Este libro, que me ha costado varios meses leer, lo comencé por una recomendación que encontré en algún sitio. He perdido la referencia, han pasado por lo menos cinco meses si no son seis. Era un artículo que hablaba en general de la obra del historietista japonés Osamu Tezuka. Tezuka está reconocido como uno de los principales historietistas nipones, y como uno de los que en su momento revolucionaron la forma de hacer la historieta, el manga, en el país del sol naciente. Fue uno de los primeros que en ese país concibieron historias largas y con un desarrollo amplio utilizando este medio artístico.

Para ilustrar la entrada, me he imaginado el entorno rural de la familia de terratenientes y los montes y bosques que lo rodea y donde cosas pasan; para representarlo, me he ido a los bosques y montes de Nikko, famoso por sus templos y santuarios, pero que tiene un paisaje absolutamente envidiable.
Justo cuando leí aquel artículo, había salido a la venta el primer tomo de Ayako, la obra que traigo hoy aquí, y que lleva el nombre de la protagonistas de una historia tórpida y compleja que abarca más de dos décadas de la posguerra mundial en el país oriental. La trama comienza cuando poco después de la guerra, el hijo de un terrateniente de provincias vuelve a casa, descubriendo que en su familia, todo un clan, el ambiente está enrarecido, y además tiene una hermana nueva… que resulta de una relación incestuosa del patriarca con una de sus nueras. Pero al mismo tiempo, el recién llegado de la guerra y sus secuelas, está metido en organizaciones que mezclan el espionaje político, son tiempos de ocupación americana, y el crimen mafioso. A partir de ahí se desencadenarán una serie de hechos violentos que llevarán a la puesta en peligro de la familia, y que la joven Ayako vaya a vivir una vida mucho más extraña y anormal de lo previsible.
Como digo, una historia que nos lleva desde los años 40 hasta los años 70, donde abundan las conductas sexuales anómalas, la violencia y la crítica social y política. El motivo por el que me ha costado meses es porque entre la publicación del primer tomo y del segundo, la obra es bastante extensa, ha pasado también meses.
El segundo tomo complementa la segunda parte de la historia de Ayako con tres historias cortas en las que se mezcla lo real con lo fantástico.
En general, me ha parecido una obra interesante, aunque no siempre sencilla o agradable de leer. Recomendable para adeptos al género.