The Ides of March (2011), 11 de marzo de 2012.
Esta película fue vista en versión original subtitulada en español; en la cartelera española es posible verla también en versión doblada con el título literalmente traducido como Los idus de marzo. Una vez más abogaré desde este Cuaderno de ruta por el cine sin adulteraciones.
Et tu quoque Brute fili mi! (Cayo Julio Cesar, idus de marzo, 44 A.C.)
Si me dicen que George Clooney ha dirigido un drama político, puede que se levante en mi interior un cierto interés por una película de este tipo. Pero si me dicen que la protagoniza uno de los actores de moda, Ryan Gosling, y que entre el reparto encontramos a gente como Philip Seymour Hoffman, Paul Giamatti, Marisa Tomei o la joven pero prometedora Evan Rachel Wood, aparte del propio Clooney, pues de repente me entran unas ganas tremendas de verla. Y a eso vamos.
En cuanto al argumento, nos encontramos en el período de elecciones primarias de unas presidenciales en Estados Unidos. El gobernador Morris (Clooney) es uno de los candidatos demócratas, que se presenta como un candidato progresista y regenerador de la política y de las formas de hacer política. Su jefe de campaña es el veterano Paul Zara (Hoffman), un peso pesado de las campañas electorales, a quien acompaña como segundo el joven y también idealista Stephen Meyers (Gosling). El contricante demócrata en las primarias tiene como jefe de campaña a otro perro viejo, Tom Duffy (Giamatti). Están en vísperas de la cita más importante de la carrera por ser el candidato presidencial, las primarias en Ohio que se van a celebrar un 15 de marzo (y de ahí el título, aparte de otras connotaciones que acompañan al mismo). Las cosas pintan bien para el gobernador, cuando ocurren dos cosas. Por un lado, Duffy contacta con Meyers, y le ofrece un puesto en su equipo de campaña, compartiendo con él algunas informaciones sobre las maniobras bajo mano con el gobernador del estado de Ohio, con quien se tiene que entrevistar Zara. Por otro lado, Meyers acaba ligando y acostándose con Molly Stearns (Wood), una joven y atractiva interna de 20 años, que trabaja en el equipo de campaña de Morris, y que es hija de un destacado dirigente del partido. Pero no es el único que se ha ido a la cama con la chica. Y cierta avispada periodista (Tomei), intervendrá para poner las cosas más difíciles el tipo. Y pronto se pondrán a prueba sus convicciones y sus lealtades.
Clooney se viene mostrando poco a poco como un director de cine razonablemente competente. Y este filme de duración contenida es un ejemplo de ello. Hay poco superfluo en el planteamiento del filme y de la historia que cuenta. Vamos al grano. Toda la información que se da es relevante para la historia. Si no lo parece, ya se verá que es así. Además, frente al frenesí que suelen acompañar otras realizaciones sobre este tema, aquí nos movemos con un tiempo tranquilo. Da tiempo a interiorizar lo que pasa. Economía de medios sin renunciar a una excelente puesta en escena y a una realización técnicamente competente. Es un tipo de cine que me gusta. Aunque tampoco destaque sobre otras propuestas. La historia se lleva con interés, y hay una serie de cuestiones planteadas que llevan a cierta reflexión sobre la ética en política. Entendámonos. Nada especialmente original. Quizá, como he leído por ahí, la propuesta tiene más pretensiones de gran reflexión política que lo que da de sí en realidad. Pero eso no quiere decir que no sea un drama interesante que se ve con agrado.
Especialmente, porque el director se ha sabido rodear de un reparto excepcionalmente competente. Cualquier intervención de Giamatti o de Hoffman son interesantes, dos secundarios de lujo que llenan la pantalla cada vez que salen. La participación de Marisa Tomei, otra actriz que también ha ido mejorando y mucho con los años, sabe a poco. Apenas un par de escenas que dejan con ganas de más. Y los dos actores jóvenes, que tienen más minutos y protagonismo en la pantalla no desentonan en absoluto. Aunque creo que Gosling no está a la altura de algún otra trabajo suyo reciente, compone su papel con competencia. A Evan Rachel Wood sólo le achacaría que su apariencia física no acompaña a la debilidad de carácter que muestra su personaje, aunque tampoco lo hace mal ni mucho menos. Clooney, que se reserva el papel de candidato, opta por un registro discreto y contenido, adecuado para no eclipsar al conjunto del excelente elenco que son los auténticos protagonistas del filme.
Como resumen cabe decir que es una película que merece la pena ser vista, ya que tanto la historia en general como las interpretaciones en especial están muy bien llevada. Un drama político que si no es original, se ve con interés, e invita a cierta reflexión que no esta mal. Dejo a lo potenciales espectadores del filme una duda pendiente. En las idus de marzo del 44 A.C., víctima de la traición, cayo muerto Julio César e indirectamente el régimen republicano que sus asesinos decían defender. ¿Quién es la víctima en este drama que presento hoy?
Valoración
- Dirección: ***
- Interpretación: ****
- Valoración subjetiva: ****