Después de comer hemos seguido dando una vueltecita por el East End, viendo lo mono que está el barrio, y entrando en alguna tienda. Había una Lomography Shop, pero nos hemos quedado con esto hipsters snobs enseñándoles la Zeiss Ikon que es mucho más auténtica.
La idea para esta tarde era que si hacia bueno nos íbamos a algún sitio mono y con verde. Por las fotos bonitas. Pero ha saludo nublado toda la tarde con una luz de m..rda. Así que nos hemos limitado a ir como los guiris habituales a hacer fotos años monumentos más conocidos y concurridos. También a los Burgueses de Calais, escultura de Rodin que me gusta mucho, al lado del parlamento, pero donde nunca hay casi nadie. Si hay sol, en la pradera de al lado.
Y luego hemos incordiado a las ardillas en St James’s Park, y cuando se ha ido yendo la luz nos hemos venido al mismo pub de ayer, que tienen cerveza muy rica fresquita, y wifi. Luego a cenar y mañana último día y regreso. Cada uno por su lado. A mi es al que me queda más horas en Londres que mi avión sale por la tarde.