…y Arthur C. Clarke nunca más hará volar nuestra imaginación

Ciencia, Cine, Literatura

Se dice que las gentes del cine nunca mueren solas. Que siempre se van al otro barrio en compañía. Claro, que Arthur C. Clarke trasciende y mucho al mundo del cine. El guionista y creador de la idea original de 2001: Una odisea del espacio, falleció ayer en Sri Lanka. Ya era mayor. 90 años.

Yo lo descubrí a propósito de la afamada película de ciencia ficción de Stanley Kubrick. Siendo todavía un adolescente, recuerdo las impactantes imágenes en las que descubría una nueva forma de ver el mundo. Un mundo que trascendía los límites de la bioesfera terrestre para introducirse en el frío espacio que interconecta los diversos astros. Es curioso, pero en un momento en el que las computadoras se veían como algo lejano y especializado, el miedo a que se volvieran locas como el esquizofrénico HAL-9000 no ha impedido que hayamos adoptado a estas máquinas como un elemento imprescindible en nuestras vidas. Claro que mi iMac, en el que escribo en estos momentos estas líneas, no ha intentado matarme. Todavía.

Al poco de ver la película, tuve la ocasión de leer la novela que escribió el propio Clarke. No era exactamente igual. Creo que la película es muy superior como producto cinematográfico que la novela como producto literario. Aunque siempre me pareció mucho más atrayente e hipnotizante la imagen del Ojo de Japeto que la de un monolito flotando en las proximidades de Júpiter.

Con posterioridad, he tenido ocasión de leer numerosas obras tanto de divulgación como de ficción del autor británico afincado en Sri Lanka. Con división de opiniones. La continuación literaria de 2001 me parece absolutamente innecesaria. Muy floja. Pero se contrarresta con esa absoluta maravilla, para mí una de las mejores novelas de ciencia ficción que he leído, que es Cita con Rama. Esa mezcla de acción, misterio y poesía en el primer contacto con una civilización extraterrestre me parece insuperada. Claro que su continuación en una serie de novelas sobre el tema me parece, asimismo absolutamente innecesaria. Y mala. Un rollo. Pero por otra parte, esa novelita de apariencia intrascendente que son los Cánticos de la lejana tierra vuelve a mostrar esa inmensa sensibilidad, destilando nostalgia a la vez que esperanza a través de esos exiliados que buscan un nuevo mundo donde vivir. Ah, y se me olvidaba… no se olviden de leer los Cuentos de la taberna del Ciervo Blanco. Se divertirán mucho.

Para finalizar esta entrada, tres cositas. La primera una cita del propio Clarke que nos recuerdan en Microsiervos y que resumen lo que realmente significa la ironía y la comprensión de lo que es la evolución biológica a un mismo tiempo. Nos decía Arthur que:

Aún tiene que probarse que la inteligencia tenga algún valor para la supervivencia.

Sútil, pero cierto y contundente. También sugiero que lean la despedida que nos ofreció recientemente, consciente ya de que estaba en sus últimos años de vida, y que nos ofrece Papel en blanco en una de sus últimas entradas. Aquí pongo el vídeo; para la traducción, vayan a la entrada mencionada.

Finalmente, un recordatorio. Aunque los termómetro quieran desmentir el hecho, es innegable que desde las 6:48 horas de esta madrugrada estamos en primavera. Hoy es el equinoccio de primavera. Y lo celebraremos con una fotografía apropiada al hecho.

Flores en árbol (III)
(Canon EOS 40D; EF 70-210/3,5-4,5 USM)

Shackleton y los náufragos del Endurance en la Lonja de Zaragoza

Ciencia, Fotografía, Viajes

Hoy he tenido la oportunidad de visitar la exposición Atrapados en el hielo en el que se relata la odisea de la Expedición Imperial Trans-antártica. La expedición, que partió el 1 de agosto de 1914 de Inglaterra, consistía en dos barcos, el Endurance y el Aurora. El Aurora era un barco de apoyo. El barco principal era el Endurance, en el que viajaba el líder de la expedición Ernest Shackleton, cuyo propósito era atravesar el continente antártico. Ambas tripulaciones sufrieron sendas odiseas, pero la que aquí nos interesa es la del Endurance.

¿Por qué la expedición del Endurance se hizo especialmente famosa? Entre otros motivos, por que el aguerrido australiano Frank Hurley, fotógrafo oficial de la expedición, frente a todas las adversidades, consiguió salvar numerosos negativos, copias y diapositivas en color de los avatares de la expedición. Estas fotografías son la base de la exposición, aunque hay otros elemntos audiovisuales, interactivos o explicativos que la complementan.

No vamos aquí a relatar los pormenores de la expedición. Diremos solamente que el Endurance quedó atrapado en un mar de hielo del que no pudo salir, que cuando naufragó dejando sin refugio a los expedicionarios estos trataron de regresar hacia el norte para ser rescatados, y que finalmente lo consiguieron. Ninguno murió, aunque la salud de varios quedó gravemente tocada. En total, estuvieron casi dos años, con dos inviernos antárticos casi completos en la región antártica. Una auténtica proeza. Aunque los objetivos de la expedición fracasaron casi por completo.

Si estáis por Zaragoza, la tenéis abierta hasta el 4 de mayo. No os la perdáis. Personalmente, creo que iré más de una vez a visitarla. En la imagen, la fila que había esta mañana de domingo para entrar.

Shackleton en la Lonja

 

(Canon EOS D60; EF 28/2,8 USM)

Ser ciudadano y la teoría de la evolución

Ciencia, Política y sociedad

Microsiervos presenta una de esas noticias que parecen curiosas, pero que al mismo tiempo nos ponen la carne e gallina.

Se trata de un gráfico en el que se expresa la aceptación de la Teoría de la Evolución por los ciudadanos de distintos países, estudiada en muestras (suponemos que obtenidas al azar) de entre 500 y 1500 individuos. El estudio se publicó en Science. El gráfico es el que se presenta a continuación:

Aceptación de la evolución por pa�ses

Bueno, los hispanos no estamos mal; podemos estar en un 70-75% de aceptación de una teoría, que científicamente en sus términos generales, está bastante demostrada. Cambia con el tiempo, conforme se encuentran nuevos datos, pero en general se afianza sobre bases cada vez más amplia. Pero he aquí que en nuestra metrópoli, en la cabeza del imperio, en los EE.UU., la aceptación de la teoría de la evolución está sólo en un 40% de la población. Y eso que es el país donde más avanzada está la ciencia y la tecnología. Pero desgraciadamente también es uno de los países occidentales dónde más arraigada está la religión, unida una incultura basal de sus habitantes. A mí me parece procupante. E ilustrador. Y en este país seguimos confiando la educación de muchos futuros ciudadanos a instituciones religiosas. ¿Estamos locos?

Se nos viene encima la primavera a marchas forzadas. Y eso no es necesariamente bueno. Así que hoy os dejo un poco de nieve en la foto. En Las Canteras, entre Huesca y Almudévar.

Blanco

 

(Fujifilm Finepix F10)

Noticias curiosas o terroríficas; en cualquier caso, diversas

Ciencia, Política y sociedad

Google parece que va a sacar un nuevo servicio. De momento se oye hablar de él como Google Health. Todavía no tengo claro qué va a ser. Por un momento, pareciera como un lugar donde buscar abundante información sobre salud. Esto, por sí mismo, produce terror. Internet y los temas de salud juntos e indiscriminadamente usados dan bastante miedo. La gente «aprende» cosas… ¡qué cosas! Y no estoy en contra de limitar la información, ni mucho menos. Pero hay que hacer un enorme esfuerzo educativo para que la gente tenga una mirada crítica sobre la información que recibe. El caso es que no. Parece que Google pretende que la gente tenga la información sobre su salud organizada en sus servicios. Ufffff. Con lo delicado que es esto. No sé yo lo que opinarán las agencias de protección de datos personales.

Hablando de temas de salud, ElPaís.com nos informa de que 30 destacadísimos invitados a una fiesta que dio Demi Moore en su «modesto» domicilio han sido reclamados por alguna agencia de salud pública para ser vacunados contra la hepatitis A. Parece que uno de los camareros de la fiesta se encontraba afectado por la enfermedad. ¡Y yo que pensaba que el color amarillo verdoso de los famosos se debía a las envidias mutuas! Por lo demás, ya estamos. Información privada sobre salud, en la prensa. No sé yo si esto es muy correcto. Incluso no sé si es correcto que yo lo comente… Aggg, ¡qué dilema bioético! Lo que espero es que todos estos pijos jolivudianos no sientan el impulso irrefrenable de demandar al pobre camarero. Ya se sabe que estos «yanquis» tienen como deporte nacional demandar al vecino de enfrente. Incluso estos que son tan infinitamente ricos.

Y hablando de infinitos o de cantidades próximas; unos individuos, científicos ellos, han publicado un trabajo en el que dicen que una serie de magnitudes de nuestro universo se relacionan por un factor de 10 elevado a 122. Lo que es un montón. Dicen que el número de partículas elementales del universo es una cantidad inferior. Con lo cual la respuesta al sentido de la vida, el universo y todo lo demás no sería 42 como se nos había hecho creer. ¡Vaya cagada del pensamiento profundo! La respuesta sería 10 elevado a 122. Claro que sigue en vigor la cuestión. Conocemos la respuesta, pero ¿cuál es la pregunta? En cualquier caso, 10 elevado a 122 es un magnitud mucho mayor que 10 elevado a 100. Un googol. Que es de donde se tomó el nombre, por homofonía, de Google. Pues vaya, me ha quedado una entrada la mar de cíclica.

La fotografía de hoy se la dedico a la Luna, que esta semana se ocultó ruborizada detrás de su hermana mayor, la Tierra, cuando se dio cuenta que el Sol la miraba. Uy, mira. Si he salido poeta. O cursi. Aquí, ligando con un aeroplano que pasaba. En Veruela.

Luna y jet - Veruela
(Canon EOS 40D; EF 24-105/4L IS USM)

¿Qué hubiera sido de Bohr… en este país?

Ciencia, sociedad

A través de La Petite Claudine, me dirijo a leer la anécdota que podíes encontrar en la siguiente anotación de La Insignia.

……. Tomaos un ratico para leerla, que no voy a reproducirla a aquí; aunque sí la voy a comentar… desde cierto punto de vista… …….

Con mi experiencia personal en el profesorado de este país en el que vivimos, desde la educación infantil hasta la universitaria, estoy prácticamente convencido que Bohr hubiese suspendido el examen, y probablemente se hubiera malogrado un físico de primer nivel. Es más… probablemente, la cerrilidad y el dogmatismo de algún docente, especialmente de los niveles más altos de la educación (bachillerato y universidad) está malogrando en este momento a científicos de primer nivel… perpetuando la mediocridad que nos asola.

Pero claro, es una apreciación muy subjetiva, basada en lo que yo me he encontrado en mi recorrido educativo y formativo. Y entiéndase, podría mencionar algunos excelentes profesores que he tenido. Pero temo que haya que hacer aquí una curiosa y triste aplicación del Principio de Pareto. Al 80% de los profesores que he tenido apenas les concederé un 20% de mi desarrollo personal en el sistema educativo. Pero del otro 20% me acuerdo, son a los que todavía pongo cara,… y voz…

Espero, sinceramente, estar equivocado. Y que todo haya sido mi mala suerte.

Paisaje, al caer de la tarde, desde Añón de Moncayo, Zaragoza

Una mirada al pasado

Ciencia, sociedad

Esto es lo que nos propone Ramón en su viñeta en ElPais.com. Y con método muy sencillo, y agradable en los meses de verano, cuando el único momento razonable para salir de casa es al anochecer, evitando las horas de calor. Tumbarse en el cesped y mirar al cielo. Se nos olvida con frecuencia, o simplemente muchos son ignorantes de este hecho, que el Universo que vemos no es real. Que la luz viaja muy despacio, a una velocidad constante de algo menos de 300.000 km cada segundo. ¿Despacio? Sí… cuando se trata de las distancia cósmicas. La luz que nos llega de la vecina Galaxia de Andrómeda, que a escala universal es el vecino de la puerta de al lado en nuestro rellano, comenzó su recorrido hacia nosotros cuando en este planeta apenas se levantaban nuestros antepasados Homo Erectus hace 2 millones de años.

En cualquier caso, y a pesar de su aspecto estático, la programación que nos ofrece el Universo me parece mucho más interesante que las que nos ofrecen las principales cadenas que vociferan por los altavoces de nuestras cajas tontas. Y mucho más relajante.

Antes de salir a contemplar el Universo, una buena cena como la que disfrutamos en este restaurante de Tallín, Estonia; mejor un poco más ligera…

Esta noche eclipse de luna…

Ciencia, Fotografía personal, naturaleza

… que casi con toda seguridad no veré, por motivos diversos. Aunque curiosos e interesantes, los eclipses de luna no tienen la grandeza visual y emocional de los eclipses de sol. Y ya he visto desaparecer varias veces a nuestro satélite en las sombras terrestres.

Esta tarde he salido ha fotografiar al campo. Y como es natural, si pocas horas más tarde va a haber un eclipse lunar, la Luna debe estar aproximadamente en el punto opuesto al Sol en la bóveda celeste. Y por lo tanto, en el momento del ocaso, al ocultarse el astro rey debe darse la salida casi simultánea de su pálida compañera en los cielos de nuestro planeta.

Y he aquí el documento gráfico.

Fotografía del ocaso, tomada a las 18:42 en las proximidades de Almudévar, Huesca; me doy la vuelta con un giro de 180º y…

hela aquí, a las 18:43, Luna, lunera, cascabelera, saliendo por el firmamento entre girones de nubes

Solvay Conference – La fotografía más famosa de la historia de la ciencia

Ciencia, Fotografía

Gracias a Gaussianos llego hoy en mi deambular por la red de redes al artículo en la Wikipedia sobre la Solvay Conference. Y en concreto a la edición de 1927 en la que se tomó la foto que podréis encontrar en el siguiente enlace.

La imagen representa a un distinguido cúmulo de asistentes, científicos de la época que contribuyeron a cambiar por completo nuestra concepción del mundo, desarrollando o contribuyendo a desarrollar las dos teorías que durante el siglo XX han dominada el mundo de la física: la teoría de la relatividad y la mecánica cuántica.

Nombres como Einstein, Marie Curie, De Broglie, Bohr, Planck, Schrödinger, Heisenberg, Pauli, Lorentz, entre otros y que resuenan en mi cabeza desde los tiempos del B.U.P. toman presencia física en la imagen, conocemos su auténtico rostro. Para algunos ha sido el martirio de sus estudios, contribuyendo a complicar notablemente la posibilidad de obtener un aprobado en su adolescencia. Para otros ha significado la alegría de no necesitar dioses o fenómenos paranormales para entender que la naturaleza, el universo es per se suficientemente interesante o apasionante. Cada cual que se quede con lo que quiera.

Cuantos de luz atraviesan la bóveda de nubes que cubre la ciudad de Lugano, Suiza

Ciencia real y ciencia ficción

arte música y literatura, Ciencia

Hoy me he enterado al visitar el directorio de Hispaciencia de la existencia de una bitácora sobre la Física en la Ciencia Ficción. O tal vez sobre la derogación de las leyes de la física en la misma. Interesante. No sé si tendré tiempo para seguir y leer sus amplios artículos, pero está bastante bien.

Personalmente, mi relación con la Ciencia Ficción ha tenido distintos altibajos desde que tuve mis primeros contactos cinematográficos con ella en mis tiempo de adolescente, cuando el cine Rialto de Zaragoza (ya desaparecido, tras una larga larga agonía como sala X) era de arte y ensayo, y me daba la oportunidad de ver películas como 2001, una odisea del espacio, o la más desconocida película rusa Solaris, tristemente occidentalizada recientemente para mayor lucimiento de cierto pediatra de un servicio de urgencias.

Mis primeros contactos literarios fueron tres o cuatro años más tarde, ya universitario, cuando leí la versión literaria de 2001 por Arthur C. Clarke, y con la lectura de la trilogía de la Fundación de Isaac Asimov. En esos años de universidad, leí mucha ciencia ficción, hasta que en mi dura mollera fueron entrando los elementos del sentido crítico, y comprendí la cantidad de morralla con escaso valor que existe dentro del género. Esto provocó un claro distanciamiento de mi persona hace esta literatura, que sólo recupero de vez en cuando, en momentos en los que prefiero leer obras de evasión para descanso de mi sufrida cabecita/cabezota. Eso sí, seleccionando con cuidado para no caer en la basurilla.

Recientemente, por ejemplo, he leído una novelita, no publicada todavía en español, Seeker de Jack McDevitt. No es que sea el no va más del futbolín, pero es entretenida, tiene alguna aventurilla que otra y especula sobre los efectos del tránsito de una enana marrón al atravesar un sistema planetario extrasolar con planetas en la biozona. Bueno. Como toda obra de ficción hay muchas cosas difíciles de tragar en la realidad, pero tiene una base científica que para mí es la base para una obra seria de este género.

Es decir, que nadie me venga hablando de la saga Star Wars como ejemplo de ciencia ficción. Son obras de aventuras, de fantasía, en las que el pensamiento mágico tiene una gran importancia, y donde, voluntariamente según declaraciones del propio George Lucas, se derogan las leyes de la física en pro del espectáculo.

En fin, sirva este artículo para recomendar la bitácora mencionada al principio, y para reflexionar someramente sobre un género literario y cinematográfico que tanto dinero e intereses mueve, y que a tantas personas arrastra.

Peligrosos artefactos de «ciencia ficción» en la Plaza de los Sitios de Zaragoza

La estrella de los Magos de Oriente

Ciencia

Esta mañana realizaba la ruta entre Zaragoza y Huesca como todos los días para acudir a mi centro de trabajo. En un momento determinado, en algún lugar entre Gurrea de Gállego y Almudévar, he visto como un punto brillante aparecía en el cielo, mirando en algún hacie el norte o el nordeste. Brillaba cercano a una de las pocas estrellas que a esas horas, ya clareando, todavía se veían en el cielo.

Lo primero que se me ha ocurrido… dada las fechas en que estamos… si sería la estrella de los Magos de Oriente (que en ningún sitio se cuenta que fueran reyes). Pero me he venido a acordar de que yo no soy precisamente muy creyente en estas cosas de la fe,… que como fantasía para los niños, pues vale… pero qué… pues eso.

Lo siguiente que se me ha ocurrido es que sería un planeta de los gordos. Quien sabe si Júpiter o Saturno. Pero… los planetas tienen la mala costumbre de encontrarse en el cielo a lo largo de una línea imaginaria, la eclíptica, que se situa de este a oeste mirando hacia el sur, ya que todos los planetas orbitan más o menos en el mismo plano alrededor del Sol. Además, suelen brillar de forma constante y no aparecen y desaparecen repentinamente.

Entonces he recordado la red de satélites Iridium. Estos satélites, dedicados a la telefonía movil, disponen de unos grandes paneles solares, que cuando en su rotación adoptan un ángulo adecuado, emiten grandes destellos perfectamente visibles desde la superficie terrestre, a veces incluso con la luz del día. Una predicción para observar los mismos, la encontramos en la página de Heavens-Above. Me he quedado casi convencido de que he visto el destello de un Iridium.

Cuando he consultado en Heavens-Above con posterioridad, ahí estaba. El satélite Iridium 62 ha producido un destello a las 7:33 horas del día 20 de diciembre de 2006, visible en las cercanías de Huesca, con una magnitud aparente de -1 (intermedia entre la de la estrella más brillante distinta del Sol que es Sirio, con -1,5, y la segunda más brillante que es Canopus, con -0,7), a 24º de altitud y a 65º Este-Nordeste de acimut.

Y lo que me ha alegrado el día.

Cielo de atardecer en las cercanías de Fuendetodos, Zaragoza

El auténtico Señor de los Anillos

Ciencia

Como ya he comentado en alguna ocasión, eventualmente compro la revista National Geographic, cuando salen reportajes que por algún motivo me llaman la atención. Este mes de diciembre he adquirido la revista sólo por ver las fotos de un reportaje; las imágenes proporcionadas por la Misión Cassini-Huygens en su viaje a Saturno y su sistema de anillos y satélites.

Auténticamente impresionantes. Muchas de ellas compuestas por hasta 165 imágenes distintas que luego fueron recompuestas en la Tierra para obtener una alta resolución de los detalles. Y más allá de lo científico, pone de manifiesto la belleza intrínseca al Universo que nos ha tocado vivir.

Como muchos primeros domingos de mes, actividades de la Asociación Via Láctea en la Plaza de España, Zaragoza

Los límites del Universo… o del Tiempo

Ciencia, mis páginas en internet

Cuando el omnipresente Google abrió su sitio para elaborar sencillas páginas en internet, abrí mi sitio particular, Un universo por descubrir. Para mí es un sitio secundario frente a otros de los que mantengo. Pero acabo de terminar mi tercer tema, y os lo quiero presentar. Un poquito de astronomía y cosmología. Pero sencillico. Que tampoco doy para más.

Puesta de Sol desde Cabo Formentor, Mallorca