Ayer terminó carnaval y hoy, para los cristianos, comienza la cuaresma. Tiempo de abstinencia y arrepentimiento. Supongo que de las muchas cosas que se tienen que arrepentir los cristianos. Pero hoy, los zaragozanos, si el tiempo no lo impide, celebraremos la Cincomarzada, que como su nombre indica cae cada año el cinco de marzo. Fiesta liberal por excelencia, en el que se conmemora la revuelta ciudadana contra un intento de invasión de las tropas tradicionalistas durante la Primera Guerra Carlista. Prohibida, como es lógico imaginar durante los tiempos de la dictadura, en las últimas décadas ha arraigado de nuevo en las costumbres de la ciudad. Luego saldré a ver que se cuece. Pero de momento os dejo con fotos del carnaval infantil, en la Calle Alfonso y Plaza del Pilar, de este domingo pasado.
Mes: marzo 2014
[Cine] Philomena (2013)
CinePhilomena (2013), 28 de febrero de 2014.
En vísperas de la gala de los óscars, ya comentada de una u otra forma, se estrena en Zaragoza, versión original incluida, una de las nueve candidatas, número claramente excesivo, al premio gordo de la Academia de Hollywood. Que además viene avalada por la dirección de Stephen Frears, y las interpretaciones de la prestigiosa Judi Dench así como del también guionista Steve Coogan.
Nos cuenta cómo, tras dejar su puesto en el departamento de comunicación del gobierno británico por un escándalo político, el periodista Martin Sixsmith (Steve Coogan) mientras decide por donde encaminar su futuro profesional accede a investigar el paradero del hijo de Philomena Lee (Judi Dench; Sophie Kennedy Clark de joven), una anciana irlandesa que en su adolescencia fue separada en contra de su voluntad de su hijo por las religiosas católicas del centro donde estuvo internada como consecuencia de su embarazo fuera del matrimonio. Esto les llevará a ambos a realizar un periplo por Irlanda y Estados Unidos para averiguar qué pasó y qué fue del hijo de Philomena Lee.
Película sin muchas complicaciones que nos cuenta una «historia de interés humano», en la que hay una crítica, no especialmente incisiva, hacia las actitudes de la iglesia católica en relación con el tráfico de niños en adopción en la Irlanda de los años de posguerra. La película está interpretada con el oficio que caracteriza a los veteranos intérpretes británicos que en ella trabajan.
Siendo una película razonablemente visible, me parece bastante blandita dado los temas que tratas. Estando de fondo el tema del tráfico de niños y bebe a cambio de dinero por parte de instituciones religiosas presuntamente caritativas, opta por una historia amable de buenos sentimientos y pocas consecuencias. Se deja ver, como digo, pero no me parece que esté a la altura de una seria candidata a premios de importancia. Los personajes son reales.
Valoración
- Dirección: ***
- Interpretación: ****
- Valoración subjetiva: ***
[Cine y fotografía] Algunos obituarios, un breve sobre los óscars y fotómetros y cámaras de antaño
Cine, FotografíaCon mi leve faringitis y el mal tiempo, el sábado tocó quedarse en casa, y como algunos quizá ya sabréis lo dediqué a un artículo sobre fotómetros de antaño que publiqué en De fotos y cámaras fotográficas, el lugar donde hablo de estas cosas técnicas fotográficas.
Pero para quien no quiera meterse tanto en la cosa técnica, dejo aquí algunas fotos de los aparatos con los que estuve trasteando. Pertenecieron al padre de un amigo mío, y algunos son diseños de finales de los años 30 del siglo XX.
Pero mientras han pasado otras cosas. Y entre esas cosas es que se nos han muerto un par de directores de cine. Muy distintos eso sí.
Por un lado con poco más de 50 años de edad falleció la directora y guionista española Dunia Ayaso (1951 – 2014), que funcionaba en pareja con Félix Sabroso. Se pusieron relativamente de moda desde finales de los años 90 con un tipo de comedia petarda que atraía al público joven, aunque desde mi punto de vista con una repercusión social y artística moderada. No estoy al tanto de su trabajo en el terreno de las artes escénicas donde también desarrollo labor. En cualquier caso, una pena que desaparezcan creadores en plena edad productiva. No andamos sobrados de ideas y propuestas en el cine español como para ir perdiendo efectivos.
Y por otro lado, hemos dicho adiós a Alain Resnais (1922 – 2014), director francés realmente innovador, encuadrado en La nouvelle vague, que aunque fallecido a una edad ya muy provecta, ha estado trabajando hasta sus últimos años. Su obra es diversa, con ese punto álgido en el puente entre los 50 y los 60 en el que nos dejó dos obras tan especiales como Hiroshima, mon amour y la muy personal y compleja L’année dernière à Marienbad. Quizá sea una buena excusa, el homenajear a este director, para revisitar alguna de sus obras.
Todo ello en el entorno temporal de la entrega de los óscars correspondientes a la generación del 2013, sobre la que me extendí ayer, sin que tenga gran cosa que añadir. En las categorías que consideré comentar, pues decir que sólo he coincidido con el criterio de los votantes académicos en el premio a la mejor actriz. Insistir en la catástrofica visión de los distribuidores y exhibidores españoles que todavía no nos han permitido ver por vías «legales» una película con tres premios como es Dallars Buyers Club. Y que según las fotos que he podido ver de la alfombra roja, Jennifer Lawrence no se ha llevado su segunda estatuilla consecutiva, pero sigue pareciendo la más guapa y simpática del cotarro, así como la más patosa. Sin duda.

La baquelita está quebrada y necesita una limpieza de las partes metálicas, pero funciona. Aunque no puedo garantizar su nivel de precisión.

Con un poco de paciencia, conseguí una imagen del interior del visor, donde está la aguja que nos guía a la hora de medir la luz de forma correcta.

Sin embargo, este Sekonic Auto Leader Mod. 38 puede tener ya su célula de selenio agotada. Un pena, porque es bonito, y muy capaz. Se puede ajustar para sensibilidades de película de hasta 12800 ASA (no ISO, que en los año 50 no existía ese estándar, pero que es equivalente, más o menos).

Quizá el aparato más interesante fue este Weston Master II, que salió al mercado en 1939, y que perteneció a una prestigiosa estirpe de fotómetros. Ansel Adams consta que usó uno de estos en ocasiones.

También trasteé con un par de cámaras. Como esta Zeiss Ikon Ikonta, mismo nombre que una de formato medio que poseo. Pero esta es para película perforada de 35 mm. Para no confundirse, sus sucesoras recibieron el nombre de Contina. Mientras que las versiones más sofisticadas, con telémetro y fotómetro eran las Contessa. De estas últimas también tengo una. No he conseguido que funcione esta Ikonta 35. El disparador está atascado. No la quiero forzar.

Y la que confiaba que funcionase es esta Konica Eye 2, camara de medio formato, negativos de 24 x 18 mm, similar a mi Canon Demi EE17. Las diferencias con esta es que no tiene modo manual mecánico. Es automática y necesita pilas para hacer funcionar su electrónica. Y aunque le he puesto una pila nueva, no ha funcionado. Sus circuitos no deben funcionar. Mala suerte.
[Cine] La tarde de los óscars,… y no especialmente emocionado
CineEsta tarde noche, hora de la costa del Pacífico en Estados Unidos, se entregarán los óscars de la 86ª edición de los premios de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de los Estados Unidos, correspondiente a la generación del 2013. Para quienes somos amantes del séptimo arte, esta debería ser la fiesta mayor. Pero no es así. O muchas veces no es así. Por lo menos para mí.
Hay una cosa que con el tiempo he comprobado que me condiciona notablemente. Independientemente de la calidad técnica o cinematográfica de las películas, si no me llegan, si no me emocionan, si no me dicen algo distinto, no permanecen en mi imaginario personal. Y sucede que hay años en los que se acumulan en estos premios películas de estas características, y otros que no. Que aparece como una gran sequía. Ya digo. Eso no quiere decir que «objetivamente» no haya buenas películas. Sino que no me llaman la atención, y causan mi desapego. Esto ha venido a suceder en esta ocasión.
He visto todas menos una de las producciones que optan al premio a la mejor película. No he comentado por aquí todavía Philomena. Es cosa de un par de días. Podría resolver lo de verlas todas. Aunque Dallas Buyers Club no llegará a la cartelera hasta mitad de marzo, está ya bastante accesible al público en general. Hace mucho que se estrenó y se editó en vídeo en su país de origen, con todo lo que ello conlleva. Hoy mismo podría verla. Todavía mantengo que es mejor ir a ver el cine a las salas de cine. Y no me importa pagar. Pero la nefasta política de distribución y exhibición en este país hace que estas convicciones cada vez sean más débiles. Cual me gustaría que ganase… No sé. Creo que de las nueve, la que más me llegó fue Nebraska. Pero no creo que gane. Entre el resto, creo que hay mucho ruido, pero pocas nueces. Propuestas técnicamente casi perfectas, exageradamente interpretadas en muchas ocasiones, pero más vacías de contenido de lo que aparentan.
Si nos vamos al apartado de mejor director estaríamos en algo similar. Es una año en el que las películas son muy de sus directores, y por lo tanto pueden ser trabajos impecables, pero con mensajes vacuos o incluso discutibles. Me vuelvo a quedar con el fino y elegante trabajo de Alexander Payne por Nebraska, aunque ya digo que no creo que se lleve la estatuilla.

La película que más me ha emocionado de las que se juegan algo esta noche viene de Bélgica, de la bélgica flamenca, y allí me voy, al beguinaje de Brujas.
Otro de los aspectos que atraen de los óscars es el glamour. Y el glamour lo dan las estrellas. Actores y actrices que nos hacen soñar, y viven por nosotros las vidas que no tenemos tiempo ni ocasión de vivir, porque sólo tenemos una y da para lo que da. Por categorías:
Actor de reparto: No tengo un favorito claro. No he visto el trabajo de Jared Leto. Así que del resto, escogería a Michael Fassbender por 12 years a slave, siendo una categoría en la que tengo claro que se han quedado sin candidatura otras interpretaciones más interesantes.
Actriz de reparto: Aquí yo le daría el oscar a cualquiera de las secundarias de August. Desgraciadamente, los responsables de la película han hecho trampa, y no han presentado a ninguna de ellas, sino a una de las protagonistas. Y por bien que Julia Roberts lo haga, me parece una candidatura tramposa y, por lo tanto, no. Del resto, creo que quien más me satisfizo fue Sally Hawkins en Blue Jasmine, que daba un excelente contrapunto a la protagonista. Aunque no parece estar en las quinielas.
Actor protagonista: No he visto al Matthew McConaughey de Dallas Buyers Club, aunque creo que este intérprete bien podría estar incluido en esta categoría por Mud, una excelente película totalmente desaparecida de estas candidaturas. Descontado este, por no haber visto la película, me quedo con otro que parece que sale con pocas posibilidades, que no es otro que Bruce Dern por Nebraska. Película que se va configurando con mi favorita, como podéis ver.
Actriz protagonista: Mi categoría favorita, la más glamourosa. Aunque en esta ocasión me produce serias dudas. Es bueno el trabajo de Dench por Philomena, algo pasado el de Streep por August,… demasiado coral American Hustle como para pensar en Adams como real protagonista,… la Bullock de Gravity no está mal, pero no me creo al personaje… Aquí sí que me pongo del lado de las quinielas, y optaré por la Cate Blanchett de Blue Jasmine. La película de Woody Allen conquista mis preferencias femeninas.
Las película cuentan historias, y las historias están escritas en los guiones, categorías importantes también donde las haya:
Guion original: Nuevamente me falta Dallas Buyers Club para tener la visión completa. Probablemente el guion más trabajado sea el de American Hustle, pero es una categoría en la que encuentro a faltar otras opciones. Sin mucho convencimiento, me quedaré con este trabajo de Eric Warren Singer y David O. Russell.
Guion adaptado: Aquí las he visto todas, y creo que tengo una favorita clara, que tampoco parece estar en ninguna quiniela. Y no es otra que aquella que nos trae los diálogos de amor y desamor entre Jesse y Celine, en la estupenda Before Midnight, y que firman Richard Linklater, Julie Delpy y Ethan Hawke. Aunque me ha sorprendido verlo como «adaptado». Creía que era un guion original para el cine.
Entre las categorías técnicas, la única que comento es la mejor dirección de fotografía, y aquí lo tengo muy claro. Aquí me quedo con el estupendo trabajo de Bruno Delbonnel en Inside Llewyn Davis, una película que merecería más consideración, aunque los cinco candidatos tienen excelencia en este apartado.
Y dejo para el final la categoría que creo que puede proporcionarnos la «real» mejor película de la noche. Aunque sólo he visto tres de las cinco candidatas a mejor película de habla no inglesa, he de considerar que las tres han conseguido algo que apenas han intentado las nueve candidatas de habla inglesa. Transmitirme una auténtica emoción a la vez que ser de excelente factura. Tengo que elegir una de ellas y optaré por la belga The Broken Circle Breakdown, la película que más poso y más cosas me ha dicho en el último año, o por lo menos durante la temporada de exhibición de las películas candidatas a premios. En mi humilde opinión, la mejor película de las que optan a algún premio y que yo haya visto. Y esta si que parece estar en algunas quinielas. Quizá con esta película coincida en algo con los premios que realmente se concederán esta noche, aparte actriz protagonista y tal vez guion original. Quien sabe.
[Fotografía] Recomendaciones semanales; algún clásico, algún clásico moderno, y algo de fotografía urbana actual
FotografíaSi mis recomendaciones semanales fotográficas suelen ser los domingos, en esta ocasión lo adelanto al sábado ya que mañana es día de cine. Por la tarde, hora de California, en la madrugada del domingo al lunes para los íberos, se entregarán los oscars, así que la mañana del domingo la dedicaré a comentar la jugada.
Esta semana tampoco tengo mucho seleccionado. Lo cierto es que ha sido una semana con mucho trabajo, con muy poco tiempo libre, y no he prestado mucha atención a mis fuentes tradicionales de información fotográfica. Pero alguna cosa hay.

Hace un tiempo tuve la sensación de que algo no iba bien con la Fujifilm GS645S, ya que los carretes no quedaban correctamente rebobinados y se velaban parcialmente los fotogramas. Decidí investigar el problema.
Algunos clásicos. O clásicos modernos.
En Sales de Plata, el excelente blog español dedicado a la fotografía con película tradicional, nos recuerdan a Margaret Bourke-White, fotógrafa nacida en el Bronx que podemos considerar una auténtica pionera en muchos aspectos, y que nos ofrece imágenes de gran calidad, tanto por su técnica, por su composición, como por el interés de sus contenido y las historias que nos cuenta.
Si hay un maridaje clásico entre disciplinas artísticas ha sido el de la fotografía y la música de jazz. Son muchos los ejemplos que se pueden poner. Pero esta semana, en Lens de The New York Times nos traen las fotografías de Aram Avakian, que harán las delicias de los aficionados a las dos artes. Avakian es más conocido como director y montador de cine, donde también estuvo relacionado con el mundo del jazz.
En aCurator nos hablan de una editorial, Minor Matters, cuyo objetivo es reeditar libros de fotografía tal vez con carácter minoritario pero interesante. Publican el libro una vez que alcanzan un número de al menos 500 compradores comprometidos a adquirirlos. Y en la entrada lo ilustran con el interesante trabajo de Larry Fink, un fotógrafo del que ya os hablé hace un tiempo en la páginas de Fotógraf@s en Zaragoza, a propósito de una exposición aquí en esta ciudad.

Me di cuenta que quizá no era problema de la cámara sino despiste mío, que no devolvía los ajustes de sujeción del carrete de la cámara a su posición correcta. Así que decidí hacer un rollo de prueba con Ilford XP2 Super.
Entrando ya en la fotografía más contemporánea podemos tener las siguientes recomendaciones.
Expone en Nueva York la fotógrafa Amy Arbus, hija de la célebre Diane Arbus, pero que ha procurado siempre diferenciarse del trabajo de la madre. Y en L’Oeil de la Photographie nos traen algunos ejemplos de sus serie On the Street, 1980-1990. Un trabajo que de alguna forma se adelantó a la moda actual de algunos blogers que se dedican a en la calle a las gentes con atuendo que pueden marcar tendencias o singulares en el ámbito del estilismo o la moda. También aparece alguna celebridad.
Si nos mantenemos en Nueva York, tenemos una nueva exploración de la ciudad y las gentes en sus calles en el trabajo de Erica Simone. Pero en esta ocasión es ella misma quien provoca la reacción de las gentes, o la que provoca la reflexión del espectador al situarse desnuda en la escena realizando actividades cotidianas. Otra forma de concebir el autorretrato. También nos lo mostraron L’Oeil de la Photographie.
Y finalmente, seguimos con la exploración de la ciudad desde otros puntos de vista. En esta ocasión Dave Jordano nos traslada a la atribulada ciudad de Detroit, semiabandonada por sus habitantes tras la crisis industrial del sector del automóvil. Se centra sobre todo en las perosnas que siguen ahí, manteniéndose en una ciudad que busca reinventarse y sobrevivir. También en un artículo de L’Oeil de la Photographie.
Ya que estamos en vísperas de la fiesta del cine, PetaPixel nos lleva al trabajo de Chuck Close realizado para Vanity Fair en el que utiliza una cámara para película instantánea de 20 x 24 pulgadas, para hacer retratos directos y honestos de las gentes del cine. No están mal, aunque no es una técnica a la alcance de cualquiera.
Finalmente, recomendar el cuarto número de la revista Impresiones de la Fundación Foto Colectania, que nos trae el trabajo de Xavier Ribas, en su particular homenaje al ibérico dominguero.

Quedo expuesto sin ningún problema. Expuesto a un IE 200, con revelado casero en Rodinal 1+100, sorprende la nitidez de los negativos y la ausencia de grano. Las imágenes fueron tomadas el 2 de febrero, cerca de casa, en el Parque de la Memoria y en los alrededores de las Terrazas de Cuellar y el Paseo del Canal. El tamaño del archivo una vez escaneado es de más de 32 megapíxeles, por lo que permite ampliaciones notables, sólo limitadas por el eslabón más débil de la cadena, que es el escáner.














