Como siempre priorizo las fotografías de los viajes a la hora de ir revisando y procesando las fotografías que hago, cuando ya se nos acaba el mes de noviembre, con las nieblas invadiendo las calles de Zaragoza, todavía estoy con las fotografías de los primeros días de este otoño de 2024 en las que no faltaron las lluvias. Este año, hemos tenido otoño real, frente a los últimos años en los que tuvimos unos veranos prolongados y otoños con sabor a primavera, por lo benigno del tiempo.




El comentario técnico de las fotografías que aquí os muestro lo encontraréis como de costumbre en su publicación de Carlos en plata. Realizadas con una película que, aunque tiene sus momentos en los que proporciona un rendimiento interesante, en realidad no me gusta mucho. Pero bueno, llegó a mis manos, y la usé. Y alguna de las fotografías, especialmente cuando aparece gente, las guardaré con cariño.
























































































