El mes pasado ya me escapé un sábado a Madrid. Hacía casi un par de años que no iba por la capital, y me había saltado las dos últimas ediciones de PHotoEspaña. También me hubiera gustado ver la exposición del Bosco en el Prado, pero no pudo ser. La semana pasada resolví esta omisión, además de visitar algunas exposiciones destacadas más del festival de fotografía.
A continuación, el enlace a la explicación detallada, y algunas fotos del día.
En estas dos últimas semanas he incorporado algunos nuevos volúmenes a mi biblioteca fotográfica. Y aunque sea brevemente, os traigo aquí los títulos porque me parecen interesantes.
Bernard Plossues un fotógrafo francés que me atrae mucho. Con gran sencillez de medios, una Nikkormat y un 50 mm con película blanco y negro, ha recorrido Europa y otras partes del mundo, y nos los muestra con una sensibilidad especial que a mí siempre me ha llamado la atención. ¿En blanco y negro? Bueno, sí… Hasta que el otro día en Barcelona, en la librería Kowasa vi el último libro que ha publicado. Fotografías en color. El título del libro, Couleurs Plossu – séquences photographiques 1956 -2013. O de cómo trasladar esa sensibilidad a la hora de contemplar el mundo a un medio expresivo fotográfico muy distinto. Y no sólo con la Nikkormat,… Cámaras de juguete, instamatics,… lo que ahora llaman los modernos y otros «hipsters» «fotografía lo-fi»,… pues haciéndolo toda la vida. Lo cogí un poco por curiosidad y porque tengo varios libros de este autor. Pero cuanto más lo hojeo, más me gusta lo que veo.
Entre los árboles.
Desde que el año pasado vi su exposición conjunta con William Klein en la Tate Modern de Londres, Daido Moriyama es un fotógrafo japonés que también me ha ido interesando cada vez más. Y ahora se ha reeditado su libro Okinawa, con las fotografías que hizo durante una estancia de una semana de duración en la isla japonesa junto con otros maestros de la fotografía nipona para impartir unos talleres a los fotógrafos locales. Okinawa es un lugar con personalidad propia en Japón, y despertó la curiosidad del maestro. Y a mí me la ha transmitido de forma considerable.
Ya he comentado en diversas ocasiones que Vivian Maier, después de muerta, se ha convertido en la fotógrafa documental de moda, o «street photographer» que dicen los modernos. Un mujer discreta, poco sociable, una niñera que en su tiempo libre tomó y conservó más de cien mil negativos, la mayor parte de los cuales nunca convertidos en copias, y cuya propiedad perdió y se perdieron hasta que alguien se hizo con ellos se dio cuenta de que había un filón. He de reconocer que había aspectos de la operación mercadotécnica montada a costa de su obra que no me acababan de convencer. Pero después de ver el documental que os recomendaba hace poco, y tras hojear el libro que os comento hoy, Vivian Maier – Street Photographer, consideré que merecía la pena incorporarlo a la biblioteca. Y oye, que hay fotos buenísimas. Pero de verdad.
Entre las flores.
Y dos publicaciones periódicas que todavía no me ha dado tiempo de hojear a fondo. Por un lado el número 36 de Foam, la revista del Museo de la Fotografía de Amsterdam, titulado Talent, y dedicado por lo tanto a nuevos talentos de la fotografía con géneros y estilos muy diversos. Probablemente de lo más nuevo avanzado en tendencias en el arte fotográfico, y por lo tanto más difícilmente digerible que obras más clásicas. Por otra lado el número 7 de los 10 que constan la serie C Photo, titulado Photographicness – Fotograficidad. He de decir que con ese título no tenía muy claro lo que me iba a encontrar. Y al final lo que hay es un conjunto de fotógrafos en los que el proceso de generación y formación de la imagen antes de convertirse en obra fotográfica es tan importante como esta misma. Entramos dentro del siempre difícil terreno de la fotografía conceptual, y de la mezcla de medios, ya que previo a la toma fotográfica podemos encontrarnos con un trabajo en el terreno de la escultura, el diseño, la pintura, el dibujo,… También de los más actual en tendencias de arte fotográfico. Y por lo tanto, también de digestión lenta. Pero interesante.
Adelanto esta semana un día mi artículo semanal dedicado al mundo de la televisión. Mañana me va a ser muy difícil dedicar un rato a esto, así que me pongo hoy a ello, y mañana ya veremos. Que temas no me faltan.
En primer lugar, hablar de dos novedades que han llegado a mi cartelera televisiva. En primer lugar, una comedia de situación de 20 minutos de duración por episodio, Ground Floor, que quizá venga a llenar el hueco de la ya cansina New Girl que abandoné la semana pasada. Los amoríos en una empresa financiera entre un empleado de alto nivel, de los que manejan cuentas muchimillonarias de alto riesgo, y una chica de la sección de mantenimiento. El uno trabaja en uno de los pisos más altos del edificio, y la otra en la planta baja. De aquí el título. Los dos primeros episodios han sido divertidos. Y la chica es muy guapa, está como un queso, y muy simpática. Qué más se puede pedir. Alrededor, un conjunto de secundarios más o menos cómicos.
También ha llegado Almost Human, serie que mezcla el procedimental policiaco con la ciencia ficción. En concreto, la presencia de robots con aspecto humano. Y los conflictos que surgen. El primer capítulo debía mucho a Blade Runner. Y como se ha dicho por ahí es una mezcla de otros muchos productos ya conocidos. Entretiene, pero le falta recorrido para tener personalidad propia. Y sin ella, puede cansar. Ya veremos.
Aparte de algunos viajes, las fotografías de Vivian Maier fueron fundamentalmente en Nueva York, en la foto Herald Square, y en Chicago.
Pero quizá lo más característico de esta semana ha sido que he visto dos documentales dedicados a fotógrafos con mucha presencia en los medios en los últimos años, los dos ya fallecidos.
El primero de ellos lo grabé de las emisiones de Canal Plus y se titula en castellano Tim Hetherington – Un fotógrafo en la línea de fuego (Which Way Is the Front Line from Here? The Life and Time of Tim Hetherington). Es un documental realizado para la HBO sobre la vida de este reportero gráfico, Tim Hetherington, fotógrafo y cineasta documental, que falleció en medio de los combates en la guerra civil libia en la ciudad de Misurata. Su muerte, sucedida al mismo tiempo que la del también fotógrafo Chris Hondros, que ha recibido menos atención mediática, ha tenido mucho impacto social y cultural. Este documental hace un recorrido por la vida y por el carácter y ambiciones de este fotógrafo, dibujando un perfil humano de una persona muy atractiva en todos los sentidos de su vida. El documental tiene un gran nivel de realización, mucho material filmado original del protagonista en los conflictivos escenarios que recorrió profesionalmente, y cuenta con los testimonios de sus personas más allegadas. Tiene mucho de panegírico, pero está muy bien.
El segundo de ellos es de la serie Imagine de la BBC que se puede ver también en Youtube. Os lo dejo puesto:
Se titula Vivian Maier – Who Took Nanny’s Pictures?, y hace un repaso a esta misteriosa fotógrafa, Vivian Maier, una niñera neoyorquina de origen francoaustriaco, anónima y desconocida, que dejó un legado de decenas de miles de fotografías, muchas de ellas sin positivar, en negativos, tomadas fundamentalmente en los años 50 y 60, aunque no sólo, y que han sorprendido por su calidad, tanto documental como estética, como por su profundidad. Aunque lo cierto es que últimamente estaba sintiendo la sobreexposición al personaje, lo cierto es que tiene fotografías absolutamente brillantes, que se pueden ver en la página que se le dedica a su trabajo, y el documental investiga a fondo en sus orígenes y en su personalidad, a pesar que poca gente sabía algo realmente de ella. Parece que sus últimos años estuvo sola, con escasas relaciones con otras personas, y viviendo en relativa pobreza. Afortunadamente su obra nos ha quedado, aunque me entran dudas de que pueda estar sirviendo de lucro para personas que lo único que han hecho ha sido dar con él. Este tipo de obras tendrían que estar más en el dominio público. También es muy recomendable, aunque sólo lo he encontrado en inglés.
Se conservan también fotografías en color, pero predomina el blanco y negro; en la fotografía Madison Square, y al fondo la Quinta Avenida y el Empire State Building.
Realmente esta semana traigo una colección de recomendaciones que son extremadamente variadas. Y dado que esta mañana de domingo es fría y húmeda, razón de más para verlas con cierta calma. Pero primero una cuestión. Las fotografías que van a acompañar la edición de esta semana de mis recomendaciones semanales proceden del primer carrete que he hecho de mi recién llegada Canon Demi EE17, una cámara de «medio formato» del año 1966 que he conseguido por un precio muy ajustado y en excelente estado. Podéis leer mis comentarios sobre las características de la cámara, así como sobre la experiencia de fotografiar con ella, en algunos de mis artículos técnicos en Medium.
En cuanto a las recomendaciones de la semana, aunque hace ya unas semanas que podíamos seguir L’Oeil de la Photographie, el nuevo proyecto de la gente que desarrolló el fenecido Le Journal de la Photographie (previamente La Lettre de la Protographie), se ha presentado ya en sociedad como proyecto en marcha y no meramente en estado de pruebas. De momento he de decir que me gustaba más el antiguo sitio, con sus pequeños porfolios que te permitían evaluar el trabajo del fotógrafo sobre cuya exposición, libro, u obra en general te hablaban. Pero bienvenidos sean, y seguiremos con atención lo que nos tengan que contar. Está también en francés, lengua de origen de sus responsables.
Lluvia y frío llevan a protegerse en los porches del paseo de la Independencia para realizar las primeras fotografías de prueba con la cámara.
En varios sitios, por ejemplo en el Tumblr de Conscientious, se han hecho eco de la adjudicación del premio Taylor Wessing de retrato a Spencer Murphy. Lo cierto es que son fotografías potentes algunas de las cuales había ya visto previamente, y que me extraña no haber mencionado ya en estas páginas. Pues nada, ahora es un buen momento para subsanar la omisión y recomendar el trabajo de este fotógrafo británico.
Otro tipo de retratos de personas son los que nos recomiendan en Sales de Plata, cuando nos hablan de las fotografías de las serie dedicada a la emigración gallega a América del gallego Manuel Ferrol. Fotografías que si bien como dicen en el artículo no tienen una elevada calidad técnica, sí que transmiten mucha emoción y no carecen de propiedades estéticas más que apreciables. Realizadas con una Rolleiflex para evitar interponer el aparato fotográfico entre los sujetos y el fotógrafo, son un documento histórico y social importante.
La lavandera de la Balseta, al final de la avenida de San José, es uno de los pacientes modelos habituales cuando pruebo nuevo material.
En Cada día un fotógrafo/Fotógrafos en la red nos han hablado esta semana de Manuel Zambrana, fotógrafo español muy vinculado al mundo del cine ya que ha trabajado con frecuencia en la fotografía fija de muchas producciones nacionales, así como ocasionalmente como director de fotografía en alguna. Incluso ha dirgido alguna cosa. En cualquier caso, merece la pena echar un vistazo a su obra, que también incluye fotografía que no tiene que ver con el mundo del cine, como retratos o fotografía de viajes.
En un largo artículo en Lenscratch dedicado a una mujer que se dedica al mundo de las exposiciones y las publicaciones de fotografía aparecen fotografías de un fotógrafo ya muy mayor, con una carrera de prácticamente 40 años, Allen A. Dutton, que me han llamado poderosamente la atención por su fuerza, por su simbolismo, por sus relaciones con el surrealismo y por su innovación mezclada con homenajes a los clásicos. Todo en un riguroso blanco y negro de película tradicional.
Excelente gradación tonal la que se puede conseguir con un poco de trabajo a partir de los reducidos negativos, como la que muestra el lateral de la basílica de San Antonio bajo la lluvia. La película Ilford Delta 100 parece una de las mejores opciones para disfrutar de la cámara.
También me ha interesado mucho el artículo que en LensCulture dedican a Jeff Cowen, fotógrafo que partiendo de sus fotografías en gran formato (no exclusivamente), y mediante el uso de técnicas mixtas, como el collage o la pintura, y otras, nos ofrece una obra muy interesante entre el arte figurativo y la abstracción.
A partir de un artículo de Rafael Roa titulado La distorsión de la memoria, me han venido las ganas de conocer más la obra de Yasuzo Nojima, un fotógrafo japonés que fundamentalmente desarrolló su trabajo en la primera mitad del siglo XX. La obra que he podido encontrar buceando en internet, no he encontrado un único sitio donde esté recopilada, así que hay que buscar, me parece de gran belleza y sensualidad. Y como dice Roa «enormemente poética y evocadora». Su estilo parece que va variando, del pictorialismo de moda en los primeros años del siglo XX hacia técnicas y estilos más modernos.
La entrada a la basílica, con escasa luz, es una prueba difícil para el muy luminoso 30/1,7 (equivalente a un 43 mm para el fotograma tradicional). Y para la latitud de exposición de la película.
Vayámonos a los videos que nos hablan de fotógrafos. En el Youtube de Photoshelter nos muestran la bolsa del fotógrafo David Burnett. Probablemente una bolsa poco habitual. Una Holga, una Pacemaker Speed Graphic, y una Canon EOS 5D. Esta última la de la primera generación. La que menos megapíxeles y zarandajas llevaba. Eso sí, con un impresionante parque de objetivos, en general muy luminosos. Interesante. Os dejo el vídeo. Burnett no es la primera vez que aparece en estas páginas, a propósito de un libro y de los juegos olímpicos, y es un reportero gráfico que me parece muy personal e interesante.
Está muy de moda Vivian Maier, la anónima niñera fotógrafa que se ha hecho mundialmente famosa después de muerta, una vez descubierto su inmenso archivo de fotografías. Últimamente se ha publicado el tercer libro con su obra, dedicado a los autorretratos, y se hacen exposiciones con su obra por todas partes. En American Suburb X (ASX) nos traen un documental de la BBC que puede ser interesante. Todavía no lo he visto entero, porque dura más de una hora y no he tenido la ocasión. Os lo dejo aquí también por si os interesa.
Un fotograma menor suele implicar una menor profundidad de campo, pero el luminoso objetivo de la Canon Demi EE17 permite jugar con este parámetro, como en la verja del parque Pignatelli. Si bien, al enfocar por estimación, hay que tener buen ojo para las distancias.
Como ya es una costumbre, recomendaciones fotográficas de lo encontrado por internet durante la semana.
En primer lugar, un par de obituarios, de los que podemos encontrar reseña y fotografías en La Lettre de la Photographie.
Por un lado, uno de los principales fotógrafos japoneses de la posguerra mundial, Yasuhiro Ishimoto. Japonés, aunque nacido en EE.UU. donde pasó sus tres primeros años, y los años de la guerra y la inmediata posguerra. Por spuesto, La Lettre… publica una selección de sus fotografías. Falleció el pasado 6 de febrero.
Más conocida puede ser la fotógrafa Lillian Bassman, que fue fotógrafa de moda en los años 40 y 50, así como directora artística de revistas de esta temática. Alguna de sus imágenes son muy conocidas, también se pueden ver en La Lettre…, y demuestran que el gusto por las modelos extremadamente delgadas viene de atrás. Aunque eso sí, muy, muy, muy elegantes, y no unas zarrapastrosas como a veces sucede hoy en día. Pasó a mejor vida el pasado 13 de febrero.
Ya comenté hace unos días mi visita a la exposición dedicada a los retratos de Andy Warhol que se puede ver estos días en Zaragoza. Entre las obras, algunas basadas en los retratos de fotomatón. Pues bien, en La Lettre… encontramos ejemplos de cómo estas máquinas aparentemente anodinas han sido utilizadas ventajosamente por diversos artistas en en el contexto de su obra. Lo cierto es que su uso se remonta a los años 20, por los surrealistas, como pude comprobar en su momento en la excelente exposición dedicada a este movimiento que tuve ocasión de visitar en Madrid hace un tiempo.
Como no podía ser menos, el iPhone también tiene una aplicación que nos permite simular el aspecto de las imágenes de los antiguos fatomatones.
Rafael Roa, en su siempre interesante blog, nos recomendó hace unos días el austero pero elegante blanco y negro de Lynn Davis. Sea de arquitectura, sean los icebergs,… quizá ambos temas con más similitudes de los que aparentan en un principio. Como últimamente no dejo de apuntar con mi cámara a los edificios que me llaman la atención a mi paso por las calles de la ciudad, me ha interesado mucho esta fotógrafa.
En los últimos tiempos se están poniendo de moda los cinemagrafos o como quiera que se quieran llamar. Esencialmente, fotografías animadas, normalmente en forma de archivos GIF, pero que con una animación muy sutil y elegante. Quizá los más conocidos son los de Jamie Beck y Kevin Burg en su Cinemagraphs. Pero en Conscientious nos recomiendan los de Simone Massera. Más sutiles todavía, parecen como si estuviéramos viendo la imagen fotográfica con la titilación de un pantalla de televisión. Muy melancólicos. He interesantes.
Un poco de arquitectura local a la caída de la tarde.
En la LightBox de la revista Time encontramos dos propuestas. Por un lado, los retratos de Rineke Dijkstra, una de las fotógrafas holandesas más respetadas y con una fotografía más sincera de la actualidad. Por otro, la curiosidad de los dispositivos utilizados por el Kinsey Institute en sus estudios sobre la sexualidad. Un poco espantado me he quedado con los chismes utilizados.
En el fotoblog Lens de The New York Times, nos vuelven a recordar las notables fotografías de la desconocida en vida Vivian Maier. Desde luego, algunas de sus imágenes son auténticas joyas. Y sólo se han hecho públicas una parte de las muchas que realizó.
Finalmente, American Photo nos propone echar un vistazo a la obra de Jay Tyrrell, Wind Army. Los campos de aerogeneradores vistos en imágenes panorámicas como algo a caballo entre los invasores marcianos de H.G. Wells y los gigantes a los que acometió Don Quijote. Esta última imagen es mía, no del autor. Pero inevitable.
Y creo que por esta semana ya es suficiente. Si os interesa lo que os propongo tenéis para pasar un buen rato viendo fotos.
Los "ejércitos" de aerogeneradores se extienden entre los campos de trigo y de vides en La Muela, cerca de Zaragoza.
Hoy me ha llamado la atención una entrada aparecida en Caborian. En ella nos cuenta cómo un tipo llamado John Maloof compró un mueble en una subasta, y en el aparecieron miles de negativos, muchos de ellos sin revelar, de una fotógrafa desconocida llamada Vivian Maier, tomados en las calles de Chicago, y otros lugares de EE.UU. La fotógrafa, aficionada, de origen francés, parece que disparaba con una TLR y producía negativos cuadrados de formato 6×6.
Autorretrato de Vivian Maier
El tal Maloof ha decidido ofrecer un homenaje a la desconocida fotógrafa, y ha abierto un fotolog para ir exponiendo las imágenes. Me he pegado un buen rato viendo lo que ha subido hasta ahora, y me han gustado muchísimo las imágenes. Muchas están perfectamente en línea con lo mejor de la fotografía callejera norteamericana de los años 40 a 70. Y eso es mucho decir. Y muy bueno.
Una curiosa imagen tomada por Vivian Maier desde un autobús
En resumen, os recomiendo que os paséis por el mencionado fotolog dedicado a Vivian Maier y su hasta ahora desconocida y anónima obra. Supongo que no habrá problema en haber puesto dos imágenes de la autora con interés divulgativo. Aunque no sé muy bien quién será el poseedor del copyright,… la autora murió recientemente y no se le conocen herederos.
Como la fotógrafa era francesa de origen, pues foto de París, que para eso le estoy dando una vuelta a las fotos descartadas de hace unos meses.
Place de la Concorde, nocturno, París (Francia) - Panasonic Lumix LX3