[Fotografía] Revistas online; cosas que he visto en septiembre

Fotografía

Últimamente tengo menos tiempo libre por diversos motivos y lo noto. Alguna de las cosas que traigo hoy hace tiempo que las tenía en reserva. Y otras, tengo poco tiempo para verlas. Me refiero a las revistas online dedicadas a la fotografía que voy hojeando poco a poco. Revistas que no tiene equivalente en papel. Os traigo tres.

Fraction Magazine – 42

Un clásico ya en estas páginas. De aparición mensual. En este número de septiembre, algunos retratos interesantes en Cloister the Mews de Natalie Obermaier. No me ha inspirado mucho el número de este mes, la verdad.

Fraction Magazine Japan – 6

De aparición trimestral, la versión asiática del anterior me suele gustar más. Pero en esta ocasión tampoco, me ha inspirado en exceso. No he encontrado esos destellos que nos ofrecen los autores japoneses o asiáticos en general que los diferencia de los occidentales. Quizá los panoramas marinos de la serie Peace Land de Mikio Hasui. O los coloridos grafismos que Naoki Shimomoto encuentra en la obsolescencia de algunas estructuras de las ciudades modernas en su serie Deserted Memories.

Galli Magazine

En forma de blog fotográfico, cada entrada nos muestra un porfolio de la obra de un fotógrafo indio o con un tema relacionado con la India. Entre las entradas de los últimos meses me ha gustado The Brides of Aravan de Senthil Kumaran, transexuales en la India en un interesante reportaje. A partir de ahora, los hallazgos de esta revista online irán a parar a mis entradas de los domingos.

Y por hoy, poco más. Lo dicho, poco tiempo para ver cosas nuevas.

Un vapor navega por el lago Lemán en Suiza ante el castillo de Chillon.

[Cine] Brave (2012)

Cine

Brave (2012), 16 de septiembre de 2012.

Mañana de domingo familiar. Primero al Museo del fuego y de los bomberos de Zaragoza, como os contaba ayer, con mi sobrino de tres años y medio. Y luego al cine, sumando algún miembro más de la familia. Al peque le gusta el cine, a pesar de los jovencito que es. Este verano ha empezado a ir. Aunque esta es la primera vez que yo le acompaño también. Lo cual es una excusa para ver una de animación. Que a priori, siendo de Pixar, tenía buena pinta.

Estamos en un reino indeterminado en un ambiente medieval, donde funciona en cierto grado la magia, pero que por lo demás tiene todo el aspecto de ser una versión de Escocia. Y allí vive la princesa Merida (vaya nombre más extremeño que le han puesto), con su padre el rei Fergus, su madre la reina Elinor, y tres hermanitos pequeños muy traviesos. Al rey le falta una pierna por un enfrentamiento con un terrible oso. Y Merida prefiere más las actividades de aire libre como montar a caballo,  tirar con arco y trepar montes, que las apropiadas para una señorita según su madre. Que además pretende casarla, para lo cual monta una fiesta donde se presentarán tres pretendientes, a cual menos atractivo, todo hay que decirlo. La princesa se rebela, acaba huyendo y trabando relación con una bruja a la que pedirá un conjuro para cambiar a su madre y evitar el lío del compromiso. Pero las cosas no saldrán como pensaba, y se complicarán, de un modo muy plantígrado.

No perderé mucho tiempo en el comentario de esta película. De factura digital, no destaca especialmente en lo técnico ni por lo bueno ni por lo malo. Pero más que el estilo original y fresco de Pixar, se nota más la moralina conservadora de Disney. No como en productos de antaño, pero por ahí van los tiros. El guion tampoco destaca especialmente, y tiene muchos momentos con diálogos excesivos y algo aburridos. Por lo demás, el carácter de los «escoceses» está lleno de un montón de estereotipos, pero en muchas ocasiones me dio en pensar que se parecían más a los irreductibles galos de cierta aldea armoricana que a otra cosa. Tiene algún golpe gracioso eso sí, y me parece simpágico que uno de los lores con hijo pretendiente sea del clan MacGuffin. O que otro sea del clan Macintosh.

Es una pena no poder disfrutar de las voces originales. Merida tiene la voz de la escocesa Kelly Macdonald, actriz a la que tengo en gran aprecio desde los tiempso de Trainspotting, y la reina Elinor disfruta de las cuerdas vocales de Emma Thompson, por poner algunos ejemplos. Pero bueno, teniendo en cuenta que es para niños…

En fin, película para niños, y probablemente más para niñas. Que supongo que disfrutarán mientras se empapuzan de palomitas o porquerías similares. Para adultos,… si hay alguno que le gusta… no sé… hay que madurar. Película regular, que encima está dirigida entre tres, que ni me molesto en mencionar.

Valoración

  • Dirección: ***
  • Interpretación: no valorable
  • Valoración subjetiva: **

Vámonos a Escocia. A Loch Ness. Si monstruo. Sólo con un ave que levanta el vuelo ante nuestra presencia.

[Fotografía] Recomendaciones semanales; encontrado en internet

Fotografía

Vuelvo como todos los domingos, a una hora desacostumbrada, a repasar los fotógrafos que me han interesado de lo que se ha publicado esta semana en internet.

En más de una ocasión he comentado lo que me atrae la fotografía japonesa y su estética. Utilizando procesos tradicionales como las platinotipias o los cianotipos, Kenro Izu nos ofrece unos paisajes, unas naturalezas muertas y unos desnudos muy interesantes. Me ha gustado sobre todo su serie Sacred Places. Vía Rafael Roa.

Creo que a Lucas Foglia ya me lo he encontrado más de una vez por la web, especialmente su serie A Natural Order. Buscando a las gentes que han adoptado formas de vidas naturistas, alejándose de lo tecnológico. En Estados Unidos, claro. Vía Rafael Roa.

Elizabeth Avedon dedica una entrada a Gordon Parks, fotógrafo afroamericano, que lo mismo denunciaba el segregacionismo racial con interesantes fotos en color, que seguía a Ingrid Bergman al rodaje en Stromboli, que fotografiaba maniquíes para revistas de moda. Y todo ello con calidad.

Museo del fuego y de los bomberos

Esta mañana ha sido familiar. He visitado de nuevo el Museo del Fuego y de los Bomberos de Zaragoza, pero acompañado de mi sobrinillo de tres años y medio. Estupendo.

Gerhard Richter no es fotógrafo sino pintor. Lo conocí hace unos años de visita en Viena a una exposción del este artista alemán en Albertina. Y me llamaron mucho la atención, y me gustaron sus pinturas basadas en fotografías. Me lo ha recordado Le Journal de la Photographie.

Tim Matsui ha recibido reconocimiento reciencientemente por su trabajo de fotografía documental sobre la prostitución de chicas menores de edad, muchas de ellas realmente jóvenes. Nos informaban de ello en Lenscratch y nos ofrecían algunas muestras del trabajo que indica que el reconocimiento es muy merecido.

La Lettre de la Photographie nos muestra los fines de semana porfolios de fotógrafos poco conocidos, aficionados muchos de ellos, que remiten sus trabajos. En los últimos tiempos no me había fijado mucho en ellos, o no me habían interesado, pero este fin de semana he ecnontrado tres que me han interesado.

Go de Monika Jurczyk.

Sous la pluie de Christophe Jacrot.

White Noise de Sander Meisner.

La semana que viene más. Espero.

Museo del fuego y de los bomberos

Aparte de un incidente con una ruidosa sirena de uno de los camiones todo perfecto. Luego nos hemos ido al cine, pero la película os la cuento mañana.

[Ciencia] Para hoy sábado, un viaje a las estrellas

Ciencia

Viaje a las estrellas. Quizá uno de los principales anhelos de los seres humanos. Que de momento, y ya hace cuarenta años de eso, en persona sólo hemos llegado a nuestro satélite, que es casi como no haber salido del portal de casa. Pero hay otras formas de viajar por el espacio. Visualmente, e incluyo aquí no sólo la recepción del espectro visible sino de todo el espectro electromagnético, no nos pongamos restrictivos a estas alturas, robóticamente, o con la imaginación. En los últimos días han ido apareciendo algunas noticias o artículos que me han llamado la atención al respecto y las quiero comentar aquí.

El excelente fotoblog In Focus de The Atlantic ha publicado estos días una entrada titulada Around the solar system, en el que se incluyen algunas de las imágenes más novedosas de lo que pasa por el vecindario en los últimos tiempos. Desde el Sol mandando enormes cantidades de materia al espacio en tremendas eyecciones de masa coronal, hasta las imágenes de la familia numerosa de Plutón, quien para muchos de nosotros, por motivos sentimentales, siempres será un planeta, digan lo que digan los astrónomos. Pasando eso sí por los autorretratos que la Curiosity nos está mandando desde la superficie de Marte, como si estuviera ahí de vacaciones en lugar de para trabajar en un duro entorno al que los seres humanos todavía no osamos ir en carne y hueso.

Aprovechando que la NASA pone sus imágenes en el dominio público con el fin de favorecer la difusión de la ciencia y de sus actividades, no me resisto a poner aquí un par de sus imágenes.

Enorme y reciente eyección de masa coronal en el Sol, que según me enseñaron los padres escolapios es el astro que nos da luz y calor. Y algunas cosas más, sé ahora. (NASA/GSFC/SDO)

Wall·E, perdón, quiero decir Curiosity, nos manda una postal de recuerdo desde Marte, donde pasa sus vacaciones científicas. (NASA/JPL-Caltech/Malin Space Science Systems)

También, a través de APOD (Astronomical picture of the day), nos llegan noticias de las sondas Voyager. A pesar de que una de ellas se encuentra ya a la enorme distancia de 18.000 millones de kilómetros, en realidad están aquí al lado, la luz solo tarda 17 horas en recorrer esa distancia, sigue mandando datos. Y uno de de ellos es la medición del flujo de partículas de alta energía que fluyen en el espacio interestelar en el que se encuentra. Pues bien, en los últimos meses está detectando un incremento constante y considerable en este flujo, lo cual nos habla de que está abandonando la heliosfera. La esfera de influencia del Sol. Efectivamente, podríamos decir que está abandonando el sistema solar. Ya ha salido del vecindario. Con tecnologías de los años 70.

Finalmente, hace unos días Microsiervos nos habló de nuevo de la ecuación de Drake, una ecuación que se supone puede servir para estimar cuántas civilizaciones con capacidad de comunicación interestelar puede haber en la galaxia, y la probabilidad de que entremos en contacto con ellas. Nos redirigía hacia una infografía en la cual se puede jugar con los distintos parámetros, si tienes una idea de lo que estas haciendo, y te salía una estimación de planetas habitados por una civilización inteligente con capacidad de comunicación. A mi me salía un número de 4 para toda la galaxia, lo cual está cerca de la estimación más pesimista. Y convierte la búsqueda de estas civilizaciones en aquello de buscar una aguja en un pajar. Siempre he sido muy escéptico, no con la posibilidad de existencia de vida o vida inteligente en algo tan grande como es el universo, sino en la probabilidad de encontrarnos. Desgraciadamente, el universo, incluso nuestra galaxia, es enorme, y la luz se arrastra por el con la desesperante lentitud que imponen los aproximadamente 300.000 km/s que tiene de velocidad en el vacío. Y hay otra fuente en mi pesimismo… tal y como nos comportamos, me resulta difícil pensar que las civilizaciones con capacidad de comunicarse duren mucho. Realmente apenas llevamos unas decenas de años con esa capacidad, y de forma modesta. Y hay datos pesimistas sobre cuánto puede durar esta civilización.

Broken Chair

Mientras las noticias de la ciencia nos dan siempre un empujoncito a la autoestima como seres humanos por nuestra capacidad de conocer, aprender y explorar, la «Broken Chair» nos recuerda lo burros que podemos llegar a ser, especialmente en nuestra capacidad de arremeter contra nuestros semejantes. Está levantada en memoria de las víctimas de los dispositivos explosivos antipersona. La especie humana parece que va dando un pasito hacia delante, y dos hacia atrás.

[Libros] Hopper, y algo más

Arte, Literatura

Cuando en el título de esta entrada digo Hopper, no quiere decir que vaya a hablar del famoso pintor norteamericano. Digo que voy a hablar de un libro que se titula así. Y que claro, trata sobre el famoso pintor norteamericano. Cuando en el título de la esta entrada digo «…, y algo más», es porque el libro lo compré el día que estuve visitando la exposición del pintor en Madrid. Pero no fue el único libro que compré aquel día o relacionado con aquel día. Y os hablaré del libro, y poquito de los otros.

Hopper
Mark Strand (traducción, Juan Antonio Montiel)
Editorial Lumen; Barcelona, 2012 (2ª edición)
ISBN: 9788426416476

Este librito, cuyas primeras ediciones originales tienen años, y cuya primera edición en español data de hace cuatro años, parece que se ha reeditado oportunamente (u oportunistamente) aprovechando la exposición ya comentada. Está escrito por el poeta norteamericano Mark Strand, aunque básicamente es un ensayo sobre la forma, la estética y los posibles significados de algunas de las pinturas de Edward Hopper. Los cuadros de este pintor han suscitado siempre mucho debate sobre lo que realmente representaban las escenas que nos muestran. Siempre con un tono relativamente melancólico, no pocas veces misteriosos, y cuando pinta personas en sus cuadros, estas adoptan en no pocas ocasiones actitudes que nos llevan a preguntarnos sobre lo que hacen o lo que piensan. Y sobre esto reflexiona por escrito Strand. Pero lo hace basándose fundamentalmente en los aspectos formales, en las elecciones estéticas del pintor. Sin dejarse llevar por la imaginación más allá de los límites que racionalmente sugieren las escenas descritas y comentadas.

Particularmente, he encontrado la lectura interesante. Cada cuadro reseñado lo es durante breves páginas. Muchas veces una o dos sólo. Lo que hace posible una lectura progresiva del libro, dando tiempo a reflexionar sobre lo propuesto. Particularmente, creo que nunca he desarrollado historias a partir de los cuadros del pintor. Acepto sus escenas, acepto sus personajes, pero los acepto desde un punto de vista estético. Me gustan sus formas, sus proporciones y sobre todo sus luces. Ir más allá, salvo cuando el título que el propio autor otorga al cuadro sugiere algo, nunca ha sido lo mismo. Pero escuchar lo que otro ve, especialmente cuando es alguien que evidentemente tiene una formación y un conocimiento muy superior al lector, es muy ilustrativo.

Me gustaría poder recomendar el libro a todo el mundo. Pero el ensayo, y menos tan especializado, no suele ser del gusto de la mayor parte de los potenciales lectores. Así que me limitaré a recomendarlo a quienes interese el tema.

Plató reproduciendo "Sol de la mañana"

Plató en el Museo Thyssen que reproduce las condiciones de iluminación del cuadro de Hopper, «Sol de la mañana»

Ese mismo día, en Madrid compré los siguientes libros:

El catálogo de la exposición que en la sala Azca de la Fundación Mapfre se dedicaba a Jitka Hanzlová. Si la fotógrafa te gusta, el catálogo esta muy bien presentado, con muy buena calidad de impresión, y puede considerarse una buena adición para mi biblioteca de libros de fotografía.

El catálogo de la exposición de Hopper… bueno, este no lo compré en Madrid. Sabía que lo vendían en alguna librería de Zaragoza y me ahorre el peso de traerlo. También está bastante bien.

Un libro, al que le tengo que dedicar tiempo, y que pasará tiempo antes de que lo aproveche por completo. Lo vi en la sede de la Librería La Central en la Fundación Mapfre – Recoletos, donde fuimos a por el catálogo de Hanzlová, y lo compré. Probablemente, uno de mis compositores de música clásica que más mi gusta, si no realmente mi favorito, es Claude Debussy. Pues bien, en una edición de Skira Flammarion, el Museo de la Orangerie y el Museo de Orsay, encontramos el título Debussy: La musique et les arts. Y en el encontramos un amplio repaso de obras de arte que influyeron en la música de Debussy, en las que influyó el músico francés. Abarca pintura, escultura, grabado, artes escénicas,… Y sobre todo, aunque no exclusivamente se trata de obras de arte a caballo entre el siglo XIX y el XX. Gran variedad de estilos y temas, pero muy interesante. Mucho que leer, y muchas obras que contemplar en sus páginas.

Nave principal del Museo de Orsay

Nave principal del Museo de Orsay en París.

 

[Televisión] Cosas de series; Futurama, 100 capitulos para Nancy y algunas novedades

Televisión

En primer lugar, algo imperdonable, pero en la entrada de la semana pasada dedicada a viajeros en el tiempo, de forma absolutamente increible, olvidé reseñar la 7ª temporada de mi muy querida Futurama. Existen opiniones de todo tipo sobre si estas últimas temporadas de su época fuera de Fox son mejores o peores. Me da igual. A mí me siguen divirtiendo. Y creo que esta séptima temporada ha tenido momentos realmente muy buenos, que no me hacen añorar buenos tiempos. Creo que sigue con su razonable cantidad de mala baba e ironía, tan imprescindible en los tiempos que corren. La capacidad de reirse de uno mismo, y básicamente la serie se ríe de todos nosostros que somos la humanidad, es algo imprescindible para llevar la vida con dignidad. Si además tiene sus puntos friquis, pues mejor que mejor. Así que ya sabéis niños, si os gustan los dibujos animados, hay que verla. Si os gusta la ciencia ficción, hay que verla. Si os gusta el humor negro y la ironía, hay que verla. Si os gustan las historias divertidas que caben en poco más de 20 minutos, hay que verla. Si no os gusta nada de lo anterior,… no sé para qué vivís. Mejor acabad con vuestros días de sufrimiento por la vía rápida.

A quien le quedan cuatro telediarios, probablemente de forma literal es a Nancy Botwin (Mary-Louise Parker) y su heterodoxa familia. El antepenúltimo capítulo de Weeds, o el penúltimo, que no sé si el doble final lo contarán como uno o como dos, coincidió con el número 100. Y la familia volvió a una regenerada Agrestic, rebautizada Regrestic. Y se encontraron con viejos «amigos». Indudablemente, preparando el cierre. La semana que viene os lo cuento. Espero. Se merecerá una entrada especial.

Algunas novedades. Revolution, la enésima «sustituta» de Lost. El piloto es una sosada. No la incluyo en mis planes de futuro. Si luego dicen que esta bien, igual la repesco. Pero de momento no hay nada que me atraiga de este mundo postapocalíptico.

¿Cómo ve a Sherlock Holmes los yanquis, si viviese en nuestros días? Supongo que como en Elementary. Es decir como alguien que no tiene absolutamente nada que ver con el famoso detective. Y la nueva doctora Watson (Lucy Liu) está más buena que el tradicional pero es que tampoco tiene nada que ver con el tradicional. Tampoco va a estar incluida en principio en mis cartelera seriéfila. Ya dije que voy a ser muy selectivo.

También he visto un capítulo de The Bletchley Circle, drama detectivesco británico situado en la posguerra, en la que las protagonistas son antiguas empleadas de Bletchley Park reconvertidas en amas de casa aburridas, y que se ponen a investigar a un asesino en serie. No está mal hecho, y está bien interpretada. Pero no me ha enganchado. Así que,… adiós.

Todavía no he decido nada sobre The New Normal, nueva familia atípica que supongo viene a hacer la competencia a Moder Family. Aunque lo dudo.

Que expeditivo estoy, ¿no? Por cierto, avisé del riesgo de Doctor Who de tirar por lo espectacular olvidando las buenas historias. Su historia con dinosaurios en una nave espacial fue entretenida y espectacular. Pero algunos peldaños por debajo de las expectativas que pone uno en esta serie. Lo dicho.

A la orilla del Canal

Atardecer sobre el río Huerva y los Pinares de Venecia en Zaragoza.

[Fotos] Recordando mi Tumblr, De viaje con Carlos

Fotografía personal

Tengo unas cuantas cosas que contar, pero poco tiempo. De todos modos, os dejo unas fotos y el recuerdo de que podéis ver fotografías de mis viajes desde 1989 hasta la fecha en De viaje con Carlos.

Vista panorámica de Segovia desde el Alcázar, abril de 1990.

Puerta de la Catedral en Canterbury, agosto de 1989.

La Sirenita de Copenhague posa para la foto, julio de 2011.

Cruce de trenes del Flåmsbana en Noruega, julio de 2012.

El Mont-Blanc asoma detrás de la ciudad de Ginebra, agosto de 2012.

[Cine] The Deep Blue Sea (2011)

Cine

The Deep Blue Sea (2011), 10 de septiembre de 2012.

Iba a decir que conservo el título original porque vemos la película en versión original, pero por razones que desconozco en la cartelera española la versión doblada conserva el título original. A nadie se le ha ocurrido llamarla El profundo mar azul, que sería lo literal, o cualquier otro desmán de los que son habituales por estos pagos. Pero el caso es que esta película británica que ya hace tiempo que se estrenó en el mundo, no ha encontrado sitio en la cartelera española hasta finales de este apático verano cinematográfico. Lo cierto es que nos sentimos atraidos por el reparto y, aunque la hora a la que proyectan la versión original es intempestiva, pues vamos a ello. Prácticamente solicos. Claro.

La película nos cuenta un par de días en la vida de Hester Collyer (Rachel Weisz), que en el Londres de la posguerra temprana intenta suicidarse en la habitación que comparte con su amante Freddie (Tom Hiddleston), aunque lo impiden la patrona y un vecino. A partir de ahí y mediante flashbacks, conoceremos la historia de los meses previos en los que muerta de aburrimiento en su matrimonio con el honesto pero desapasionado juez Sir William Collier (Simon Russell Beale), acaba enamorándose de un dicharachero e infantil antiguo piloto de la RAF, el mencionado Freddie. Intercalada entre los flashbacks vemos como se desarrollan los eventos tras el intento de suicidio, de modo que podemos comparar la expectivas de Hester cuando comenzó su affair con el guapo piloto con su depresión actual que le ha llevado al intento de suicidio.

Vamos a ver. La historia, dirigida por Terence Davies, no da para mucho más de lo que es la poco más de hora y media que dura. Rodada de forma técnicamente perfecta, con excelente iluminación, excelente diseño de producción, el conjunto sin embargo resulta extremadamente frío, frente a las pasiones que se supone han agitado la relación entre los tres personajes principales del relato. Es como si se hubiese contagiado del carácter del juez.

Así pues, lo único que se salva es ver la interpretación de los protagonistas. Rachel Weisz hace tiempo que ha demostrado que es una excelente actriz, aunque aquí no consigue contagiar el apasionado carácter de su personaje al conjunto del filme. El resto del reparto tiene esa solidez propia de los elencos británicos que pueden con todo. Incluso con los planteamientos más aburridos.

Salvo para fanáticos de los dramas de época, o de alguno de los intérpretes, no es una película que me atreva a recomendar especialmente. Un poco, una decepción. Uno espera más de las producciones británicas.

Valoración

  • Dirección: **
  • Interpretación: ****
  • Valoración subjetiva: **
Puente de la Torre

Ya que estamos, caigamos en el topicazo. Tomo Puente de la Torre (el que todo el mundo llama en este país el Puente de Londres, como si no hubiera más).

[Fotografía] Exposición «Duffy retrospectiva» en el Centro de Historias de Zaragoza

Fotografía

Desde ya lo digo. Si os gusta la fotografía y vivís en Zaragoza, u os pilla de paso o a mano, no podéis dejar de visitar la exposición retrospectiva dedicada a Bryan Duffy que encontramos en estos días en el Centro de Historias de Zaragoza. Pero es que si la fotografía no os atrae como suficiente motivación para visitarla, este fue uno de los fotógrafos que revolucionaron el mundo de la moda, la fotografía del famoseo y de publicidad en los años 60. Así que hay mucho famosillo retratado. Apta para curiosones. Todos contentos.

Estará entre el 6 de septiembre y el 11 de noviembre de 2012. Dos mesecillos. Hay tiempo. Pero cuidado que el tiempo pasa rápido.

El resto os lo cuento con fotos. A por cierto, no dudéis en visitar la página web del fotógrafo, y considerad la compra del catálogo de la exposición, que no es exactamente el catálogo porque hay más fotos, y que tiene dos cosillas que pueden tirar para atrás a más de uno: el precio (60 machacantes) y que está en inglés.

Lo que me gusta de las fotos… (2)

Contemplando.

Este señor puede estar contemplando la foto, o puede leer el texto que está a su lado:

Lo que me gusta de las fotos que hice hace cincuenta años es que parecen fechadas, porque un buen fotógrafo data el momento en el que son tomadas. La fotografía trata con el tiempo y el espacio.

Dicen que a buen entendedor pocas palabras bastan. Pero cuando diche que un «un buen fotógrafo data el momento» no se refiere a que apunte la fecha y la hora. Sino que el propio contenido de la fotografía delata el momento y el lugar. Es la esencia para valorar una obra de arte en contexto. Dónde y cuándo se hizo. Curiosamente, Duffy no creía hacer ningún tipo de arte.

Bowie

Bowie.

Uno de los espacios fuertes de la exposición está dedicado a su relación con el mundo de la música. Y especialmente con David Bowie, para quien hizo algunas portadas de discos notables.

Shrimpton

Jean Shrimpton.

Hace unos meses, a propósito de un telefilme de la BBC, comentaba la relación en el fotógrafo David Bailey, contemporáneo de Duffy, y la modelo Jean Shrimpton. El planteamiento es que con las poses de la modelo en las calles de Nueva York revolucionaron el mundo de la moda. Tal cosa sucedió en 1962. Lo cierto es que las cosas evolucionan, no pasan de forma aislada. La foto que aquí encima muestro fue tomada por Duffy y la misma modelo en 1960, y ya contenía muchos de los elementos, en mi modesta opinión, del revolucionario reportaje mencionado. Bueno, faltaba el osito de peluche.

Canon Dial 35

Canon Dial 35.

Un par de vitrinas nos muestran algunas de las cámaras que usó Duffy. Entre ellas esta Canon Dial 35. Era una cámara de medio formato, que no es lo mismo que el formato medio aunque últimamente cada vez oigo más errores al respecto. El caso es que no sé si sería muy práctica, el concepto no triunfó porque no evolucionó en el tiempo. Pero era original. Se usaba en vertical, tenía avance de película automático mediante un motor mecánico de muelle, y el pseudodial telefónico era el fotómetro a base de células de sulfuro de cadmio (CdS).

Olympus por doquier

Colección de cámaras Olympus.

Duffy fue durante un tiempo fotógrafo oficial de Olympus. La cámara de la izquierda es una rara Olympus M1, primera declinación de la celebrada serie OM, que inicialmente iba a ser serie M. Pero a Leica, que le tenía y tiene apego a esta letra, le montó un pollo, y en series posteriores la cámara se convirtión en la OM-1. Lo cierto es que quizá fue un favor de Leica. La cámara ganó prestigio por sí misma así como la serie que le siguió, hasta las declinaciones de la OM-4. No obstante, Leica sigue con sus M, mientras que Olympus hace tiempo que abandonó la serie OM, aunque haya bautizado como OM-D a una reciente cámara digital que sigue el protocolo Micro Cuatro Tercios. Yo la tengo, y he manejado alguna vez alguna OM, y… no son lo mismo.

[Fotografía] Recomendaciones semanales; encontrado en internet

Fotografía

Tenía la sensación de que esta semana tenía un montón de cosas para enseñar. Pero después de depurar la cosa el fin de semana se ha quedado en menos. Y además con mucha nostalgia y regreso al pasado. Veréis.

Virxilio Vieitez, fotógrafo gallego ya fallecido (1930 – 2008), del cual tengo un librito de la colección Photobolsillo de La Fábrica, que se dedicaba a tomar retratos de sus paisanos también gallegos. Un auténtico estudio antropológico y unas fotografías que no carecen de interés. Nos lo recordaron en Cada día un fotógrafo.

Dance de las Tenerías

Ayer tarde fuimos al Centro de Historias de Zaragoza a ver una exposición de la que os hablaré muy pronto. De camino al centro a tomar unos chismes nos entretuvimos un rato viendo el Dance de las Tenerías que actuaban junto a La Magdalena.

También he tenido la ocasión de recordar esta semana a otra fotógrafa que me gusta mucho, también fallecida ya hace tiempo. Se trata de Imogen Cunnigham (1893 – 1976). Formaba parte del grupo F/64, formado por ilustres de la fotografía norteamericana, y sus imágenes me parecen realmente bellas. También tengo un tomo de buen tamaño en mi biblioteca dedicada a ella. Este recordatorio me llegó por gentileza de Rafael Roa.

Una fotógrafa que no conocía a pesar de que pertenece a una época que siempre me ha interesado mucho es Germaine Krull (1897 – 1985). Una de las muchas brillantes creativas que surgieron en los años 20 en París, y que revolucionaron el mundo de la fotografía. Tengo que saber más sobre ella. De momento, ha sido gracias a Rafael Roa por quien he sabido de su existencia, y de los desnudos y retratos tan intensos que realizaba.

Dance de las Tenerías

Angelitos y demonios.

Ya me apareció hace algunas semanas, y esta semana lo ha hecho de nuevo. Una fotógrafa alemana actual, Meike Nixdorf, y su serie In the Orbit of El Teide. Paisajes tomados alrededor del volcán tinerfeño en los que éste siempre está presente, aunque no necesariamente como elemento dominante. Una forma distinta de representar el paisaje volcánico, entre lo desolado y lo vivo. En esta ocasión volví a saber de esta serie en The Picture Show, blog fotográfico de la radio pública norteamericana NPR.

Desde el próximo día 13, nos informa la Galería La Fábrica, van a exponer una serie completa de la fotógrafa norteamericana Sally Mann. Ya he hablado en otras ocasiones de esta fotógrafa. No me importaría visitarla en persona. Pero sólo va a estar dos meses y acabo de visitar la capital hace poco más de una semana.

Dance de las Tenerías

El diablo se intercala entre los danzantes.

En Pixelicia han mostrado una galería de imágenes de la grabación del Kind of Blue de Miles Davis. Obra seminal del jazz modal, considerada una obra maestra, el disco más vendido de la historia del jazz, fue grabado en dos sesiones el 2 de marzo y el 22 de abril de 1959. Las imágenes, tomadas por el fotógrafo oficial de la discográfica, Don Hunstein, corresponden a la segunda de las sesiones. Visitar la página web del fotógrafo será algo que agradezcan tanto los aficionados a la fotografía como a la música.

En The Online Photographer publican de vez en cuando imágenes bajo el epígrafe Random Excellence. Ayer mismo publicaban un impresionante autorretrato de Giles Duley, fotografo que resultó gravemente herido en Afganistán sufriendo una triple amputación. Está basado en las estátuas clásicas rotas, en las que falta con frecuencia una extremidad. Realmente poderosa.

Bueno. Pues había más cosas que contar de las que pensaba. Hasta la semana que viene.

Tangos

También bailaban, pero tangos, como es tradicional los sábados por la tarde en la plaza José Sinués, en la trasera del Teatro Principal de Zaragoza.

[Fotos] Entre la tristeza y el cachondeo de las noticias, el Museo Suizo del Aparato Fotográfico

Fotografía

Me levando esta mañana, y me pongo relativamente activo. He tenido unos sueños muy raros esta noche, de los que me hubiera gustado saber en que quedaban cuando me he despertado. Con las ganas me quedaré. El caso es que mi humor era raro, indefinido. La lectura de los titulares de las noticias no han colaborado a definirlo. No hablo ya de las noticias políticas o económicas, cuyo humor hace tiempo que está definido,… Me refiero a las otras. Me pongo triste leyendo sobre el fallecimiento del Maestro Reverendo (1955 – 2012),… un homenaje…

Sí. Ya sé que musicalmente no es su mejor composición. Pero sí una de las más divertidas y arraigadas en mi memoria preadolescente. Y me pone de buen humor, qué narices. Para compensar, llevo toda la mañana escuchando a Bill Evans. Que también era pianista como el Reverendo. Aunque era otra cosa.

Pero si este deceso me ha puesto la nota triste a la mañana, no he podido partirme de risa, porque no estaba yo dentro, cuando me entero de que la cutreaerolínea irlandesa más famosa tiene que inmovilizar un avión en Roma porque está infestada de chinches. Viva la vida low-cost. En íntimo contacto con la naturaleza. Si es que en esta vida te chupa la sangre hasta tus compañeros de vuelo.

También me ha puesto de bueno humor aunque en otro sentido, más positivo, el rato que he estado entretenido con el doodle que Google le ha dedicado a Star Trek. Como todavía está activo, no está en el histórico. En cuanto pase, a ver si me acuerdo de poner aquí el enlace.

En cualquier caso, que con todo esto, ya no se me ocurría sobre qué hablar hoy. Así que lo voy a dejar en poner unas cuantas fotografías del Museo Suizo del Aparato Fotográfico de Vevey, con algunos venerables ejemplares de tecnología fotográfica.

Cuarto oscuro

Reproducción de un cuarto de revelado, o cuarto oscuro.

Cámara de placas

Una bonita cámara de banco para placas emulsión de sales de plata sobre vidrio del siglo XIX.

Primeros exposímetros

Los exposímetros de mano son más antiguos de los que pensamos, y aquí hay un muestrario.

Tablas de exposición

Pero si nuestra cámara carece de exposímetro, y no tenemos uno de los anteriores, si sabemos utilizar una tabla de exposiciones no nos irá mal.

Ermanox

Un logro técnico para la época; una razonablemente compacta Ermanox calzada con un objetivo 100mm f/2, de enorme luminosidad para la época, principios del siglo XX, más teniendo en cuenta que cubría el formato 6 x 4,5 cm. Pero no pudo competir con la salida al mercado de las primeras Leicas.

Rolleiflex

Icónicas, las reflex binoculares de Rollei.

Primeras Leicas

Ejemplares de época y reproducciones modernas de las primeras Leicas. La decisión de optar por un fotograma de 24 x 36 mm todavía condiciona el diseño de los aparatos fotográficos digitales de hoy en día.

Vest Pocket Kodak

Una bonita Vest Pocket Kodak; con colores más austeros, se vendía como la cámara del soldado, para colocársela a la carne de cañón del cuerpo expedicionario norteamericano a la guerra del 14-18. Como si se fueran de vacaciones y no a que los mataran.

[Cine] Amor bajo el espino blanco (2010)

Cine

Amor bajo el espino blanco (Shānzhāshù Zhī Liàn – 山楂树之恋, 2010), 5 de septiembre de 2012.

Nota: En esta entrada aparecen nombres chinos. En su idioma original el apellido va antes que el nombre de pila. En esta entrada, he decidido mantener esa convención, lo cual aviso para navegantes.

Como en otras ocasiones, esta película ha sido vista en dos ocasiones. Una en la sala de cine, pagando entrada, condición indispensable para aparecer reseñada de forma completa en este Cuaderno de ruta, y otra, buscándome la vida, en versión original que es como hay que ver las películas. Esta vez era fácil encontrar versiones de este tipo. Hace nada más y nada menos que dos años esta película anda danzando por el mundo. Motivos para habernos decidido por ella. El argumento recordaba levemente a aquella maravilla literaria y cinematográfica que es Balzac et la Petite Tailleuse chinoise (Balzac y la joven costurera china). El director es Zhang Yimou, director de quien he visto cosas muy interesantes, aunque también algún pestiño. Algunas reseñas recomendaban la película. Pues nada. A ver de que va.

La película está basada en una historia cierta, y nos encontramos en China a principios de los años 70, en plena Revolución Cultural. Jing (Zhou Dongyu) es una joven adolescente que quiere ser maestra, ganarse la vida y de esta forma acabar con las penalidades de su familia, ya que su padre está encarcelado por pertenecer al ala derecha del partido. Para ello, se esforzará en su «reeducación», trabajando los meses que corresponde en el campo, y prestándose voluntaria a todo tipo de trabajos también en su ciudad. Su madre le insiste constantemente en que no puede cometer errores, y que su conducta debe ser intachable en todos los ámbitos de su vida si no quiere arruinar sus posibilidades. Durante el período en que trabaja en el campo, conocerá a Sun (Dou Shawn), un joven acomodado, de familia bien situada en el régimen, que trabaja para el servicio geológico realizando prospecciones. Y se enamorarán. Perdidamente. Pero por el temor de Jing y su madre a arruinar su reputación, lo llevarán en secreto. Incluso dejando de verse a  temporadas. Aunque nada podrá con el amor que se profesan. O sí. No sé. Tendréis que ver la película.

A ver. No parece una película de su director. Suponiendo que tenga un estilo definido. Es puro cine cebolla. No apto para lacrimosos fáciles, por riesgo de deshidratación. Es cierto que si esto lo hubiera hecho un norteamericano, ya han hecho alguna cosa similar y con gran éxito y fama, hubiese sido un producto indigerible, no apto para diabéticos. Y desde ese punto de vista, la película se sostiene. Está realizada con mucho oficio y nos traslada con facilidad a la época. Entendámonos. Carece por completo de la profundidad de la historia de la costurerilla que he mencionado antes. Historia que desde mi punto de vista es muy superior. Mucho más comprometida. Aquí, el ambiente social es meramente descriptivo, sin reflexión ni crítica. A lo que vamos es a una historia de amor puro entre dos jóvenes, muy jóvenes.

Y la cosa francamente se salva también por la más que notable interpretación de los dos protagonistas. La chica es una monada a la que adoptarías de inmediato. Nada sexual. Fundamentalmente para invitarla a comer y a que deje de padecer la chica, que salvo en los momentos más dramáticos no pierde la sonrisa. Y el chavalote… ¿que mujer no querría un yerno como ese? ¿O novio? No sé. Según mis acompañantes en la sala de cine, yerno. Por buen mozo que sea, no se veían con semejante dechado de perfecciones románticas.

Vale. Película digna. Como ya he dicho, puro cine cebolla. Si te va ese tipo de cine, a por ella sin dudarlo. Te lo pasarás de maravilla sufriendo los difíciles amores de Jing y Sun. Si no te va tanto, pero lo toleras, puedes encontrar virtudes en el largometraje. Si a tí, lo que te va son las de rambo o la patrulla X,… mantente alejado de esta sala de cine.

Valoración

  • Dirección: ***
  • Interpretación: ****
  • Valoración subjetiva: ** (sí, sólo dos; la historia en su conjunto tiene un cierto déjà vu a filmes con los que no simpatizo)

Me está costando horrores sacar adelante el libro con el diario de viaje a Ginebra. Por fin en color con alguna imagen en blanco y negro. Uffff… Qué poco inspirado.

Navegación en el Lemán.

Navegando por el lago Lemán entre Lausana y el castillo de Chillon, con los Alpes (orilla francesa) de fondo.