[Breve con foto – TV] Archer, ¿agente secreto?

Televisión

En el repaso que hice hace un par de días de temporadas de series televisivas que he terminado de ver recientemente, me dejé una en el tintero. La segunda temporada de Archer. Reconozco que si bien la primera temporada sólo me despertó alguna sonrisa de vez en cuando, la segunda, que terminó el martes pasado en Canal+, me ha divertido bastante más. Creo que todos los absurdos personajes de esta imposible agencia de espionaje han aportado su granito de arena a esta diversión. El cachondeo, el sexo absurdo, el politiqueo todavía más absurdo, el reírse de los tópicos del género jamesbondiano ha estado más conseguido. Y yo me he divertido. A esperar la siguiente temporada de esta serie recomendada sólo para audiencias adultas entre otras cosas por su actividad sexual explícita. ¡Pero si son dibujos animados! Y de verdad. No es para tanto. Que ni siquiera sacan el dibujo de un pezón.

Arche de la Defense

La Defense de París; París es la sede de ODIN, la organización de espionaje rival de ISIS, a la que pertenece Archer y cuya sede está en Nueva York (Panasonic Lumix GF1, G 20/1,7 ASPH).

[Breve – foto] Russia Irina Popova | La Lettre de la Photographie

Fotografía

Russia Irina Popova | La Lettre de la Photographie.

En estos días, La Lettre de la photographie se está dedicando a las exposiciones asociadas a Photoquai, certamen bienal de fotografías del mundo, que se celebra en el Museo del Quai Branly de París. Hasta el momento había visto cosas que me habían gustado más y otras menos, pero sin impresiones notables. Pero hoy nos proponen la fotógrafa rusa Irina Popova, y su historia de la familia de la pequeña Anfisa, una niña de dos años, hija de dos drogadictos en San Petersburgo. El reportaje completo en la página de la fotógrafa.

[Fotografía] Charles W. Cushman, fotógrafo aficionado

Fotografía

He llegado hasta las fotografías de Charles W. Cushman a través de un tweet de FotoDNG. Este era un retuiteo de un tweet de CalidaDigital, y a su vez me dirigía al diario británico Daily Mail, que ha publicado una colección de fotografías en color tomados entre 1941 y 1942 por Cushman. El mérito de las fotografías es triple. Por un lado, documentan de forma espléndida el Nueva York de la época. Por otro lado, son fotografías en color, tomadas con película Kodachrome, la cual todavía estaba en sus inicios y era muy cara. Finalmente, Cushman es un fotógrafo aficionado. Un tipo que en sus viajes de trabajo o personales, cargaba siempre con su cámara encima y documentaba lo que veía. Y chico. Me siento vinculado a este individuo. Es algo que me gusta hacer a mí también, como quienes sigan este Cuaderno de ruta sabrán.

Puente en la desembocadura del Severn

Al igual que al personaje protagonista de la entrada de hoy, me gusta documentar el mundo que veo cuando viajo; como el largo puente en la desembocadura del Severn, en un desplazamiento entre Cardiff, Gales, y Wells, Inglaterra (Fujifilm Finepix F10).

Le he denominado fotógrafo aficionado… y he dudado mucho al respecto. Ya descubrí hace tiempo que era más sencilla mi vida diciendo que soy «aficionado a la fotografía» en lugar de «fotógrafo aficionado». Parece ser que muchos profesionales andan muy sensibles por el impacto que la fotografía digital ha producido en sus negocios, y sienten que el intrusismo de los «fotógrafos aficionados» les está afectando negativamente. Como no deseo inmiscuirme en los asuntos que no son míos, y para poner un poco de distancia en estas cuestiones, prefiero pues aplicarme la etiqueta de «aficionado a la fotografía». Que además me permite encuadrar otros aspectos de la afición, como ir coleccionando libros de fotografía y fotógrafos, asistir a exposiciones, y formarme en los aspectos estéticos y documentales del medio tanto como sujeto activo detrás de la cámara como pasivo ante la obra de otros.

Pero Charles W. Cushman era una persona de otros tiempos, evidentemente un sujeto afortunado, con un buen nivel socioeconómico, que le permitía tener un buen equipo fotográfico, y apuntarse a la fotografía en color cuando muy pocas personas lo consideraban por los costes implicados. Y creo que es justo ponerle la etiqueta de «fotógrafo», aun cuando su profesión fuera otra. Pero es que su actividad fotográfica fue más allá de las imágenes que nos presenta el Daily Mail. Y es que esta persona legó su archivo de diapositivas en color Kodachrome, bien archivadas y documentadas, tomadas entre 1939 y 1969 a la Universidad de Indiana, donde estudió y se formó. Y este archivo está formado por nada menos que 14.500 diapositivas. Aunque sea aficionado, si esto no le da derecho a recibir la etiqueta de «fotógrafo» en aquellos tiempos, dígame usted… Este archivo se puede visitar en internet, actividad que recomiendo por su interés no sólo fotográfico sino histórico y documental.

Río Ebro

No sólo los sitios más o menos exóticos que encontramos en los viajes se pueden documentar; también la realidad cotidiana. Como ver a los deportistas entrenar en sus piraguas por el río Ebro en el atardecer zaragozano (Leica D-Lux 5).

Recientemente se publicaban las fotografías tomadas con el último rollo de la mítica película diapositiva de Kodak, ya fuera de producción. Este último rollo fue confiado al famoso fotógrafo de National Geographic Steve McCurry, el de la niña afgana, y el último fotograma fue tomado en el cementerio de Parsons (Kansas) donde se encuentra el último laboratorio en admitir para revelado los rollos de esta especial emulsión fotográfica. Y el tema me ha hecho reflexionar sobre una cuestión que periódicamente encuentro en la red. ¿Perdurarán los archivos digitales actuales como perduraron los carretes de negativos y la diapositivas de otras épocas? ¿O se perderán en forma de señales electromagnéticas indescifrables dentro de unos años en el interior de los dispositivos de almacenamiento de datos?

Personalmente he tomado la decisión de ir generando libros de fotografías con aquellas que me parecen más significativas, o me apetecen sin más. Para que además de los archivos digitales haya copias físicas en papel susceptibles de ser contempladas. No sé que será de ellas el día que yo ya no esté. Pero eso será responsabilidad de otros. Pero quizá, las mías, o más probablemente las de otros más dotados que yo, sean en un futuro dignas de ser guardadas en archivos que ayuden a preservar la memoria visual del mundo.

Música recomendada

Como ya sucedió en otra ocasión, me vuelve a la cabeza y tarareo el Kodachrome de Paul Simon.

Kodachrome
They give us those nice bright colors
They give us the greens of summers
Makes you think all the world’s
a sunny day
I got a Nikon camera
I love to take a photograph
So mama don’t take my Kodachrome away

Chopera

Una selección de mis fotografías va a parar a mis libros fotográficos. Ahora estoy preparando la selección del correspondiente al segundo cuatrimestre de 2011, en el que se encuentran los paisajes de las choperas cerca de Casetas, Zaragoza (Canon EOS 5D Mk. II, EF 85/1,8 USM).

[Breve – CineTren] Lo prometido es deuda, y «La deuda» pasa a engrosar la lista de CineTren

Cine, Trenes

Como comentaba ayer en la reseña de La deuda, he incluido esta película en la lista de películas del cine en la historia del ferrocarril. Con el enlace directo a la reseña ampliada ferroviaria.

ICE en Museum Insel

En tiempos más modernos que los de la película, los trenes de alta velocidad cruzan por entre los museos de Berlin Mitte (Pentax *ist DS, SMC-A 50/2).

[TV] Finales de temporada: ciencia ficción, fantasía y humor,… todo mezclado

Televisión

Se acerca el final del verano. Y con él, van llegando a su fin algunas series de televisión de las que se ha podido disfrutar, más o menos, durante los meses de calor. En los últimos días, han terminado temporada tres de ellas. Muy distintas. Las tres tienen un componente de ciencia ficción o fantasía. Y humor. Que no falte. Por lo menos en dos de ellas. Os lo cuento.

Torchwood: Miracle Day

De las tres es la que más ciencia ficción maneja, y menos humor. Aunque tiene sus puntitos; que algo le tenía que quedar de su origen como spin off de Doctor Who. Tras la evolución de la serie  que ya comenté hace un año aproximadamente, el instituto clandestino británico encargado de proteger la tierra de agresiones alienígenas, quedaba reducido a dos integrantes. El inmortal Jack Harness (John Barrowman) y las dinámica policía galesa Gwen Cooper (Eve Myles). Y sin instalaciones desde las que actuar. Pero de repente sucede algo milagroso. En el mundo, deja de haber muertes. Lo que levanta las sospechas de algunos agentes de la CIA. Que acabarán como compañeros de la pareja de Tochwood. Hay que descubrir lo que pasa y restaurar la normalidad.

Como he leído en algún sitio, en esta temporada hemos visto como nacía una distopía. Sobre la base de un hecho aparentemente positivo, la inmortalidad de los seres humanos, se va construyendo una sociedad con una ética torticera, distorsionada, y muy deshumanizada. Y esto es básicamente interesante.

En su conjunto, la temporada de 10 capítulos ha sido interesante, pero quizá excesivamente larga. Y no siempre han encajado bien los estilos de hacer de los británicos «torchwoodianos» con los americanos de la CIA. En cualquier caso, entretenida. Veremos cuando nos anuncian si siguen y cómo siguen.

En la cima de Mount Snowdon

En homenaje a esa galesa de armas tomar que es la Gwen Cooper (Eve Myles) de Torchwood, hoy acompaño con una serie de imágenes de tierras galesas. Por ejemplo, de la cima del Mount Snowdon, al norte del país céltico (Canon EOS D60, Tokina AT-X Pro 12-24/4).

Futurama – 6ª temporada

Por que sea un cachondeo y de dibujos animados, no vamos a quitarle el calificativo a esta divertida serie de «ciencia ficción». Tiene muchas más referencias a la ciencia, tanto la real como la de ficción, como los más sesudos productos del género. Y encima sigue siendo muy divertido seguir las andanzas de Fry, Leela, Bender, el profesor Fansworth, Amy Wong, Hermes, Zoidberg, y demás. Es cierto que quizá no tenga la frescura de las primeras temporadas, pero en cualquier caso es una buena excusa para 20 minutos de entretenimiento y cachondeo. Esperando con impaciencia el regreso.

Playas en Tenby

En la otra punta del país de Gales, en el sur, la gente pasea por las tranquilas playas de Tenby (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

True Blood – 4ª temporada

Desde luego, pasamos al terreno de la fantasía. Pero hace tiempo que me resisto a encuadrar este batibuurrillo de vampiros, hombres lobos, hadas, brujas y demás seres sobrenaturales, como otra cosa que no sea una serie de comedia desmadrada. Porque todo lleva a un profundo cachondeo y notoria hilaridad. Reconozco que esta es una de mis aficiones culpables. Ya me he planteado varias veces el dejar de ver la historia de la histérica de Soockie Stackhouse (Anna Paquin) y toda su corte de personajes naturales y sobrenaturales, pero en cualquier caso demenciales. Es cierto que salvo en algún momento puntual, las brujas de este año no han llegado a los extremos gores y excesivos que se han podido ver en las temporadas anteriores. Pero lo esencial ha estado ahí. Sangre, sexo, y tramas demenciales de relaciones entre los personajes que te hacen alucinar en chiribitas. Serie válida para dejar las neuronas en posición de mínimo gasto energético durante una hora. Y echar risas.  Porque si te lo tomas en serio, lo único sensato es dar al botón de apagado del televisor. Lo mejor sigue siendo los títulos de crédito. Y bueno, en el episodio final, la espectacular caracterización de la mema de Jessica (Deborah Ann Woll) como una traviesa caperucita roja vampírica. Seguro que todos los espectadores masculinos de las serie le han perdonado lo cargante que ha resultado ser hasta ese momento. Aunque no más cargante que la protagonista y algunos otros personajes. Pero es así esta serie. Si lo quiere lo coges y si no lo dejas.

Cementerio en la catedral de St David's

Mucha muerte, mucho muerto viviente, mucho cementerio en las series de hoy, así que me despido con las lápidas del cementerio de la catedral de St David's (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

[Cine] La deuda (2010)

Cine

La deuda (The Debt, 2010), 13 de septiembre de 2011.

Semana de transición en la que no parece haber un polo de atracción cinematográfico claro, y que nos lleva a uno de los cines del centro para ver una película de espías que suponemos entretenida, y que cuenta con el aliciente de Helen Mirren y algún otro ilustre en el reparto. Veremos a ver en lo que queda esta película dirigida por John Madden, que parece ser una nueva versión de un original israelí que no tuvo difusión práctica fuera de su país.

Sinopsis

Estamos en Israel, en 1997, y la hija de Rachel (Helen Mirren/Jessica Chastain), una antigua agente del Mossad, presenta un libro que cuenta la historia de su madre, su padre Stephan(Tom Wilkinson/Marton Csokas) y un tercer agente israelí, cuando acabaron con un criminal médico nazi (Jesper Christensen) en el Berlín oriental de la guerra fría en los años 60. Al mismo tiempo, el tercer agente, David (Ciarán Hinds/Sam Worthington), tras años desaparecido por el mundo, vuelve a Israel con una noticia que turbará las vidas de Rachel y Stephan. Esto provocará en Rachel los recuerdos de cómo fue realmente aquella operación y cuáles fueron sus consecuencias para sus vidas.

Realización y producción

Parte de la acción está situada en el mundo actual de 1997, pero una gran parte es el largo flashback en el cual Rachel recuerda como transcurrieron los hechos. La diferencia temporal, más de 30 años, hace que los personajes esté interpretados por distintos actores. En las indicaciones anteriores, el intérprete que caracteriza al personaje en su madurez está en primera posición. Sin embargo, no es una película de saltos en el tiempo. Tras la presentación de la situación en la época contemporánea, hay un largo salto atrás en el tiempo que nos cuenta la realidad de la operación llevada a cabo, y el último tramo de la película vuelve a la época contemporánea para llegar al debido desenlace.

La realización de la película no me parece que tenga nada de particular, es una realización artesanalmente adecuada con el objetivo de contar la historia, dejando el peso de la película en los intérpretes. Unos exteriores localizados en Budapest para representar el Berlín de los años 60, una iluminación lúgubre que busca señalar la atmósfera opresiva de aquel momento, y a funcionar. Como hay una cierta importancia de cuestiones ferroviarias en la trama, incluiré el filme en mi colección del ferrocarril en la historia del cine, y hay comentaré posibles deslices.

Interpretación

Como ya he señalado, la base de la película son las interpretaciones de los actores y de las actrices. No estamos ante los típicos agentes secretos de las películas al uso de espías. Estos tienen emociones, toman decisiones erróneas basadas en las emociones, y meten la pata. Y de eso trata un poco la historia, de cómo llegamos a cometer errores y cómo tenemos que lidiar con ellos. He de decir que de la interpretación esperaba un poco más. Lo cierto es que el peso de la película no lo lleva Mirren que más bien es secundaria por el tiempo que permanece en pantalla, aunque su personaje sea el principal. Junto con el del médico nazi que es el otro personaje importante de la película. Más que los dos muchachotes que acompañan a la chica. Porque es la chica, Jessica Chastain, quien lleva realmente el peso dramático de la historia. Globalmente no lo hacen mal, pero tampoco consiguen llegar a producir el impacto emocional necesario para que esta historia se convierta en una gran historia. El resultado queda un poco frío.

Conclusiones

Mentiría si dijera que me he quedado con ganas de ver el producto original. La historia no me ha llamado la atención tanto. Es una más de espías, pero con chapuzas. Hay un problema con esta película. Aunque en los comentarios que se han podido leer por ahí no te cuentan la película, lo cierto es que no hace falta ser un lince para saber por donde van a ir los tiros a partir de los mismos. Por lo tanto, no hay grandes sorpresas en el desarrollo de la acción. Lo cual, en una película de acción,… pues es un problema. No obstante, es una película indudablemente entretenida, que se deja ver sin problemas, y que puede ser recomendable para pasar una tarde sin mucho romperse la cabeza.

Valoración

Dirección: ***
Interpretación: ***
Valoración subjetiva: 
***

Hackescher Markt

El ferrocarril atravesando el antiguo Berlín oriental; esa es una de las situaciones que podemos ver en la película, así como las estaciones fantasmas de la época de la guerra fría (Panasonic Lumix LX3).

[Fotos] Un paseo por Cornualles

Viajes

Los negativos comentarios que realicé el sábado pasado sobre el último libro que he terminado de leer, me dejaron un dolorcillo en el alma. Quedé con la sensación de que esa negatividad se podía transmitir a la región británica en la que acontecen buena parte de los hechos; Cornualles. Sin embargo, esta parte de la Gran Bretaña es un lugar muy recomendable para ser visitado. Tuve la oportunidad de hacerlo hace cinco años en un viaje que me llevó también a Gales y a otras comarcas inglesas. Para compensar cualquier posible mala sensación, os dejo con algunas imágenes del lugar.

Mount St. Michael desde Marazion

Aunque mucho más modesto que su equivalente francés, también en contramos un Mount St. Michael, al que principalmente se llega en barco, salvo cuando la marea está realmente muy baja (Fujifilm Finepix F10).

Desde Marazion a Mount St. Michael

Barcas motoras que unen Marazion con el Mount St. Michael (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Casitas en la isla del Mount St. Michael

Lejos de un aspecto tétrico, las casitas tiene un aspecto pulcro y aseado, como estas del puerto de Mount St. Michael (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

La costa desde el Teatro Minack en Porthcurno

Cerca de Porthcurno, paseamos sobre las calas y los acantilados de la costa sur de la península de Penwith (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Acantilados en Land's End

Uno de los lugares más visitados son los acantilados de Land's End, o sea, el "finisterre" inglés (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Dolmen en la península de Penwith

En la península de Penwith encontramos numerosos ejemplos de monumentos megalíticos (Fujifilm Finepix F10).

Tintagel (población no visible por la niebla)

Cuando llegamos a Tintagel, en cuyo castillo dicen las leyendas que nació el rey Arturo de Bretaña, una densa niebla nos sale al encuentro (Fujifilm Finepix F10).

[Breve – foto e historia] Bill Biggart: Photographer

Fotografía, Historia

Bill Biggart: Photographer.

En otro orden de cosas, parece que se considera que sólo un fotógrafo profesional murió en los atentados del 11 de septiembre de 2001. Siempre es difícil saber eso, ¿no? En cualquier caso, cuando se encontró el cadáver de Bill Biggart, se encontraron también sus cámaras de fotografías con los carretes y las tarjetas de memoria que contenían las imágenes que había impresionado en los minutos anteriores a su muerte en el derrumbe de las torres. En el enlace que os he dejado, se pueden ver. 20 minutos antes de morir llamó a su mujer diciéndole que no había peligro, que «estaba con los bomberos».

Via: Caborian.

[Breve – foto e historia] Sudden Journeys: September 11th 2001: Through My Lens

Fotografía, Historia

Sudden Journeys: September 11th 2001: Through My Lens.

En los medios hemos podido ver durante la pasada década, y especialmente en estos días de conmemoración, muchas imágenes sobre los atentados del 11 de septiembre de 2001 en Nueva York. Pero estas que propongo ahora tienen la particularidad de estar domadas por una particular, aficionada a la fotografía, que salió a la calle a ver que pasaba, y se llevó su cámara de fotos.

Vía: Caborian.

[Deportes] Y una pena lo de los «red dragons»…

Deporte

Sigue la Copa del Mundo de Rugby 2011. Dos partidos he visto este domingo por la mañana. Os cuento.

El primero,… bueno, estaba incluido en la selección de partidos que incluyen a los equipos del tres y seis naciones y Argentina. Pero no tenía mucha confianza sobre las posibilidades de que fuera emocionante. Se trataba del Australia – Italia. La selección de los wallabies me parecían a priori mucho más potentes que los azzurri. Y así ha sido. Los italianos han puesto ilusión y a base de esfuerzo, han mantenido el partido igualado hasta entrado el segundo tiempo. Pero cuando han empezado a flojear, han ido cayendo los ensayos australianos sin piedad. Es una dinámica muy propia de este tipo de encuentros en este tipo de competiciones. Pues nada. Lo previsto.

El segundo, sin embargo, despertaba mi interés. Aunque la selección de Sudáfrica aparecía a priori como favorita frente a Gales, este último es un equipo al que no le falta calidad, y los primeros no parecen haber llegado en su mejor momento. Y ciertamente el choque ha estado emocionante, con un resultado final ajustadísimo de 17-16 a favor de los africanos. Los galeses han tenido que remontar un ensayo en contra desde las fases iniciales del encuentro. Globalmente han jugado mejor que los springboks. Pero estos últimos tienen calidad potencial, y en un momento de necesidad han conseguido el ensayo que les ha dado la victoria. Los dragones rojos aún podrían haber ganado, pero han desperdiciado un drop relativamente fácil y un golpe de castigo a palos en los últimos minutos del partido. Y eso es algo que no se puede hacer en esta tipo de competiciones. Un pena. Merecían algo mejor.

Os dejo con una par de instantáneas galesas.

Embalse en Elan Valley

Embalse en Elan Valley, País de Gales (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

Puerto con marea baja - Tenby

El puerto de Tenby con la marea baja (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).

[Historia] ¿Qué hacías tú cuando… ?

Historia

Hoy es el décimo aniversario de los atentados del 11 de septiembre de 2001, que conmocionaron al mundo y que han marcado, y no poco, la historia de la primera década del siglo XXI. No pocas guerras, convulsiones económicas y acontecimientos políticos anclan sus causas a las decisiones tomadas por los líderes mundiales por aquellos hechos. Pero como son muchos los sitios que hay por ahí para leer sobre el acontecimiento y sus consecuencias, así como para ver y rememorar las imágenes que lo acompañaron, yo meditaré sobre otras cuestión. Y es que estos acontecimientos también nos sirven de ancla para muchos de nuestros recuerdos. Es la típica pregunta: ¿te acuerdas que hacías tú cuando los atentados del 11 de septiembre?

El primer acontecimiento de alcance histórico que marcó un «¿que hacías tu cuando…? en mi vida, fue la llegada del hombre a la luna. El primer alunizaje tripulado se produjo el 20 de julio de 1969, y yo estaba de vacaciones en Benicarló. Solía ir con mi familia a esta localidad costera de veraneo hasta que nació mi hermana. Y aunque difusos, porque yo era muy niño, tengo recuerdos de la expectación que se levantó a mi alrededor. Asociada a mis vacaciones en Benicarló está también el brote de cólera que se produjo en 1971 en Aragón. La prensa nacional, sometida a la censura de la dictadura, poco comentaba. Así que durante el periodo vacacional se buscaban los periódicos que traían los turistas extranjeros para ver que decía. De forma harto sensacionalista, un periódico francés «hablaba» de gente cayendo enferma por la calle Alfonso I de Zaragoza, en aquellos momentos la principal arteria comercial de la ciudad, probablemente. A mi me vacunaron, o eso dijeron, algo me inyectaron, en la Casa de Socorro del ayuntamiento, en el Paseo de la Mina.

Músicos callejeros

Músicos callejeros en la calle Alfonso I de Zaragoza. Ni entonces ni ahora cae enferma por dicha calle la gente, entonces concurrida por los zaragozanos de compras y hoy más por los turistas que visitan la ciudad (Panasonic Lumix GF1, Leica DG Macro-Elmarit 45/2,8).

Los siguientes acontecimientos históricos que marcaron recuerdos en mi vida fueron las muertes de los jerarcas de la dictadura. Primero fue el asesinato de Carrero Blanco, en diciembre de 1973, del que tengo recuerdos difusos. De haber vuelto, deprisa a casa con otros compañeros del colegio, sabiendo que algo grave había sucedido, pero sin capacidad para medir el alcance, ni para identificar la naturaleza del político asesinado. Todavía era muy joven. Pero todo estuvo ya muy nítido y diáfano cuando la muerte de Franco. Recuerdo haberme levantado pronto por la mañana para ir al colegio, bajar a comprar el pan y la leche, como hacía todos los días, y escuchar a mi madre debatir consigo misma sobre la oportunidad de dejarme salir hacia el colegio. Se suponía que no iba a haber clase, pero nada habían mencionado al respecto en la televisión y en la radio. Sólo marchas militares. Así que cogí la cartera y salí. No pasé de la avenida de San José, cuando alguien nos dijo a mí y a un compañero que vivía cerca y con el que me encontré, que mejor nos volvíamos a casa. Como mi madre me había advertido que ante cualquier cosa «rara» me volviese, me volví. En los años siguientes fueron diversos los momentos de anclaje histórico de mi memoria, fundamentalmente asociados a las convulsiones de la transición y a los principales procesos electorales y referendos.

A ver si os enteráis ¡a 20!

No tenía este aspecto la avenida de San José en 1975. Todavía circulaban los tranvías, aunque no llegaban tan arriba (Leica D-Lux 5).

Por supuesto, el gran acontecimiento histórico que da lugar al consabido «¿qué hacías tú cuando… ?» fue el intento de golpe de estado del 23 de febrero de 1981, del que se ha conmemorado este año el 30º aniversario. Me pilló a mí en la adolescencia tardía, cursando COU. Y de forma inopinada pasamos con algunos compañeros y compañeras de clase la tarde después de las horas lectivas en la plaza de los Sitios, ya que aun estando en febrero, recuerdo que el día fue agradable. Así que nos demoramos algo por allí, merendamos algún bocadillo y luego cansinamente nos fuimos a casa. Cuando llegué, mi madre me echó la bronca. Que dónde había estado con lo que estaba pasando y esas cosas. Yo no tenía ni idea de nada. Lo cierto es que en esos momentos en la calle no se notaba nada. O por lo menos yo no lo noté. Tal vez habría menos gente por la calle, pero no me di cuanta. Iba pensando en mis cosas. Un adolescente.

Bellas Artes

El museo de bellas artes de Zaragoza en la plaza de los Sitios, donde nos demoramos aquella tarde de golpes de estado antes de volver a casa (Pentax *ist DS, SMC-A 50/2).

Es curioso, que durante los años de mi juventud universitaria no tengo recuerdos de grandes eventos que me marcaran la memoria. Y seguro que hubo cosas. Pero no. Tampoco cosas como la caída del muro de Berlín, me marcaron especialmente. Fue después de esta etapa, cuando empecé a trabajar, cuando empecé a tener la sensación de que si me iba de vacaciones en agosto, algo iba a pasar en el mundo. Así, en agosto de 1990, mientras nos íbamos de vacaciones a París durante casi tres semanas, el ejercito de Iraq invadía Kuwait, y cinco meses más tarde comenzaba la Guerra del Golfo. Un acontecimiento que porque se mezcló con otros aconteceres más personales que no vienen al caso, me sumió en una época de mucho pesimismo. Pero es que al año siguiente, justo cuando nos íbamos de vacaciones de nuevo por Francia, el Loira y Normandía fue el destino, se produjo el intento de golpe de estado contra Gorvachov en la extinta Unión Soviética, evento que contribuyó notablemente a la desintegración de este gigante con pies de barro. Durante unos años, cuando cogía vacaciones, me iba de viaje con aprensión. Aunque en realidad, el único acontecimiento notable fue ya en 1996 cuando el día que nos íbamos de vacaciones a Escocia, una fuerte avenida produjo la catástrofe del camping de Biescas, una localidad que visitábamos de vez en cuando y que nos hizo partir un poco mohínos.

Tours

De vacaciones en la ciudad de Tours, mientras en la Unión Soviética las pasaban canutas (Pentax P30N, probablemente con un Sigma 28-70/3,5-4,5 en las manos de MJS).

Y llegamos pues a la fecha famosa que ha dado lugar a todo este rollo. Septiembre de 2001. Llevaba yo entonces en mi actual puesto de trabajo, en Huesca, poco más de tres meses. El día 11 era martes. Y yo me quedé a trabajar un rato por la tarde. Así que a la hora apropiada, bajé a comer un bocadillo a la cafetería del centro de trabajo. Sólo estábamos la mujer que la llevaba y yo. Tenía puesta la primera cadena de RTVE. Y me quedé atónito mirando como estaban echando imágenes de una de las dos torres del WTC en llamas. Los locutores comentaban que una avión había impactado contra el edificio no se sabía nada más. De repente presencié un situación absolutamente surrealista. La cámara mostraba como un avión venía volando e impactaba contra una de las torres. Los locutores decía que estaban mostrando imágenes en diferido del choque del avión contra la torre. ¡Pero yo veía claramente como las imágenes mostraban una torre ardiendo, y el avión chocando contra la otra! Evidentemente aquello tenía que ser un acontecimiento nuevo, del que los inútiles que estaban comentando las imágenes no se estaban dando cuenta. Presencié por lo tanto en directo y por televisión el choque del segundo avión. Difícil olvidar lo que estaba haciendo en aquel momento. ¿No creéis?

WTCZ

El World Trade Center de Zaragoza, también dos torres gemelas, pero mucho más modestas de tamaño (Leica D-Lux 5).

Lo que siguió en los años siguientes estuvo nutrido de acontecimientos. Tantos, que no han contribuido tanto a fijar momentos en mi memoria. Pero estuvieron los atentados del 11 de marzo de 2004, que hicieron que viviéramos una mañana y los días siguientes pegados a la televisión y a los transistores como no sucedía desde el 23-F. Por supuesto, con las consecuencias políticas que se derivaron de aquel momento.

Memorial 11-M (Madrid-Atocha)

Memorial de los atentados del 11M en Madrid-Atocha (Panasonic Lumix GF1, G 20/1,7 ASPH).

O los atentados del 7 de julio de 2005 en Londres, que a mí me pillaron de vacaciones en Irlanda, lo que me hizo recordar aquella época en la que asociaba mis vacaciones a acontecimientos catastróficos.

Como podéis ver, existen esos anclajes a nuestra memoria que provocan los acontecimientos históricos, que nos hacen recordar con mayor precisión qué hacíamos en aquellos momentos. Aunque los expertos aseguran que también producen sesgos o falsos recuerdos. Es decir que nos parece recordar con precisión los acontecimientos históricos de los que se trata, cuando en realidad son recuerdos inducidos por las repeticiones constantes de los mismos. En la medida de lo posible, he intentado ser honesto con lo que recordaba y lo que no. Se me han quedado algún otro acontecimiento en el tintero, que me viene ahora a la memoria, como el incendio del Hotel Corona de Aragón, que sucedió un día que yo tenía que pasar por allí por un recado que me mandó mi padre, y sobre el que curiosamente siempre he tenido un problema de situación en el tiempo. Siempre tengo la sensación de que pasó un par de años antes del año en el que realmente sucedió. Y algún otro… pero bueno. Tampoco es cuestión de aburrir más con esta entrada histórico-nostálgica que he pergeñado hoy.

Cerca de Leicester Square

Justo un año después de los atentados de Londres, un 7 de julio, yo estaba en la capital británica de vacaciones (Fujifilm Finepix F10).

[Deporte] Una pena lo de los «pumas»,…

Deporte

Hoy ha sido la primera jornada de la Copa del Mundo de Rugby 2011. Ya he repasado el calendario de la fase de grupos que dura hasta el primer fin de semana de octubre. Ya he añadido a mi agenda los partidos que voy a ver si es posible. Son aquellos que involucran los enfrentamientos entre sí de las selecciones del Seis y del Tres naciones más Argentina. Todos se jugarán en fin de semana, y la mayor parte de ellos en torno a las 9 – 10:30 de la mañana hora española. Está bien.

Hoy cuando me he levantado estaba jugando Francia contra Japón, y aunque no he prestado mucha atención, me ha sorprendido ver cómo Japón se ha acercado mucho al quince del gallo en la mitad de la segunda parte. Luego, los galos se han puesto las pilas y han abierto distancias. Pero me ha quedado la sensación de que los franceses no llegan muy allá. Luego ya, una vez terminadas las tareas domésticas del sábado por la mañana, he visto un emocionante Inglaterra – Argentina, en los que los del cono sur han dominado el marcador hasta mediada la segunda parte cuando un ensayo de los de la rosa ha roto la dinámica del partido y se han adelantado y llevado los cuatro puntos. Los argentinos han sido un poco ingenuos frente a los resabiados ingleses, que se han mostrado duros y contundentes en defensa. Sin la eventual aportación de los tres cuartos, sólo con la delantera y golpes de castigo, no es suficiente para ganar a los grandes. Y encima, han fallado muchos tiros a palos. Pero también ha fallado mucho sir Jonny Wilkinson en el peor partido que le he visto en aspecto del juego.

Mañana más.

Megalitos en Stonehenge

Megalitos en Stonehenge, Inglaterra. ¿Jugarían a algo parecido al rugby aquellos británicos de hace más de 4000 años? (Canon EOS D60, EF 28-135/3,5-5,6 IS USM).