Se me acumulan los temas y disminuyen los días que tengo para tratarlos. De hecho, esta semana estaré varios días en modo «solo fotos». Así que entre hoy y mañana, y tal vez dejando programada una entrada para el miércoles, saque adelante un poco el trío habitual tv/cine/libros. Tres comentarios rápidos a tres series diversas que he visto en las últimas semanas.
The Sinner 2
La primera temporada fue una sorpresa relativamente agradable; sin ser nada del otro mundo, el buen trabajo actoral te enganchaba. En esta ocasión volvemos a contar con el mismo inspector de policía que la ocasión anterior, un recuperado Bill Pullman, que mira tú que ha hecho bodrios en el cine. Pues ahora se luce en televisión. En esta ocasión vuelve a su ciudad natal, donde un niño de 13 años ha matado a quienes aparentemente son su padres. Pero detrás hay un problema de sectas y de secretos de antaño entre la aparentemente «buena gente, buenos ciudadanos» de la pequeña ciudad. Ha destacar el siempre sólido trabajo de Carrie Coon, y varios otros buenos secundarios. Sigue siendo una serie que vale más por su trabajo interpretativo que por sus tramas, que tampoco están mal.

Wanderlust
En esta serie británica, Toni Collette y Steven Mackintosh son un matrimonio que se quiere, pero que ha perdido la chispa en el dormitorio y andan con un notable grado de insatisfacción sexual. Para remediarlo, deciden abrir su matrimonio a la relación con otras personas, lo que parece que va a ir bien… hasta que no va. Repercutiendo en las vidas de sus hijos y de otras personas. Irregular, también salvada por el buen trabajo actoral. Decir que el quinto episodio de los seis de los que consta la serie es un mano a mano entre Collette y Sophie Okonedo, que es la psicóloga de la primera, de primer nivel interpretativo, y que justifica ver el conjunto de la serie para llegar ahí. Buenísimo.

The Kominsky Method
Sinceramente, no me apetecía mucho ver una serie protagonizada por Michael Douglas, un actor al que nunca he tenido mucha simpatía. Pero me la recomendaron vivamente y, haciendo pareja con Alan Arkin, en su relación actor veterano/agente todavía más veterano, componen una comedia dramática de muy buen nivel. Ambos, y un excelente grupo de secundarios, ayudados de un excelente guion, nos conmueven, tanto en las risas como en las penas, en esta reflexión sobre la pérdida y el duelo, sobre hacerse viejo, sobre la amistad, y sobre las relaciones familiares. Muy recomendable.
Como veis, todas las series de esta semana, serán mejores o peores, pero tienen excelentes trabajos interpretativos. Es lo que puede que sean interesantes para los espectadores.
