[Recomendación fotográfica] Stacey Baker, Alec Soth y el amor que perdura

Fotografía

No tengo muy claro de dónde me llegó el enlace a esta conferencia TED. Muy posiblemente, apareció de forma espontánea en las recomendaciones de Youtube en función de los vídeos que veo habitualmente, pero no estoy seguro.

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Las fotografías de hoy no se parecen a las de Alec Soth; pero alguno de los motivos por los que están hechas, pertenecen a determinadas zonas de Zaragoza, no están muy alejados de los de Soth.

Esta conferencia, una breve charla de poco más de 10 minutos con fotografías proyectadas, fue impartida por el Alec Soth y Stacey Baker, está en inglés, pero se puede configurar el vídeo para ver los subtítulos en español.

Alec Soth es un fotógrafo que nació y vive en Minneapolis, del cual tengo algunos libros y láminas de fotografías que me gustan mucho. Es un fotógrafo documental que realiza proyectos en profundidad sobre la geografía humana de los territorios en los que fija su mirada, muchos de ellos, aunque no exclusivamente, en el medio oeste americano. Al mismo tiempo, sus fotografías no dejan de tener un tono poético. En la actualidad es miembro de Magnum Photos.

Stacey Baker iba para abogada, aunque tras un tiempo de ejercicio lo dejó, y se pasó a la fotografía. En la actualidad es la editora de fotografía en The New York Times, teniendo por lo tanto la responsabilidad de decidir qué se publica y qué no se publica en cuanto a imagen gráfica en el prestigioso diario neoyorquino, cuya nómina de fotógrafos ha recibido algún que otro Pulitzer y otros prestigiosos premios. Pero también tiene otros proyectos personales; los más conocidos tienen que ver con… piernas. Piernas urbanitas.

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El vídeo nos habla de una colaboración que Baker le pidió a Soth para analizar desde un punto de vista fotográfico la naturaleza del amor que perdura. Cuáles son las características de esas parejas que permanecen juntas de por vida… convencidas de ello. Pertenezco al otro grupo, al de las personas que no han conseguido afianzar la convivencia con sus parejas, por lo que no me pronunciaré sobre el tema. Salvo quizá por una cosa que dicen. La vida es dura. Es dura para quienes no tienen una pareja estable, porque no es fácil vivir en soledad sin un compañero o compañera de fatigas. Pero es dura para quienes sí la tienen, porque no es fácil mantener vivas las razones para la convivencia. La vida es dura.

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[Libro] El vino de la soledad

Literatura

Descubrí la Suite Francesa de Irène Némirovsky hace unos años durante una estancia hospitalaria de mi padre, y a propósito de la edición de aniversario de la editorial Salamandra de algunas de las más destacadas novelas de su catálogo en formato de bolsillo. Esta gran epopeya inacabada de la Segunda Guerra Mundial me impactó mucho, y situó a la escritora apátrida de origen ruso y lengua francesa entre mis favoritas. Nos anuncian para dentro de unos meses una versión cinematográfica de esta obra que, cuanto menos, tiene un reparto interesante. Pero de momento he decidido leer otra obra de la escritora, que me pareció a priori interesante.

El vino de la soledad
Irène Némriovsky; traduciión por José Antonio Soriano Marco
Ediciones Salamandra, 2013
Versión electrónica

La novela sigue la historia de una familia, formada por una esposa de buena familia venida a menos, un esposo de la burguesía y empresariado judío dedicado a los negocios, una hija, la narradora, muy jovencita cuando comienza el relato con unos 8 años, y la institutriz francesa de la niña. Comienza el relato poco antes del comienzo de la Primera Guerra Mundial, cuando la familia en una ciudad ucraniana a orillas del Dnieper, con todas las pintas de ser Kiev. Y a lo largo de unos diez años los acompañaremos en su periplo por esta ciudad, San Petersburgo, y su exilio tras la revolución soviética, primero en Finlandia, y finalmente en París. La hija, la narradora, probablemente una alter ego de la propia novelista, carece del cariño de la madre, una mujer voluptuosa, que ante la dedicación del marido a los negocios y al juego, acaba conviviendo con un primo más joven como amantes. Y por lo tanto, siente que su única fuente de cariño y afecto es la institutriz francesa que muere finalmente en San Petersburgo, desencadenando un fuerte odio de la hija hacia su madre y su amante, buscando una venganza contra ambos cuando se presente la ocasión.

Un tranvía bajo la lluvia en Helsinki

No he pisado nunca suelo ruso o ucraniano, y tal como está el patio tampoco apetece mucho, pero sí que conozco Finlandia, la primera estación de paso en el exilio de la escritora y de sus personajes en la novela. En la fotografía, un tranvía bajo la lluvia en las calles de Helsinki. Que en la novela recibe el nombre sueco de Helsingfors.

El periplo de la familia es similar al de la propio Némirovsky en sus años jóvenes. Y parece que consta que tampoco gozó del cariño y la compañía de sus padres siendo criada por institutrices extranjeras. Por lo tanto, parece haber mucho de autobiográfico en esta novela. Una novela dura, en la que vemos crecer en una niña primero, adolescente después sentimientos fuertes de odio, contrastando constantemente la inmadurez de la joven con las actitudes envejecidas y resabiadas consecuencia de los fuertes sentimientos que la falta de afecto materno le suscitan. Conmueve y horroriza al mismo tiempo el relato, en el que te sumerges previamente, y que es una muestra más de la excelente capacidad narradora de la malograda escritora.

A mí me parece un libro muy recomendable, e indudablemente en el futuro iré leyendo alguna obra más de esta interesante escritora.

La Torre Eiffel surge entre la niebla

Y cómo no, el destino final de la escritora y su familia, y también de su familia de la novela, entre las calles de París.

[Cine] Amour (2012)

Cine

Amour (2012), 12 de enero de 2012.

Michael Haneke no es un director fácil. Pero es de los importantes. Para algunos, el más importante director europeo actual. Si descartamos los aspectos comerciales, donde difícil es competir con el cine norteamericano, eso sería como considerarlo casi uno de los primeros del mundo. No he visto todo lo que ha rodado. Pero lo que he visto nunca me ha dejado impasible. Y en general lo he considerado de bueno a muy bueno o excelente. Así que en estos momentos, después de lo mucho que me gustó lo último que nos mostró, un estreno suyo es una visita obligada a las salas de cine.

La película que os traigo hoy ha sido vista en su versión original en francés, subtitulada en español. El francés culto y pausado de los diálogos han convertido los subtítulos la mayor parte del tiempo en algo superfluo para mí, afortunadamente. En cualquier caso, se puede encontrar en la cartelera española bajo el título Amor (Amour).

Georges (Jean-Louis Trintignant)Anne (Emmanuelle Riva) son un matrimonio octogenario. Cultos, profesores de música retirados, los conocemos asistiendo al concierto de Alexandre Tharaud (persona real, músico francés que se interpreta a sí mismo en la película), uno de sus antiguos alumnos ya consagrado como concertista de piano. Su hija Eva (Isabelle Huppert), también música, vive en el mundo y se ven poco. Viven en su piso de París, de forma calmada como personas bien consideradas, asistidos en algunas cosillas por su conserjes. En un momento dado, Anne sufre un ictus, un accidente cerebrovascular, y el intento de resolver el problema quirúrgicamente no tiene éxito y queda paralizada de su lado derecho del cuerpo. Y a partir de ahí viene la historia de la evolución de esta pareja, unida por un amor realmente profundo, en la adversidad de la discapacidad y la dependencia, y sujetos a sus propios compromisos del uno hacia el otro.

Hasta cierto punto, conocemos desde la primera escena el desenlace del filme. Rodado casi íntegramente, salvo una escena en la sala de conciertos y otra breve en un autobús urbano, en el piso de los dos ancianos, Haneke va desarrollando la historia de muchas personas hoy en día, en el que el nivel de vida nos permite llegar edades avanzadas, dándose situaciones de dependencia en ancianos para las actividades básicas cotidianas. Y conocemos el compromiso del marido, por el inmenso amor y respeto que tiene hacia la esposa, conocemos los conflictos de los hijos, que tienen su propia vida que les impide salvo enormes renuncias atender a sus mayores, conocemos los problemas del cuidado profesional adecuado de estas personas, conocemos los sentimientos de rabia, frustración, depresión,… Todo ello mostrado magistralmente, sin excesos, con claridad. Y el amor entre ambos ancianos, constantemente significado en sus acciones, pero también en numerosos elementos, muchos de ellos metafóricos (la paloma, por ejemplo, los cuadros de paisajes,…) que impregnan y presiden la historia. Los espectadores salen impresionados por esta historia. Y yo salgo pensando, cómo esta historia cuando afecta a personas cultas y con recursos, y cuanto más tremenda es en situaciones de pobreza e incultura, pero potencialmente en un medio igualmente poco acogedor.

Desde luego, la gran baza del filme, que tiene muchísimos méritos cinematográficos, es la interpretación de los dos veteranísimos intérpretes. Ambos protagonistas están en estado de gracia, otorgando una realidad y una verosimilitud a sus personajes que te encoge el alma. Huppert tiene un papel menor, pero está igual de solvente. Riva,  que siempre recordaré de Hiroshima, mon amour, es candidata al óscar, aunque no se lo darán. Pero no porque no lo merezca, que probablemente está al nivel o superior a otras de las candidatas con más números para el premio, sino porque es una señora mayor, francesa y en una película no hablada en inglés con una difusión menor probablemente en los EE.UU. La precisión con la que reproduce los efectos de la enfermedad, enhorabuena por los asesores, es notable. Y Trintignant podría estar también entre los candidatos, aunque ya he mencionado los motivos por los que esto era difícil.

Una película que no es fácil. No es complaciente. Pero suscita muchas preguntas para el espectador, desde luego si es un espectador que busca en el cine algo más que un entretenimiento. Como digo otras veces, quien se acerca a las salas de cine para ingerir toneladas de palomitas con grasa y sal, que se abstenga. O que al menos considere que con todas esas toneladas de palomitas se acerca a terminar como Anne. Para los demás, una película casi imprescindible.

Valoración

  • Dirección: *****
  • Interpretación: *****
  • Valoración subjetiva: ****

Hay modificaciones en mis valoraciones de Hacia los premios Óscar 2013, que afectan a la categoría de Mejor películaDirectorGuion original y sobretodo Actriz protagonista, ya que considero que el trabajo de Emmanuelle Riva es más destacado que el de Jessica Chastain, que ocupaba hasta ahora la primera posición.

Ile de la Cité

Inevitablemente, París. Las isla de la Cité desde el Pont des Arts.

[Cine] Sesión doble: Ruby Sparks (2012) – Hotel Transilvania (2012)

Cine

Este es para mí un fin de semana largo, de puente, aunque sin perspectivas lúdico-festivas más allá de lo que eventualmente surja. Hay cosas prácticas que hacer. No obstante, lo que ha surgido ha sido la posibilidad de ir dos veces al cine en dos días. Una con los amigos, y otra con la familia, a una infantil. Os las cuento las dos.

Ruby Sparks (2012), 31 de octubre de 2012

Jonathan DaytonValerie Faris, los responsables de la curiosa e interesante Little Miss Sunshine (Pequeña Miss Sunshine), vuelven a traernos otras película con sabor a cine independiente que buscar devolvernos las sensaciones de aquella aunque con un tema totalmente distinto. Confían para ello en uno de los actores de aquella comedia-drama-road movie familiar, Paul Dano.

La cosa va Calvin Weir-Fields (Paul Dano), un joven escritor que dio el pelotazo a una edad extraordinarimente precoz con una novela que le produjo fama y fortuna, pero que le ha impedido mantener unas relaciones personales adecuadas desde entonces, especialmente con las mujeres. Y para colmo de males está en una profunda crisis creativa, que le impide escribir una sola línea. En estas estamos cuando su terapeuta el Dr Rosenthal (Elliott Gould) le recomienda que escriba en un folio algo sobre una mujer sobre la que sueña con frecuencia. Y cuando lo hace, descubre que la mujer de sus sueños se hace realidad, que se llama Ruby Sparks (Zoe Kazan) y que aparentemente es ideal. Y lo es porque es capaz de cambiar sus comportamientos o sus características simplemente tecleando con su máquina de escribir lo que quiere de ella. Aunque probablemente el asunto no sea tan ideal como parece.

La historia que nos cuenta esta película, escrita por la propia Kazan, su protagonista femenina, va fundamentalmente de dos temas, desde mi punto de vista. Por un lado, del hecho de que cuando nos enamoramos de alguien nos enamoramos muchas veces de nuestra visión idealizada de esa persona y no de la persona real en sí misma, y de que queremos poseer esa visión idealizada de la persona… lo cual frecuentemente lleva al fracaso de la relación. Por otro lado, de la aventura creativa, de las dificultades para la creación artística, y de las consecuencias del éxito temprano conseguido con un esfuerzo escaso. En el plano técnico está bien rodada, como casi todo hoy en día, y la historia se sostiene razonablemente durante la hora y tres cuartos de metraje que tiene, aunque hay algunos altibajos. Es de las que tiene un buen planteamiento, se desarrolla razonablemente hasta cierto punto, en el que empieza a dar algún bandazo, y finalmente termina de una forma un tanto previsible. Muy previsible, en realidad.

Las interpretaciones son razonablemente adecuadas por parte de los dos protagonistas. Ella juega mucho con su imagen de chica joven, que sin ser una belleza, es resulta, mona, con encanto. El es el prototipo de joven un poco lelo y asocial que tan de moda está en el cine independiente. Resulta agradable la breve presencia en la película de Annette Bening como la madre del chaval, y Antonio Banderas como escultor algo pirado que es la pareja de la madre en ese momento.

Desde mi punto de vista, este filme no alcanza el nivel ni la profundidad de la anterior película de los directores, pero es agradable de ver, y puedes llegar al final con algún tropezón pero sin problemas. No sería mi primera opción en la cartelera actual, pero sí que puede merecer una oportunidad.

Valoración

  • Dirección: ***
  • Interpretación: ***
  • Valoración subjetiva: ***

Pelirrojas. A pesar de la escasa proporción de la población que es auténticamente pelirroja, un número sorprendentemente alto de las chicas jóvenes con encanto de las películas de hoy en día son pelirrojas. Y Ruby Sparks no es una excepción.

Hotel Transilvania (Hotel Transylvania, 2012), 1 de noviembre de 2012.

Esta película no es de mi elección. Se trataba simplemente de pasar una mañana familiar con el sobrinillo, el peque de la familia, que aún no ha cumplido los cuatro años. Así que el comentario será breve. Es película de animación dirigida por Genndy Tartakovsky.

El Conde Drácula, tras perder a su querida esposa Marta, queda solo en el mundo con su pequeña Mavis y, ante la incomprensión de los humanos hacia los monstruos, decide construir un enorme castillo secreto en las montañas de Transilvania que sirva de hotel refugio para los monstruos de todo el mundo frente a la intolerancia humana. Cuando Mavis llega a los 118 años, mayoría de edad para los monstruos, se celebrará una gran fiesta con todos ellos, pero el Conde también está preocupado porque Mavis quiere conocer el mundo exterior, y aunque se lo ha prometido no quiere dejarla ir. Para ello organizará una farsa que demostrará que los humanos siguen odiando a los monstruos. Con lo que no contará es con la intrusión en el castillo-hotel de Jonathan, un joven mochilero de 21 años, entrometido, desenfadado y sin complejos, que además hará «tilín» en el corazón de Mavis.

A ver. Es fácil de resumir. Como muchísimas comedias de consumo fácil de hoy en día, una historia simplona, poco elaborada, y un montón de gags de los cuales, algunos hacen gracia y otro nos. Reconozco que me reí en unos cuantos de ellos, pero que si tuviera que calificar el guion diría que es muy pobre en su conjunto. Se puede tratar al público infantil con un poco más de inteligencia, creo. Curiosamente, en los títulos de crédito aparecen ¡¡¡cinco!!! guionistas. Parece que la inteligencia del guion está hoy en día en relación inversa al número de mentes que se aplican a la tarea.

De la interpretación diré poco. La película estaba doblada al castellano, y me pareció un doblaje horrendo, lleno de acentos regionales o extranjeros diversos, que pretenden ser graciosos pero a mí me chirrían muchísimo, y contribuyen a hacerme la cosa algo más pesada.

En fin, una película que si hay que llevar a un crío al cine pues tendrá que valer, y que se hace soportable a los adultos por alguna de las gracias que se sueltan. Pero nada más. En el cine actual, de donde no hay no se puede sacar. Aunque por comentarios oídos a mi alrededor, había muchos papás y mamás satisfechos. Supongo que sus expectativas son bajas… no sé.

Valoración

  • Dirección: **
  • Interpretación: No aplicable
  • Valoración subjetiva: **

Vista desde las rejas de la ventana de un castillo. Pero no en Transilvania. Es el castillo de Chillon, a orillas del lago Lemán.

Libro: Esperando a Robert Capa

Literatura

Este año he tenido muy presente las figuras de Robert Capa y Gerda Taro. O Andrei Friedmann y Gerta Pohorylle. Como prefiráis. Exiliado, fotógrafos, amantes, idealistas,… Allá por el mes de junio tuve la ocasión de leer, y disfrutar, del Ligeramente desenfocado del fotógrafo húngaro. En septiembre, disfruté también de la exposición de ambos fotógrafos en el Museo Nacional de Arte de Cataluña. Y me compre el catálogo de las fotografías de Taro. De Capa ya tenía hace tiempo algún libro.

Por todo ello, cuando hace unas semanas me enteré de la publicación de una novela se Susana Fortes sobre la relación de la pareja, y a pesar de que suelo esperar a que este tipo de relatos lleguen a su edición de bolsillo, me compré el libro y en las dos últimas semanas he procedido a su lectura.

Esperando a Robert Capa
Susana Fortes
Editorial Planeta, Barcelona 2009
ISBN: 9788408087250

El relato es una novelización de la vida de Gerda Taro desde que la encontramos en el tren que la lleva, exiliada, desde Alemania al París de los años 30 hasta su muerte en la Batalla de Brunete en 1937, centrándose especialmente en la relación que mantuvo con el fotógrafo de origen húngaro, también exilado, Robert Capa.

He de decir, que a pesar del interés que sentía a priori por los personajes, me ha costado terminar de leer la novela. Normalmente, una novela de esta extensión que me enganche la leo en menos de una semana, y esta me ha durado casi dos semanas. No es que esté mal escrita, ni nada de eso. No dudo de las cualidades lingüísticas de la autora. Pero no me ha convencido lo que me ha contado y cómo me lo ha contado. Tengo la sensación de que más que una historia, me ha descrito una serie de imágenes tópicas, basadas muchas veces en fotografías de la época, como postales. Aquí Taro y Capa se conocen/se emborrachan/discuten (táchese lo que no proceda) en tal o cual café/bar/lugar de París que sea. Ahora lo vemos relacionándose con este o aquel intelectual de la época, o en medio de uno u otro acontecimiento social o político del momento. Y así hasta el momento de la contienda civil española. Lo dicho, todo me ha resultado muy tópico. No me ha generado o transmitido las emociones que deberían haber estado ahí.

Las expectativas eran elevadas. Habiendo recibido algún que otro premio, y con reseñas favorables en determinados medios, esperaba más de la novela. Pero, yo soy así. El hecho de que las intenciones sean buenas, de la mayor o menor afinidad ideológica con los personajes o con la autora, para mí no bastan para decidir que un libro me gusta. Y este me ha dejado frío. Es más, por mi simpatía con los personajes, me parece una ocasión perdida.

Una pena. ¿Verdad?

Cementerio Père Lachaise

El cementerio Père-Lachaise de París, donde fue enterrada la fotógrafa alemana con honores de heroína republicana - Panasonic Lumix LX3

Cuatro vidas (2007)

Cine

Cuatro vidas (The Air I Breathe, 2007), 30 de septiembre de 2008.

En primer lugar, nuevamente a actuado el psicópata ese que se dedica a poner títulos en castellano. Qué tendrá que ver lo de las «cuatro vidas» con el «aire que respiro». Pero bueno; supongo que con la manía que tienen de tratar a los espectadores de cine como tarados, pensaron que así entenderíamos mejor de que iba. Aunque tal vez ni ellos sepan de que va.

La película dirigida por Jieho Lee es del estilo «vidas cruzadas«. Cuatro episodios, en cada uno de los cuales hay un personaje principal y varios secundarios, en los que se narra un episodio vital para cada uno de ellos. Las vidas de los personajes se entrecruzan, y el personaje principal en una de las historias es secundario en otra. Hay un personaje, un mafioso apodado Dedos, intepretado por Andy Garcia, que es el eje alrededor del que pivotan las historias de los personajes encarnados por Forest Whitaker (episodio Felicidad), Brendan Fraser (episodio Placer), Sarah Michelle Gellar, (episodio Tristeza) y Kevin Bacon (episodio Amor).

La historia se desarrolla principalmente dentro de un ambiente opresivo, relacionado con el mundo fuera de la ley de la delincuencia organizada. Hay violencia. Sólo las esporádicas incursiones a otros mundos se muestran con luminosidad y claridad. Pero incluso las historias de amor internas son oscuras y desesperadas. No está mal planteado, aunque cansa un poco a pesar de que la película no tiene excesivo metraje ni mucho menos (95 minutos).

Y las historias que se cuentan son un poco endebles. Muy cogidas por los pelos. No llegan a interesarme en algunos momentos. Los mcguffin que mueven a los personajes resultan a veces increibles. Los poderes «paranormales» de uno, el raro grupo sanguíneo de la otra,… seguro que se podrían haber buscado mejores motivaciones para conducir la acción.

Los actores están en general bien. Muchos de ellos, Garcia, Whitaker o Bacon, han demostrado su valía y oficio con creces anteriormente. Y aquí cumplen; sin esforzarse mucho más. Fraser es un actor flojo que aquí se salva porque tiene que hacer de tipo inexpresivo. Y la Gellar intenta superar como puede su condicionamiento de estrella televisiva, pero no lo consigue siempre, y muestra carencias interpretativas.

Me siento un poco defraudado. Las historias entrecruzadas me gustan; siempre me gustó el cine de Robert Altman, entre otras cosas, por su afición a este tipo de cine. Pero estas me han dejado un poco vacío. Pero bueno, seré benevolente y le pondré un seis a la valoración subjetiva, con la misma nota a la dirección y a la interpretación.

Otras opiniones sobre la película:

Hoy os dejo con una imagen del pasado Mercado Medieval de las Tres Culturas en Zaragoza.

Rapaz de pico amarillo

Exhibición de cetrería. Canon EOS 40D; EF 50/1,8

Expiación – La novela

Literatura

No suelo comentar las lecturas que leo. Es algo con lo que no me siento tan cómodo como con otras cosas. Pero hoy me apetece compartir mis impresiones sobre lo último que he leído. Se trata de la novela Expiación (Atonement) de Ian McEwan. El motivo para leer este relato de ficción es la película que se estrenó recientemente con guion adaptado a partir de esta novela, y que me dejó un buen sabor de boca. Aunque también cierta insatisfacción. Uno siente que no se ha enterado de toda la historia. Que le falta algo. Así que, viendo una edición de bolsillo de la Colección Quinteto en la que participa la Editorial Anagrama, que posee los derechos de la traducción al español, la compré y me puse a la obra.

En primer lugar, he de decir que la adaptación cinematográfica es excelente. Casi todo lo que transmite la lectura también lo encuentras en el filme. Una de las adaptaciones más fieles que conozco. Con una muy buen representación de los personajes y los ambientes. Y los ambientes son importantes en esta historia. Porque básicamente transcurre en tres ambiente muy marcados por el espacio y el tiempo.

  • Una casa solariega en la campiña inglesa en el año 35, donde suceden los hechos desencadenantes que conllevan al drama; la acusación de violación sobre el hijo de la sirvienta de una familia adinerada inglesa, que hasta el momento ha financiado su educación.
  • La retirada británica hacia Dunkerke, donde encontramos al acusado, que se ha alistado para redimir su condena en prisión.
  • El hospital donde la niña, ya convertida en una joven, comienza sus estudios de enfermera, y en la que nos encontramos con la verdad sobre la acusación.

Finalmente, encontramos casi a modo de epílogo, un desenlace que da sentido, o da otro sentido, a todo lo que hemos leído, situado ya en el presente.

La historia no es compleja, aunque sí lo son los personajes y sus motivaciones. Pero es importante para entenderlos y para comprender lo que les pasa, esas descripciones ambientales, que acompañan el devenir de los protagonistas. Particularmente me han gustado las vivencias del joven soldado en los campos belgas y en el caos de las playas de Dunkerke. Constituyen un excelente retrato de lo que supone una guerra. También las tribulaciones de la joven estudiante de enfermería, Briony, auténtica protagonista del relato en el hospital donde comienza a ser adulta, a comprender la magnitud de sus actos y de sus consecuencias, mientras entra en contacto con la miseria del ser humano enfermo o destrozado por la guerra.

En ocasiones, se ha presentado esta obra como una obra de amor. Sin embargo, siendo importante y necesaria la historia de amor, el tema del libro es la culpa y la redención de esa culpa. Y está muy bien.

El libro me ha gustado. Es de esas lecturas que entra poco a poco; que hay que dar tiempo a ir penetrando en la situación. Pero una vez que estás dentro te apetece quedarte. Y te quedas insatisfecho. Te quedas insatisfecho, porque sientes que la injusticia no queda resuelta. Que el mundo es cruel, y que no siempre ganan los buenos. Que la vida no es una comedia romántica de Hollywood. Y esto es adecuado. Pero, a veces. triste.

Un pero. La traducción. No es buena. Es especialmente notorio en los capítulos que transcurren en el hospital donde Briony se forma como enfermera. En la organización victoriana de la enfermería británica, a las profesionales equivalentes a las actuales supervisoras de enfermería, se les denominaba «sisters«. El traductor se hace un lío, no sabe esto, y empieza a traducir sister por sor o monja. Esto es un error. A partir, se me genera una desconfianza con el conjunto de la traducción. Me pregunto si algún día debería hacerme con la versión original, y leerlo en el inglés original. Algún día. Tal vez. Puede.

En el relato, Briony y su amiga Fiona, se dan un paseo por St. James’s Park en Londres, poco antes de que comiencen a llegar los heridos del desastre del norte de Francia. Tal vez, allí contemplaran las evoluciones de alguna antepasada de esta ardilla, fotografíada en ese mismo parque… 66 años más tarde.

(Canon EOS D60; EF 28-135/3,5-4,5 IS USM)