[Viaje] Navascués y Ochagavía con película negativa en color de formato medio

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. En Navascués, Ochagavía y Sos del Rey Católico con Hasselblad 500CM y Kodak Gold 200.

Comenteba ya el lunes que a la excursión de hace unas semanas hacia los Pirineos navarros me animé a llevarme la Hasselblad 500CM, cámara de formato medio. Gracias a su modularidad, además de las fotografías en blanco y negro que os mostraba a principio de semana, pude simultanear con fotografías en color. Las primeras de ellas en el entorno de la ermita de Santa María del Campo en Navascués.

La mayor parte del día los pasamos en Ochagavía, Navarra, con sol radiante… y calor. Especialmente conforme llegaba la hora de comer. A la salida de la sidrería, donde nos demoramos un rato, porque se estaba muy bien con la sidra y el aire acondicionado, el calor era sofocante. Pero aun nos dio para hacer un recorrido por la ermita de Nuestra Señora de Muskilda. Que como transcurría en buena parte del recorrido entre bosques, con su sombra, se hizo llevadera.

Nos alejamos por la tarde de tierras navarras, pero no mucho. Porque en el norte de la provincia de Zaragoza, a 73 o 74 kilómetro de Ochagavía, pero a solo 13 kilómetros de Sangüesa, también población navarra, se encuentra Sos del Rey Católico, con su casco histórico medieval, muy bien conservado, y donde pasamos un buen rato de la tarde, hasta que, amenazando tormentas y lluvia, decidimos que era hora de regresar a Zaragoza. Fue un buen día.

[Viaje] Navascués y Ochagavía con película negativa en blanco y negro de formato medio

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. En Navascués y Ochagavía con Hasselblad 500CM y Lomography Potsdam Kino 100.

Hace unas semanas ya hice un resumen de la excursión en el día que hice con un par de amigos a Ochagavía y Sos del Rey Católico. Como suele ser habitual, además de la cámara digital con la que hice las fotografías de aquel resumen, me llevé también una cámara para película fotográfica tradicional. A pesar de que el calor previsto para esos días no invitaba a llevar chismes pesados y voluminosos, me animé a llevarme la Hasselblad 500CM, cámara de formato medio.

Hubo un motivo para ello. Estas cámaras son modulares, y tienen distintos complementos y accesorios que las hacen más versátiles y convenientes. Y quería hacer algunas pruebas con uno de ellos, uno de los respaldos en los que se coloca la película fotográfica. Tengo uno averiado, y quería comprobar si un determinado apaño funcionaba. Como los rollos de película en color iban a tardar unas semanas en llegar revelados, me llevé un rollo de película en blanco y negro, que revelo yo en mi casa, por lo que comprobé en pocos días si la cosa había ido bien. No del todo. No es un apaño conveniente. Qué se le va a hacer. Aunque de las ocho fotografías que presento, el problema sólo se aprecia en dos. O quizá tres… si uno se fija bien. En el enlace que aparece en el encabezado de la entrada encontraréis la explicación técnica. Aquí unas fotografías de la ermita de Santa María del Campo en Navascués y del casco urbano de Ochagavía.

[Fotos] Paseando por el Canal Imperial de Aragón con película instantánea

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Un paseo fotográfico con Hasselblad 500CM, respaldo NONS Intant y película Instax Square.

Durante varios años, estuvo intentando avanzar en la fotografía con película instantánea. Fuese con película Fujifilm Instax Square, fuese con la nueva película Polaroid. Pero el sentimiento de frustración con los resultados obtenidos era grande. Y hace unos meses… lo dejé. Lo que fui haciendo hasta ese momento se puede ver en una cuenta en Instagram monográfica de ese tipo de fotografía.

Con un nuevo accesorio para mi Hasselblad, ahora puedo hacer fotografías con mayor precisión en la exposición, con mayor precisión en el encuadre, y mucho más nítidas gracias a las bondades de los objetivos Carl Zeiss, que superan la capacidad de resolver de la película instantánea. Espero divertirme en un futuro utilizando este accesorio.

[Viaje] Un paseo por Riglos con película negativa en color

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Un paseo fotográfico con Hasselblad 500CM y Kodak Ektar 100.

Sobre las circunstancias que se dieron para que a mediados de junio hiciéramos una escapada de unas horas a Riglos, para contemplar sus famosos mallos, una de las vistas más características de los Pirineos aragoneses, ya hablé hace unas semanas. Recientemente me llegaron reveladas las fotos del rollo de película fotográfica que hice ese día.

Con el pronóstico del tiempo que había, sol y buen tiempo, o si lo preferís, sol y calor, me pareció que me podía arriesgar a llevar una película de baja sensibilidad, apropiada para el paisaje con luz abundante. Por ello opté por coger un par de rollos de este tipo de película, aunque al final solo expuse uno. Es que el tiempo que pasamos en Riglos no dio para más.

Lo cierto es que, como ya comenté en su momento, el día estaba soleado, pero la luz no era muy buena. Había algo de calima en el ambiente, lo que hacía es que los objetos situados a cierta distancia en el paisaje aparecieran desaturados y poco contrastados. Por lo que las características propias de esta película, color vivos, saturados, muy nítida, se vieron penalizadas por las circunstancias ambientales. Pero, aun así, hay alguna foto razonablemente presentable.

[Fotos] Caminata por la Ribera Alta del Ebro con película para negativos en color

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Un paseo fotográfico con Fujifilm GS645S Wide 60 y Cinestill 400D.

En una visita anterior a Casetas, vi un cartel en el que señalaban el inicio de una ruta circular entre este barrio rural de Zaragoza y la desembocadura del río Jalón. A la ida se pasa por las poblaciones de Sobradiel y Torres de Berrellén, mientras que el regreso se propone por la ribera sur del río Ebro. Y en un día de mis vacaciones en mayo decidí hacer esta ruta. Los días anteriores habían estado con temperaturas y luz agradable, y me apeteció.

Las cosas no fueron exactamente como había pensado. El día salió totalmente despejado con una luz muy dura. Aunque llegué relativamente pronto, no madrugué en exceso, y a lo que empecé la caminata el sol estaba relativamente alto. Y equivoqué el camino un par de veces, añadiendo kilómetros. En realidad, la segunda vez es que no vi camino alguno por la ribera del Ebro y retrocedí a volver por Torres de Berrellén.

Me llevé una cámara de formato medio, una cámara ligera, adecuada para una caminata. La cuestión es que las fotos no son nada del otro mundo. Una iluminación muy plana, podría haber llevado una película menos sensible y también hubiese funcionado bien, incluso mejor. O mejor todavía, quizá no era el día para hacer fotos. Y encima, el recorrido acabó durando casi hora y media más de lo previsto. Es lo que hay.

[Recomendaciones fotográficas] Un clásico, los paisajes de Burtinsky y otras cosas

Fotografía

Las series de fotografías que ilustran esta entradas de este Cuaderno de ruta pueden verse, desprovistas de texto, en Carlos en plata. Fotografías en el entorno de la estación de Alagón y la antigua azucarera con la pequeña Panasonic Lumix G100.

Se me pasan mucho fines de semana, especialmente los domingos, sin que me de la vida para recomendaros fotógrafos y fotografías de las que encuentro por internet. Es cierto que la red de redes evoluciona, y el predominio actual de las redes sociales sobre los blogs o las páginas web tradicionales hace que la información esté más diluida, y corra el riesgo de quedar más diluida. Por otra parte, hay no pocos sitios que pretenden monetizar su esfuerzo, lo que es legítimo, pero que los servicios que ofrecen no convencen para apoquinar los 10 euros mensuales de rigor. ¿Sólo por información, sin más valor añadido? ¿Y con tanta oferta? Es difícil que atraigan el gasto. Por lo menos el mío. Pero si sobreviven es porque tienen su público fiel, claro. Pero ya no los cuento entre mis fuentes de información.

Hace ya unas semanas, En PhotoSnack, Tomasz nos recomendaba un clásico de la fotografía norteamericana. Una figura de la historia de la fotografía que es obligatorio conocer. Se trata de Paul Strand; el fotógrafo que dio la espalda al pictorialismo que imperaba en los primeros años del siglo XX, para adquirir un estilo de fotografía documental, más objetivo. Aunque también experimentó con la abstracción y otras formas fotográficas. Fue precursor e inspirador de muchos otros fotógrafos del siglo XX, norteamericanos, principalmente, pero no únicamente. Tomasz propone echar un vistazo a su obra en las páginas del International Center of Photography de Nueva York.

El mundo empieza a dar penica desde algunos puntos de vista. Entre ellos los ambientales. La crisis global del clima, más la deforestación, más la polución, están dejando cicatrices difíciles de cerrar en nuestro planeta. Desde hace ya unos cuantos años, Edward Burtinsky se ha dedicado a la fotografía de paisaje con la intención de mostrar, sensibilizar y luchar contra estas agresiones que, a la corta o a la larga, afectarán gravemente a los seres humanos. Lo he visto en Aesthetica Magazine.

En Frames Magazine nos hablan de la fotógrafa Andreyna Sanchez, también conocida como Dre Chez. Fotógrafa venezolana de orígen, criada en Florida, actualmente establecida en Australia. Su trabajo más comercial es correcto, pero no me dice especialmente nada. Normal. El trabajo comercial tiene que decir y convencer al que lo encarga y paga. Pero parte de su trabajo más personal, especialmente en el ámbito del retrato en blanco y negro me ha parecido muy interesante. En el artículo de Frames nos habla de cómo se inició en la fotografía en la adolescencia. Parece un mujer joven todavía… o sea que no hará mucho de esos tiempos. Aunque bueno… igual hace más de lo que parece. Fue modelo… y tal.

Y finalmente, un poco de macrofotografía, recomendada en Oldskull. Esta página en español tiene buenas recomendaciones, pero me parece muy antipática de navegar y la visito con menos frecuencia de lo que podría. Es lo que hay. En esta ocasión el fotógrafo es Thomas Shahan, con unos impresionantes primeros planos de los ojos de los insectos y otros artrópodos, llenos de color y de detalle. Virtuoso técnicamente, su sentido del a composición y del manejo del color son también muy notables. También practica el paisaje. El caso es que lo hace con una Pentax… pocos las usan estos días para estos menesteres, con un 28 mm y un 50 mm y unos tubos de extensión. Esto es difícil… hay que acercarse mucho mucho mucho al bicho.

[Fotos] Amanecer en el Cabezo Cortado y macrofotografía en el Parque Grande

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Sigo familiarizándome con el Tamron 90 mm macro , adaptándolo a Canon EOS RP, y sumándole el flash Godox TT685C.

Como digo en el encabezamiento, sigo familiarizándome con el objetivo para macrofotografía que me llegó recientemente. Un objetivo que cada vez que comparo sus prestaciones, con los precios que se ven por ahí, y con los resultados que ofrecen, más comprendo que se puede considerar un chollo. Pero los precios del mercado de segunda mano están muy condicionados por la ley de la oferta y la demanda, más que los del mercado de equipo nuevo, y no debe haber mucha demanda de estas ópticas, que por otro lado van muy bien.

Eso sí, en esta ocasión, los resultados no fueron los esperados. Si sumamos algún despiste mío que me impidió usar algunos accesorios con el flash incorporado a la cámara, más las tormentas habían causado sus destrozos entre la flora del Parque Grande de Zaragoza, y que soplaba un viento que dificultaba la operación de enfoque y encuadre correcto de la fotografía,… pues no fue lo que yo esperaba. Afortunadamente, las gotas del agua caída por la noche y que no se habían secado todavía tras el tempranero amanecer, dieron algún aliciente a las macrofotografías de las flores. Porque salvo algún áfido que otro… vulgarmente, pulgones,… pocos bichos encontré.

[Fotos] Varios fines de semana de paseos con película en blanco y negro, antes del calor

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Medio fotograma con blanco y negro, un rollo de Ilford FP4 Plus, y filtro amarillo para mejorar el contraste.

He enfocado el enlace del encabezado a la finalidad de cargar un rollo de película para negativos en blanco y negro de sensibilidad media en una cámara de medio fotograma. Básicamente, se trata de tener una configuración que, llevada de forma continua en la mochila o bolsa con la que te mueves por la ciudad, en tus quehaceres o en tus paseos, te permite hacer fotografías cuando hay un sujeto o unas condiciones de luz que te llamen la atención.

Si llevas una cámara de medio fotograma, es porque te cunde más. Más de 72 fotografías frente a las 36 o 37 de las cámaras compactas de fotograma completo. Recordemos, el fotograma completo, tal y como lo imaginó Oskar Barnack para su primera Leitz Camera (LeiCa), tiene unas dimensiones de 36 x 24 mm. Al medio fotograma llegamos cuando dividimos en dos el anterior, aproximadamente, con unas dimensiones de 17 x 24 mm.

Un formato no muy alejado del fotograma estándar cinematográfico de principios del siglo XX. Aunque el llamado formato académico (por la Academia de las artes y las ciencias cinematográficas de Hollywood, los de los Oscar), se determinase en 1932 en 16 x 22 mm, para ajustar la banda de sonido. En el mundo del cine se habla de un paso de cuatro perforaciones, el medio fotograma de la película, y de ocho perforaciones, el fotograma completo. Aunque hay otras variantes. Especialmente con tres perforaciones. Vaya… he acabado hablando más de cine que de fotografía. Las dos artes visuales me gustan, claro. Y la cinematografía no deja de ser fotografía en movimiento.

[Viaje] Madrid y algunas de las exposiciones de PhotoEspaña 2025

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Algunas notas tomadas con la Sony ZV-1 mientras visitábamos la exposiciones.

Como tantos años, este 2025 también me he desplazado un día a Madrid para ver algunas de las exposiciones del festival de fotografía PhotoEspaña. Y eso que me daba un poco de pereza. Mucho calor en Madrid en verano, y más desde que los veranos en España se está convirtiendo en verdaderos infiernos. Lo cierto es que en los días previos no tuve mucho tiempo para revisar la programación de exposiciones, y tal vez podríamos haber echo un recorrido un poco más vistoso. O simplemente, la edición de este año no es tan vistosa como la de otros años.

Habías exposiciones de dos de mis fotógrafos favoritos, todavía vivitos y coleando, pero octogenarios o nonagenarios. En Colón, en el la salas de exposiciones de Teatro Fernán Gómez, una exposición dedicada al viaje por Europa que hizo un joven Joel Meyerowitz entre 1966 y 1967, con Vivian, su primera esposa. Viaje durante el cual estuvo varios meses apalancado en Málaga, donde trabó amistad con una familia gitana, de donde salió una experiencia y unas fotografías muy interesantes. En Fundación Canal, una retrospectiva dedicada a Duane Michals que me recordó mucha a otra similar que vi en Barcelona hace unos años, y que me resultó menos novedosa. Una retrospectiva de Meyerowitz vi hace unos años en Viena, pero no dedicaba tanto espacio ni tanta profundidad a su experiencia europea, aunque fue cuando me convertí en un fan de sus fotografías.

En la galería Fernández-Braso se expone la última serie de Judith Prat, Aquella niebla, este silencio. Después de sus Brujas, la fotógrafa de Altorricón se fija en el comercio de esclavos y en los restos de esclavitud que quedaban en el muy disminuido imperio español durante el siglo XIX, a pesar del tratado firmado con el Reino Unido a principios de ese siglo para terminar con este infame negocio. Pero con el que algunas familias españolas siguieron enriqueciéndose durante décadas. Es sabido que en Cuba todavía hubo esclavos durante ese siglo. Me gustó. Me traje el catálogo.

Me supo a poco la exposición en la Serrería Belga de fondos de la colección Helga de Alvear, con una selección de fotografías de fotógrafos alemanes vinculados a la Escuela de Dúseldorf, unos fotógrafos que mantuvieron vivo el espíritu del movimiento de la Nueva Objetividad de entreguerras, y que conectan también con el espíritu del a Nuevas Topografías y su paisaje alterado por el ser humano, movimiento más americano. Con Bern y Hilla Becher al frente, y con nombres tan importantes como Candida Hoffer, Axel Hütte, Thomas Ruff o Andreas Gursky, entre otros, me supo a poco porque en 2008 pude visitar un exposición sobre este grupo mucho más amplia y profunda en el Museo de Arte Moderno de la Ciudad de París. Pero es interesante y la sala de exposiciones muy agradable.

De menor trascendencia, en el Museo de Romanticismo, donde acabamos por error, vemos una curiosa exposición en la que se mezclan las fotografías de una señora del siglo XIX, Adelaida Martínez-Corera, no las que hizo ella, sino las de su entorno familiar, de amistades y profesional, y algunos documentos de la época, con reconstrucciones visuales de lo que sería la época generadas por aprendizaje automatizado… o lo que por ahí llaman «inteligencia artificial». Como digo, una curiosidad. Y más ganas le teníamos a la exposición de fotografías y dibujos de Dora Maar en el Museo Lázaro Galdiano. Pero siendo fotos tomadas por la fotógrafa en una estancia en Barcelona, y algunos dibujos de sus amigos artistas… se queda lejos de lo que la obra en su conjunto de Maar merece. Y hasta aquí puedo contar.

[Fotos] Un taller de iluminación con flash ilustrado con película para blanco y negro… y flash

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Una cámara de juguete, la Safari Indiana Jones, con un rollo de Ilford FP4 Plus y un flash barato de Amazon.

Hace unas semanas, la Asociación de Fotógrafos de Zaragoza AFZ realizó un taller de iluminación con flash en colaboración con la escuela de fotografía Centro de la Imagen de Zaragoza. No tenía pensado en asistir. Pero con la suspensión del viaje a China, y hasta que salí de viaje a Sicilia como alternativa, tuve unos días en los que no tenía nada planeado, y me apunté. Lo cierto es que no había hablado de él todavía… y aprovecho que he decidido hablar de las cuestiones técnicas de la toma fotográfica en el Substack de Carlos en Plata. El enlace al artículo, en la introducción.

Pero a estas actividades, además del equipo «serio», para el aprendizaje, me gusta llevar alguna otra cosa que, sin salirse del espíritu de la actividad, aporte un poquito de sentido lúdico y simpatía a las horas en que estamos juntos haciendo el taller. Sin que nos desvíe de la finalidad principal del mismo. Y me llevé la Cámara Safari Indiana Jones, una cámara de plástico, casi de juguete, cargada con película fotográfica en blanco y negro y un flash barato y sencillo que compré hace unos años. Y que a pesar de su sencillez, sirve para hacer cosas. Bien.

[Viaje] Caluroso día de excursión en Ochagavía y Sos del Rey Católico

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Excursión de muy caluroso sábado a Ochagavía y Sos del Rey Católico con Sony ZV-1.

Surge a mitad de semana la posibilidad de hacer una excursión en el día a algún lugar más fresquito que el infierno en el que se está convirtiendo Zaragoza últimamente. Yo no tengo claro que vaya a haber lugares más fresquitos en la península en ese sábado 21 de junio, solsticio de verano del año 2025, y me siendo algo perezoso. Pero acepto. Tras diversas diversas deliberaciones ponemos rumbo a Ochagavía, en los Pirineos navarros, en su parte más oriental. Como de camino a esta bonita localidad navarra pasamos por Sos del Rey Católico, dentro de Aragón, que todavía es más vistosa, y hace tiempo que no la visitamos, decidimos que a la tarde pararemos un rato a recorrer el casco urbano medieval de la población donde nació Fernando II de Aragón y… no sé muy bien que lugar ocupa en la cuenta de los monarcas castellanos de donde también fue rey.

Por la mañana, recorrimos el casco urbano de Ochagavía. Previamente habías parado a hacer unas fotos a la ermita de Santa María del Campo en Navascués. En seguida empezó a subir la temperatura, en general fue soportable. Quizá porque sólo llegó a temperatura que empezaron a ser muy poco confortables cuando ya nos dirigíamos a comer. Y que el recorrido circular que hicimos a la ermita de Muskilda lo hicimos empezando la subida al principio del mismo, dejando para la vuelta, con más calor, un recorrido en bajada, que en muchos tramos transcurría entre la umbría de los bosques de hayas.

Tras dar cuenta de las viandas, entre las que se contaban unos ricos choricillos a la sidra y unos chuletones, acompañados por sidra fresquita, salimos a la calle… y casi nos da algo porque la temperatura había llegado a los 35/36 ºC… en los Pirineos occidentales… cuando la previsión era de máximas entre 30/32 ºC.

Inmediatamente nos metimos en el coche con aire acondicionado y nos dirigimos a Sos del Rey Católico. Donde hacía niveles de calor similares, pero las estrechas y umbrías calles de su casco histórico medieval aliviaban notablemente el paseo. Eso sí, tras visitar el palacio de Sada, lugar donde quedó registrado el nacimiento del Rey Católico, nos encontramos que se habían cerrado las nubes y amenazaba tormenta. Así que terminamos la visita y nos volvimos a Zaragoza, que al fin y al cabo eran ya las ocho de la tarde.

[Fotos] Un sábado por Zaragoza con película en una cámara de fotos, por no perder la costumbre

Fotografía

Esta serie de fotografías que ilustran esta entrada de este Cuaderno de ruta puede verse, comentada desde un punto de vista de la técnica fotográfica, en Carlos en plata. Comprobando un apaño que no funcionó en la Olympus mju-II con un rollo de Kentmere Pan 100.

Esta entrada, y estas fotografías, tienen poca miga que contar. Tiene que ver con la cámara, mi Olympus mju-II. Una cámara a la que le tengo mucho cariño, pero que uso mucho menos de lo que me gustaría por que no funciona del todo bien. Quise comprobar un sábado por la mañana si un apaño del que me hablaron paliaba el asunto, y salí a pasear con un rollo de película en blanco y negro. El más barato que encontré.

El apaño no funcionó. Así que supongo que seguiré usándola poco. Pero por lo menos me quedaron las fotos de ese sábado por la mañana. Que sin ser nada del otro mundo, tampoco quedaron mal. Al fin y al cabo, es mi costumbre salir a caminar siempre con una cámara fotgráfica a mano.