[Cine] Di jiu tian chang [地久天长] (2019)

Cine

Di ji tian chang [地久天长] (2019; 49/20191015)

El martes pasado, sin mucho convencimiento por mi parte porque no me encontraba con la cabeza muy en mi sitio, nos fuimos a ver esta película china, que se ha titulado en la cartelera española Hasta siempre, hijo mío. La modificación respecto al original chino parece que es la referencia al hijo. Lo cierto es que la película llegaba tras el éxito alcanzado en la última Berlinale, donde se llevó los premios correspondientes a la interpretación para Yong Mei (actriz) y Wang Jingchun (actor). La película está dirigida por Wang Xiaoshuai, de quien no recuerdo haber visto nada previamente.

Wang se toma su tiempo para contar esta historia, un poquito más de tres horas, con un guion que abandona desde el primer momento la linealidad temporal para ir saltando entre las distintas épocas en las que desde los años 80 hasta la actualidad va contándonos la historia de dos familias, que se tratan como hermanos, tanto los adultos como los hijos, pero que se van distanciando por los eventos que llevan a la muerte de uno de los niños, con la imposibilidad añadida de la madre (Yong Mei) para engendrar otros hijos.

Estamos ante una historia triste, aunque al final el director trata de aportar un tinte de esperanza, en la que de fondo tenemos los cambios profundos que la sociedad china ha acometido en los últimos treinta o cuarenta años, desde la época donde quedan coletazos de la dialéctica de la Revolución cultural, aunque esta se haya dado por finiquitada, se implanta la política de un solo hijo, hasta el momento actual de país bajo una dictadura comunista con economía capitalista. Como sucede con frecuencia, los directores chinos tienen cierta libertad para criticar las cosas que no funcionan bien, especialmente si se encuentran en el pasado, siempre que no cuestionen el liderazgo del Partido Comunista Chino. Y eso es aprovechado contar simultáneamente la historia de estas familias y la historia de los cambios sociales de su país.

La película exige atención. La información sobre lo que realmente pasó en cada momento se nos va dando de forma dosificada a través de la película, aunque de forma muy inteligente, permitiendo combinar el ritmo tranquilo de la narración con una cierta tensión en el espectador, a la expectativa de lo que ha sucedido con esta gente. Y todo ello muy fortalecido por el impresionante nivel actoral de un elenco que, además, tiene que adaptarse a interpretar sus roles con el envejecimiento propio de las décadas que pasan desde el inicio de la acción hasta el final.

La película es buena, muy buena. Emociona. Y mucho. Hay pocas cosas criticables, puesto que las aparentes incoherencias que percibes durante el metraje, al final encajan como un guante, mostrando una planificación en el desarrollo argumental muy fino. Pero eso sí, quien busque el histrionismo en los planteamientos y en las interpretaciones que en estos momentos parecen de moda,… pues no. Porque la película no deja de hablarnos más que de las vidas con su alegrías, pocas en este caso, y tristezas, bastantes más, de gente normal, que tiene que vivirlas con duelo y sensación de pérdida en algunos casos, con remordimientos y sensación de culpa en otros. Aunque todos ellos, con sus aciertos y sus meteduras de pata, son esencialmente gente honesta.

Valoración

  • Dirección: ****
  • Interpretación: *****
  • Valoración subjetiva: ****