Carlos Carreter
http://carloscarreter.com
Mes: agosto 2015
[Televisión] Cosas de series; verdaderos detectives,… delincuentes,… corruptos,…
TelevisiónHoy no es jueves. Y por lo tanto no tocaba hablar de las series de televisión. Pero este Cuaderno de ruta va a pasar durante unos días al modo «solo fotos», y me he dado cuenta que se me pueden acumular en las semanas que viene los comentarios sobre series que terminan temporada. Así que he decidido mantener la sección semanal, trasladándola al miércoles.
Hablar en primer lugar de un par de novedades que han entrado en mi cartelera particular. En primer lugar, tenía en reserva desde junio la tercera temporada de Orange is the new black. Esta serie de trama carcelaria que mezcla con sabias dosis la comedia y el drama, es en estos momentos «obligatoria» para el aficionado a la ficción televisiva. Tiene demasiados momentos buenos como para correr el riesgo de perderse alguno. Hace menos de una semana que empecé a ver la tercera temporada, y hasta el momento no ha tenido desperdicio, encontrando por mi parte incluso una tendencia al alza en la calidad de la serie. No diré más.

Hoy acompaño la entrada con fotografías que se han podido ver últimamente en mi Tumblr de viajes (enlaces al final de la entrada) En la fotografía; canal del Brenta, cerca de la laguna Veneta, Italia. Marzo de 2013. En el encabezado de la entrada; asando salchichas y carne en Alexanderplatz, Berlín (Alemania). Agosto de 2013.
También comenté hace unos días, después de terminar la primera temporada de Humans, que me apetecía echarle un vistazo a su original sueco, Äkta människor (Real Humans). Sólo diré una cosa. El primer episodio de la serie sueca me parece superior al primer episodio de su versión inglesa. Más interesante, con más posibilidades, aun teniendo en cuenta que básicamente es la misma historia con algunas diferencias, que no me parece en todos los casos menores. Así que es prácticamente seguro que seguiré adelante con ella.
Y vamos con lo más importante de la semana, el final de la segunda temporada de True Detective, una serie con unas expectativas muy elevadas, especialmente por lo mucho que gustó la primera. Para quien no esté al tanto, hay que decir que las temporadas de esta serie no son continuación unas de otras. Son historias totalmente independientes, que tienen en común que están protagonizadas por policías norteamericanos que trabajan en entornos complejos. Policías que arrastran traumas personales por episodios de su pasado, con dificultades para las relaciones interpersonales, con familias difícil, disfuncionales o a las que terminan ahuyentado en el caso de las más normalizadas. Puede estar o no corruptos. Y se enfrentan a casos detrás de los cuales hay gente poderosa manejando los hilos. Estos policías están en la punta del iceberg de la corrupción social. En esta ocasión, han sido tres policías de distintos cuerpos californianos, Ani Bezzerides (Rachel McAdams) de la policía estatal, Ray Velcoro (Colin Farrell) de la policía local de un municipio californiano, y Paul Woodrugh (Taylor Kitsch) un exmilitar en la policía de tráfico. A estos hay que sumar, con papeles trascendentes, prácticamente al mismo nivel, un capo mafioso, Frank Semyon (Vince Vaughn) y su mujer Jordan (Kelly Reilly). Entrar ahora en contar el trasfondo de cada uno de los personajes y lo que les lleva a la improbable confluencia de todos ellos, sería complejo y probablemente inútil. Para tratar de entender el conjunto hay que verlo.

Mansfield Place, Edimburgo, Escocia (Reino Unido). Julio de 2013.
En cualquier caso, en esta segunda temporada no he conseguido engancharme emocionalmente al caso y a las circunstancias de sus protagonistas como en la primera temporada. Quizá porque son muchos más personajes con los que empatizar. También porque en la primera el misterio era profundo y enredado, pero no tan complejo en ramificaciones e intereses como este. Indudablemente porque la química de los intérpretes de la primera temporada era globalmente superior. Más concentrada, mejor trabajada y más creíble. Y también estoy de acuerdo en los que opinan que el guion, la historia, estaba peor tramada. Sin contar con que la dirección de Cary Fukunaga en la primera temporada era más personal, y de más calidad, que la que nos proporcionan los múltiples directores de episodios de esta, que son buenos profesionales, pero que como sucede con frecuencia en televisión, se ven obligados a homogeneizar sus formas y estilos, perdiendo personalidad. Por ello, en televisión habitualmente el director es menos importante que en el cine. En el cine es el autor con la ayuda del guionista y otros creativos. En televisión, es el creador de la serie, muchas veces un guionista en este papel o como productor ejecutivo, el que con ayuda de otros profesionales tiene la responsabilidad del producto.
La temporada ha resultado por lo tanto en mi humilde opinión inferior. Ciertamente han intentado compensarlo con espectacularidad. Y en ese sentido son notables el tiroteo creo que del episodio 4º y la secuencia de la orgía sexual en el 6º. Junto con algunos otros momentos. Aun así, se han leído muchas opiniones criticando duramente el resultado. Yo diría que no estamos ante ninguna catástrofe. Sigue siendo mejor que muchas cosas que se hacen en televisión, pero ya no tengo la sensación de que sea una serie especial, como durante la primera temporada. De hecho, si esta fuera la primera temporada, daría por bueno el tiempo dedicado a su visualización, pero me plantearía si querría ver otra historia de este tipo.
Desconozco cuál es el destino de la serie. No sé si habrá una tercera temporada. La idea general de la serie es buena… pero ya hemos visto que los resultados pueden ser irregulares. Veremos… que dijo un ciego a otro ciego.

Egipto en el Met (Metropolitan Museum of Art), Nueva York (Estados Unidos). Septiembre de 2013.
De viaje con Carlos (Tumblr)
De viaje con Carlos (Cuadernos de viajero)
Una foto de mis viajes, al azar
[Cine] Misión imposible: Nación secreta (2015)
CineMisión imposible: Nación secreta (MIssion Impossible: Rogue Nation, 2015): vista el 10 de agosto de 2015.
No tenía previsto ver esta película tampoco. Esto me ha venido pasando en este verano… en el que no tengo claro qué me apetece ver y qué no me apetece ver. La primera entrega de las versiones cinematográficas de aquella serie sesentera, ya hace casi 20 años, me pareció mediocre. La segunda, horriblemente mala. Un despropósito infame. Nunca vi la tercera ni la cuarta. No encontraba a priori estímulo alguno para ver la quinta. Hasta que alguien observó mientras tomábamos el domingo el aperitivo que el director y guionista de esta entrega es Christopher McQuarrie. A este señor le debemos el guion de una maravilla del thriller de hace 20 años, y también fue responsable de la adaptación de una novela de ciencia ficción para adolescentes japonesa en una de las más entretenidas películas de ciencia ficción y acción del año pasado y de los últimos tiempos. Si a eso unes críticas razonablemente favorables, pues me animé a la propuesta de aligerar el principio de la semana con una visita a las salas de cine.

La «Staatsoper» de Viena es el escenario del conjunto de secuencias más interesantes de la película.
El argumento es el de siempre. Un peligrosísima organización de malos malísimos, bla bla bla, desetabilizar el orden mundial, bla bla bla,… Una chica guapa de nombre exótico, Ilsa Faust (Rebecca Ferguson), que no sabemos si es de los buenos o de los malos, algún alto funcionario sin imaginación, Alan Hunley (Alec Baldwin), y el «prota», Ethan Hunt (Tom Cruise), junto con sus incondicionales Benji (Simon Pegg), Luther (Ving Rhames), y el escéptico Brant (Jeremy Renner),… a salvar el mundo. Eso sí con un malo malísimo especialmente malvado, Solomon Lane (Sean Harris).
Nada nuevo bajo el sol. Estas películas no dejan de ser una variante de las películas de 007, pero con protagonista norteamericano en lugar de británico. No hay más. Y eso sí, para mayor gloria del desmesurado ego de su protagonista, que actúa como siempre. Son contadas las películas en las que Cruise no hace el mismo papel de siempre.
Dado que el reclamo para llevarnos al cine era la competencia de McQuarrie para forjar historias interesantes, con guiones que van más allá de los esperable… ¿ha satisfecho las expectativas esta película? Mmmmmm… parcialmente. Empieza bien. Realmente bien, aunque sea imperdonable que apiole a la chica más mona de la película a la primera de cambio. Pero entre con cierta agilidad en la trama, sin demasiada verborrea, y se nos ofrece un conjunto de secuencias en torno a una representación de Turandot en la Staatsoper de Viena, que si no podemos decir que sea totalmente original, reconozco que está muy bien rodada, que es autoexplicativa, sin necesidad de verborrea superflua, y que se resuelve con mucha elegancia. En ese momento, la sensación es que realmente estábamos ante una película de acción interesante.

Situada en la parte más aristocrática de la estirada capital austriaca, no lejos de la Karlplatz, cuya boca de metro aparece en la película.
Lamentablemente, a partir de ahí la película retorna a los caminos trillados del género en el cine de acción de los últimos veinte años. Si hasta ese momento el director y guionista había considerado a sus espectadores como seres inteligentes, a partir de ahí pasa al modo de estándar de considerarlos tontos. Largas escenas de verborrea incontenible para explicar lo que va a pasar. La típica escena de acceso a un lugar inaccesible. Una persecución… Atentos a una línea del guion… Vemos en pantalla a una guapa mujer que sale pitando montada en una moto enorme de marca alemana. Tras ella el protagonista intentando darle alcance en un coche de lujo de marca alemana… la misma marca alemana. A estas alturas ya queda claro que además de película es un largo anuncio de vehículos de motor y teléfonos móviles. Y tras el protagonista, los malos malísimos, tras el montados en otras motos enormes de marca… sí,… alemana. Y entonces aparecen los personajes prescindibles de la historia montados en un 4×4 cutre, y uno de ellos, un desaprovechado y patético Jeremy Renner, dice «¡¡¡Una persecución!!!». No vaya a ser que los tarados que vamos al cine y pagamos la entrada no nos hubiéramos enterado de que se trataba de tal tipo de secuencia, típica y tópica de cualquier película de este tipo… Si ya habíamos sentido que la película estaba decayendo tras abandonar las calles de Viena, aquí empezamos a sentirnos molestos en el asiento.
Afortunadamente, los siguientes desmanes del filme son los previsibles pero no más graves. Unos cuantos políticos haciendo el melón, los malos que tienen muy mala puntería y son incapaces de dar en el blanco a dos personas huyendo por un callejón mientras les disparan con armas automáticas de los que los niños denominan «metralletas», una cuenta atrás de una bomba que por supuesto se detiene cuando falta menos de un segundo para que estalle, y una explicación del malo malísimo de todas las cosas que quiere hacer que permite que los buenos monten una forma de pillarlo. Déjà vu.

Luego, una pequeña persecución nocturna por las calles vienesas para dar paso al siguiente acto del filme.
En la cuestión de interpretaciones, buenos secundarios totalmente desaprovechados en papeles absurdos o totalmente planos, el protagonista haciendo como he dicho el mismo papel de siempre, y sorprendentemente, dándole la réplica femenina una actriz sueca pero que suele interpretar papeles de británica, que no está mal y dotada de un número de neuronas superior a los previsibles en este tipo de películas para las mujeres. No falta la escena en biquini saliendo del agua y un cambio de ropa de espaldas con un pecho que se atisba muy de refilón. Que no falten los tópicos.
¿Cuál es la consideración final? La película tiene un comienzo prometedor pero cae en los defectos habituales de este tipo de cine, que no parecen importar a buena parte del público que parece encantado que lo traten por tonto. No obstante, es bastante más visible que otras de la misma u otras sagas similares. Al fin y al cabo, cambiando los nombres de los protagonistas, esta película vale para 007 o para cualquier otro imitador que se os ocurra. Como entretenimiento de verano vale,… por lo demás, prescindible.
Valoración
- Dirección: ***
- Interpretación: **
- Valoración subjetiva: **

Por cierto, que la «Staatsoper» no es la única ópera de Viena, que también está la «Volksoper»; aunque a esta igual no asisten los no menos estirados cancilleres federales austriacos.
[Libro / historieta] Veo por Ti
LiteraturaEsta semana me paso a la historieta. Bueno, ya me la leí hace unas semanas, pero que hasta esta no me había encajado en el Cuaderno de ruta. Pero es que además es producto local. Escritor, Roberto Malo, y dibujante, Chema Cebolla, son «made in Zaragoza». Hace unas semanas, el segundo domingo de julio se les podía encontrar vendiendo sus historias en el mercado de la calle de las Armas. En ese momento ya había caído en mi poder la historieta que os traigo aquí hoy, pero todavía no la había leído. Hecho
Veo por Ti
Escrito por Roberto Malo y dibujado por Chema Cebolla
Editorial Cornoque, 2015

Tras un sábado lluvioso, este domingo salió con sol pero temperaturas muy suaves… alguien dijo de bajar a ver si había mercado en las Armas…
Curiosa historia la de Paco, un joven ciego, que anda escaso de relaciones sentimentales y sexuales. Hasta que un día, una chica le dice que lo encuentra muy mono. ¿Para ser ciego? No, mono en sí mismo. Y se dispone a entrar en acción… y descubre Paco que cuando se acerca al clímax de la excitación sexual, recupera momentáneamente la visión. A partir de ahí, una serie de situaciones más o menos curiosas, más o menos divertidas, más o menos entrañables, se sucederán.
Para empezar, a pesar del tema sexual y de que aparecen dibujadas relaciones de carácter íntimo razonablemente explícitas, considero esta historieta apta para un público amplio. Quizá abstenerse timoratos, reprimidos y aburridos, salvo que quieran abandonar cualquiera de estas condiciones.

Al fin y al cabo era segundo domingo de mes. Yo avisé que probablemente estaban todos de vacaciones…
Detrás del innegable humor de las situaciones provocadas, a mí una de las más científicas y divertidas me parece la de la oftalmóloga, no deja de haber una historia tierna sobre la siempre difícil iniciación a la sexualidad y a las relaciones íntimas o románticas con otras personas. No hace mucho hablaba también de una película brasileña que abordaba un tema muy similar aunque con un enfoque muy distinto. Aunque los dos son válidos. Complementarios. Como cualqueir acercamiento que se haga desde la empatía y la sensibilidad. Por la historieta no es vulgar, y detrás de la fantasiosa situación provoca que nos acerquemos y nos pongamos en el lugar del otro.
Se lee enseguida. Tiene un formato cómodo y agradable. Y desde mi punto de vista, es producto local, pero no de estos que parece que tienes que defender aunque no te apetezca, de los que la gente se pone el cachirulo aunque te siente como un tiro. No, es un producto contemporáneo, actual, perfectamente exportable y recomendable. Qué más quieres.

Y así fue. Pero en LAC 72 siguen pasando de forma ininterrumpida las fotografías de las exposiciones del II Encuentro de Fotógrafos de Aragón… y allí nos quedamos mirando como bobos hasta que pasaron todas.
[Fotografía] Recomendaciones semanales: del 2 al 9 de agosto de 2015 – Fotografía y otras artes visuales
FotografíaRecomendaciones semanales: del 2 al 9 de agosto de 2015 – Fotografía y otras artes visuales.
La semana que viene, probablemente, no habrá esta sección semanal sobre recomendaciones fotográficas. Fotógrafos y fotografías interesantes que voy encontrando y seleccionando por internet a lo largo de la semana.




[Fotografía] Fotografía nocturna y de interiores con una Leica M2 – Fotografía y otras artes visuales
FotografíaFotografía nocturna y de interiores con una Leica M2 – Fotografía y otras artes visuales.
Todavía me quedan tres o cuatro artículos que pasar desde https://medium.com/@carloscarreter a http://carloscarreter.es/. El caso es que dentro de pocos días voy a hacer una escapada a Suiza. A una zona que ya conozco (https://carloscarreter.com/tag/suiza-2009/). Y estaba pensando llevar un equipo mixto, digital y película. Así que he rescatado esta experiencia de hace año y medio, para refrescar conceptos.
[Cine] The Age of Adaline (2015)
CineThe Age of Adaline (2015); vista el 4 de agosto de 2015.
Película vista «fuera de programa», es decir que no estaba en mis/nuestras previsiones iniciales, pero a la que soy invitado y no encuentro motivo para decir que no. En versión original, y por ello conservo su título en inglés. En España se encuentra también en versión doblada en la cartelera bajo el título mal traducido, como suele pasar, de «El secreto de Adaline».
Dirigida por el poco conocido Lee Toland Krieger, nos cuenta la historia de Adaline (Blake Lively), una joven madre y esposa de veintitantos años, que como consecuencia de un accidente en los años 30 del siglo XX, tiene una secuela inesperada. No envejece. Tras una amenaza del FBI de convertirla en conejillo de indias, concibe una estrategia que le permite cambiar de identidad y de ciudad cada 10 años, siendo la única que conoce su secreto su hija Flemming (Ellen Burstyn, ya de anciana). Cuando en la actualidad está a punto de un nuevo cambio de identidad, conoce a un apuesto y adinerado filántropo, Ellis Jones (Michiel Huisman), con quien flirtea y algo más. Pero las cosas se complicarán cuando este la lleve a pasar un fin de semana con su hermana Kikki (Amanda Crew) y sus padres, Kathy (Kathy Baker) y William (Harrison Ford). Porque en el caso de este último no será un encuentro, sino un inesperado reencuentro.

Aunque la película transcurre fundamentalmente en California, especialmente San Francisco…
Cuando llegué a casa después de ver la película, estuve indagando en la ficha técnica de la película para ver si su protagonista formaba parte de la nómina de productores del filme. Porque parece la típica película echa para mayor gloria de su protagonista, que sale guapa y en un porcentaje de planos cercano al cien por cien. Blake Lively es una actriz joven todavía, no ha cumplido los treinta, que alcanzó cierta fama con cierta serie televisiva orientada al público adolescente que tuvo un razonable éxito, que yo no vi. Pero que a pesar de alguna que otra aparición en el cine, no había encontrado un papel protagonista que la hiciera destacar en medio de una generación de actrices jóvenes muy potente. Y parece que le han hecho esta película para su lucimiento personal y profesional. Vestida muy elegante, siempre con toques retro tanto en el vestuario como en el peinado y maquillaje, que le van a su físico,… una historia romántica,… con misterio,… Hecha a medida.
El problema es que la cosa funciona parcialmente. No es la primera vez que se analiza en el cine o en la televisión la cuestión de una persona inmortal. En este último año, hemos podido seguir una serie de televisión bastante entretenida, aunque parece que no va a tener continuación, sobre el tema. Y la verdad es que sobre el tema no aporta gran cosa. La cosa evoluciona hacia una historia romántica, con la pequeña complicación de haber conocido al padre también antes que al hijo. Y no da para mucho más. Son evitables algunas cosas… toda la explicación pseudocientífica de los telómeros de los cromosomas y tal me parece una pérdida de tiempo y un esfuerzo absurdo. Consideremos la película como una fantasía, que no pasa nada, hace tiempo que está descrito y estudiado el fenómeno de la «suspensión temporal de la incredulidad», y a otra cosa mariposa.

… la campiña inglesa tiene un papel importante en el desarrollo de este drama romántico.
En el aspecto interpretativo, creo que Lively no consigue lo que pretende. Aunque sí que se luce como chica guapa y elegante, no nos transmite un intensidad especialmente fuerte en las emociones. No nos impresiona en especial. Cumple sin más. De hecho, el reparto de ancianos que le acompaña roban constantemente cada escena en la que se encuentran con cualquiera de los dos protagonsitas, Baker, Burstyn o Ford, se meriendan a cualquier de los guaperas más jóvenes de ambos sexos. De hecho, diría que es el mejor papel que le he visto a Harrison Ford desde hace muchos, muchos años, aunque sea en una película que finalmente me resulta anecdótica.
Dicho todo lo cual, tampoco estamos ante una mala película. Se deja ver con agrado. No nos sorprende, pero es un buen trabajo artesano que nos permite huir del calor de principios de agosto en una agradable tarde de cine con aire acondicionado. Quizá no guardemos un recuerdo imborrable del largometraje, pero no consideramos mal gastados los 5 euros y 80 céntimos que nos costó la entrada.
Mientras tanto la Lively tendrá que buscar otras armas para buscarse su sition entre las Jennifer Lawrence, Scarlett Johansson, Emma Stone, Shailene Woodley, Saoirse Ronan, Rooney Mara, Emma Watson, Carey Mulligan, Mia Wasikowska, Kristen Stewart, Keira Knightley, Gemma Arterton, Alicia Vikander, Ellen Paige,… por hablar de actrices anglófonas que están dando que hablar, si ningún orden en concreto, mayores de 20 y que como mucho tengan 30 años en estos momentos. Como decía, una generación de actrices jóvenes muy potente y con mucha diversidad.
Valoración
- Dirección: ***
- Interpretación: ***
- Valoración subjetiva: ***

Por ello, aquí os traigo algunas imágenes tomadas en la península de Cornualles y en el sur de Gales.
[Televisión] Cosas de series; de todo lo humano y lo… ¿robótico? ¿mutante?
TelevisiónSinceramente, la temporada veraniega, por lo menos en lo que a mi cartelera personal televisiva se refiere, se está poniendo interesante. A menos de una semana para el final de la segunda temporada de True Detective, si no la calidad de la primera al menos nos ha ofrecido espectacularidad. Y a dos episodios del final de Power, ya nos han planteado situaciones que nos podrían haber resultado satisfactorias incluso para un final de temporada. Y además tenemos ya algún final de temporada que comentar. Sobre series que merecen además un comentario reflexivo.
Sense8 – 1ª temporada (no confirmada todavía la segunda)
«Sense8» se pronuncia en inglés como «sensate», algo así como ‘senseit». El número 8 además es el de los protagonistas de la serie, un grupo de personajes dispersos por el mundo; Méjico, California, Chicago, Londres, Islandia, Berlín, India, Seul, Kenia… que nacieron todos el mismo día, un 8 de agosto; 8 del 8. No nos dice el año. Muy conveniente, porque se supone que todos tienen la misma edad, pero no lo aparentan… fallo de «casting». Pero vamos,… entre los 25 y los 35, aunque los actores y actrices que los interpretan sobrepasan todos el límite inferior de este intervalo mientras que otros lo sobrepasan. Entonces estaríamos hablando más bien entre los 28 y los 38… De todas las nacionalidades. El actor mejicano es español (Miguel Ángel Silvestre), la transexual californiana es californiana (Jamie Clayton), el policía de Chicago es tejano (Brian J. Smith), el keniata es londinense descendiente de caribeños (Aml Ameen), la surcoreana es surcoeana (Doona Bae o Bae Doona, léase algo así como ‘peduná’), la india es india (Tina Desai), la islandesa residente en Londres es inglesa de Bristol (Tuppence Middleton) y el berlinés es berlinés (Max Riemelt).
¿Y qué tienen en común? En el momento en que misteriosamente muere una mujer llamada Angelica (Daryl Hannah), descubren que todos ellos están interconectados mentalmente o telepáticamente. Y no sólo se puede comunicar entre sí en la distancia, sino que además puede transferirse unos a otros sus propias habilidades. Su capacidad para pelear, para hackear ordenadores, para disparar un arma, para conducir, para descerrajar un caja fuerte,… lo que sea. Estamos ante la enésima iteración del tema de superhumano. Del mutante con poderes especiales. Ciertamente sin ridículos trajes de colores, sin capas ni antifaces, como entre los procedentes del mundo de la historieta. Y por supuesto, perseguidos por un archienemigo que quiere acabar con ellos, el Sr. Whispers (Terrence Mann), que para colmo es uno de ellos (¿dónde he visto yo esto antes?).

«Sense8» está rodada en las nueve localizaciones reales en las que transcurren los hechos, entre ellas Berlín, la capital alemana.
Todo lo anterior lo metemos en una coctelera y lo adornamos con un poco de homosexualidad y transexualidad, amores imposibles, romances tórridos y romances platónicos, mucha presunta diversidad étnica y racial, y abundancia de referencias a la cultura pop del momento. Canciones pegadizas, especialmente. Y como ya he insinuado algo de sexo más o menos tórrido, que siempre sirve para enganchar audiencia. Qué mejor que una escena lésbica, con un primer plano de un pene artificial montado en un arnés, para «calentar» la audiencia. O unas escenas en una piscina con una «manage a quatre» aunque sea por vía telepática.
Se me olvidaba, este invento es de los Wachowski de la mano J. Michael Straczynski (le debemos Babylon 5, que muchos admiran, yo no tanto, y algún bodrio que otro en el campo de los superhéroes). Y hereda visual y conceptualmente mucho de lo que los primeros hicieron con el alemán Tom Tykwer (que también dirige un par de episodios) en la aceptable aunque no del todo conseguida adaptación de la excelente novela El atlas de las nubes.
Qué me parece a mí todo esto… Vamos a ver… de la misma forma que hay comida para gurmés y comida rápida, que no tiene porque ser mala,… o que existe la música culta de calidad, la clásica o el jazz, y luego esta el pop, que no tiene porque sonar mal… Pues todo lo que tocan los Wachowski es lo mismo. Pueda estar mejor o peor, puede ser pretencioso o visualmente interesante, puede entretener o aburrir como una ostra,… pero en general no pasan de ser algo parecido al «pop». Un producto de consumo fácil, con mucha menos profundidad de la que aparenta, muchos lugares comunes, que se nos pega con facilidad, pero probablemente lo olvidaremos también con facilidad, con menos originalidad de lo que aparenta porque pica de los caminos ya trillados por otros. Casi todo lo que han hecho los Wachowski tiene características similares. Incluso la tan admirada por algunos Matrix, que a mí nunca me ha convencido gran cosa. Y menos con el «caracartón» de protagonista. Pero por lo menos, en lo que nos toca en esta ocasión, para refrescar los calores del verano, entretiene. Y aunque peca de alguna irregularidad en el desarrollo de la historia, y especialmente en el interés de algunos de los ochos «sensates» (véase la pastosa historia de los mejicanos), también tiene momentos muy divertidos, con finales de episodios muy entretenidos, incluido el del que termina la temporada.
No se ha confirmado todavía su regreso en una segunda temporada. Si no vuelve, no penaré. Pero si vuelve Confirmada la segunda temporada, supongo que la veré. Entretenimiento.
Por cierto, parece obligado pronunciarse por el «sensate» favorito… Para mí, las chicas claro; Sun (Bae Doona), Riley (Middleton) y una que no es «sensate», sino la pareja de una de ellos, la antigua «companion» del Doctor, Amanita (Freema Agyeman), personaje secundario pero mucho más dinámico e interesante que alguno de los primarios.
Sigo diciendo que para mí lo mejor de los Wachowski fue Bound (Lazos ardientes),… película de lo más «noir» con alto voltaje sexual, que no se parece en nada al resto de lo que han hecho.

Una de las localizaciones es el Monumento a los judíos asesinados en Europa; aunque no tengo claro si usan el monumento real o algún decorado similar… detalles que me han chocado… yo que lo he visitado en tres ocasiones.
Humans – 1ª temporada (volverá para una 2ª temporada)
Si la anterior era la enésima vuelta de tuerca al tema de los mutantes y de la nueva humanidad, o lo que viene después del ser humano, en esta ocasión estamos ante una nueva iteración sobre el concepto de la inteligencia artificial y los posibles difusos límites entre una inteligencia artificial autoconsciente y emocional y el ser humano. Los «synths» (sintéticos) de Humans son más que dignos descendientes de los replicantes, los cylones de nueva generación y otros diversos antecesores, televisivos, cinematográficos y literarios, de seres artificiales de aspecto humano e inteligencia avanzada.
Pero si en otras producciones nos hemos movido en mundos futuristas, mundos alienígenas, futuros o pasados más o menos remotos, «space operas», en esta ocasión nos movemos en un presente alternativo, con tonos distópicos, y el principal escenario de la acción son las calles de Londres y los domicilios de la más o menos aburrida clase media británica. Nos sitúa los dilemas asociados al reconocimiento de la inteligencia en seres que no son biológicamente humanos en el cuarto de estar o en la cocina de casa. Al mismo tiempo que se genera una trama con un nivel de suspense adecuado para esperar con ganas el episodio de la semana siguiente.
Producción británica, que es casi sinónimo de producción de calidad y bien interpretada. Detrás del tema principal, sobre la humanidad de los «humanos» sintéticos, arañamos unas veces más superficialmente otras menos con algunas cuestiones absolutamente humanas: el abuso o violencia sexual, tanto doméstica como en el entorno de la prostitución; la violencia absurda hacia aquellos seres que consideramos inferiores; la soledad y la necesidad de sustitutos para rellenar los huecos dejados por la ausencia de otros seres humanos; las relaciones conyugales y familiares; el amor y la lealtad fraterna, cuando el concepto de «hermano» o «hermana» se extiende más allá de los tópicos culturales.
Es adaptación de una producción sueca, Äkta människor (Gente real), que dicen que está igual de bien o mejor. Incluso más incisiva a la hora de tratar los temas. Ganas me entran de verla…
Mucho menos espectacular, pero mucho más profunda y reflexiva que la producción de los Wachowski, e igualmente entretenida.

En cualquier caso, la simbología me parece un poco cogida por los pelos, no del todo apropiada, y seguramente banalizada por esa tendencia de los Wachowski a convertilo todo en algo «pop».
[Libro] La extraña
LiteraturaCuando volví de vacaciones a finales de junio, decidí rearmar mi lista de lecturas para unos meses. Por algún motivo recordé en ese momento el buen sabor de boca que me dejaron hace unos años unos cuantos libros de la Editorial Salamandra, y por ello decidí mirar a ver qué tenía que ofrecer en estos momentos esta editorial. Y decidí repetir con un escritor húngaro, Sándor Márai, del que leí alguna novela hace algún tiempo. Y aquí os lo cuento.
La extraña
Sándor Márai; traducción de Mária Szijj y J. M. González Trevejo
Ediciones Salamandra, 2008
Edición electrónica

Siendo Sándor Márai húngaro, visitaremos el país magiar. En el encabezamiento, el coqueto pueblo de Szentendre, y aquí el interior de los baños Szechenyi en Budapest.
Viktor Askenasi es un profesor aburguesado que se encuentra de vacaciones en la costa dálmata, en solitario, en un hotel en el que se aprecian otros burgueses centroeuropeos con sus convenciones y sus minucias. Ya en la cincuentena, le ha llevado allí la necesidad de desahogarse de su situación familiar y amorosa. Conoció algún tiempo atrás a una mujer, una bailarina, que lle llevó a romper con su esposa y sus hijos, y a vivir una vida más mundana. Pero también, como consecuencia, a sufrir el ostracismo social de sus amigos y colegas. Ahora en este hotel del Mediterráneo, se cruzará con un extraña, a la que seguirá a la habitación, y a cuya puerta llamará.
En un relato que casi puede encuadrarse dentro del concepto de novela corta, Márai consigue transportarnos a la angustia vital de este hombre burgués, que probablemente nunca nos hubiera interesado especialmente, y cuyas acciones le han llevado a una situación en la que se siente desconcertado y agobiado.

Márai era étnicamente húngaro aunque descendiente de alemanes, pero nació en una población situada en la actual Eslovaquia… Follón centroeuropeo. En la fotografía, el puente que une Esztergom en Hungría con Štúrovo en Eslovaquia, sobre el río Danubio.
Es además una novela de misterio, en la que se nos plantea la duda de lo que sucede tras la puerta de esa habitación de hotel, desvelada sólo en cierta medida. Entre las reflexiones sobre el momento actual del personaje, los flashbacks en su memoria nos ayudarán a comprender mejor quién es y cómo ha llegado allí, aunque no necesariamente a simpatizar con él. Puesto que en el fondo, este burgués profesor es el representante de los vicios, hipocresías y defectos de una burguesía europea en el periodo de entreguerras.
La novela se lee bien, intriga lo suficiente, y obliga al lector a sacar sus propias conclusiones y análisis de lo que sucede tras esa puerta de hotel y cuales de los factores vitales de Askenasi son los que le llevan a actuar como actúa. A mí me ha parecido bastante interesante.

Más al sur, podemos pasear por las tranquilas calles de la ciudad de Pécs.
[Fotografía] Libros de fotografía: Man Ray, Madoz, Plossu, Salgado, García Alix, Muller, Périer,… y otros – Fotografía y otras artes visuales
FotografíaHacía mucho tiempo que no redactaba un artículo con una recensión de mis últimas adquisiciones de libros de fotografía, así que he tenido que comprimir siete libros en uno sólo. Aunque algunos son pequeñas publicaciones o catálogos de exposiciones.
Acompaño de algunas fotografías de una tarde de tormenta desde el balcón de casa.

[Cine] A primera vista (Hoje eu quero voltar sozinho, 2014)
CineA primera vista (Hoje eu quero voltar sozinho, 2014): vista el 30 de julio de 2015.
Casi se nos escapa esta película de cartelera, una de las pocas que han venido con comentarios relativamente elogiosos que no sean de animación en este verano. Película brasileña que vimos en versión doblada al castellano, pero que como llega con retraso, no es difícil encontrar por ahí en versión original en portugués. Lo cierto es que este domingo me vi esa versión original que la cicatería de los distribuidores y la incultura cinematográfica del país nos hurta. En cualquier caso, la crítica había sido entre benevolente y entusiasta con este filme que nos viene de la potencia sudamericana, dirigido por Daniel Ribeiro, y que para empezar sufre los desmanes de ese peligroso criminal que se dedica a poner los títulos en castellano en España. Tiene mucho más sentido el título en portugués, que podría traducirse sin muchos problemas al castellano simplemente con un «Hoy quiero volver sólo», que expresa mucho mejor las cosas que le pasan al protagonista del filme. Pero es un caso perdido, el de la traducción de los títulos.

No tengo fotografías propias de Brasil, y menos de Sâo Paulo; así que puestos a buscar algún lugar lusófono que mejor que Lisboa.
He de decir que este largometraje estrenado en 2014, se basa en un cortometraje previo del mismo director con el mismo trío protagonista y que se titulaba Eu não quero voltar sozinho. Un clara diferencia… que se justifica a medias. Las dos historias son similares aunque el desenlace es suficientemente distinto como para que merezca la pena ver ambos filmes. Como está disponible en Youtube, os lo dejo, dejando a cada cual el criterio de si quiere verlo antes o después de la película, o en lugar de la película, o nada de lo anterior. Si se abre en Youtube, pueden activarse los subtitulos en castellano.
La historia nos habla de Leo (Ghilherme Lobo), un adolescente de unos quince años ciego, que vive muy protegido por sus padres, y cuya mejor amiga, Giovanna (Tess Amorim), le hace de lazarillo en lo que se refiere a la vida escolar. Salvo algún roce con algún tonto del colegio que hace bromas a costa de su ceguera, tiene una vida razonablemente buena. Vida que se ve alterada por la llegada al colegio de Gabriel (Fabio Audi), un guapo chaval que va a revolucionar la vida del entorno. Se hará buen amigo de Leo, provocará la atracción de Giovanna y luego sus celos cuando esta sienta que es suplantada por él en su amistad por Leo, y que con el tiempo despertará sentimientos en Leo que van más allá de la amistad.
Estamos ante una historia pequeña. Sencilla. Estamos ante un momento clave en la vida de los tres adolescentes de la película. Han abandonado definitivamente la infancia, lo expresa muy claramente el padre de Leo cuando comenta cómo Giovanna se ha convertido en poco tiempo en una mujer, pero todavía no han construido ni aclarado su mundo afectivo. Leo tiene miedo de que su ceguera le impida entablar relaciones afectivas, y al mismo tiempo empieza a reivindicar su autonomía, quiere más libertad, quiere liberarse de la excesiva protección de su entorno, especialmente su madre. Giovanna se ve claramente atraída por Leo, pero la presencia de Gabriel la confunde, y manifiesta celos cuando otras chicas prestan atención a ambos mozos. Gabriel es un misterio, del que sólo nos queda claro que no es Giovanna quien le atrae,… ¿pero quien? La cinta está rodada con sencillez, pero efectividad, en un entorno de un sociedad calmada, burguesa, sin otros problemas, centrándose en el desarrollo de los adolescentes. Estamos lejos de otros filmes brasileños en los que surgen los importantes problemas sociales y las desigualdades del país. Aquí estamos entre una clase media, de descendientes de europeos, que vive bien.

Nos pasearemos por la Alfama y los alrededores de la Sé, con sus coquetos tranvías.
Evidentemente, el peso de la película lo llevan los tres adolescentes, especialmente el protagonista, Ghuilherme Lobo, que por momentos nos lleva a creer que es realmente ciego como su personaje. A pesar de que le toca en algunos momentos ser la antipática del grupo, aunque con buen corazón, Tess Amorim también muestra muy buenas maneras, siendo el más flojo del grupo Fabio Audi, sin que por ello signifique que lo haga mal, ni mucho menos.
Sí que creo conveniente hacer un comentario respecto al cortometraje que da origen a la película. Los tres protagonistas participan en ambas producciones. Pero en el cortometraje tenían los 14 o 15 años que representan en sus personajes, estando menos maduros interpretativamente, pero más naturales y más creibles. En el largometraje están un poquito mayores ya.
Globalmente, considera que es una película maja de ver, que te deja un buen sabor de boca por ese tono de buen rollo que mantiene constantemente. Existen conflictos, pero no acritudes, y se van resolviendo poco a poco en un proceso de maduración y aceptación personal muy optimista, especialmente marcado por la proactividad que el personaje principal va adoptando poco a poco con respecto a su propia vida. No sé si la encuentro tan maravillosa de las maravillas como algunas criticas que he leído por ahí, pero está muy bien. Es una buena recomendación para este verano, si no ha desaparecido ya de las carteleras. Por cierto, el desenlace del corto me parece más majete…
Valoración
- Dirección: ***
- Interpretación: ****
- Valoración subjetiva: ****

Aunque supongo que para el personaje de Leo, discapacitado visual, le sería bastante más peliagudo moverse por estos barrios lisboetas que por las pulcras urbanizaciones paulistas que nos muestran en la película.
[Fotografía] Recomendaciones semanales: del 26 de julio al 2 de agosto de 2015 – Fotografía y otras artes visuales
FotografíaA pesar de estar a mitad del verano, se supone que con el «mundo» al ralentí, no dejan de aparecer noticias y propuestas interesantes en el mundo de la fotografía, que intento recoger modestamente todos los domingos. Acompaño con unos paisajes cerca de Pozuelo de Aragón que me hacen reflexionar sobre lo «destrozones» que somos en esta tierra…








