[Libro] Acordes y desacuerdos

Literatura

No, no se trata de la película de Woody Allen, Sweet and Lowdown, que en España llevó el título que aparece en el de esta entrada. Pero sí, tiene que ver con el jazz. No el del belga Django Reinhardt, cuya música impregnaba aquella estupenda película, pero la acción transcurre en Bélgica. En Bruselas. Ah, por cierto, y es una novela gráfica. O historieta. O cómic. O tebeo para adultos. O como le queráis llamar.

Acordes y desacuerdos (título original francés, Accords sensibles)
Antonio Lapone, dibujos; Régis Hautière, textos (traducidos al español por Diego Álvarez)
Editorial Dibbuks; Madrid, 2012
ISBN: 9788492902919

Creo que el breve resumen que podemos encontrar en Laponeart, el blog del dibujante, expone bastante bien de qué va esto. Traducido libremente por mí:

Gabrielle se aburre con el enteradillo de Simón y sueña con Lester. Lester que aspira a ordenar su vida tras su separación de Anna. Anna, de quien el talentoso trompetista Gordon está perdidamente enamorado. Y es incapaz de ver a Audrey, que le ama en secreto…

En cuatro historias cruzadas, más un epílogo, asistimos con la música de jazz de fondo a las andanzas un grupo de gentes cuyas vidas se entrecruzan en la Bruselas de la exposición universal de 1958, de la que heredamos el famoso Atomium. Gentes que se enamoran unas de otras, pero siempre de la persona equivocada, de quien no les corresponde. Lo cual pasa más de lo que pensamos, y por ello acabamos con quien no deberíamos. O sí, que tampoco me voy a poner a divagar sobre las cosas del «cuore».

En cualquier caso, con cada historia diferenciada por la tonalidad de color dominante, nos encontramos ante una novela gráfica muy elegantona, tanto por los estilizados y expresivos dibujos de Lapone, como por la historia que nos cuentan entre ambos autores. Eso sí. Imprescindible leerla con música de jazz. Imprescindibles My Funny Valentine, para mí en alguna de las versiones más cool de Paul Desmond, aunque porque no con la limitada pero sensual voz de Michelle Pfeiffer, y Time after Time que tiene un millón de versiones al igual que la anterior, pero que yo mayoritariamente escucho últimamente, y no poco, por Gino Paoli y sus buenos jazzistas italianos de Un incontro in jazz. Altamente recomendado. Todo.

El Atomium de Bruselas, un cristal de hierro con nueve atomos amplíado decenas de miles de millones de veces, y que es de la época en la que transcurre nuestra historia de hoy.

[Libro] Chico y Rita

Literatura

Llevaba un tiempo sin leer ninguna historieta. Actividad que inicié de forma más o menos periódica hace algo más de un año, pero que había abandonado en los últimos meses. Pero al entrar en una librería hace unos días me sorprendió ver es una novela gráfica firmada por un diseñador famoso como Javier Mariscal, y un director de cine, supongo que como guionista, no menos famoso como Fernando Trueba. Y la cogí. Luego me he enterado que es una adaptación como historieta de un filme de animación que todavía está por estrenar.

Chico y Rita
Javier Mariscal y Fernando Trueba
Ediciones Sins Entido; Madrid, 2010
ISBN: 9788496722736

Esta es una historia de una amor, aparentemente imposible, entre un pianista, Chico, y una cantante, Rita, ambos cubanos, ambos de raza negra. Durante años, décadas, se van persiguiendo, encontrándose y desencontrándose primero en La Habana, luego en Nueva York, y en sus respectivos periplos por París o Los Ángeles, desarrollando sus carreras en el mundo del jazz, del music-hall, o del cine,… a pesar de las traiciones de los amigos, de los agentes, de los mafiosos, del racismo, o del mundo de la política.

En líneas generales estamos ante una historia gráfica con un dibujo muy interesante, que produce un ambiente muy auténtico de la época y de las situaciones. Sin embargo, la historia la he encontrado un poco fría y un poco tópica. No ha llegado a emocionarme del todo. En lo que se refiere al libro, me convence el trabajo de Mariscal, pero no tanto el de Trueba. Veremos como pinta el largometraje. Que supongo que iré a ver, ya que he empezado con esta historia.

Recomendación musical

Mucha música cubana fusionada con el jazz. Cubop, jazz latino,… lo que haga falta. Vamos. Que sugiero un repaso por la obra de Bebo Valdés, que pone música a la película que pronto se estrenará.

El cielo sobre los pinares de Venecia

El cielo sobre los pinares de Venecia - Cosina 100/3,5 MC Macro

[Libro] Las serpientes ciegas

Literatura

Es curioso. La primera vez que hoy hablar de esta historieta fue hace un año aproximadamente cuando se le concedió el Premio Nacional del Cómic. Por aquel entonces, a mí me había empezado a picar el gusanillo de ponerme al día con el género, y salí a mis librerías habituales a buscarlo. Y no lo encontré en ninguna. Es cierto que no hice más esfuerzos. Ni hablé con los libreros para encargarlo, ni lo busqué por internet ni nada de eso. Tenía otras cosas que leer. Pero me llamó la atención, que un libro premiado no estuviera en las estanterías a la vista del público. Curiosamente, hace un par de semanas lo vi. Casi me había olvidado de él, pero me llamó la atención la portada y me di cuenta que era el mismo libro. Así que lo cogí, y aquí va lo que me he encontrado.

Las serpientes ciegas
Bartolomé Segui (dibujo) y Felipe Hernández Cava (guion)
BD Banda; Pontevedra, 2008
ISBN: 9788461249787

La acción comienza en el verano de 1939. Un individuo de extraño aspecto, pelirrojo y que viste de rojo, llega a Nueva York buscando a alguien. Alguien que tiene cuentas pendientes con su pasado; Ben Koch. Para ello se dirige a una pensión, cuyo dueño conoce a Koch. Y esperará pacientemente a que aparezca. Mientras, en una serie de flashbacks que no siguen un orden aparente, y que nos permiten conocer el conjunto de la historia poco a poco, sabremos que Koch llegó huyendo de un siniestro pasado en Detroit a Nueva York, donde se unió a organizaciones relacionadas con los partidos de inspiración comunista, que se desenvuelven entre la necesidad de la acción y la persecución policial. Allí conocerá a Curtis Ruciano, que le acabará arrastrando a marchar a Europa, donde acabará alistándose como brigadista en la guerra civil española. A partir de ahí, asistiremos a una historia de traiciones, venganzas y ajustes de cuentas, fuertemente incardinado en el estilo del género negro. Una historia que nos sorprenderá al final del penúltimo capítulo, en los montes que flanquean el Ebro a su paso por Cataluña, y que dará un giro sorprendentemente en el capítulo final que nos proporcionará la comprensión final de la historia.

He de decir que la historia me ha sorprendido por lo bien narrada que está. Con una separación por capítulos que tienen una cohesión interna y narrativa excelente, y que a lo vez nos van transportando en esos saltos en el tiempo y en el espacio, adelante y atrás, en Nueva York o en la España en guerra, de forma aparentemente caótica pero que en realidad están muy bien pensados para dar la información oportuna en cada momento para el desarrollo de la historia. Como ya he dicho, la narración es heredera del género negro, pero también tiene tonos de la historieta fantástica, sabiamente dosificados.

En lo que se refiere a la ilustración, me ha gustado bastante, y creo que lo más destacable es el buen uso del color, que nos va dando constantemente pistas de los ambientes, situaciones y orígenes de los distintos personajes. Aunque no lo sepamos hasta el final. Creo que hay una excelente correlación entre dibujos y guion. No lo sé expresar mejor. Que sólo hace poco más de un año que me tomé en serio lo de leer alguna que otra historieta de vez en cuando.

Finalmente, considerar los temas de la obra. Es posible que haya mucha gente que al oír hablar de la guerra civil se pongan en guardia y les entren reticencias. Es un tema demasiado sobrexplotado en la ficción española de cualquier género. Sin embargo, no es el tema principal de esta obra. Aquí estamos ante otros temas. Unos más generales, como la forma en que los totalitarismos en cualquier forma que se presenten son necesariamente perniciosos para las personas. Otros más personales, como el concepto de venganza, o el ajuste de cuentas, bien entre personas o con nosotros mismos y con nuestro pasado.

En resumen, una obra muy interesante, que he leído con calma pero intensidad en este largo fin de semana que acabamos de pasar, y que recomiendo a cualquiera que quiera acercarse al género literario, la historieta, que tratamos hoy.

Camino de Santiago

No faltan los personajes solitarios en esta historia, no; el caminante de la fotografía recorre un tramo del camino de Santiago entre Villanúa y Castiello de Jaca, Huesca - Panasonic Lumix GF1, G 20/1,7 ASPH.

Libro: Frank Cappa

Literatura

Estos últimos días he ido leyendo en paralelo. Durante el día, en los autobuses, mientras me electrocutaba el fisioterapeuta, o en cualquier otro lugar donde disponer de un rato muerto, las historias cortas que os comentaba ayer. Y por la noche, las aventuras del reportero Frank Cappa. Me encontré el libro por casualidad mientras hacía tiempo en una librería a que llegara una amiga. Una portada con una cara sudorosa parcialmente oculta por una veterana réflex de las de toda la vida, de las que funcionaban con un carrete de película de 35 mm. Y no lo pude resistir. Ah, se me olvidaba. Son historietas.

Frank Cappa
Manfred Sommer
Ediciones Glénat; Barcelona, 2010
ISBN: 9788499470115

Dibujado y escrito por el español de origen alemán Manfred Sommer, que en los años 80 crea el personaje protagonista del libro. Cappa es un reportero integral. Escribe y fotografía recorriendo el mundo de guerra en guerra, donde se embarca en aventuras a las que siempre parte con intención de ser un mero espectador aséptico, pero en las que acaba teniendo un papel protagonista por su dificultad para mantenerse al margen de la injusticia, de la agresión al ser humano, de la arbitrariedad del poderoso. África, Afganistán en la época soviética, Vietnam, Nicaragua, la Amazonia brasileña, con algún interludio fuera de los escenarios de guerra que nos ayudan a entender mejor quien es este curioso reportero. El conjunto del libro no es una historia por entrega. Es la recopilación de todas las aventuras del reportero, aunque en su conjunto mantiene una admirable coherencia.

Lo cierto es que lo he leído con interés y con ganas. Realmente, las historias tienen acción, muy ágil, pero muy bien llevada, ya que no te pierdes en ningún momento. Con un dibujo que me parece muy claro al mismo tiempo que muy adaptado a los escenarios violento y a la vez bellos en los que muchas veces se mueve. Los guiones me parecen muy acertados.

Supongo que a la hora de poner el nombre al personaje habría cierta inspiración en el Capa, con sólo una pe, que existió en la vida real. Pero no identificas al personaje real en el protagonista de las aventuras; es muy distinto.

Resumiendo, un libro muy entretenido, que también te hace pensar un poco, y que me ha mostrado el buen hacer de algún historietista español.

Enjoy your water front

Historieta elemental en el frente del río Ebro alabando las bondades del espacio que quedó tras la Expo 2008 - Panasonic Lumix GF1, G 20/1,7 ASPH.

Kick-Ass (2010)

Cine

Kick-Ass (2010), 8 de junio de 2010.

Es curioso. Vi el avance de esta película hace un tiempo y nunca pensé que acabaría viéndola. De superhéroes adolescentes, basada en una historieta y con Nicolas Cage en el reparto. Realmente, la probabilidad a priori de encontrar una motivación suficiente para caminar hasta la sala de cine y pagar una entrada por un producto así me parecía suficientemente próxima a cero como para pensar en ella. Y de hecho, se me olvidó tal cual. Pero en las últimas semanas me sorprendieron las numerosas críticas positivas. La única negativa la leí ayer por la noche, después de ver el filme. Y ayer teníamos la tarde un poco histérico-gamberra. Y nos metimos a verla.

Dirigida por Matthew Vaughn, la cosa empieza como una película americana de institutos, con el típico pardillo (Aaron Johnshon) al que no hace nadie caso, que le gustan las historietas, y que sufre abusos diversos por todo tipo de gente. En una de estas, se le ocurre que alguien debería plantearse ser un superhéroe para hacer un poco de justicia para la gente común. Se busca un traje,… el más horrible que uno se pueda imaginar, sale a la calle, y le dan una paliza y una cuchillada que casi lo matan. Pero el tema no queda ahí. Reincide y llama la atención de dos auténtico justicieros con disfraz, un tipo (Nicolas Cage) con su hija de 11 años (Chloë Moretz) que se están entrenando para acabar con un mafioso (Mark Strong) que les amargó la vida en un momento dado. Este tiene un hijo (Christopher Mintz-Plasse), el típico hijo tonto de mafioso, que también entra en el negocio de los héroes en pijama. Por supuesto, están los amigos del pringado, tan pringados como él, y una niña mona del instituto (Lyndsy Fonseca) con la que tras una serie de vicisitudes acabará triunfando, en todos los sentidos de la palabra.

La gracia de la película es que es una total y absoluta parodia del género del superhéroe, que se combina con dosis de comedia juvenil normal, y al mismo tiempo es una película de acción con dosis de violencia explícita y gore muy superiores a las películas que busca parodiar. Con un guion razonablemente ágil, vemos pasar las distintas peripecias entre la incredulidad y la sonrisa (a mí en ningún momento me sacó la carcajada), con algún tono de amargura de vez en cuando. Técnicamente, bien realizada como casi todos los productos norteamericanos.

En el campo de la interpretación, es de las pocas películas en las que he visto a Cage contenido y eficaz. Lo cual es una novedad agradable. También son notables las interpretaciones de los malos de la películas, especialmente de Strong. Los pardillos y la chica mona cumplen sin más, puesto que resultan ser todo, incluso el presunto protagonista, personajes secundarios al que realmente se lleva el foco de la película y del espectador. Y este personaje que se come a los demás es el de la niña convertida en máquina de matar, interpretada como hemos dicho por Chloë Moretz, y que es una mezcla de candidez infantil y personaje tarantiniano o matrixiano cuando se pone borde y se lía a balazos con todo dios. La disociación entre la imagen de la niña y sus acciones es lo que mantiene entre epatado y emocionado al espectador, sentado y atento en su butaca.

Resumiendo, un producto entretenido, superior en general a la mayor parte de las películas del género al que parodia, pero que tampoco es tan allá como en alguna crítica que he leído. Buena parte del mérito, como ya he dicho, la niña. Sospecho que habrá una segunda parte, que habrá perdido el factor sorpresa, y que será absolutamente prescindible. Pero mientras, quien quiera pasar un rato razonablemente divertido, en este principio de verano con una cartelera tan pobre, esta es una opción más que razonable.

Dirección: ***
Interpretación: ***
Valoración subjetiva:
***

El monstruo y la anciana

Un malo en las calles de Zaragoza amenaza a una ancianita; que venga Hit Girl y lo elimine - Panasonic Lumix GF1, Leica DG Macro-Elmarit 45/2,8

Libro: Corto Maltés en Siberia

Literatura

Después de leer Las Helvéticas, el primer volumen que leía del personaje Corto Maltés, me llegaron varios comentarios sobre que efectivamente, mi impresión sobre que la historia no era excesivamente representativa del personaje era cierta y que debía, si quería apreciar adecuadamente al mismo, leer alguna otra historia más clásica. Así que he vuelto a la tarea, y he leído otra aventura del personaje, raramente titulada en la versión española En Siberia, cuando la mayor parte de la acción transcurre en Manchuria y en Mongolia Exterior, si no me he perdido en los avatares del personaje.

Corto Maltés en Siberia
Hugo Pratt
Norma Editorial; Barcelona, 2007
ISBN: 9788498470246

En esta ocasión, las andanzas de Corto, aliado coyunturalmente con su «amigo» Rasputin, y con una joven china de una organización misteriosa llamada las Linternas Rojas. Y el entorno de las aventuras es la difícil situación del Asia Central tras la caída del Imperio Ruso por la revolución soviética, con las luchas civiles entre el Ejército Rojo y los Rusos Blancos, la presencia de potencias extranjeras como los norteamericanos y los japoneses en Manchuria y en la Siberia oriental, y los movimientos para la independencia de Mongolia Exterior, perteneciente en esos momentos a China, apoyados por los soviéticos. Aparecen ahí personajes reales como el almirante Kolchak o el barón von Ungern, así como una pléyade de señors de la guerra chinos y mongoles, en una aventura típica de «todos a por el oro», muy movida, muy dinámica, que altera el dramatismo violento con momentos de humor, y que va siempre acompañada de la melancolía del personaje. Y algunos flirteos románticos no resueltos al final.

La verdad es que ciertamente esta historieta no tiene nada que ver con la fantasía filosófica que leí en una primera ocasión. Es muy entretenida, con un muy interesante trasfondo histórico, y muy recomendable. Especialmente en estos tiempos en los que la vida real es tan gris y áspera. Pero de eso hablaré mañana.

Flor

No tiene que ver la foto de hoy con el contenido de la entrada; pero con el frío que está haciendo, me apetecía poner algo primaveral - Panasonic Lumix GF1, Canon-S 50/1,8 II

Libro: Corto Maltés: Las helvéticas

Literatura

Aunque es cierto que ha sido recientemente cuando he decidido ir leyendo de vez en cuando algún libro de historietas, siempre buscando calidad y cierto interés en las historias narradas, hace muchos años que conozco uno de los personajes más famosos de este mundo. Se trata de Corto Maltés, del historietista italiano Hugo Pratt. En Zaragoza, ciertamente, muchos son los que han oídos hablar del Corto Maltés; pero sospecho que para muchos también resulta que no es más que un celebrado bar del Casco Viejo. En fin, sin disgresiones. El caso es que nunca había leído una aventura completa del marino de La Valetta, y como el otro día me encontré este volumen en una librería me dije, «a por él», y aquí va lo que me ha parecido.

Corto Maltés: Las helvéticas
Hugo Pratt
Normal Editorial, S.A. Barcelona, 2007
ISBN: 9788498470291

La verdad es que no sé si es la aventura más representativa del marinero,… porque es una aventura interior. ¿Interior? Me explicaré. Corto acompaña a Suiza a su amigo el profesor Jeremías Steiner, que acude a un congreso a la ciudad de Sion en el Valais. Allí se aloja en la casa de Hermann Hesse en el Tesino, donde va a tener un sueño, dentro del cual vive una aventura digna de los caballeros de las sagas artúricas, especialmente en su versiones germánicas, en la que Sir Perceval se transforma en el caballero Parzival (lease parsifal). Es pues una aventura en la que se mezcla el materialismo pragmático de nuestro héroe con la espiritualidad y los misterios de la historia del Santo Grial y sus derivados.

Como he dicho antes, no sé hasta que punto es un aventura representativa del personaje, pero a mí me gustado mucho tanto el transcurrir de la misma, repleta de referencias literarias y mitológicas que te obligan a ir consultando para no perderte los matices y los detalles, como el caracter del personaje, con ese descaro con el afronta las situaciones y los presuntos adversarios que a la vez es respetuoso y cortés. Un auténtico caballero de principios del siglo XX.

No sé. Si os apetece leer alguna historieta, os podéis animar con ésta.

Pradera

Paisaje en las cercanías de Zermatt, en el Valais suizo; Wallis en esa comarca de habla alemana - Panasonic Lumix LX3

Libro: La estación de las flechas

Literatura

Como ya sabéis los que venís por estas páginas con alguna frecuencia, desde hace unos meses me estoy interesando en el género de la historieta. O cómic, o novela gráfica, o como sea que lo queráis llamar. A partir de ahora, aquí será historieta. Pero cuando me acerco a las estanterías no siempre me resulta fácil que elegir. El desconocimiento, supongo. Y aunque sigo algún blog en internet sobre el tema, tampoco se me aclaran las ideas. Ni me interesan mucho los super héroes, ni las cosas de japoneses, que parece que sí interesan mucho a la gente que escribe en estos sitios.

Pero el otro día en la FNAC me llamó la atención el título que hoy os traigo, y que estaba apilado en un aparte, lejos de los estantes dedicados al género. Veréis por qué.

La estación de las flechas
Samuel Stento (guion) y Guillaume Trouillard (ilustración)
Sins Entido, Madrid, 2009
ISBN: 9788496722552

Supongamos que en el último cuarto del siglo XIX, un emprendedor visionario se hubiese dado cuenta de una cosa. Los indios, los nativos americanos que más correctamente se dice ahora, tan abundantes en ese tiempo, estaban desapareciendo a marchas forzadas. Y en un futuro, como todo artículo escaso, serían un bien preciado. Supongamos que ese emprendedor ponga un negocio de conservas de indio. Sí, en bote, como las frutas en almíbar o el atún. Y que en nuestra época, una solitaria pareja de jubilados compra un bote de indios en conserva. Una familia, padre, madre e hijo, y los instala en su casa.

Éstas son las curiosas premisas de partida de esta historieta, con muy pocos diálogos y mucha acción. Desde el primer momento, nos sumerge en un particular surrealismo, en el que poco a poco, el modesto apartamento donde viven los jubilados se van expandiendo física y conceptualmente, hasta transportarnos a las vastas praderas del oeste norteamericano. De norte a sur. El frigorífico pueden ser las heladas tierras del lejano norte canadiense, mientras que el salón tal vez sean las cálidas tierras del sur de los Estados Unidos. A partir de ahí, se desarrollan una serie de aventuras donde se mezcla el divertimento con la crítica de determinados elementos de nuestra sociedad moderna.

La propuesta es curiosa, aunque encuentro algún problema. Los principales se deben a que obviamente los autores son de origen francés, y se ha realizado una adaptación donde se supone que los jubilados viven en Salamanca. Pero hay elementos que chirrían en esta adaptación puesto que determinados elementos culturales de la historia son claramente propios de nuestros vecinos del norte. No sé muy bien a qué fin no los dejan como estaban, si total no afecta a la esencia de la historia. Por lo demás, me ha parecido entretenida y original, con algunas imágenes estéticamente muy bonitas. Creo que esta obra da una idea de hasta que punto la historieta puede tener unas formas propias, alejadas de otros medios de expresión artística literarios y visuales.

No son las praderas del oeste en casa, pero son unas praderas cerca de casa, en la Plana de Zaragoza - Canon EOS D60, Tokina AT-X Pro 12-24/4

Libro: Releyendo a Tintín; Tintin au Tibet

Literatura

Quienes siguen este Cuaderno de ruta saben que en los últimos meses he comentado varios libros de aventuras gráficas o novelas gráficas. Historietas, en resumen. O como quiera que haya que llamarlos. Pero he aquí que en casa tengo dos colecciones completas de las historietas de dos de los personajes de este mundo más famosos, y de origen en el mundo francófono; el galo Astérix y el belga Tintín. Así que he decidido releer alguna de las aventuras de este mundo pero intentando alejarme de prejuicios que se originaron en mi infancia. Con una mirada más adulta.

Tintin au Tibet
Hergé
Casterman, París/Tournai, 1991.
ISBN: 9782203001190

Como ya he dicho en la pequeña introducción a esta entrada, intento acercarme a las aventuras del personaje sin prejuicios. Me explicaré. Cuando yo era niño, como me imagino que sucedería con muchos de mi generación, o por lo menos así me consta entre mis amigos y conocidos, los personajes de historieta modelo eran Mortadelo y Filemón. Es decir, personajes caricaturescos de grandes narizotas, destinados a hacer reír, o al menos a parecer risibles. Y esta idea, como muchas otras procedentes de la pobreza intelectual de la época, quedó bastante grabada en nuestras jóvenes mentes. En ese contexto, personajes como Astérix eran asumidos con bastante naturalidad puesto que el aspecto de la historieta no se alejaba del estándar impuesto.

Pero he aquí que uno de los curas jóvenes que de vez en cuando pasaban por el colegio escolapio donde recibí la educación formal académica nos insistió en un momento dado en abrirnos a otros conceptos. Y particularmente nos recomendó al pequeño e intrépido reportero belga que hoy nos ocupa. Como consecuencia de eso, conseguí hacerme con la propiedad de un ejemplar de El templo del Sol, aparte de leer otros volúmenes de las aventuras de Tintín en las bibliotecas públicas de los parques de Zaragoza durante el verano. Sin embargo, no acabó de cuajar en mí dura mollera aquellos dibujos tan distintos del ya mencionado estándar de personajes ridículos y narizotas.

Hace unos años, un buen amigo me volvió a hablar del personaje en términos muy elogiosos. Yo por aquel entonces había completado mi colección de Astérix en versión original, en francés, con alguno de los títulos tardíos publicados por Uderzo. Empecé a interesarme de nuevo por el personaje del belga Hergé, y empecé a adquirir los títulos publicados del personaje, hasta que terminé la colección a principios de 2008. Los fui leyendo todos, y reconozco que me gustaron más que en mi infancia.

Ahora, con este renovado interés por el género de la historieta, he decidido, con calma volver a releer algunos títulos intentando mantener una cierta limpieza de prejuicios en mi actitud. Y por eso he empezado por las aventuras del reportero belga en el Himalaya. Es uno de los últimos, de los más recientes, y tiene un tono melancólico. Es un libro cuya base temática es la amistad. Tintín recibe la noticia de que uno de sus mejores y más queridos amigos, el chino Tchang Tchong-Jen, ha resultado muerto en un accidente aéreo en el Himalaya tibetano. El belga se resiste a creer en la noticia, y decide salir en búsqueda de su amigo pese a que todos los que le rodea le advierten de la futilidad de dicha búsqueda.

Las dos cosas que más impresionan del libro son, por una lado, la exquisita ambientación de los lugares y las épocas que es propia de casi todas las aventuras del personaje, y por otro lado, un cierto tono melancólico en la búsqueda del amigo perdido que nos habla de la importancia que tenía para el autor el tema de la amistad.

Lo que también me queda claro es que uno de los problemas para que de niño rechazase al personaje, o al menos dejase de mostrar interés por él, es que el personaje es más adulto de lo que era admisible para el niño de 9 o 10 años que era yo entonces. Es muy posible que una toma de contacto con el personaje durante mi adolescencia hubiese sido mucho más positiva. Y desde luego, ahora lo considero absolutamente recomendable también para un adulto que quiera recorrer esa parte de la literatura que es la historieta.

Cheverny

Aunque debemos suponer que la residencia ficticia de Tintin y su amigo el capitán Hadock, el Chateau de Moulinsart, está en algún lugar de la Valonia belga, lo cierto es que está inspirado en el Chateau de Cheverny, en el Loira francés, aquí con su aspecto en 1990 - Pentax P30N, Sigma 28-70/3,5-4,5

Libro: Kiki de Montparnasse

Literatura

Tras la grata experiencia de leer Maus, y meterme así en el mundo de la historieta seria, con contenido, con miga, he vuelto a probar el género. Y si el anterior se basaba en las vivencias biográficas de un superviviente del holocausto, en esta ocasión me he metido en la biografía completa de uno de los más conspicuos personajes del París de entreguerras; Alice Prin, más conocida como Kiki de Montparnasse.

Kiki de Montparnasse
Catel Muller y Jose-Louis Bocquet
Sins.entido. Jesús Moreno y asociados – Espacio y comunicación. Barcelona, 2007
ISBN: 9788496722309

Antes de comentar el libro, hablemos un poco de la persona. Alice Prin nació pobre, no reconocida por su padre, y criada por su abuela en Châtillon-sur-Seine hasta que siendo una preadolescente fue a vivir con su madre a París. Sin embargo, tras tener diversos oficio durante su adolescencia, acaba por trabajar de modelo posando desnuda para un escultor, lo cual ocasionó la ruptura con su madre, siendo todavía una adolescente. A partir de ahí, tras algunos altibajos, continuó su carrera como modelo siendo la musa de pintores, escultores y fotógrafos, afiliados a los distintos ismos que configuraron la vanguardia parisina en el París de los felices años 20. En los enlaces a sus biografías en español y en francés en Wikipedia, podréis encontrar un listado de los artistas a los que inspiró y para quienes posó. En su momento, fue declarada la «reina de Montparnasse«, y no dudó en cantar y bailar en los cabarés de la época. Sin embargo, el estilo de vida, el abuso del alcohol y de las drogas, le llevó a un deterioro físico precoz, y a desaparecer de la escena intelectual relativamente olvidada.

Desnudo en el espejo, por Julian Mandel (imagen de dominio público); la modelo es Alice Prin, Kiki de Montparnasse. Es evidente que los criterios estéticos de la época no favorecían a las anoréxicas modelos de la actualidad (Fuente: Wikimedia Commons)

Yo me familiaricé con el personaje por mi afición a la fotografía, ya que fue amante y musa del polifacético artista norteamericano Man Ray, con quien hizo una de las obras más representativas de la fotografía surrealista, el Violón de Ingrés.

En el relato gráfico que hoy nos ocupa, conocemos a la joven Alice de niña, cuando vive con su abuela, y vamos siguiendo su vida hasta que desaparece de la escena parisina con la llegada de los alemanes a París, después de lo cual la encontramos ya retirada de la vida pública y enferma, muriendo con sólo 51 años en 1953. El relato está estructurado en escenas de su vida que son representativas de su forma de vivir, de sus relaciones, o de los acontecimientos más señalados de su vida.

Kiki de Montparnasse por el escultor aragonés Pablo Gargallo, Museo del Louvre. Fotografía de Hay Kranen (Fuente: Wikimedia Commons)

El relato gráfico es muy dinámico, aunque profundiza poco en los acontecimientos que narra. Creo que genera una sensación de superficialidad en la protagonista, cuando en muchos entornos se ha destacado que se puede considerar como una de las primeras mujeres realmente liberadas del siglo XX, aun con los costes personales que eso le produjo. Además, la historia se va desfondando conforme llega a sus últimos capítulos; creo que hubiese sido mejor dar más profundidad a determinados momentos clave de la biografía de la modelo, aun a costa de no ser tan exhaustivo en la descripción de su vida.

En resumen, un relato que no está mal, que me sirve para ir conociendo más el medio de la historieta, y que me ha entretenido a ratos.

Torre de Montparnasse

Montparnasse, el reino de Kiki, con su gran y emblemático rascacielos - Panasonic Lumix LX3

Los cincuenta años de Astérix

Literatura

Lo comentaba hace unos días cuando hablaba de Maus, Astérix, el irreductible galo de la península de Armórica, cumple 50 años. Y merece que le dedique unas líneas.

De niño leía tebeos. Los habituales de la época. De muy pequeño, Pumby. Luego TBO, Din-Dan, DDT, Pulgarcito, etc… Y allá cuando ya tenía siete años, había oído hablar de Astérix. Pero sus aventuras no salían en ninguno de los anteriores. Una pena. En ese momento, tras una temporada en la que casi cada mes sufría un episodio de amigdalitis, fui operado y privado de mis amígdalas en casa de un otorrinolaringólogo que tenía su consulta en la calle Espoz y Mina de Zaragoza. Ante la valentía mostrada en tan duro trance, el galeno en cuestión dijo cuando terminó la faena,

Macho, ahora ya puedes pedirle lo que quieras a tus padres, que te lo has merecido.

Y yo contesté,

Quiero un ‘Astérix‘.

Y aquella misma tarde tuve mi Astérix. En concreto, Astérix y los normandos. Aquello fue la bomba, nunca me lo había pasado tan bien leyendo un tebeo. Con posterioridad tuve varios más, aunque no sobrevivieron a mi infancia y a la de mi hermana. Demasiado ajetreo. Ya con unos treinta años, echaba de menos las aventuras del pequeño galo. Así que comencé a comprar la colección completa, en un plan a varios años, pero eso sí, en la versión original en francés. Y ahí los tengo. Y disfruto de ellos. Hace casi cuarenta años que conocí al personaje. 11 menos que los que cumple en estos momentos. No está mal.

Los he disfrutado en los dos idiomas. En el original francés, reconozco que la calidad de las historias disminuyó notablemente con la muerte de su guionista, el genial Goscinny, y se hizo cargo del completo su genial dibujante, Uderzo. Genial como dibujante, pero menos como guionista. En el original español, tuvimos la suerte de que muchos de los números fueron traducidos por El Perich, humorista gráfico desgraciadamente ya fallecido, pero que supo no sólo traducir sino también adaptar al español los guiones de Goscinny de forma magistral y tronchante.

Resumiendo, uno de mis personajes favoritos, junto con todos sus colegas de la aldea armoricana que hoy y siempre resiste al invasor.

Foto ‘gabacha‘, claro.

Bouquiniste

Entre los 'bouquinistes' a orillas del Sena a su paso por París es frecuente encontrar volúmenes usados de las aventuras de Astérix el galo - Panasonic Lumix LX3

Libro: Maus

Literatura

Esta semana me he dedicado a un género que no frecuento; la historieta seria. O la novela gráfica o relato gráfico que llaman algunos. Allá por mis veintipocos compraba con frecuencia revistas de comics.

Nunca me ha gustado mucho la palabra comic. Su etimología que nos dirige directamente a la comedia hace que mucha gente no sea consciente de que se pueden contar historias serias, dramas o tragedias utilizando este medio. A mucha gente le quita seriedad esa apelación. En España, se ha utilizado mucho, y de hecho está recogido en el diccionario de la RAE, el término tebeo cuyo origen estaba en la revista TBO, que yo leí ocasionalmente en mi infancia y que creo que era una pequeña joya no suficientemente reconocida. Pero este término, por asociación con su origen nos remite más a las revistas de historietas infantiles más que a otra cosa. A un niño se le compran tebeos, pero ningún adulto aficionado al género reconoce leer tebeos. En algunas ocasiones, con la intención de darle carta de respetabilidad y seriedad, para las historietas largas y con un contenido dramático, se utiliza el término de novela gráfica. Aunque parece ser que algunos consideran el término un poco presuntuoso. Entonces, a pesar de que el término historieta, a pesar de ser un diminutivo de historia con las connotaciones que ello conlleva es el término más adecuado.

Retomo la cuestión. Allá por mis ventipocos compraba con frecuencia revistas de historietas, pero lo dejé porque… no sé,… nunca he sido lo suficientemente friqui para engancharme a la mayor parte de las historias que contaban aquellas revistas. Algunas cosas estaban bien,… el Torpedo de Abuli y Bernett lo recuerdo con cariño,… y otras cosillas. Pero durante muchos años, mi único contacto con el género fue mi colección íntegra de Astérix en su idioma original, el francés, que siempre he disfrutado, especialmente mientras la escritura estuvo a cargo del fallecido y difunto Goscinny. Por cierto que tengo que hablar algún día del 50º aniversario del personaje. Posteriormente, por la mala influencia de un buen amigo, me hice también con la colección completa de las historietas de Tintin, también en su idioma original. Pero nada más.

Y he aquí que me he animado a leer lo que algunos llaman un «novela gráfica». Os lo cuento.

Maus: Relato de un superviviente
Art Spiegelman
Ramdon House Mondadori, Reservoir Books
7ª edición, Barcelona 2009
ISBN: 978-84-397-2071-3

El autor, Art Spiegelman, nos lleva a través de sus dibujos a la historia de como su padre, un judío polaco, sobrevivió al holocausto después de pasar por una terrorífica odisea donde de puso en juego constantemente una mezcla de capacidad personal y suerte. Es una narración de la historia real de la familia del autor, pero el tema real del relato, más que una reflexión sobre el propio holocausto es el sentimiento de culpa del superviviente. Un sentido de culpa que en esta ocasión se transfiere de alguna forma del padre al hijo, aunque este nació tras la guerra, por la sombra que sobre su vida proyecta la muerte de su hermano mayor en uno de los guetos de la Polonia ocupada por los alemanes. La historia se cuenta en forma de flashbacks, en los cuales el padre del autor, ya anciano y residiendo en los EE.UU., va relatándole a lo largo de un cierto tiempo sus vivencias durante la guerra. Mientras tanto, asistimos también a los problemas familiares que como consecuencia de aquellas vivencias, sufren en el tiempo actual (años setenta y principios de los ochenta) los protagonistas de la historia.

Uno de los aspectos más curiosos e importantes de la historia es que el autor dibuja a las personas como animales diversos según su nacionalidad o etnia. Los judíos, sea cual sea su nacionalidad, son ratones. Los alemanes, consecuentemente, son gatos. Los polacos no judíos son dibujados como cerdos; lo cual nos habla también de los sentimientos de los protagonistas hacia sus anteriores compatriotas no judíos. No olvidemos que para los judíos el cerdo es un animal impuro. El relato permite comprender un poco mejor el porqué de esto. Otras nacionalidades aparecen eventualmente representadas. Los norteamericanos son perros, un francés aparece representado como una rana (hay una cierta explicación al respecto, ya que la esposa del autor es una francesa, que sin embargo es representada como ratón al estar convertida al judaísmo; pero hay una cierta discusión al respecto en la propia historia), los suecos son renos. Cuando un judío en la Polonia ocupada oculta su condición y se hace pasar por polaco étnico, aparece dibujado con una careta de cerdo. Creo que en su conjunto el recurso es de una potencia tremenda, e influye poderosamente en cómo se va siguiendo y sintiendo el relato.

No me siento muy cualificado en comentar los aspectos estilísticos del dibujo, más allá de lo dicho en el párrafo anterior. No tengo experiencia ni conocimientos suficientes para ello. En cualquier caso, lo que me ha sucedido a mí es que me he metido de lleno en el relato que me ha parecido interesantísimo, y he disfrutado a pesar del dramatismo notablemente de las andanzas de la familia Spiegelman. No me queda por lo tanto otra conclusión que animar a todo el mundo a que se adentren en esta forma literaria y lean este relato de indudable calidad.

La foto de hoy no podía ser de otro sitio…

Cambio de agujas en las vías de acceso al campo de Auschwitz II - Birkenau, Polonia - Canon EOS 40D, EF 24-105/4L IS USM

Cambio de agujas en las vías de acceso al campo de Auschwitz II - Birkenau, Polonia - Canon EOS 40D, EF 24-105/4L IS USM