[Cine] Heart of Stone (2023)

Cine

Heart of Stone (2023; 48/20230903)

A ver. No voy a perder mucho tiempo con esto. Cada vez hay menos títulos que se estrenan en versión original en Zaragoza. Y nos negamos a ver versiones dobladas. Así que por diversos motivos, esta semana teníamos muy complicado ir a las salas de cine. Por no dejar huérfana de entrada cinematográfica esta semana, me fui a los estrenos recientes de Netflix, y decidí darle una oportunidad a esta película de acción protagonizada por la guapa Gal Gadot, una actriz que, más allá de su buen porte, en alguna ocasión ha dado indicios de buen saber hacer interpretativo. La cosa está dirigida por Tom Harper. El malo de película está interpretado por Jamie Dornan, que ha hecho de todo… muy bueno y muy malo. En fin.

En estos productos prefabricados, parecen casi obligadas algunas localizaciones como los Alpes, el Sahara, Lisboa e Islandia. Esta película registra las cuatro. Pongo fotos de Islandia, que es lo que más me apetecía.

Producto de entretenimiento a los que se está aficionando la plataforma de contenidos en línea, en el que sobre la base de un/a protagonista con renombre, en este caso Gadot, nos presentan un sucedáneo de las películas de James Bond o de cualquier otro héroe/antihéroe de acción. En este caso, una Bond femenina. El esquema argumental el típico y tópico, lo hemos visto mil veces. El problema es que está todo mal hilado y deslavazado, las interpretaciones son poco entusiastas y quedan flojas, la empatía que despiertan los personajes es nula, y los dilemas del argumento, lo que podría haber dado interés a la película se pierden por completo en la sucesión de escenas de acción que hay que incluir porque sí, porque toca, porque es lo que manda el manual de las películas de acción tipo «Bond».

Producto prefabricado sin interés, del que te podrías olvidar sin más, pero que te produce cierta indignación porque llegas a pensar que te están tomando el pelo proponiéndote una mediocridad de tal calibre. Así que… no ver. De verdad. No perdáis el tiempo. Mejor una teleserie coreana. Son inanes. Pero más divertido. Y se ajustan a las expectativas. Esto es una desgracia para el cine… Y es que encima se habrán gastado una pastuza en ir de lado a lado por el mundo como pollos sin cabeza.

Valoración

  • Dirección: **
  • Interpretación: **
  • Valoración subjetiva: **

[Cine] Belfast (2021)

Cine

Belfast (2021; 11/20220117)

En el plazo de unos días vamos a ver dos estrenos de Kenneth Brannagh. El director británico, norirlandés por más señas como veremos a propósito de la película de hoy, ha realizado cosas muy muy interesantes a lo largo de su carrera. También como intérprete. Y sin embargo, también da la sensación de que hay cierta irregularidad en su carrera. En cualquier caso, la película de hoy llega con halo de ambiciones en la temporada de premios, y con probabilidad de premio gordo. No sé si mucha o poca, pero la posibilidad existe.

Confío en visitar Irlanda del Norte en algún momento. De momento, tengo que conformarme con fotos de la República de Irlanda. Las que traigo hoy, en blanco y negro para acompañar el tono de la película, de la península de Connemara.

Brannagh nos traslada a su ciudad natal Belfast, con un alter ego de nueve años, Buddy (Jude Hill), que de repente despierta a la dura realidad sociopolítica de Irlanda del Norte cuando un grupo de matones unionistas irrumpe en su pacífica calle donde conviven familias protestantes y católicas para atacar a estas últimas. A través de los ojos del niño y sus correrías por el barrio iremos conociendo las entretelas de esa ciudad en conflicto y dividida, pero no sólo entre protestantes y católicos, sino también entre quienes quiere paz y quienes buscan bronca, representada por el enfrentamiento entre su padre (Jamie Dornan) y un matón unionista (Colin Morgan), a pesar de ser ambos protestantes. Y con la poderosa presencia de la madre (poderosa presencia también la de Caitriona Balfe), y la no menos poderosa e importante presencia de los abuelos del niño (prestigio a raudales con Judi Dench y Ciarán Hinds).

Brannagh abandona sus macroproducciones complejas y rueda con sencillez, en un delicado blanco y negro salpicado de alguna nota de color, un breve pasaje vital, varios meses en la vida de una familia que debe tomar la difícil decisión de si ha de quedarse en precario en la ciudad que ama y con la familia y los amigos que quieren, o deben emigrar, como tantos irlandeses en la historia, para abrir un futuro a sus hijos. Un tremendo retrato social de unos tiempos y unos conflictos, en la que el realismo de la historia no está reñido con no pocas dosis de poesía. Y poco más de hora y media de duración. Las pequeñas grandes historias no necesitan más para estar bien contadas.

Poderosas interpretaciones de un reparto mucho más coral de lo que parece, donde sólo la presencia del pequeño Jude Hill es constante, y que nos limita la historia, que podría tener otras interpretaciones u otras visiones. La misma historia, con distinto resultado, podría haber sido contada y resultar tremendamente interesante desde el punto de vista de la madre, esa madre guapa y garbosa, tanto en sus aciertos como en sus errores. O de la abuela. O del abuelo. O de un vecino. O de la prima mema. Todos ellos podrían generar su versión de esta pequeña historia y sería igualmente interesante, pero distinta. Hay muchas películas posibles en esta película concreta. Todo el reparto es irlandés, o con raíces irlandesas (Dench es inglesa de madre irlandesa), y nos acuna con su musical acento, que los irlandeses llevan la música hasta en el hablar.

¿Es recomendable? Es prácticamente imprescindible. Un canto al entendimiento, un homenaje a las familias modestas, a lo que emigran, a los pacíficos, a los sencillos de corazón, que también meten la pata en ocasiones. Una denuncia del conflicto por el conflicto, de los integrismos ideológicos dogmáticos, políticos o religiosos. Una visión necesaria de un norirlandés protestante que se aleja de todos los tópicos, al mismo tiempo que hace avanzar la historia bajo el impulso de la potente música y firmes letras de las canciones de Van Morrison, otro norirlandés de pro. No os la perdáis. Ah… y la sorpresa final sobre la niña de clase que trae loco a Buddy,… la guinda final en el mensaje de Brannagh con esta película.

Valoración

  • Dirección: *****
  • Interpretación: ****
  • Valoración subjetiva: *****

[Televisión] Cosas de series: se nos va por un tiempo lo mejor de la temporada hasta ahora

Televisión

En primer lugar, felices fiestas a todos. Espero que lo estéis pasando realmente bien. Ya advierto que no son mis fiestas favoritas. Ni de lejos. Y en los últimos años, menos. Sólo la presencia de algún pequeño por ahí de cinco años las hace llevaderas. Dichosa credulidad… está visto que son más felices aquellos que menos se preguntan sobre cómo es el mundo. Los que lo aceptan tal y como se lo cuentan, sin sentido crítico. Lo cual está muy bien cuando tienes cinco años… ¡pero a los cincuenta! En fin. Vamos a lo que toca. Que es jueves. La tele.

Pues sí. Hemos llegado al final de temporada de las que probablemente han sido las mejores series de la temporada de otoño e invierno. Por lo menos de las que yo tengo en cartelera y he seguido. Os comento.

Desde el Reino Unido, nos llega esta serie policíaca con asesino en serie que es The Fall, que si ya en su primera temporada nos dejó momentos buenísimos, en esta segunda ha rozado la excelencia total. Intensidad, introspección, desarrollo de caracteres, buena ligazón entre todas las tramas, temas desasosegantes, interpretaciones buenísimas. Absolutamente sobresalientes sus dos protagonistas Gillian AndersonJamie Dornan, a quienes los guionistas han sabido dotar de innumerables matices y de una evolución personal durante la acción. Pero no son los únicos, ya que están rodeados de un buen número de secundarios que dan un excelente soporte a la acción. Rodada en Belfast, dosifica como pocas el examen psicológico y social del entorno y los personajes, y el justo grado de acción, siempre creíble y proporcionada. Aquí no hay fuegos artificiales. La serie se planeo para doce episodios, que ya sean cumplido, más o menos. Creo que en realidad, entre las dos temporadas han sido once.  En cualquier caso, el final nos da pie a una posible continuación que no me importaría ver, aunque el caso esté resuelto. La verdad es que lo que menos importaba era la resolución del caso, ya que siempre hemos sabido quien era quien.

Los motivos navideños de este año los encuentro en una escapada que hice el año pasado a Barcelona en diciembre (En el Born).

Los motivos navideños de este año los encuentro en una escapada que hice el año pasado a Barcelona en diciembre (En el Born).

Cuando Homeland alcanzó tamañas las cotas de éxito y aplauso de audiencia y crítica en su primera temporada, se lo puso muy difícil a sus guionistas para sus eventuales continuaciones. Ciertamente, la segunda y tercera temporadas que cerraban el ciclo en torno a Brody tuvieron momentos de irregularidad. Pero a mí no me ha dejado de gustar nunca. Lo único que no siempre brilló con la misma intensidad y paso de momentos sublimes a otros donde simplemente era entretenida. En esta cuarta temporada, de alguna forma se ha tenido que reinventar, encontrar su propio camino, independientemente de Brody, y ya con Carrie Mathison (Claire Danes) como protagonista absoluta, aunque comparta plató con excelentes secundarios. Lo cierto es que en la cuarta temporada nos hemos encontrado una trama más cercana a las tradicionales de espías británicas, con su grupo de espías, trabajando juntos, con sus disensiones, con sus lealtades dudosas, con sus meteduras de pata, con su más que probable topo, y con un resultado final más que incierto. No han faltado momentos de acción más a la americana. Pero contenidos y bien realizados. Y en el aspecto interpretativo Danes ha estado más contenida, más creíble, hemos tenido en Peter Quinn (Rupert Friend) un excelente segundo protagonista, y hemos contado con la siempre estimable presencia de Mandy Patinkin, siempre a buen nivel. Yo creo que ha encontrado su sitio y realmente he disfrutado de temporada. Y espero con ganas, qué pasa en la siguiente.

Supongo que hay muchos elementos que son muy universales en estas celebraciones; los adornos, las luces,... (Mercadillo de la plaza de la Catedral)

Supongo que hay muchos elementos que son muy universales en estas celebraciones; los adornos, las luces,… (Mercadillo de la plaza de la Catedral)

Una excepción al buen tono que vengo comentando hoy es la miniserie Ascension. Pensada como seis episodios de 40 minutos, al final han sido tres de 80 minutos. La idea de su productora era iniciar un fenómeno similar a Battlestar Galactica, siendo también una serie de presunta ciencia ficción. Lanzar una miniserie que enganchase al público, y si todo iba bien, luego lanza una serie con temporadas regulares. He de decir que esta historia alternativa en la que supuestamente los americanos lanzan un enorme cohete con cientos de personas hacia Proxima Centauri en los años 60, pero en la que nada es lo que parece, no ha acabado de engancharme. La calidad está varios enteros por debajo de Galactica, las tramas son muy banales, aunque tuviesen mucho potencial, y las interpretaciones, tamaño de los pechos de las chicas aparte, son menores. Pero parece que no ha disgustado al potencial público objetivo de esta producción y a lo mejor, o a lo peor, vuelve. Ya veremos que hago entonces. Si le dos alguna oportunidad, o no. Si Galactica fue para los aficionados de la ciencia ficción lo que Lost a los aficionados a los misterios sobrenaturales, parece que al igual que estos últimos, no hemos encontrado una serie que la sustituya en nuestros corazoncitos.

Y la música, que no falte la música (En los alrededores de la catedral).

Y la música, que no falte la música (En los alrededores de la catedral).

Finalmente, uno de los mejores estrenos de la temporada, sino el mejor, ha llegado a su final de temporada. Con todo abierto para el desarrollo de todo tipo de tramas en un futuro. The Affair nos cuenta la historia de una aventura entre un hombre, padre de familia, de Nueva York, que veranea en Montauk, en el extremo de Long Island con su familia política, y una mujer local, una esposa relativamente joven que ha perdido a su único hijo en un tremendo accidente. Este adulterio de verano tendrá consecuencias importantes en sus vidas y en las de quienes los rodean. Cada capítulo está contado desde dos puntos de vista distintos, el de Noah (Dominic West) y el de Alison (Ruth Wilson), los dos protagonistas de esta aventura. No nos cuentan exactamente lo mismo, ya que no siempre están juntos, y desde su punto de vista también vemos lo que sucede cuando están con otras personas. Con Helen (Maura Tierney), la mujer de Noah, con Cole (Joshua Jackson), el marido de Alison, o con los hijos y otros familiares y amigos o vecinos de todos ellos. La gracia es que los momentos comunes no siempre son contados de la misma forma. Y la intriga viene de que son contados a unos detectives de la policía que están investigando una muerte. Y cuándo esta muerte comienza a tomar importancia, llegamos al parcialmente sorprendente final de temporada. Uno de los principales atractivos de la serie, aparte de la originalidad del guion, son las excelentes interpretaciones. De todos en general, pero de las féminas en general. Reconozco que yo siento debilidad por Wilson por distintos trabajos, y por Tierney, mayormente por su personaje en E.R. (Urgencias). Pero la verdad es que son las que mejor están. La que más se luce es la primera, como protagonista. Pero Tierney tiene algunos momentos espléndidos.

Y con esto llego al final de esta entrada del día de Navidad. Probablemente, el próximo jueves vendrá el comentario de los especiales navideños de las series británica. Que hay cuatro o cinco este año. Lo dicho al principio, que las navidades os sean leves y lo paséis bien.

Y la comida... mucha comida,... espero que no os empachen las fiestas (Mercado de la Boquería).

Y la comida… mucha comida,… espero que no os empachen las fiestas (Mercado de la Boquería).