[Arte y foto] Día mundial de la fotografía, como una de las bellas artes

Arte, Fotografía

En algún momento se decidió que el 19 de agosto fuese el día mundial de la fotografía. El motivo de elegir este día fue que coincide con el aniversario del día en 1839 en que Louis Daguerre presentó su invento, el daguerrotipo. Esto siempre me ha supuesto un problema… porque Daguerre no es un tipo que goce de mis simpatías. Aunque indudablemente contribuyó al nacimiento y divulgación de la técnica fotográfica, era más negociante que otra cosa y no tuvo muchos escrúpulos. Especialmente con uno de los pioneros importantes de la fotografía, Joseph Nicéphore Niépce, cuyos experiencias y conocimientos aprovechó para su propio beneficio. El otro gran pionero de la fotografía fue el británico William Henry Fox Talbot. Si Niépce fue primero, los procesos de Talbot fueron los que dejaron herederos y fueron realmente precursores de lo que vino después. A cada uno, lo suyo.

Las fotografía de la entrada de hoy proceden de la exposición de la Lonja, «El sueño de la razón».

Pero estos inventores y pioneros desarrollaron técnicas. Porque, en el debate sobre si la fotografía es una de las bellas artes o no, yo tengo una idea clara. En principio, la fotografía es una técnica que aprovecha determinadas leyes de la naturaleza, estudiadas por la física y la química, para la reproducción de imágenes tomadas de la realidad. Que sea un arte o no, no es algo intrínseco a la fotografía, sino a la intención del fotógrafo o del artista que adopta la fotografía como un medio de expresión principal o accesorio en su trabajo. Lo que define la obra de arte, en mi humilde opinión, es la intención del artista. Y no nos olvidemos de una cosa. Imagen bella no es igual a arte. Las fotografías astronómicas que vemos, tomadas por el telescopio espacia Hubble u otros, son de gran belleza. Pero su objetivo es la ciencia no el arte. Aunque sea como digo apabullantemente bellas. Y por el contrario, existen obras de arte, también mediante técnicas fotográficas, que no son bellas, pero son arte.

Dicho lo cual, una de los grandes logros de la fotografía fue ayudar a la liberación de otras artes. No voy a decir que fuera la principal responsable, pero ayudó. Haciéndose cargo de la tarea de representar con más o menos fidelidad los acontecimientos y lo que hay en el mundo, permitió que otras artes se liberaran de esta función, especialmente la pintura y la escultura, que dejaron de tener como objetivo trasladar el mundo a un lienzo o una pieza del material escultórico que fuera con fidelidad. Y llegó el impresionismo, el fauvismo, el expresionismo, la abstracción, lo conceptual, el surrealismo, el dada,… y tantos otros. Hasta que la propia fotografía se liberó de su función documental inicial y recorrió libremente los caminos de la creatividad y de los conceptos.

El domingo pasado estuvimos visitando la exposición actual en la Lonja de Zaragoza, El sueño de la razón, en la que 53 artistas contemporáneos recogen el testigo de Francisco de Goya a la hora de tratar los temas, de recoger la visión del aragonés con técnicas modernas, o de homenajear la obra del ilustrado de Fuendetodos. Triste destino, ser ilustrado en la España de principios del XIX. Casi me atrevería decir que sigue siendo un triste destino, ser ilustrado en la España de principios del XXI. La fotografía ocupaba su lugar entre otras técnicas artísticas. Con bastante dignidad. Como técnica principal o auxiliar. En cualquier caso, esa madurez de la fotografía, que va mucho más allá del inmenso bombardeo de imágenes, todas iguales, todas repetidas, que sufrimos en las redes sociales, y que van justamente en dirección contraria de la fotografía como una de las bellas artes. Si esta última va de pensar, reflexionar, diferenciarnos en nuestra variedad, la de las redes sociales, si nos descuidamos, nos lleva a la homogeneización, a la pérdida de identidad, a ser igual a todo y a todos. Tenemos que tener cuidado con lo que celebramos hoy.

[Arte] Mañana de domingo en el museo

Arte, Fotografía

Como la previsión es que la mañana del domingo, tras un principio lluvioso, quedase despejada y agradable a partir del mediodía, como así fue, quedé con unas amistades para ir al Museo de Zaragoza y luego a tomar un aperitivo y charrar un rato. El motivo de ir al museo es porque les hablé de la exposición Goya+Buñuel que comenté hace unos días. aunque luego nos dimos una vuelta más amplia por las exposiciones temporales de estos días.

En el patio del museo, escultura, una retrospectiva con 17 obras de Santiago Gimeno realizadas entre 1992 y 2018.

En una de las salas de la planta baja, teníamos el 94º Salón Internacional de Otoño de fotografía organizado por la Real Sociedad Fotográfica de Zaragoza. La verdad es que vimos esta exposición por los pelos. Era el día de la clausura. Ya no se puede ver más. Una amplia variedad de obras, muy diversas, de autores internacionales. He de decir que siento todas ellas muy correctas e incluso brillantes desde un punto de vista técnico, encontré pocas que me interesaran por su contenido, y mucha copia más o menos descarada de obras ya conocidas de autores con más o menos prestigio. Desde quien emula a pintores como Matisse o Vermeer, a quien se fija en la piscinera Maria Svarbova, a quien sigue a rajatabla las recomendaciones uniformantes de sitios como 500px y similares.

Ya finalmente, subimos a la exposición Goya+Buñuel, que como ya comenté está repartida en dos sedes. La sección contenida en el Museo de Zaragoza me parece más interesante que la del Museo Goya (antes Camón Aznar), por lo que fue a este al que acudimos. Con menos gente que el sábado de la semana anterior, pude dedicar más tiempo a las obras, y especialmente a los audiovisuales. La disfruté más.

También visitamos alguna de las nuevas incorporaciones a la colección permanente sobre Goya y relacionados. Nos había llamado la atención en la prensa la denominación de una de ellas como «borrón», que debe tener sentido en el ambiente técnico de la pintura artística, pero que no deja de ser graciosa. Tras ello, salimos hacia la plaza de los Sitios y buscamos un sitio donde tomar algo.

[Arte] Exposición: Goya+Buñuel, los sueños de la razón

Arte, Cine

Este sábado pasado, arrastrando una faringitis que luego me tuvo todo el domingo en casa, tuve la oportunidad de visitar la exposición «Goya+Buñuel: Los sueños de la razón», que actualmente se celebra en una doble sede; el Museo de Zaragoza, del Gobierno de Aragón, y el Museo Goya de Zaragoza, de Fundación Ibercaja. La exposición se puede visitar hasta el 30 de diciembre. Y probablemente volveré a pasarme por ella, para terminar de absorber todo aquello que ofrece.

Lo especial de la visita es que fue organizada desde la Asociación de Fotógrafos de Zaragoza AFZ, con el objetivo de ofrecer la posibilidad de incrementar la cultura visual de los socios, más allá de la fotografía, y que tuvimos la suerte de que estuviera guiada por Amparo Martínez, profesora titular del Departamento de Historia del arte en la Universidad de Zaragoza, y una de los dos comisarios, junto con José Ignacio Calvo. Si este último sería el especialista en Francisco de Goya, Amparo Martínez tiene el cine y Luis Buñuel como área de especialización, lo que inevitablemente marcó un cierto sesgo durante la visita hacia este último. Lo cual, a mí, no me importó ni me molestó en absoluto.

Como ya he dicho, la exposición se encuentra repartida en dos sedes. Sobre esto, mi opinión más adelante. La primera que visitamos fue la del Museo de Zaragoza, en la plaza de los Sitios de la ciudad. En ella se analizan una serie de dimensiones en los dos artistas, tanto de carácter personal como artístico. Uno de los objetivos confesos de la exposición es superar las coincidencias más superficiales entre ambos artistas; ser aragoneses, tener una discapacidad auditiva y haber tenido que salir exiliados hacia Francia. Ambos fueron innovadores en sus tiempos y en sus artes, mantuvieron una actitud curiosa y de búsqueda del aprendizaje, no tuvieron inconveniente en incomodar activamente sus coetáneos señalando los desajustes de la sociedad y sus principales estamentos, ejercieron su libertad hasta la subversión, y practicaron ejercicios de introspección personal. Esto es lo que se ve fundamentalmente en esta primera sede. Primera por el orden de visita, no porque haya un orden establecido entre las dos.

En la segunda sede, el Museo Goya, que todavía muchos conocen como Museo Camón Aznar aunque hace unos años que cambió de nombre, se hace una comparativa de las obras de ambos artistas, buscando aquellos aspectos formales y de fondo que los unen. Aunque no necesariamente se pueda establecer una influencia directa de uno, Goya, en el más reciente, Buñuel.

Globalmente, la exposición nos dejó un buen sabor de boca. A mí por lo menos. El buen planteamiento de Amparo Martínez al guiar la visita, pero dejando libertad a los miembros del grupo para explorar lo que más les interesase, fue un acierto. Por lo menos para mí, que soy poco adepto a las visitas guiadas, en las que me siento muchas veces parte de un rebaño. No en esta ocasión. Sin embargo, tiene algunos «peros», que no atribuyo a sus comisarios, que me parece que han hecho un buen trabajo.

La exposición está bien, pero en mi opinión no tiene volumen como para que sea necesario que se reparta en dos sedes. Obviamente, esto se debe a cuestiones «políticas». Las dos entidades promotoras quieren tener su «protagonismo»… cuando los protagonista tendrían que ser los artistas y los visitantes y el mejor interés para estos últimos. Pero es el mundo, o el país, en el que vivimos. Siempre he sido crítico con la forma en que se trata la obra de Goya en Zaragoza. La hay, con piezas muy interesantes, y creo que debería exponerse de forma unificada y lo más didáctica posible, en lugar de dispersa en varias sedes. Es el problema de base. En lugar de colaborar y sumar… cada uno a lo suyo. Por mucho que se creen fundaciones y comisiones de coordinación y estas cosas…

También es un poquito una pena lo escueta que es la información en internet sobre la exposición. La encontramos en tres sitios relacionados, 1, 2 y 3. Pero en los tres es tremendamente escueta, sin que haya apreciado la existencia de documentación complementaria que el visitante virtual se pueda descargar.

Por lo demás, como decía, una actividad muy satisfactoria.

[Fotos] III Encuentro Analógico AFZ – Excursión a Muel (II); en blanco y negro forzado – Fotografía y otras artes visuales

Fotografía

Segunda parte de mi crónica fotográfica sobre el III Encuentro Analógico en la Asociación de Fotógrafos de Zaragoza (AFZ) (Facebook).

Si en la primera parte os mostraba las fotografías en color que realicé en el Parque Municipal de Muel y os contaba mi experiencia al usar una cámara de un solo uso para realizarlas, en esta segunda parte empezaré a hablar de las fotografías en blanco y negro. Como ya había visitado con anterioridad el lugar, planifiqué el uso de carretes en blanco y negro de acuerdo al previsible orden en que íbamos a hacer la visita al lugar; dejar los coches cerca de la ermita de Nuestra Señora de la Fuente, visitar la ermita con sus pinturas de Goya y luego pasear por el parque. Y para visitar la ermita es necesario forzar el revelado de la película utilizada para conseguir una gama de tonos adecuada.

Los detalles técnicos en el enlace a continuación. Para quienes no estéis interesados, os dejo las fotos.

Origen: III Encuentro Analógico AFZ – Excursión a Muel (II); en blanco y negro forzado – Fotografía y otras artes visuales.

 

[Arte] Visitando el Museo Goya – Colección Ibercaja con Fotógraf@s en Zaragoza

Arte
Este artículo es una variante del que ha salido publicado recientemente en el blog de Fotógraf@s en Zaragoza. ¿En qué se diferenica? En el artículo del blog de FeZ mi responsabilidad estaba en el texto, pero las fotografías son aportación de todos los que hicimos la visita. Aquí, las fotografías, para bien o para mal, son todas mías. Espero que ambos os resulten interesantes.

El jueves 28 de mayo de 2015 Fotógraf@s en Zaragoza (Facebook, Flickr) dejó parcialmente a un lado la fotografía para enfocar su atención sobre algunas del resto de las bellas artes, fundamentalmente la pintura y la escultura. Sin dejarse las cámaras en casa, como veremos. Porque recibimos la invitación del Museo Goya – Colección Ibercaja para hacer una visita guiada, reservada a 25 participantes, a las instalaciones de este museo, uno de los más emblemáticos de la ciudad de Zaragoza.

Este museo fue inaugurado en 1979, como parte de la Obra Social de Ibercaja, y sus fondos procedían fundamentalmente del legado del profesor y coleccionista zaragozano José Camón Aznar, del qué tomó originalmente su nombre. Sin embargo, en febrero de 2015 se inauguró de nuevo con el nombre de Museo Goya – Colección Ibercaja, sobre las base de la institución anterior y los fondos mencionados, entre los cuales se encuentran algunas interesantes obras del pintor aragonés Francisco de Goya y Lucientes de quien toma su nombre actual.

El museo se encuentra ubicado en la Casa del Infanzón Jerónimo Cósida, en la calle Espoz y Mina 23, un palacio renacentista que destaca por su vistoso patio. Como se nos explicó en la bienvenida al museo, este patio era el lugar donde los dueños de los palacios echaban el resto, mostrando su riqueza y poder en la riqueza ornamentación de los mismos. Nos contaron que a estos patios en Aragón se les llamaba «lunas». Y no sé qué experiencia tendréis los lectores de estas líneas que seáis aragoneses, pero de toda la vida en mi casa, al patio de luces de los edificios de viviendas se les seguía llamando la «luna». Lo que yo desconocía es que fuese un modismo local o regional.

Vista del patio de la Casa del Infanzón

Vista del patio de la Casa del Infanzón Jerónimo Cósida.

En la página en internet del museo podréis encontrar toda la información pertinente para planificar de forma adecuada la visita al museo; horarios, precios, cómo llegar,… Incluso para quienes no podáis acercaros allí, de momento, podéis acceder a una visita virtual,… aunque no he conseguido pasar el patio… Quizá problemas con mi navegador.

Como bienvenida, nos proyectaron una película documental de alrededor de 10 minutos de duración, que nos situaba perfectamente en la figura de Goya y su tiempo, en sus principales acontecimientos vitales y en el devenir de su obra. Además, por los comentarios que intercambié con otros miembros del grupo, coincidíamos en la calidad del montaje, del grafismo y del guion del documental. Casi encuentro una lástima que hasta el momento no lo hayan incluido en su página web, o que no lo compartan con el público en general a través del canal del museo en Youtube, donde hay comentarios de algunas obras destacadas. Valga como sugerencia, la primera que me surge a vuela pluma tras la visita del museo.

Alguna de las vistas del documental de bienvenida...

Alguna de las vistas del documental de bienvenida…

... que realmente encontramos bastante bien hecho e informativo.

… que realmente encontramos bastante bien hecho e informativo.

Tras la bienvenida y el audiovisual, comenzamos la visita propiamente dicha a las colecciones permanentes del museo. Estas están dispuestas en tres pisos. En el primero, encontraremos fundamentalmente los antecedentes y precursores del pintor aragonés. Obras pictóricas y escultóricas del gótico, el renacimiento y el barroco, hasta llegar a la época neoclásica, época con la que se topa el pintor, aunque finalmente adquirirá un estilo más propio del romanticismo y precursor de la pintura moderna y contemporánea.

Explicaciones sobre "La Virgen entronizada" de Blasco de Grañén.

Explicaciones sobre «La Virgen entronizada» de Blasco de Grañén.

La segunda planta incorpora fundamentalmente la obra de Goya, así como de algunos de sus contemporáneos, fundamentalmente la de sus cuñados los hermanos Bayeu, Ramón, Manuel y especialmente Francisco. Además de las obras pictóricas que se exponen, creo que lo más destacado es poder contemplar las cuatro series de grabados de Goya íntegras, Los Caprichos, Los desastres de la guerra, La tauromaquia y Los disparates. A mi siempre me han parecido algunas de las obras más geniales del pintor, y como aficionado a la fotografía no puedo dejar de reconocer en el grabado un antecedente en el deseo del ser humano de facilitar la reproducibilidad de la obra de arte, garantizando la consideración de obra de arte a cada una de las copias obtenidas a partir del material original del autor.

Representación de la Inmaculada Concepción pintada por Francisco Bayeu.

Representación de la Inmaculada Concepción pintada por Francisco Bayeu.

Detalladas explicaciones de la técnica del grabado antes de visitar las series completas de los de Goya.

Detalladas explicaciones de la técnica del grabado antes de visitar las series completas de los de Goya.

Finalmente, la tercera planta incluye obras de artistas posteriores a Goya, con una orientación a aquellos que lo copiaron con más o menos éxito, y de forma más importante a aquellos en los que influyó de forma característica. Ya hemos mencionado su carácter de precursor de muchas corrientes del arte moderno y contemporáneo, podemos ver obras de escultores como Gargallo, Serrano o García Condo, y pintores como Beruete, Barbasán, Palencia o Fermín Aguayo, entre otros nombres ilustres.

Durante la visita, la guía, de cuyo nombre no me acuerdo, fue parándose y explicando una serie de obras seleccionadas del conjunto de las expuestas de la colección de forma permanente. Estas obras, para todos aquellos que todavía no conocéis el museo, son las que en la página en internet del museo vienen agrupadas bajo el epígrafe de 15 esenciales.

"El joven de la margarita" de Pablo Gargallo, supuestamente la esencia de ser aragonés.

«El joven de la margarita» de Pablo Gargallo, supuestamente la esencia de ser aragonés.

Una de las esculturas de Honorio García Condoy.

Una de las esculturas de Honorio García Condoy.

Finalmente, tras la visita guiada, la dirección del museo nos permitió permanecer en las dependencias del mismo con libertad para hacer fotografías, sin flash, como las que ilustran este artículo. A pesar que la norma general, por alguna indicación que pudimos ver a la entrada, es de prohibición para las mismas. Desde luego, agradecemos el detalle hacia nuestro grupo. Pero quiero aprovechar para lanzar la segunda sugerencia que se me ocurre mientras escribo. Cuando visité París por última vez, en diciembre de 2014, pude conocer la campaña Tous photographes! (¡Todos fotógrafos!) (enlace en francés). Esta es una iniciativa del gobierno francés, consecuencia de que en la actualidad la práctica fotográfica y fílmica es omnipresente en las vidas de los ciudadanos. Todo el mundo lleva una cámara en su teléfono móvil, que cada año que pasa es capaz de ofrecer una mejor calidad de imagen en todo tipo de situaciones. Reconociendo la dificultad, por no decir imposibilidad, de luchar con prohibiciones contra quienes toman fotografías del interior de los museos y los monumentos más destacados, publicaron una declaración de buenas prácticas, promotora de un comportamiento ético (PDF en francés) para todas las partes implicadas. Consta de cinco artículos que establecen la necesidad de respetar la propiedad intelectual de las obras expuestas, especialmente cuando se comparte en las redes sociales, evitar conductas que puedan producir daños en las obras, no molestar al resto de los visitantes mientras realizamos la fotografía, no molestar a los trabajadores de los museos y monumentos haciéndoles fotografías que probablemente no deseen, y solicitar autorizaciones específicas cuando se quiera usar un material especial o las imágenes tengan un fin comercial. Por supuesto, nada de flash, trípodes o paloselfis. Reconozco que es más fácil implantar campañas de este tipo cuando las obras artísticas están en propiedad de los poderes públicos. Pero a pesar de todo, considero que son iniciativas a copiar y a respetar, para una mejor difusión de la cultura.

La familiar silueta de Francisco de Goya en las paredes del museo.

La familiar silueta de Francisco de Goya en las paredes del museo.

Y finalizaré este artículo con mi tercera sugerencia, que no se me ha ocurrido sobre la marcha, sino que la he pensado hace tiempo. En las visitas que he realizado a muchos museos por el mundo, es frecuente que existan los abonos anuales, que por una cantidad superior a la entrada individual pero moderada, permitieran a la población local la entrada libre durante todo el año al museo. En estos momentos, con los cuatro euros de la entrada, buena parte de los habitantes de Zaragoza van a visitar el museo en un momento dado, y luego,… de forma excepcional o en las jornadas de puertas abiertas; día de los museos, fiestas locales señaladas, etcétera. Imaginemos que ponemos un bono anual por ocho euros. El equivalente a dos visitas. Pero que permite entrar cuantas veces quieras… ¿No saldríamos ganando todos? Los ciudadanos, que accederíamos más, el museo, que tendría una mayor vitalidad, y la cultura, que recibiría un cierto impulso. Ahi queda.

Y por supuesto, reiterar a la dirección y empleados del Museo Goya – Colección Ibercaja por su invitación y por la extrema amabilidad y paciencia de la que hicieron gala durante la visita.

Autorretrato con pequeña y coqueta escultura de un autor que, sinceramente, no recuerdo.

Autorretrato con pequeña y coqueta escultura de un autor que, sinceramente, no recuerdo.

[Fotografía / arte] Algunas exposiciones y un tranvía

Arte, Fotografía

En estos últimos días, el principal motivo de curiosidad de los zaragozanos que pasean por el centro son las pruebas del tranvía sin catenaria. Un par de unidades de los tranvías de Zaragoza están haciendo pruebas entre la plaza de Paraíso y la de España, mientras van avanzando las obras de la línea que terminará de atravesar la ciudad de norte a sur. La novedad de esta ampliación de la línea del tranvía es que en determinados tramos no necesitará catenaria para adquirir la energía eléctrica necesaria para alimentar sus motores. De esta forma, no es necesario realizar esta instalación, con el abaratamiento de costes y la mejora estética para el centro de la ciudad. A cambio, al llegar a las paradas, las unidades del tranvía se cargarán de energía mediante unos patines que se conectarán a unas placas metálicas entre los raíles de las vías. Esta energía será suficiente para llegar hasta la siguiente parada donde repetirán el proceso. Dicen que es uno de los sistemas más innovadores en este tipo de transporte público.

Pero si algún curioso pasa por la plaza de Paraíso de camino a curiosear las pruebas, sugiero una parada en el Paraninfo de la Universidad de Zaragoza, donde se expone la obra de un fotógrafo alemán afincado en la ciudad, y que estuvo en activo en el primer tercio del siglo XX. Se trata de la exposición Art-Studio Gustavo Freudenthal, Zaragoza 1906-1930. Este fotógrafo, Gustav Freudenthal, casado con una española y establecido en nuestra ciudad, tuvo un estudio fotográfico dedicado fundamentalmente al retrato, al mismo tiempo que durante buena parte de este período y hasta la llegada de los nazis al poder fue cónsul honorario del Reich Alemán en la ciudad. Los retrato que hacía Freudenthal no me parecen especialmente innovadores para la época en que desarrolló su actividad. Atascado en el pictorialismo en una época en la que esta tendencia estaba superada en fotografía, no se puede negar de todas formas su cuidada técnica y atención al detalle, y el innegable valor de sus obras como testimonio de la época. Como curiosidad, como cónsul honorario alemán atendió la llegada a Zaragoza para impartir unas conferencias del premio nóbel Albert Einstein, de quien se conserva un retrato realizado por Freudenthal.

Por la fragilidad del archivo original, las obras expuestas son reproducciones realizadas con cámaras digitales de los originales. Pero se agradece la fidelidad en la presentación que han mantenido los organizadores de la exposición.

Tranvía en pruebas sin catenaria en plaza de Aragón

El tranvía en pruebas en la plaza de Aragón; al fondo, el edificio del Paraninfo donde se celebra la exposición de Gustavo Freudenthal.

Por otro lado, recientemente se ha abierto una nueva exposición de importancia en la Lonja de Zaragoza, en combinación con el Museo Ibercaja Camón Aznar. Se trata de la exposición Durero – Rembrandt – Goya, dedicada a los grabados y estampas de tres maestros de la pintura mundial; Alberto Durero, Rembrandt y Francisco de Goya. El grabado y la estampación no son técnicas que tengan la misma popularidad ni vistosidad que otras técnicas pictóricas como puedan ser el óleo, el fresco, etcétera. Pero indudablemente la exposición que tenemos entre nosotros hasta principios de septiembre es de primer nivel y por lo tanto de obligada visita para todo aquel que decida desasnarse un poco en cuestión de arte. Así que nada, ya sabéis. A ello.

Monumento a Goya ante la Lonja

Francisco de Goya en su monumento ante la Lonja, una de las sedes de la exposición comentada.