así que no siempre es fácil separar las dimensiones. En cualquier caso, yo creo que pilláis por donde va el tema. Otros relaciona estos parámetros de otras formas, pero esta es la que prefiero. Si los resultados están al mismo nivel de las expectativas, 100 % de satisfacción. Y a partir de ahí hacia abajo, pero sin tomarnos la relación matemática como algo preciso, ya que la subjetividad condiciona mucho la interpretación.

Este final de semana pasado, entre el jueves por la tarde y el domingo por la mañana, estuve haciendo algunos retratos con un cámara Polaroid. Las fotos que veis aquí y que comento en Tomarse con tranquilidad las fotos instantáneas mejora los resultados – Polaroid Now+ con Polaroid 600 Round Frame, son algunas que hice al margen de los retratos. Estos no los muestro porque pertenecen a la esfera de lo privado; de mi esfera de lo privado, y de la esfera de lo privado de las personas retratadas. Bueno. El caso es que estas fotos, para las personas que han participado en la actividad, con un tono relativamente lúdico, les han parecido estupendas. Un alto nivel de satisfacción. Muchos han considerado que los resultados estaban muy por encima de sus expectativas. Una satisfacción del 150 %, por poner un ejemplo numérico.

Sin embargo, mostradas en un foro de fotografía analógica, el tono general, los comentarios, han sido de mostrar el disgusto hacia el material Polaroid actual, en comparación con el antiguo. Recordemos que la empresa que fabrica el material sensible Polaroid, de fotografía instantánea, es distinta de la tradicional de hace unas décadas, aunque tenga adquiridos en propiedad los derechos del uso de la marca. Pero por diversos motivos tuvo que desarrollar desde cero un nuevo material sensible, porque las regulaciones medioambientales y la disponibilidad de materias primas, impedían replicar el método de fabricación tradicional. Ahora, los aficionados exigentes consideran este material sensible como impredecible, poco estable en el tiempo de cara a su conservación, y caro. De mala calidad, en general.

¿Cuál de los dos grupos que opinan sobre el caso tiene la razón? Eso os lo dejo a vosotros, que leéis estas líneas.

[Fotocomentario] El precio justo… o el justo precio…

Fotografía

Hacía tiempo que me rondaba el runrún de una cámara Polaroid con más prestaciones que la que tengo ahora. Las que realmente me gustaban, que son modelos antiguos reacondicionados, se iban mucho de precio para la calidad real que da hoy en día la nueva película Polaroid, muy discutible. En fin… al final he conseguido una, modestita, que supone alguna mejora sobre lo que tenía hasta ahora. Lo explico en Nueva cámara para fotografía instantánea – Polaroid Now+.

Pero he de dejar una cosa muy clara. Aunque no son cámaras muy caras, al fin y al cabo el fabricante cuenta con ganar dinero con la venta del consumible, la película, más que con la del aparato, el tema de la calidad que ofrecen está tan en el límite, que es un precio que me cuesta pagar. Por ello sólo me he decidido cuando he tenido la oportunidad de acceder a un aparato de outlet, o de los usados para exposición, que están como nuevos, pero no se pueden vender como nuevos. Y con un descuento muy muy sustancial sobre el precio original.

Y es que en muchas ocasiones pagas la marca, o que algo está de moda, la subida de precios por el exceso de demanda, o cuestiones similares. Y el precio del objeto que quieres no es el adecuado. Estas cámaras son plásticos más o menos bien presentados, con unos circuitos electrónicos que, a estas alturas de la función, son elementales y cuestan muy poco de desarrollar y fabricar. Por ello cuesta decidirse a comprar algo que, objetivamente, no vale lo que cuesta. Los partidarios del capitalismo hablan de que el mercado ajusta los precios para beneficio del consumidor y bla bla bla bla… Lo cierto es que cada vez hay más tendencia a la concentración de la fabricación de bienes o prestación de servicios en monopolios u oligopolios, dando lugar a abusos en los precios que no tienen sentido. No se trata del «precio justo» que proclamaba aquel concurso de la televisión, sino del justo precio que debe tener un artículo. Pero es frecuente que mis amistades me tachen alguna vez de ingenuo…

[Fotocomentario] ¿Comprar barato es comprar dos veces?

Fotografía

De vez en cuando me gusta trastear con cámaras para película instantánea. Por las limitaciones de este medio fotográfico, estás obligado a ser más creativo y más imaginativo para obtener resultados interesantes. A veces me salen, otras no. Pero sin duda es estimulante. Pero como este tipo de película es cara, la compro entre los productos reacondicionados de un conocido vendedor en internet. Y una de mis últimas experiencias… no fue nada bien. Las fotos las podéis ver en Desastre y alivio “intantáneos” – Polaroid Supercolor 635 con Polaroid 600 B&W y Color Round Frame.

Como las cosas no fueron bien, son las fotos en blanco y negro las incorrectas, me quedó la duda sobre porqué las fotos habían quedado «quemadas» como dice popularmente la gente. Sobreexpuestas. ¿O quizá incorrectamente reveladas? Empecé a pensar que la película no estaba en buenas condiciones. Tal vez por haber comprado barato, la cosa había ido mal. Y ahora, estaba en la necesidad de gastar otro cartucho de película para verificar donde podía estar el problema. «Comprar barato es comprar dos veces», dice el dicho popular.

Al final… no sé muy bien que pasó. La cámara funciona bien. El segundo cartucho de fotos, en color pero de la misma marca, también estaba comprado en los reacondicionados del comercio en línea, y quedó bien. Y ahora, después de haber investigado un poco, creo que puede deberse a las bajas temperaturas en las que se realizó el revelado instantáneo de las fotografías. Pero no estoy seguro. De momento, como ha sido un caso aislado, seguiré arriesgándome a «comprar barato», porque en el conjunto, aunque haya gastado un cartucho de más, me sigue saliendo a cuenta. Pero todos tenemos que saber qué arriesgamos cuando practicamos este tipo de compra. Por eso se dice que, cuando el trabajo fotográfico va en serio… usa los mejor que puedas y con productos frescos.

[Recomendaciones fotográficas] Polaroids y Corea del Norte

Fotografía

No he recopilado muchas cosas esta semana. Fundamentalmente por falta de tiempo. O porque he dedicado mucho de mi tiempo a otras cosas. Buena parte de las tardes se me han quedado reducidas a la nada en lo que se refiere a sentarme un poquito, aunque solo fueran 20 minutos, delante de la pantalla del ordenador a navegar por internet. Ni siquiera he podido avanzar mucho con mis fotos del libro de fotos del sur de Francia, ahora que ya me ha llegado impreso el de Múnich y otras ciudades bávaras. Así que, más por necesidad que por virtud, seré breve.

Las hojas de los ginkgos en Zaragoza se están poniendo feas directamente desde el color verde, sin transición por el bonito e intenso color amarillo que adquieren en otoño. Será porque con las temperaturas que tenemos, no se puede llamar otoño a lo que tenemos encima. No sé. Ayer estuve caminando un rato por la luz del atardecer.

En Lenscratch han estado de Polaroid Week. Semana dedicada a la fotografía sobre polaroids. Es curioso. Aunque el sistema que ha dado continuidad a la fotografía instantánea, el que no dejó de fabricarse en los últimos 20 años, es el Instax de Fujifilm, nunca me he encontrado con artistas que lo usen. Los habrá, sin duda. Pero no me constan. Algunos podrán decir que es por el tamaño. Pero… la Instax Wide tiene la misma superficie útil que una polaroid tradicional. Pero no es cuadrada… claro. O quizá sea las diferencias del soporte. O tal vez porque no está insertada en la cultura popular de la misma forma que las polaroids, que ya atrajeron a artistas del popart y del posmodernismo hace tres o cuatro décadas. Lo que sea.

En cualquier caso… lo publicado… es suficientemente diverso como para que algunas cosas me atraigan y otras no. Por ejemplo, me ha gustado la entrada de ayer sábado dedicada a Selwhyn Sthaddeus “Polo Silk” Terrell, que lleve fotografiando la cultura y la sociedad negra de Nueva Orleans desde hace más de tres décadas. Me ha llamado la atención especialmente que algunas de las fotos que se muestran son en formato Spectra, no son cuadradas, que lamentablemente ya no está disponible. Tengo una cámara para este formato polaroid, llamado Image System en Europa, y daba una calidad muy superior a las infinitas variantes de las Polaroid 600.

También me han gustado los dípticos, trípticos y polípticos de Rachel Portesi, utilizando diversos formatos de fotografía instantánea. desde el típico formato cuadrado de las Polaroid 600/SX-70 hasta las grandes copias de las Polaorid 8×10 (pulgadas; o sea 20×25 cm). Viendo algunas de las fotografías, especialmente las más antiguas, lamentas la desaparición de algunos de los formatos y sistemas que ya no están entre nosotros y que daban unas estéticas estupendas, y una calidad muy superior a lo que nos ha quedado.

Las polaroids en blanco y negro de Nathan Pearce son curiosas, pero no tienen el nivel de los dos anteriores. Aunque tienen una virtud innegable; son una fuente de inspiración para cualquiera que tenga una cámara básica instantánea de las que puedan funcionar todavía por disponer de película compatible o por ser nuevas, y quiera sacarle un poco de rendimiento. El resto de los días son artistas que utilizan las pequeñas copias fotográficas para intervenir sobre ellas con técnicas mixtas o alteraciones físicas o químicas, a veces con más sentido, otras con menos.

Por último, el lugar al que les gustaría ir buena parte de los fotógrafos documentales que en el mundo existen, si no todos, es Corea del Norte. Precisamente por que es difícil ir y conseguir permiso para hacer fotos. Lo que pasa es que los que van… todos trae fotos parecidas o de las mismas cosas, y acabas no distinguiendo a unos de otros. En Feature Shoot han recopilado la obra de cinco de los fotógrafos que han tenido la oportunidad de visitar el autárquico país oriental, la única monarquía inspirada por Marx y Lenin que se conoce abiertamente… aunque no me atrevo a decir que haya sido estrictamente la única. La de China no es hereditaria… pero no me atrevo a decir que las intrigas del régimen, por lo que hemos visto en los últimos días, fueran muy distintas de las de los palacios de las antiguas dinastías imperiales. ¿Cuáles me han llamado la atención?

Quizá las de Dieter Leistner, ya fallecido comparando escenas «similares» de las dos Coreas. Si es más o menos tendenciosos, vete tú a saber. Pero en algunos de los pares es ingenioso. Siempre hay que considerar las de Carl de Keyzer, que siempre incluyen no poca ironía y sátira del régimen, aunque él diga que no es su intención. Y también, por su atención al pequeño, pero importante, detalle, especialmente cuando ese detalle da humanidad a la foto, las de Tariq Zaidi, que creo que es el que mejor se acerca a la humanidad de este triste país.

[Fotocomentario] El mundo es (más o menos) redondo… no cuadrado

Fotografía

Si sólo tuviéramos un ojo nuestro campo de visión tendría unos límites circulares. Como nuestra visión es binocular, se alarga el eje horizontal y es más bien elíptico. Pero desde luego no es cuadrado, como las fotografías que nos suministran nuestras cámaras, o como la mayoría de los cuadros que vemos en los museos, galerías de arte o, quien sabe, colgados en el salón de la casa de alguien. Las fotos y los cuadros no representan nuestra visión, prácticamente nunca. Más bien, vemos el mundo con ellos como a través de una ventana.

Lo curioso es que nuestras cámara fotográficas, más bien los objetivos, los sistemas ópticos a través de los cuales entra la luz, también proyectan su imagen de forma circular. Sin unos límites del todo nítidos, aunque razonablemente diferenciados. Tal es así que la cámara de cajón Kodak de 1888, la primera destinada al gran público, llevaba incorporado un rollo de película que ofrecía 100 negativos… redondos. Y las copias que entregaban una vez revelada la película también eran redondas. Remitir la cámara a Kodak para revelar, obtener las copias y que te la devolvieran nuevamente cargada costaba 10 dólares. Lo cual era un montón de dinero para la época. El lema de la cámara Kodak era You Press the Button, We Do the Rest (Tú pulsas el botón, nosotros hacemos el resto).

Hoy en día no es fácil encontrar sistemas que hagan fotos redondas. Desde luego, ninguno digital. Pero en película fotoquímica, tenemos las Polaroid Color Round Frame, que nos devuelven aquellas sensaciones. A mí me gustan, como las del cartucho del que hablo en Paisajes redondos al amanecer – Polaroid Supercolor 635 con Polaroid Color Round Frame.

[Fotocomentario] Las ausentes fotos en papel

Fotografía

Hoy, sábado, he quedado a cenar con unos amigos. Quedamos periódicamente. Ahora que ya tienen los hijos mayores, y están más libres, con más frecuencia que durante los tiempos en que eran niños o más jovencitos. Y está muy bien. Algunos de ellos los conozco desde hace cuatro décadas largas. Y entre ellos, aún más. La ultima vez que quedamos, un día antes de salir de viaje en vacaciones, hicimos unas risas con unos retratos sobre película Polaroid en blanco y negro.

Las fotos se las di a ellos. Sólo me quedé la mía… que evidentemente no hice yo. Hoy en día se hacen más fotos que nunca. Constantemente, millones de ellas, en todo el mundo. Pero son fotografías que se perderán. Casi nadie hace copias en papel, para los álbumes familiares, personales, de viaje o lo que sea, como hacíamos antes. Y toda esa riqueza documental se perderá. Bueno. Tampoco hay que dramatizar. Tantas se hacen, que el pequeño porcentaje que se convierte en objetos físicos en papel pueden bastar para que los historiadores, sociólogos, archivistas, conservadores de arte, etc… hagan su tarea en un futuro. Pero mucha gente se quedará sin recuerdos físicos con el tiempo. Yo intento pasar a papel fotos. En forma de libros. Ahora estoy elaborando el de las fotos del Tirol y Venecia. Nunca sabes cuando se va a estropear el ordenador y perder todas esas fotos. Aunque confío en que mi sistema de respaldo me permita recuperarlas. Espero.

Los datos técnicos de las fotos están en Retratos improvisados sobre Polaroid 600 blanco y negro – Polaroid Supercolor 635.

[Fotos] Paseo en día de lluvia con Polaroid blanco y negro

Fotografía

No estoy muy contento con los resultado que obtengo usando el sistema Fujifilm Instax de fotografías instantáneas. Y por lo que veo por ahí, debería obtener más nitidez y detalles en las fotos de este sistema. Mientras investigo, estoy usando de nuevo las Polaroid, buscando ofertas de cartuchos de película no tan caros como el precio oficial de la misma.

El último cartucho que hice fue en blanco y negro, que es la que más me gusta de la gama Polaroid. En un día nublado y con lluvia. El comentario técnico lo encontraréis en Más Polaroid blanco y negro, buenos resultado, con alguna subexposición. Aquí os dejo las fotos, que también van apareciendo en una de mis cuentas de Instagram.

[Fotos] Paisaje urbano y ferroviario con Polaroids blanco y negro

Fotografía

La verdad es que tengo bastantes rollos de película y otras cosas, también en el mundo de la fotografía digital, que comentar en estas páginas. Especialmente desde que me llegaron revelados los siete rollos de película del mes de enero que mandé a revelar a Carmencita Film Lab con el cambio de mes. Pero todo llegará. Como hoy no voy con mucho tiempo, voy un cartucho de fotografía instantánea reciente. Cambié a Fujifilm Instax hace algo menos de un par de años por el coste de la película Polaroid. En ocasiones es casi el doble por ocho fotos, mientras que las Instax ofrecen diez por cartucho. Pero claro, las fotos Instax son más chiquitas. Y por otro lado, la tecnología de Fujifilm está madura, las fotos se revelan pronto y tienen gran estabilidad en el tiempo… las de Polaroid…

Aquí os presento las últimas realizadas en blanco y negro mientras tomaba otras fotografías en formato digital. Paisaje urbano y ferroviario. Y si queréis conocer los motivos, más técnicos, por los que vuelvo a Polaroid, sin abandonar Instax, los podéis leer en Polaroid en blanco y negro; por la ciudad y en paisaje ferroviario.

[Fotos] Retratos con película Polaroid de marco redondo

Fotografía

Poco antes de mi reciente viaje a Suiza, durante mis breves vacaciones de finales de julio, en una reunión con unos amigos para cenar y charrar un rato, me llevé una cámara Polaroid con película instantánea con el marco redondo. Para hacer unos retratos. Hacía tiempo que no usaba la Polaroid. Últimamente uso la Instax SQ6, que tiene otro «feeling» distinto. Y es más barata.

Los elementos técnicos os los cuento en Retratos con Polaroid 600 Round Frame – Polaroid Supercolor 635. Aquí os dejo algunos ejemplos de las fotos que hicimos. Escaneadas las que me quedé yo. Fotografiadas con una cámara digital las que se quedaron mis amigos.

[Fotos] Polaroids «electorales»

Fotografía

Las estúpidas elecciones del domingo pasado, o te las tomas un poco con un humor o te dan para ponerte a quemar cosas, dada la escasa seriedad de las fuerzas políticas partidistas. Nosotros, gente poco violenta, optamos por el humor. Y por tomarnos un aperitivo y dar un paseo después de votar. Y yo me llevé una de mis Polaroids. Los detalles técnicos en Polaroids en blanco y negro para la mañana electoral.

[Fotos] Mil últimas Polaroids… y parón instantáneo

Fotografía

En mi blog dedicado a la fotografía explico un poquito porqué he parado de hacer, por lo menos por un tiempo, las vulgarmente llamadas «polaroids»: Mis últimos Polaroid Originals… por el momento. Básicamente, la película es cara… e inconsistente (¿por no decir mala?), aunque eventualmente se obtienen imágenes interesantes. Bueno. Os dejo con los dos últimos cartuchos que hice antes del parón. Fallos incluidos.

Un paseo a orillas del Ebro en Zaragoza, con colegas del grupo Fotógraf@s en Zaragoza.

 

Visita al castillo de Peracense a finales del mes de febrero.