No sé si son fruto del azar, de un patrón consciente, del capricho que me invade en cada momento o de qué, pero a partir de los datos EXIF de las fotos «válidas» de mi viaje a Suiza, he sacado unas estadísticas de mi forma de fotografiar. En primer lugar, para entender algunas cosas veamos qué equipo he llevado.
Son fotos «válidas» aquellas que tras revisar todos los fotogramas tomados en formato RAW han sido procesadas para obtener un formato de «exhibición» por decirlo de alguna forma.
En total, en mi carpeta correspondiente tengo 428 imágenes.
En el bolsillo, me he llevado la Panasonic Lumix DMC-LX3, una cámara de la que desde mi viaje a París de este invierno donde fue mi cámara principal, me he separado muy poco. Antes, las cámaras compactas las llevaba un poco como de reserva o como cámaras secundarias para determinados momentos del viaje. Pero ahora le concedo bastante protagonismo. Esta cámara tiene un objetivo con focales equivalentes al formato de 35 mm entre 24 mm y 60 mm. En ella se pueden utilizar tres formatos de imagen: 3:2, 4:3 y 16:9. Ya adelanto que el 3:2 no le he usado en esta cámara.
En total, 231 imágenes (54%) están tomadas con la LX3.
La gran luminosidad del objetivo, su razonable buen comportamiento a ISOs moderamente altas, y su discreción hacen de la LX3 una cámara ideal para interiores, como en la catedral de Friburgo.
Como cámara presuntamente principal he llevado una Pentax K10D, con cinco objetivos de focal fija (entre paréntesis la focal equivalente en 35 mm): 21 (32), 40 (60), 70 (105), 100 (150) y 200 (300) mm. Estos dos últimos, viejos objetivos de enfoque manual, me los lleve con la intención de usarlos esporádicamente, especialmente en los Alpes.
En total, 197 imágenes (46%) están tomadas con la K10D.
Si quiero fotografiar con focales largas, la K10D es obligatoria como a la hora de obtener detalles de la Jungfrau.
Una conclusión que se puede sacar es que cuando una compacta es buena, pensada para el fotógrafo, en muchas ocasiones es suficiente para obtener las imágenes que quieres, y además es más discreta y más cómoda de llevar. Por eso, la usado bastante.
En cuanto a las focales utilizadas, utilizaré como referencias los extremos del objetivo de la compacta y los objetivos fijos de la réflex. Siempre daré las focales equivalentes en 35 mm, para estandarizar el asunto:
Entre 24 y 28 mm (gran angular): 97 imágenes (87 de ellas a 24 mm).
Entre 30 y 39 mm (angular): 40 imágenes.
Entre 41 y 60 mm (estándar): 171 imágenes (79 con la LX3 en 60 mm y 68 con el objetivo fijo de la K10D).
105 mm: 68 imágenes.
150 mm: 8 imágenes.
200 mm: 31 imágenes.
Mi sensación es que para mí, las focales de interés serían un gran angular entre 24-28 mm, una focal estándar y un teleobjetivo en torno a los 100 mm. No hace falta que me vuelva a llevar dos teleobjetivos. Con uno es suficiente. También se nota que cuando tienes un objetivo de focal variable o zoom, lo que más se usan son las focales extremas. Con la focal con la que me siento más cómodo (esto ya lo sabía, es con la estándar, entre 40 y 60 mm. Pero evidentemente, el gran angular tiene siempre un gran interés en viaje.
Mis focales reinas, las focales estándares, como el 40 mm (60 mm equivalente 35 mm) que obtuvo esta imagen de uno de los puentes de Lucerna.
En cuanto a la orientación de la imagen, 381 son apaisadas y 47 verticales.
En lo que se refiere al formato, teóricamente todas las de la K10D tendrían que ser 3:2, pero no es así porque muchas de las verticales las recorto a 4:3. El 3:2 no me gusta en vertical. Así que el conjunto queda así:
3:2 – 147 imágenes, casi todas ellas apaisadas.
4:3 – 65 imágenes, las dos terceras partes de ellas aproximadamente verticales.
16:9 – 213 imágenes, casi todas ellas de la LX3, aunque también algún recorte de la K10D y alguna composición panorámica de varias fotos.
Probablemente, todo esto a la mayor parte de vosotros os haya parecido un rollo. Pero a mí me ha hecho pensar. Sobre todo, de cara a lo que viene siendo mi obsesión últimamente. ¿Cuál es el equipo idóneo a llevar de viaje que de la mejor calidad con el menor volumen y peso posible? ¿Alguna idea?
El clon de Leica de mi LX3 y, en primer plano, la novísima Olympus Pen E-P1. ¿Irán por aquí los tiros del equipo ideal del viajero comodón?