Good luck to you, Leo Grande (2022; 45/20220907)
El principal atractivo de esta película dirigida por Sophie Hyde, de quien no recuerdo haber visto nada previamente, es el papel protagonista de Emma Thompson, una actriz que hace ya varias décadas admiro por su buen trabajo actoral, lleno de honestidad. Y por este motivo, su calidad interpretativa, y no por su cacareado desnudo integral que, como gesto, tiene la importancia que le queramos dar dentro del mensaje general de la película, reivindicando la sexualidad activa de las mujeres mayores. Pero también nos generaba algunas dudas la sinopsis que habíamos leído de la película en alguna parte.

Aunque no es una adaptación teatral al cine, lo parece. Escenarios limitados. En la práctica dos de ellos, una habitación de hotel que lo es en un elevado porcentaje del metraje, y una cafetería. Y una película mucho más basada en diálogos que en acción. Una profesora de religión en un colegio de chicas (Thompson), viuda desde hace dos años, se decide a contratar los servicios de un trabajador del sexo (Daryl McCormack), con el que tendrá varios encuentros en la misma habitación de hotel.
El principal activo de la película es el trabajo de ambos protagonistas, ambos impecables, y los diálogos que mantienen, que nos dejan algunas perlas conceptuales interesantes, incluso si no estás del todo de acuerdo con el mensaje que aporta la película. Esta se centra, como ya he mencionado, en reivindicar la libertad sexual, la independencia y la capacidad de decidir y vivir por sí mismas de las mujeres, especialmente cuando bien pasada su menopausia han quedado relegadas por la sociedad a papeles más bien pasivos y asexuados.

No obstante, la película no me llega del todo. El buen porte del prostituto, sus buenas maneras, su hábil conversación, otorgan una visión excesivamente glamurosa de la prostitución que, en mi opinión, no se corresponde con la realidad, incluso cuando hablamos de la prostitución para niveles adquisitivos elevados. Si bien algunos diálogos intentan bajar a la tierra sobre las vivencias del chico, queda diluidos por el mensaje principal. La prostitución sigue siendo una actividad predominantemente femenina. Y hay mucho porcentaje de actividad en la prostitución asociada a la explotación de las personas, con riesgos importantes de alienación para las personas que la practica mas voluntariamente o menos. Por lo tanto, esa visión glamurosa de la figura del prostituto no acaba de dejarme satisfecho. En su momento, hace ya muchos años, por motivos profesionales, me acerqué bastante al mundo de la prostitución. Y aprendí a respetar a estas personas, ya practiquen este trabajo por que quieren o, las más de las veces, porque se ven abocadas a ello. Pero lo que nunca he conseguido respetar, y el tiempo no mejora la situación, es a las personas que se aprovechan de ellas. Incluidos los clientes. Y por eso la película me dejó incómodo, preguntándome si esta era la mejor forma de mandar el mensaje positivo que se plantea.
Valoración
- Dirección: ***
- Interpretación: ****
- Valoración subjetiva: ***
